El Senado y Cámara de Diputados...

Creación del Programa Alimentario Nutricional Nacional para la protección y el desarrollo saludable de la niñez denominado Cucharada de Miel.

Artículo 1° - Créase el Programa Alimentario Nutricional Nacional para la protección y el desarrollo saludable de la niñez denominado Cucharada de Miel.

Artículo 2° - Instruméntese la provisión de 10 gr de miel de abeja, durante el período escolar a partir de los 5 años de edad a todo niño de la Nación que concurra a los establecimientos públicos habilitados con comedores escolares, hasta los 12 años de edad.

Artículo 3° - Los objetivos del programa Cucharada de Miel son:

- Garantizar la seguridad alimentaria de los niños y niñas de nuestro país

- Contribuir con un aporte alimentario extra al recibido en los hogares

- Contribuir a reforzar el Programa Alimentario Nutricional Nacional Copa de Leche

- Prevenir el raquitismo y la desnutrición infantil

- Promover el desarrollo físico y psíquico equitativo

- Promover la producción apícola en el territorio nacional

- Fomentar el desarrollo de emprendimientos apícolas a través de la compra del Estado de la producción de miel

Artículo 4° - El organismo de aplicación de la presente ley será el Ministerio de Desarrollo Social

Artículo 5° - El Programa Alimentario Nutricional Nacional Cucharada de Miel se instrumentará de forma progresiva, comenzando por aquellas escuelas cuya población evidencia mayores carencias nutricionales

Artículo 6° - La materia prima, miel, será suministrada por los distintos productores apícolas agrupados en las distintas cuencas apícolas existentes o a establecerse

Artículo 7° - Comuníquese al Poder Ejecutivo

Señor presidente:

La República Argentina se encuentra entre los 5 productores más importantes del mundo. Compite contra grandes potencias industriales como la República Popular China. Nuestros apicultores son un ejemplo de producción eficiente, equilibrada y competitiva que se refleja en la calidad de la miel que llega a las góndolas de todo el globo. Tan sólo la venta de miel entre los meses de enero a mayo de 2016 generó ingresos por U$S 70 millones llegando a destinos remotos como el Japón.

La miel argentina es buscada por los paladares más sofisticados del ámbito culinario, siendo preciada nuestra versión orgánica, de eucaliptus y de bambú. Este sello de calidad se ha logrado gracias a los esfuerzos realizados por los apicultores de todas las regiones de nuestra nación quienes han hecho del cooperativismo y el asociativismo herramientas fundamentales para el intercambio de tecnología y conocimientos que permitieron modernizar la estructura apícola nacional.

Asimismo, la producción apícola tiene una gran relevancia para el sector agropecuario. La FAO destacó este año el impacto de las abejas en la producción de campo ya que ayudan a garantizar la seguridad alimentaria de los pequeños agricultores. Más allá de producir miel, las abejas fertilizan a las plantas al avanzar de flor en flor, aumentando así los rendimientos de los cultivos. Según la FAO, las abejas pueden tener un papel clave para mejorar la producción de unos 2.000 millones de pequeños campesinos en el mundo y asegurar los alimentos y la nutrición de la creciente población del planeta. Esto significa que las estrategias de seguridad alimentaria podrían beneficiarse si incluyesen la polinización como un componente integral. La FAO subrayó la necesidad de encontrar maneras de propiciar la reproducción de esos insectos ya que se encuentran amenazados por diversos factores, entre ellos el cambio climático.

En tal sentido, creemos que estrategias como la Semana Nacional de la Miel que tuvo lugar entre el 8 y 14 de agosto, bajo el lema “Sumale miel a tu vida” son positivas para poner de relieve estos temas en la agenda pública. Pero dichos esfuerzos deben ser prolongados en el tiempo. La seguridad alimentaria debe ser garantizada por el Estado y la sociedad en su conjunto. En base a proyectos impulsados en otros países, como fue el caso de la Red de Municipios Rurales del Perú –REMURPE-, incluyen a la miel como complemento de la copa de leche, instando a las escuelas con comedores que provean un mínimo de 10 gramos (una cucharada sopera) de miel en sus colaciones.

Las bondades de la miel son variadas y beneficiosas para la salud: regula el azúcar en sangre, reduce el estrés metabólico, promueve la recuperación del sueño, mejora la función cerebral, minimiza las alergias y estimula el sistema inmunológico. Además, es rica en vitaminas: A, C, D, B1, B2, B3, B5, B6, y minerales: cobre, magnesio, calcio, hierro, fósforo, potasio, azufre, sodio y yodo.

Con la creación de un Programa Alimentario Nutricional Nacional que incluya la miel en la dieta de los comedores escolares será sin duda una política pública que contemple el futuro de nuestros niños y niñas, ya que bregará por el desarrollo de sus capacidades psíquicas, físicas y cognoscitivas, permitiendo en consecuencia, un progreso en su formación como educando, ciudadano y ser humano. Por otra parte, un programa de este calibre pondrá de relieve la importancia de acompañar al sector apícola nacional y a los miles de productores de escala familiar que podrán ampliar su mercado y, al mismo tiempo, contribuir al cuidado de las futuras generaciones de nuestra nación.

Por todos los argumentos expuestos, solicito a mis pares me acompañen en la aprobación del presente proyecto ley.