La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar su más enérgico repudio y una profunda preocupación por los dichos del Embajador de la República Argentina en Ecuador, Sr Luis Juez, realizados a Radio Belgrano, referidos a la ex Presidenta Cristina Fernández de Kirchner con motivo de su viaje a aquel país para recibir la condecoración “Manuela Sanchez” por parte de la Asamblea Nacional de Ecuador.

Señor presidente:

Resulta hasta vergonzoso (ante el pueblo argentino, ante la comunidad diplomática y ante el Mundo) tener que presentar el presente proyecto y esto por varios motivos.

Se sabe que en la política moderna, la aparición en medios de comunicación es práctica recurrente, al que el locuaz ex intendente de la Ciudad de Córdoba sabía estar acostumbrado y de lo cual pretendía él transformar dicha presencia en capital político.

Ungido ahora con el honor de representar al pueblo argentino ante la hermana República del Ecuador, su voz hace un tiempo no se deja oír en los medios o es desechada por los editores. Aún cuando su misión es lo suficientemente importante y podría hacer méritos para que ello suceda.

La pregunta Sr Presidente es: ¿amerita prestarle atención a las mencionadas declaraciones (concretamente “Correa se va a llevar un chasco con Cristina”)? Lamentablemente sí, Sr Presidente. Luis Juez, muy a pesar de las responsabilidades que le caben a nuestro cuerpo diplomático posee el cargo de embajador y allí es donde debemos tomar cartas en el asunto. De otra forma, quizás, podría obviárselo.

Una pregunta conexa Sr Presidente, y en clave de comprender semejante comportamiento, sería: ¿amerita poner en juego la representación del pueblo argentino en su conjunto con declaraciones de esa calaña, sólo con el fin de tener una efímera aparición en medios? Aún más ¿Es consciente el Poder Ejecutivo Nacional del cuerpo de embajadores que propone (por no mencionar lo que declara públicamente la propia titular de la Cancillería y el mismísimo Presidente sobre, entre otras cosas, la soberanía de Malvinas)?

¿En qué esquema de pensamiento de qué escuela de análisis de relaciones internacionales se define el concepto de “chasco”? Es literalmente vergonzoso que cuando se reclama institucionalidad, respeto, mesura y una ex presidenta de la República es elegida para recibir un premio en el extranjero se viertan expresiones de ese nivel.

Debe ser motivo de sanción ejemplificadora y el PEN tiene que comprender que lo que declara un embajador lo hace a título de la República, no a una tribuna complaciente, en el living de una casa en Quito cuya manutención le cabe a todos los argentinos.

Es ese el peso de la palabra, más aún en relaciones internacionales, ámbito en el que se miden minuciosamente cada una de las declaraciones.

Al ex síndico de Papel Prensa SA nombrado por el ex presidente Menem (de cuya idoneidad y honestidad este sujeto no parece tener crítica alguna) quizá les parezca lógico que un miembro probado y documentado del Operativo Independencia viaje hasta Washington y reclame ante la OEA por la libertad de expresión (otro ridículo más, reconocido por la propia OEA en su conjunto).

Es larga la lista de incongruencias, y las necesidades de nuestro país apremian demasiado como para ocuparse de un dislate semejante. No es de extrañar que sea el propio Ecuador el que ponga en razón al Sr Luis Juez en un futuro no lejano.

Sin embargo, algunos ridículos pueden ser obviados Sr Presidente y otros lamentablemente no, como ya lo hemos dicho.

A la política exterior de Argentina hacia la región, boicoteando abiertamente el Mercosur y entregando el reclamo de soberanía por Malvinas a las aspiraciones personales de su canciller Malcorra en la ONU, le agregamos personajes del tipo Luis Juez o Miguel del Sel en países hermanos, no hace más que confirmar un papelón que está más para un espectáculo de stand up en la calle Corrientes.

Por todo lo expuesto, solicito a los señores y señoras diputadas y diputados el acompañamiento del presente proyecto.