El Senado y Cámara de Diputados...

DE PASE A PLANTA PERMANENTE DE LOS TRABAJADORES INSCRIPTOS EN LOS PLANES DE TRABAJO DEL MINISTERIO DE BIENESTAR SOCIAL

Art. 1°: Se dispone el pase a la planta permanente de todo trabajador actualmente inscripto en los Planes de Trabajo del Ministerio de Desarrollo Social (Argentina Trabaja, Ellas Hacen o similares) que este cumpliendo tareas en el ámbito de la Administración Pública Nacional, de las provincias y municipios que han suscripto a estos Programas.

Art. 2°: El Ministerio de Desarrollo Social traspasara el presupuesto que invierte en la actualidad en estos planes, al presupuesto de las provincias, municipios, reparticiones o institutos donde se han de incorporar los trabajadores del Argentina Trabaja y Ellas Hacen. La diferencia presupuestaria, que devenga de estos pases, deberá ser compensada por una partida especial del presupuesto nacional.

Art. 3°: Los trabajadores que sean incorporados a la Planta Permanente gozaran de los mismos beneficios salariales y convencionales del resto de los trabajadores permanentes en cada rama que se desempeñen. Regirá el principio de “a igual trabajo, igual salario” y a “igual trabajo, igual convenio”.

Art. 4°: Se constituirá una Comisión de Control, formada con delegados elegidos por las propias organizaciones de desocupados y trabajadores de los planes precarizados y por los sindicatos y comisiones internas de cada área donde debieran integrarse los trabajadores que pasen a planta permanente, para fiscalizar la culminación de este operativo en términos reales e inmediatos.

Art. 5°: Se invita a las autoridades provinciales y municipales a adherir a los términos de esta Ley e imitarlos en los planes específicos que puedan estar vigentes en sus distritos.

Art. 6°: De forma

Señor presidente:

La precarización laboral en la argentina se profundizó en los últimos años al calor de la llamada “reconstrucción de la burguesía nacional”. El kirchnerismo llevó hasta donde pudo un régimen de precarización del trabajo que incluyó las más variadas formas, con el objetivo de eliminar conquistas y derechos que la clase obrera obtuvo en años de lucha contra el capital. El macrismo ha recrudecido la ofensiva contra el trabajo, con despidos y suspensiones masivas por un lado, y por otro le ha dado una continuidad extraordinaria a la política laboral y asistencial del kirchnerismo, manteniendo y perfeccionando el sistema de cooperativas, que pretende utilizar como mecanismo de contención ante la miseria creciente que genera en la gran masa obrera del país el ajuste en curso.

Son más de doscientos mil, los trabajadores que están inscriptos en los Planes de Trabajo promocionados por el Ministerio de Desarrollo Social. Los planes vigentes en la actualidad son el Plan Argentina Trabaja y el Plan Ellas Hacen, cuya planta laboral se encuentra congelada desde el año 2013. Los trabajadores de estos planes han sido incorporados a diversas reparticiones de la Administración Pública Nacional y de algunas provincias y municipios, lo que incluyó desde Universidades, hasta la ESMA o Campo de Mayo. Realizan todo tipo de tareas como: porteros y personal de limpieza en escuelas; en las cocinas, limpieza y mantenimiento de hospitales; en trabajos de desmalezamiento y parquización; en la reparación y pintura de edificios públicos; en la construcción de redes de agua y gas; tareas de saneamiento ambiental, etc.

No se escapa a nadie que el reparto de estos Planes ha sido denunciado, en reiteradas oportunidades como producto de manipulaciones clientelares de diversos ‘punteros’. Tampoco que, lejos de haber significado la creación de trabajo genuino, nos encontramos frente a la constitución de trabajadores de segunda, con menores salarios, sin estabilidad laboral, sin aguinaldo, ni vacaciones, ni usufructo de las conquistas sindicales convencionales. Es decir se creó trabajo precario y sujeto al arbitrio de las autoridades de turno. Se transforma así a esta masa en competidora, hacia la baja de salarios y conquistas, de los trabajadores en planta permanente. Se ha incentivado y presionado la contratación, bajo la forma de ‘cooperativa’ para ocultar que el Estado es el patrón. Lo que ya ha sido denunciado, en muchos casos, como un fraude laboral. Es un paso más en las políticas de precarización laboral que, según reconocen los propios funcionarios de gobierno, supera el 40% de la mano obra activa.

