SU pesar por el fallecimiento del ex Presidente de Chile Don Patricio Aylwin, ocurrido el día 19 de abril de 2016, reconociendo su trayectoria como hombre de bien y líder democratacristiano en Latinoamérica, expresando sus condolencias a la familia del mandatario y a todo el pueblo de la República de Chile.

Señor presidente:

Con hondo pesar el día 19 de abril de 2016 se ha producido el fallecimiento de uno de los Prohombres del socialcristianismo de América latina del siglo 20; nos estamos refiriendo al ex Presidente de la República de Chile Don Patricio Aylwin Azocar.

Don Patricio vivió una vida comprometida con los intereses del pueblo chileno, preocupado por la pobreza, el desempleo, la falta de oportunidades para los jóvenes, la necesidad de una salud pública al alcance de todos y la consideración de la educación como un bien social. Fue un demócrata cristiano que abrazó la causa de los más humildes y desprotegidos del pueblo de Chile.

Su obra como estadista y como hombre público se caracterizó por su humildad intelectual, apego al trabajo y por su compromiso irrestricto con la defensa de la dignidad de la persona humana.

Fue cultor de la amistad cívica, principio del humanismo cristiano, que lo llevo a la práctica en forma permanente en todos sus actos públicos, como, así también, en la vida partidarias en las filas de la Democracia Cristiana de Chile.

Encarnó los valores de la cristiandad, siendo devoto de la Beata Laurita Vicuña, como me lo manifestará personalmente en sus visitas a la República Argentina, puntualmente a la Ciudad de Córdoba, hace ya varios años atrás.

Presidente del Senado entre los años 1971 y 1972 y Presidente de la Republica en el periodo 1990 a 1994, siendo el primer Presidente electo luego del repudiable y terrible golpe de Estado que derrocó al presidente constitucional Salvador Allende. Fue el primer presidente de la era democrática chilena posterior al régimen militar, y que cimento el nacimiento de la denominada Concertación de Partidos por la Democracia, en donde la Democracia Cristiana conjuntamente con el socialismo, vienen cumpliendo un rol protagónico, para el afianzamiento, vigencia y fortalecimiento del orden democrático y constitucional chileno.

Don Patricio como abogado, catedrático universitario, político y como estadista fue promotor del trabajo en equipo y del apego irrestricto a las reglas de la ética.

Defensor de los derechos humanos del pueblo chilenos ante las violaciones cometidas por el régimen militar de Pinochet.

Promotor de los valores y principios de la Democracia Cristiana en donde ejerció, en reiterados periodos, la presidencia de su partido.

En definitiva, Don Patricio, seguro, ha pasado a la historia como uno de los grandes demócratas de América, y tiene ganado un lugar importante en el corazón de los chilenos, por eso, nosotros solo hacemos un humilde homenaje, en el convencimiento de que Dios está recibiéndolo en su seno.

Por todo ello, solicito a los señores Diputados se sirvan acompañar el presente proyecto de declaración.