PECULIARIDAD
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Dirección General de Cultura de la HCDN // Diputada Nacional Dina Rezinovsky
Detrás de Senkirritin está Santiago Sánchez, un hombre común a simple vista, aunque no tanto si lo interpelamos. Es amante de la fotografía y tiene un particular don para captar lo peculiar de las personas.
Sus protagonistas, siempre hombres, aunque no se le parecen, tienen mucho de autor-referencial.
Este artista destaca en cada uno de sus personajes una característica propia que lo hace distinto del resto. Como si estuvieran atrapados en la vorágine de un mundo que tiende a masificarnos, y él los salvara por medio de esa individualidad.
Si nos detenemos frente a ellos veremos sus miradas directas, honestas, nostálgicas y reflexivas, a las que no les importa el qué dirán.
Curaduría: Daniela Zattara
Los personajes se nos muestran, y nos da la sensación de haberlos conocido. Cada profesional interactúa con sus objetos cotidianos, mientras en la soledad de sus mundos, ellos piensan, miran y reflexionan.
El autor los retrata en situaciones habituales donde nadie más los ve, como un espía cruel; sin embargo a ellos no les importa el qué dirán. Los gestos de lo cotidiano, lo sincero de las poses y la anomia del momento son característicos de estas representaciones.
Momentos de introspección o momentos compartidos son ejes de una mirada sutilmente acida del dibujante. El artista destaca en cada uno de sus personajes una característica propia que lo hace distinto del resto.
Atrapados por un mundo que tiende a masificarnos, Senkirritin intenta salvarlos por medio de la individualidad. Él se siente parte de cada uno de los protagonistas con su empático “yo interior”.