Fernández, Albino

Destacado pintor y grabador cubano nacionalizado argentino

Inició su formación artística en la Escuela Nacional de Bellas Artes, de la que egresó en 1946. Se formó con los maestros Onofrio Pacenza, Horacio Juárez, Antonio Berni y Lino Spilimbergo con quien ejerció la docencia en el Instituto Superior de Bellas Artes de la Universidad de Tucumán. También impartió clases en instituciones de renombre como el Instituto Argentino de Artes Gráficas y la Escuela Nacional de Bellas Artes “Manuel Belgrano”.

A lo largo de su carrera, su obra fue expuesta en importantes galerías y museos en Argentina y en el extranjero, participando en eventos como la Bienal de México (1958), la Bienal de San Pablo (1959) y la Bienal de Tokio (1960), entre otras.

En 1965 fundó el Club de la Estampa de Buenos Aires, un hito en la promoción del grabado en el país bajo el cual se ofrecieron talleres e intercambios artísticos, además de la producción de una serie de xilografías y litografías de artistas de renombre. Bajo esa institución, organizó la Primera Bienal Internacional de Grabado en Buenos Aires en 1968, a la que le siguieron muchas más.

Su obra se destaca por su estilo expresionista con un uso de colores intensos y contrastantes que evolucionó hacia una abstracción geométrica y libre en sus últimos años. Entre sus premios figuran el Gran Premio del Salón Municipal de Buenos Aires en 1955, el Premio Adquisición Salón de Arte Moderno en 1958, el Primer premio de Grabado Salón de Arte de Mar del Plata en 1958, el Premio de la Villa Onsoy en Noruega, entre otros.

Albino Fernández, también, dejó una huella en el ámbito editorial. Fue editor en la colección La Barca Gráfica, especializada en libros de difusión de arte plástica y poesía, y creó la editorial Albino y Asociados Editores, única en la Argentina en obtener los derechos de autor para publicar la obra del gran escritor Ramón Gómez de la Serna con ilustraciones originales de grandes artistas plásticos como Víctor Rebuffo, Luis Seoane, José Moraña, Carlos Tordallardona, Américo Balán y Norberto Onofrio.

Reconocido por su contribución al arte gráfico argentino, dedicó su vida a difundir y jerarquizar el grabado en el país, consolidando una trayectoria que lo posiciona como una figura central en la historia del grabado en Argentina y en el ámbito latinoamericano.