La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Solidarizarse con el reclamo del conjunto de los docentes universitarios que llevan adelante un plan de medidas de acción directa por el aumento salarial del 45%.

Reclamar el inmediato aumento salarial del 45% para los docentes universitarios de todo el país.

Reclamar la inmediata aplicación del Convenio Colectivo de Trabajo de los Docentes Universitarios (Decreto 1246/2015) y el pase a carrera docente de todos los docentes interinos.

Reclamar el fin de la precarización laboral, con el pase a planta de todos los docentes contratados bajo las formas de monotributo, contrato de locación etc.

Reclamar el fin del trabajo ad honorem, asignando inmediatamente a cada docente que trabaje bajo esta figura el salario correspondiente a su categoría y antigüedad según el citado Convenio Colectivo de Trabajo de los Docentes Universitarios.

Señor presidente:

Actualmente los docentes universitarios de todo el país se encuentran en un plan de lucha nacional encabezado por la Conadu Histórica. Los reclamos son el 45% de incremento salarial inmediato, la aplicación del Convenio Colectivo de Trabajo, el salario para los denominados ad honorem (trabajadores que no perciben ningún salario por su labor).

El reclamo, que ha comenzado hace 4 meses, ha dado lugar desde hace un mes a un plan de medidas de acción directa que incluyeron en el mes anterior cinco días de paro, una movilización a la Plaza de Mayo y dos carpas docentes frente al Ministerio de Educación.

La respuesta del Gobierno de Macri y los rectores fue convocar a una Mesa Negociación Salarial en la que no realizaron oferta alguna. Se trata de la repetición de la maniobra que el año pasado implementara el ex ministro Alberto Sileoni: la de abrir una mesa salarial para extender una fraudulenta negociación, manteniendo las nefastas paritarias a junio, las cuotas y una recomposición salarial por debajo de la inflación real.

Las paritarias de 16 meses de los últimos años impuestas por el Gobierno anterior con el aval de las direcciones burocráticas llevaron a los docentes universitarios a un desfase salarial de más del 120% de la canasta familiar, mientras se expandían los convenios por universidad a la baja y se convalidaba desde el Gobierno y los rectorados que más del 80% de la planta docente siga en estado de precariedad, amenazada por el despido (como en las universidades de La Matanza y Río Negro), o a que decenas de miles de docente continúen sin cobrar salario (como en la Universidad de Buenos Aires).

Hoy el salario inicial de un docente universitario –que tiene que capacitarse, preparar las clases, corregir exámenes y preparar finales- es de $2800 por mes, teniendo muchas veces más de 200 alumnos a cargo. Este valor es inferior al de los planes Argentina Trabaja, que alcanza los $3100. En ambos casos no los podemos llamar salarios sino subsidios que están debajo de la línea de indigencia.

El Gobierno Nacional, en la segunda reunión paritaria que se desarrolló el miércoles 06/04/2016 en el Palacio Sarmiento, ofreció un 25% de aumento salarial en dos cuotas a la docencia universitaria; un 15% a partir del 1 de mayo, a cobrar en junio, y un 10% a partir del 1 de agosto, a cobrar en septiembre, ambas cuotas no acumulativas. La vigencia de la propuesta era hasta el 30 de abril del 2017, ocasión en la que se abriría la nueva negociación salarial. Esta propuesta fue rechazada por todas las asambleas y gremios de docentes universitarios del país.

Así, el Gobierno convocó a una tercera reunión de Mesa de Negociación Salarial el lunes 18/04/2016, en el que logró romper toda lógica de negociación salarial: hizo una oferta menor a la anterior. El gobierno de Mauricio Macri, a efectos de hacer pasar el ajuste, puso sobre la mesa la política de la paritaria doblemente corta: de 6 meses y por un 15% de incremento por todo ese periodo, cuando la inflación, medida por la Ciudad de Buenos Aires o la provincia de San Luis, supera el 30%.

Es una política de Estado. La aplicó la gobernadora Vidal a los estatales bonaerenses otorgando un miserable 15%. Rodríguez Larreta en la CABA con un 14%. Angelo Calcaterra en la Construcción con un 20%. Todos lo firmaron con el concurso de las burocracias sindicales. Es la reducción salarial en el Estado y en la Construcción.

Es en el marco de esta política de Estado que el ministro Esteban Bullrich les ofrece a los docentes universitarios el 15% desde junio a noviembre de 2016. Esto sobre sobre sueldos que permanecen congelados desde octubre de 2015 hasta la fecha. Las masivas asambleas docentes de AGD-UBA, ADIUNT, Comahue, Luján, San Juan, Cuyo y los congresos de la Conadu Histórica rechazaron siempre la reducción salarial, antes a 18 meses y hoy a 6 meses.

La actual medida de paro, del 24 al 30 de abril, se está llevando a cabo con un altísimo acatamiento en el conjunto de las Universidades de todo el país. La docencia universitaria está de pie junto con los estudiantes cortando calles, llevando adelante clases públicas, en la lucha por su salario, por la aplicación del Convenio Colectivo de Trabajo y, en suma, por la defensa de la educación pública universitaria, porque sin salario y sin condiciones de trabajo para los docentes no hay universidad posible.

En este cuadro, en una nueva reunión paritaria, el Gobierno Nacional ofreció el 26/04/2016 un 15% a partir de mayo (a cobrar a partir de junio) y un 15% a partir de diciembre (a cobrar en enero de 2017), no acumulativo, cerrando la paritaria hasta mayo de 2017. Nada relacionado a la aplicación efectiva e inmediata del Convenio Colectivo de Trabajo para todos los docentes universitarios. Muy lejos del reclamo docente de 45% de incremento salarial inmediato.

Por ello, nos dirigimos a los señores legisladores para que acompañen este Proyecto de Resolución.