Expresar el más enérgico repudio ante el brutal acribillamiento a balazos seguido de muerte de Marielle Franco, el pasado miércoles 15 de marzo en Río de Janeiro, Brasil.

Marielle Franco era concejala feminista brasileña por el Partido Socialismo y Libertad (PSOL), y fue asesinada por ser activista afrodescendiente y lesbiana, defensora de los derechos humanos, militante contra el racismo y la violencia institucional y una férrea opositora al gobierno golpista de Michel Temer.

Señor presidente:

La concejala feminista brasileña Marielle Franco tenía 38 años y fue asesinada a tiros luego de haber denunciado en las últimas semanas un incremento de la violencia institucional a partir de la intervención militar que decretó el gobierno golpista de Michel Temer en las favelas de Rio de Janeiro. Las pericias confirmaron que en la escena no hay rastros de intención de robo, por ende, no caben dudas que se trata de un asesinato político.

Franco había entrado con 46.000 votos en la Cámara Municipal de Rio en las elecciones de 2016, siendo la quinta concejala más votada. Hace dos semanas, había asumido la función de relatora de la Comisión de la Cámara de Concejales de Rio, creada con el objeto de controlar la actuación de las tropas a cargo de la intervención militar decretada por Temer. El 10 de marzo, había denunciado en sus redes sociales la gravísima situación de violencia institucional que se encuentran viviendo los vecinos y vecinas en la favela de Acarí “¡Lo que está sucediendo ahora en Acari es absurdo! (…). El batallón de la 41 Policía Militar es conocido como el batallón de la muerte. ¡Basta de matar a nuestros jóvenes!”. “Un día él dice que te cuidará, el siguiente te dará rosas y el siguiente destruye los quioscos donde los trabajadores y trabajadoras subsisten. Una turbulencia y una cobardía sin tamaño. ¡Síntomas de una ciudad cada vez más militarizada y menos democrática!”. Incluso un día antes de su muerte había denunciado la muerte del joven Matheus Melo, quien fue baleado cuando salía de una iglesia en la favela de Jacarezinho “¿Cuántos más van a necesitar morir para que esta guerra acabe?”. Cabe destacar que la intervención militar en la ciudad ha dejado un saldo de 157 asesinatos en lo que va del 2018, siendo el mayor número registrado en los últimos quince años en Brasil.

Sin lugar a dudas el hecho de ser feminista, activista afrodescendiente y lesbiana, defensora de los derechos humanos, denunciante de todas las atrocidades cometidas por el gobierno golpista de Temer y sobre todo una esperanza política de muchos y muchas en un contexto de facto como el que atraviesa Brasil, basto para que quienes quieren seguir perpetrándose de manera impune en el poder acabaran con su vida.

Levantamos las banderas de Marielle Franco, denunciamos con rabia y tristeza su muerte, y nos comprometemos en su memoria a seguir luchando para construir la América Latina que soñamos.

Por todo lo expuesto, solicito la aprobación del presente Proyecto de Resolución.