La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Declarar de interés de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación, la película argentina de carácter documental titulada “Camino a la muerte del Viejo Reales”, producida entre los años 1968 – 1971 y dirigida por Gerardo Vallejos.

Señor presidente:

El 10 de abril del año 1974 se estrenaba en el país la película documental “Camino a la muerte del Viejo Reales” dirigida por Gerardo Vallejos y producida entre los años 1968 y 1971.

La propuesta de Vallejos se relaciona entorno a la historia de vida del trabajador azucarero tucumano y concretamente a la dramática situación ocasionada por el cierre masivo de ingenios azucareros tras la intervención realizada en 1968 por el entonces presidente de facto Juan Carlos Onganía.

Tomando como testimonio central la historia de la familia de Don Ramón Gerardo Reales y sus tres hijos: Ángel, Mariano y Pibe, la obra se divide en dos partes fundamentales. La primera de ellas relata, en forma documental, la vida de un viejo campesino jubilado y pobre y la de sus dos hijos Angel y Mariano. La segunda parte nos cuenta la historia del tercer hijo del viejo Reales, el Pibe, desarrollando como eje la entrada de este en la lucha sindical y política, relacionado directamente a las luchas obreras de la provincia y aun del país.

Los registros muestran las condiciones de vidas y rasgos socio-culturales de los miembros de las familias trabajadoras del surco, optando por (re) construir momentos oposicionales en lo político-cultural, de cada miembro a la apuesta política del grupo. No desplaza su interés a la indignación cultural, sino basado en esas justificaciones, desarrolla su interés en la explotación vividas de los personajes, incluso por la temporalidad campesina.

Su exilio género que “Camino a la muerte del Viejo Reales” se termine en Roma y tiempo después, sea estrenada en Argentina.

Desde entonces, el nombre de Vallejo quedó prohibido, como el de tantos otros representantes de la cultura. Poco después, ya instalado en España, fundó la Escuela de Cine de Madrid, y dirigió Reflexiones de un salvaje.

Mencionado films tuvo la colaboración de los Sres. Pino Solanas y Octavio Getino quienes años más tarde, junto a Gerardo, filman al General Juan Domingo Perón en su primer mensaje de exilio desde Madrid.

Regresado del exilio, entre 1973 y 1976, se dedicó a registrar la lucha de los trabajadores de la Fotia (Federación Obrera Tucumana de la Industria Azucarera), en una serie de documentales reunidos bajo el título Testimonios de Tucumán hasta que, en 1974, cuando ya sonaba en sus pagos el Operativo Independencia, pudo esquivar un intento de fuerzas paramilitares de violar su domicilio y así marchar, finalmente, al exilio, en principio en Panamá.

Tuvo su consagración de grandes Premio por Unanimidad de Jurado en el XX festival internacional de cine de Mannheim, (Alemania 1971), Premio al mejor film de la FREPASI (Federación Internacional de la Prensa Cinematográfica), Premio al mejor film de la OCIC (Oficina Católica Internacional de Cine).

El 6 de febrero de 2007 se despedía de esta vida Gerardo "Chango" Vallejo, quien antes que nada fue un gran tucumano, un gran peronista, un gran argentino que eligió al cine para poner en imagen a los olvidados, a los humillados, a los argentinos de la Argentina negada por la ciudad oligarca y neoliberal

Vallejo le ha aportado al cine argentino, como en el caso de ésta película, una mirada de una gran sensibilidad social, pero sobre todo una mirada crítica desde el interior del país, fiel a la tradición

Militante, del compromiso social, de los años duros de la dictadura, pagando el costo de la persecución y el exilio y ser agredido con una bomba en su casa de Tucumán.

Hoy, con este humilde reconocimiento, me atrevo a terminar mis líneas con una frase de Vallejos, quien con su lucha y orgullo provinciano de nuestra Tucuman, sostuvo los pilares de una argentina justa, equitativa y siempre fiel a la igualdad de aquellos campesinos azucareros.

“Falta la mirada del interior y la mirada del pueblo, su protagonismo. Lo que se ve ahora es el cine de la burguesía y de la clase media, pero que no expresa los sentimientos del pueblo argentino, que es el que sufre las postergaciones desde hace tanto tiempo”.

Por lo expuesto, solicito a mis pares, acompañar en este proyecto.