PROPUESTA DE MODIFICACIÓN DE LA LEY DE EDUCACION NACIONAL 26.206, SOBRE LA EDUCACIÓN ALIMENTARIA NUTRICIONAL (EAN)

Artículo 1º.- Incorpórese al Capítulo II "Disposiciones específicas" del Título VI "La Calidad de la Educación" de la Ley 26.206 el siguiente artículo que quedará redactado de la siguiente manera:

“Artículo 89 bis.- El Ministerio de Educación, en acuerdo con el Consejo Federal de Educación y el Ministerio de Salud, dispondrá las medidas necesarias para proveer la Educación Alimentaria Nutricional (EAN) en todos los niveles y modalidades del Sistema Educativo Nacional, con la finalidad de promover hábitos y conductas alimenticias que mejoren la calidad de vida de los estudiantes, preserven su salud y la de la comunidad. A tal efecto se definirán en dicho ámbito institucional, las políticas y estrategias destinadas a incluir la educación alimentaria nutricional en los contenidos curriculares comunes y núcleos de aprendizaje prioritario, así como a capacitar a los/as docentes en esta temática.”

Artículo 2º.- Comuníquese al Poder Ejecutivo.

Señor presidente:

Se considera al sobrepeso y la obesidad como problemas de origen multicausal. Un primer balance energético positivo entre la ingesta y el gasto en el individuo suele deberse, en el nivel familiar, a un estilo de alimentación del niño muy permisivo o muy controlador, no saludable, con alto consumo de bebidas edulcoradas y alimentos con alto contenido de grasas, y bajo consumo de frutas y verduras. A este estilo de vida sedentaria con excesivo tiempo ante la TV y la PC a expensas de actividades deportivas se le suman estímulos comunitarios como una alimentación escolar inapropiada en los comedores escolares o en los kioscos escolares, falta de actividad física suficiente y de facilidades para desarrollar actividades deportivas, ausencia de educación alimentaria en las escuelas y abundante disponibilidad de alimentos para comer al paso.

En la Argentina, la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud por última vez llevada a cabo en el año 2007, arrojó resultados sobre la prevalencia (%) de la obesidad en niños y niñas de 6 meses a 5 años de 9,1 en promedio, con valores tan bajos como 4,9 en Misiones y 5,1 en Chaco y Salta, y superiores al 11% en Buenos Aires, Santa Fe, Entre Ríos, Catamarca, La Rioja, San Juan, Santa Cruz, Chubut y San Luis. Cuanto más cerca de la edad adulta persista la obesidad, mayor es el riesgo de mantenerla más tarde durante la adultez, lo cual enfatiza la importancia de su prevención, detección y tratamiento en edades tempranas. De esta forma se estaría previniendo el riesgo de diabetes tipo 2, de enfermedades cardiovasculares, de osteoartritis, de hipertensión, de cálculos hepáticos y de algunos tipos de cáncer; sin olvidarse del correlato psico-social que la obesidad acarrea.

En vistas que la prevención y el tratamiento de la obesidad en la infancia resultan claves para el desarrollo de una vida adulta saludable es pertinente enfocarnos en acciones que promuevan una alimentación adecuada desde la temprana edad, específicamente la educación alimentaria nutricional en todos los niveles. De esta manera se acompaña el crecimiento de los niños, y su aprendizaje sobre las elecciones de alimentación, en un contexto donde ya se ven impactados por incontables estímulos que propician una mala alimentación, como campañas publicitarias específicamente diseñadas para incentivar el consumo.

La Ley 26.206 de Educación Nacional ya prevé la educación ambiental en todos los niveles para construir desde la infancia el arraigo de los valores vinculados al cuidado de la Tierra. De la misma manera, y con el mismo objetivo de velar por la salud de nuestros ciudadanos, abogamos por la inclusión de la Educación Alimentaria Nutricional en el Sistema Educativo Nacional.

Por todo lo expuesto anteriormente y porque la salud y la infancia plena son derechos vitales para el desarrollo de nuestra Nación, solicito a mis pares la aprobación del presente Proyecto.