Expresar su más enérgico repudio a la violenta represión desatada por la policía santafesina el día 9 de octubre, en el marco del Encuentro Nacional de Mujeres realizado en la ciudad de Rosario, Provincia de Santa Fe.

Señor presidente:

El pasado 9 de octubre del 2016 la policía local, de la ciudad de Rosario, Santa Fe, desató una fuerte represión sobre las mujeres que realizaban la jornada de cierre del Encuentro Nacional de Mujeres en dicha ciudad. Miles de militantes habían participado de dos jornadas de intensos debates, entre otros temas debatieron sobre la violencia a la que todavía es sometida la mujer en nuestro país. Paradójicamente, el encuentro concluyó con una fuerte represión desatada por las fuerzas de seguridad sobre las participantes.

El Encuentro fue multitudinario y considerado exitoso por las organizadoras: unas 70 mil mujeres participaron a lo largo de dos días de los 69 talleres, en 300 comisiones, en las que se debatió en profundidad problemáticas de género, la despenalización del aborto, los femicidios y el trabajo sexual, entre otras cuestiones. Sin embargo, una vez más llamó la atención, la represión desatada por las fuerzas de seguridad, que dejó un saldo de más de 20 personas heridas, entre las cuales se encuentran trabajadoras y trabajadores de medios de comunicación que estaban cubriendo el Encuentro. Lamentablemente este tipo de prácticas viene siendo cada vez más frecuente en el marco de un gobierno que no tiene políticas proyectadas, para resolver las demandas que presentan diversos sectores de la sociedad. Su única respuesta es la represión, cada vez más salvaje. En este caso creemos que es aún más grave debido al ámbito en el que tuvo lugar: a exigencia de mayor cuidado de las mujeres por parte del Estado, se respondió con más violencia estatal.

Los funcionarios provinciales no hicieron más que justificar los hechos de violencia: el ministro de Seguridad de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, consideró que el operativo de la policía, que reprimió con gases y balas de goma, fue "correcto y extremadamente profesional". A su vez, el secretario de Seguridad provincial, Omar Pereyra, justificó la represión con la prensa local. Estas declaraciones sin embargo no sorprenden, ya que están en línea con las que emite el Ministerio de Seguridad de la Nación, donde el gobierno da a entender que la salida del gobierno frente a los reclamos seguirá siendo la represión.

Entendemos que es gravísimo desandar el largo camino construido en todos estos años de contención y resolución pacífica conflictos sociales. Dar vía libre a las fuerzas de seguridad para desatar su violencia sobre nuestro pueblo nos lleva por un camino muy peligroso, como nuestra historia nos ha mostrado en más de una oportunidad.

Por las consideraciones expuestas es que les pido a mis pares que me acompañen con el siguiente proyecto de Resolución.