Expresar repudio por los episodios de violencia física y verbal sufridos por el periodista Ignacio Otero y su productor ejecutivo Maximiliano Heiderscheid, perpetrados el pasado 24 de agosto en el intento de realizar una nota periodística.

Señor presidente:

El pasado 24 de agosto de 2016, el periodista Ignacio Otero, junto con su productor ejecutivo Maximiliano Heiderscheid, ambos trabajadores de Canal 13, fueron agredidos física y verbalmente por la pareja de ex funcionarios públicos conformada por Angelina Abbona y Enrique Mengarelli.

El acontecimiento tuvo lugar en el vuelo de Aerolíneas Argentinas que los trasladaba desde la Ciudad de Buenos Aires hacia Rio Gallegos. Según surge de los videos difundidos en los medios de comunicación Enrique Mengarelli, ex Subdirector Nacional del Registro Oficial, fue visto por otros pasajeros agrediendo físicamente a Otero, quien previamente se había dirigido a la ex Procuradora del Tesoro de la Nación, Angélica Abbona, a los efectos de realizarle una consulta relacionada con hechos que tuvieron lugar durante el tiempo en que esta última se desempeñaba en la función pública.

El episodio no sólo afecto la posibilidad de los periodistas de realizar su labor de manera pacífica, sino que generó en Ignacio Otero daños físicos, dejando marcas en su rostro.

Las imágenes difundidas son un reflejo de la violencia verbal ejercida en contra de los comunicadores sociales, quienes se encontraban intentando obtener información de interés público, obstruyendo de esta forma la posibilidad de ejercer la libertad de expresión.

Resulta necesario recordar que esta libertad fundamental se encuentra consagrada en el artículo 13 de la Convención Americana Sobre Derechos Humanos (CADH) y el artículo 19 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, los que gozan de jerarquía constitucional en razón de lo dispuesto en el artículo 75 inciso 22 de nuestra Constitución Nacional.

La situación reseñada pone en riesgo las dos dimensiones de la libertad de expresión, que han sido explicadas por la Corte Interamericana de Derechos humanos a lo largo de su jurisprudencia, estas engloban por un lado el derecho individual a no ser arbitrariamente impedido de manifestar su pensamiento, como el derecho de la sociedad de recibir informaciones.

Por los motivos anteriores, solicitamos a nuestros pares que se apruebe el presente proyecto de declaración.