Su preocupación y repudio por la agresión que sufriera Vanesa Orieta, hermana de Luciano Arruga, al ser incendiado su auto particular el 7 de junio de 2015.

Señor presidente:

La incansable lucha de la familia del joven Luciano Arruga desparecido en 2009 es un ejemplo ético de lucha contra la impunidad, la violencia institucional y la defensa de los derechos humanos de los niños, niñas y jóvenes de los barrios más pobres.

También, es un ejemplo de lucha por la búsqueda de verdad y justicia. Búsqueda de verdad y justicia que tuvo un primer reconocimiento judicial el día 15 de mayo de 2015, fecha en que con un fallo unánime, el Tribunal Oral Criminal 3 de La Matanza condenó a 10 años de prisión al ex policía bonaerense Julio Diego Torales, acusado de torturar a Luciano Arruga el 22 de septiembre de 2008. Este fallo, además, se convirtió en el primer precedente judicial en considerar la gravedad de los tormentos psicológicos por parte de las fuerzas de seguridad.

A menos de un mes de dicho fallo, la familia del joven Arruga denunció mediante un comunicado de prensa que el auto de su hermana, Vanesa Orieta, apareció incendiado.

Este hecho según la familia Arruga no debe leerse como aislado sino que se suma a una serie de amenazas y episodios que se suceden desde que realizaron la primera denuncia por la desaparición del joven en febrero de 2009. En este contexto el comunicado expresa que "...el peligro que corremos se convirtió en cotidiano, y también las amenazas a nuestra integridad. Estamos una vez más en la penosa situación de tener que volver a denunciar que todas nuestras vidas corren peligro."

Dada la gravedad de los hechos denunciados, exhortamos al estado provincial a realizar una pronta y rápida investigación de los hechos denunciados y

a garantizar protección y seguridad efectiva a familiares y amigos de Luciano Arruga

Por lo expuesto anteriormente, es que solicito a las Sras. Diputadas y los Sres. Diputados acompañen en la sanción del presente Proyecto de Declaración.-