Las cooperativas de “trabajo” son un fraude laboral, en primer lugar para los trabajadores que las integran: las cooperativas fueron el instrumento creado desde el Gobierno para evitar una relación laboral con miles de trabajadores desocupados, que reciben un salario miserable, hoy fijado en $3200, tras el último aumento en abril de 2016. Desde el año 2009, el Poder Ejecutivo Nacional a través del Ministerio de Desarrollo Social paga un ingreso fijo, realiza los descuentos por inasistencias, fija los lugares de trabajo y el horario, realiza los descuentos por obra social. Además desde 2012 el ingreso del trabajador del Argentina Trabaja está conformado entre otros por dos ítems nuevos: asistencia y productividad que conforman el ingreso con un monto fijo por cada uno. Por su parte, el municipio o ente estatal en el que el trabajador desempeña sus tareas, fija el lugar de trabajo, lo cambia a su voluntad y controla la asistencia. Mantener a los trabajadores de estos Planes en esta situación implica un fraude laboral.

La falta de estabilidad laboral hace que estos trabajadores sean sometidos a chantajes. Deben concurrir a actos oficiales, aceptar el adoctrinamiento que se les transmite en ‘cursos’ paraestatales, etc. Es justamente, el principio de la estabilidad del trabajador estatal, que no puede estar sometido a los cambios de gobierno con sus subsecuentes despidos o persecuciones por pensar política o ideológicamente de manera diferente al oficialismo de turno.

El Estado es el principal infractor con esta masa de trabajadores precarizados en los Argentina Trabaja y Ellas Hacen.

Recientemente, en un acto del gobierno en Almirante Brown, el presidente Macri anunció que las cooperativas destinadas a la construcción de viviendas, que emplean trabajadores del Plan Argentina Trabaja, tendrán ahora un tratamiento económico superior al otorgado por el gobierno anterior. Concretamente, el gobierno permite ahora que las cooperativas puedan ofrecer presupuestos al mismo costo que las constructoras privadas en cualquier plan de viviendas y no a un valor inferior como hasta ahora -un 20% por debajo en el Plan Federal. Como hemos señalado, un trabajador del Argentina Trabaja cobra 3.200 pesos por mes, por cuatro horas de trabajo. Esto significa un ingreso de 16 pesos la hora contra 47 que corresponderían cobrar según el convenio de la UOCRA. De esta manera, el macrismo está promoviendo una profundización de la estafa laboral que representan estas cooperativas para los trabajadores. A su vez, le han otorgado a las organizaciones sociales que administran estas cooperativas el carácter de “Unidades Ejecutoras”. Es decir, entes que son contratados por obras, reciben un monto, fijan las condiciones de trabajo y se hacen cargo del salario -para el que sigue existiendo el fijo de $3.200. El Estado, en cualquiera de sus niveles, se declara prescindente, como en cualquier tercerización. Ahora la cabeza de la Unidad Ejecutora resolverá por sí y ante sí la distribución de los montos del contrato y los niveles de explotación de sus trabajadores. ¡El vilipendiado “sistema” de Milagro Sala ha sido promovido a nivel nacional nada menos que por el gobierno de Cambiemos! Sin dudas se trata de una política de regimentación del movimiento de desocupados y su cooptación, como parte de un orientación estratégica de ofensiva contra la clase obrera, que pretende ser paliada con asistencialismo.

La agenda del movimiento piquetero en lucha es otra: actuar junto a la clase obrera por el pase a planta, el salario correspondiente al convenio, un seguro al parado equivalente al 75% de la canasta familiar y un plan de viviendas

Esta es una razón de peso para pasar a estos trabajadores a la planta permanente y terminar con esta arbitraria discriminación.

Es hora de terminar con esta manipulación e injusticia. Todos los trabajadores de estos Planes de Trabajo del Ministerio de Desarrollo Social deben pasar a Planta Permanente. Por estos motivos, solicitamos a los señores diputados la aprobación del presente proyecto.