Citar en los términos del artículo 71 de la Constitución Nacional a los Ministros de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, Arq. Julio de Vido; y de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Lic. Héctor Timerman; para recibir las explicaciones e informes necesarios que se le requieran por el Plenario de la H. Cámara de Diputados, en relación a las relaciones diplomáticas y negociaciones comercia- les bilaterales con la República de Venezuela desde el año 2003 hasta el pre- sente.

Señor presidente:

La enorme conmoción que ha causado en los últimos días la comprobación de la existencia de una diplomacia paralela, a cargo de las negociaciones comerciales bilaterales entre nuestro país y la República de Ve- nezuela, amerita la presencia de los funcionarios y áreas responsables en su máximo nivel gubernamental. Y ésta es la razón por la que solicitamos la presencia de los Mi- nistros de Planificación Federal, Inversión y Servicios, Arquitecto Julio De Vido; así como del nuevo Canciller Héctor Timerman, y sin perjuicio del breve tiempo de gestión de este último, pero que, con seguridad, estará en condiciones de responder a los re- querimientos que se le formulen.

Nuestro sistema democrático de derecho, y la división de poderes del sistema republicano, facultan y obligan al Poder Legislativo en su tarea de control sobre la gestión del Poder Ejecutivo, máxime en cuestiones vin- culadas con la política exterior y las relaciones comerciales entre los países. Y de ma- nera particular lo establece, la Constitución Nacional, al obligar al Poder Ejecutivo a brindar informes de gestión cuando le fueran requeridas, y al fijarlas como facultad de cada una de las Cámaras del Congreso Nacional, el citar a los Ministros para recibir las explicaciones e informes que estime convenientes.

En el ejercicio de esta facultad y deber constitucional es que solicitamos por medio de esta resolución, la presencia de los mencionados titulares de las áreas de referencia. Estimamos necesario recibir sus testimonios para brindar claridad a una cuestión tan sensible como son las relaciones internacionales y también la ejecución de convenios de cooperación y comercialización celebrados con otros países.

La relación bilateral comercial entre nuestro país y la república hermana de Venezuela, ha sido motivo de severos cuestionamien- tos y sospechas, tanto en el ámbito público oficial, como en la justicia y en los medios de comunicación, desde hacer varios años. Pero de manera particular, esa situación se ha agravado con las recientes declaraciones de funcionarios, embajadores, empre- sarios u otras personas, en el sentido de reafirmación de esa suerte de diplomacia paralela que, desconociendo o eludiendo los canales formales oficiales de la relación entre los países, facilitaron, instalaron o ejercitaron en negociaciones que también han resultado, a su vez, objetivo de dudas o sospechas, acerca de sus protagonistas, sus beneficios, conveniencias o perjuicios para el país. Los mismos ministros convocados han tenido expresiones públicas de las que podría inferirse, también, esta anómala situación sobre la que estamos requiriendo información.

Eduardo Sadous, ex embajador argentino en Venezuela entre el año 2002 y 2004, declaro en la justicia la existencia de gestio- nes paralelas e irregulares en el vínculo entre nuestro país y Venezuela, y de las cua- les se ha desprendido una serie de negocios entre particulares y/o con la intervención directa de ambos países. Se ha conocido también la existencia de una serie de comu- nicaciones internas que ratifican dicha situación, y en particular la advertencia sobre la existencia de un Fideicomiso y otros instrumentos respecto de los cuales la Embajada no habría tenido participación. Las sospechas recaen también en la probable exigencia del pago de "comisiones" a los empresarios argentinos que querían realizar exporta- ciones a Venezuela. Y además, lo que existe como confirmación absoluta, es la identi- ficación de Claudio Uberti como el responsable de dichas relaciones y negocios, el mismo funcionario que, siendo Presidente del OCCOVI (Organismo de control de co- rredores viales), viajaba con injustificable frecuencia desde y hacia Venezuela, en aviones financiados por PDVSA, y recordando que en una de esas oportunidades, dicho funcionario llegó a la Argentina acompañado de Guido Antonini Wilson, portador de una valija con u$s 800.000.- que nunca ha reclamado.

El propio ex Ministro de Relaciones Exterio- res Rafael Bielsa declaró a la revista Noticias en su ejemplar número 1740, en refe- rencia al faltante de fondos del fideicomiso "Le envié la documentación a Kirchner y con posterioridad nos reunimos. Le expliqué la preocupación del embajador Sadous, y él tomó perfecto conocimiento y cartas en el asunto. Si mal no recuerdo, me dijo que era un tema de De Vido, pero no me dijo "acá hay alguna irregularidad", al contrario, le pareció que era un malentendido.

El Ministro de Planificación, Julio De Vido, en declaraciones realizadas a una radio el pasado 24 de junio declaró " Cuando habla de una embajada paralela, si se refiere a todo lo que tuvimos que hacer porque él (por Sadous) no hacía nada o porque se pasaba de copetín en copetín y de cóctel en cóc- tel, bueno, tómelo como una embajada paralela", y se jactó además de haber sido el responsable de haber aumentado el comercio entre Argentina y Venezuela.

La ley 26.638 es clara en cuanto fija como atribuciones del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto en "asistir al Presidente de la Nación, y al Jefe de Gabinete de Ministros en orden a sus competencias, en todo lo inherente a las relaciones exteriores de la Nación y su representación ante los gobier- nos extranjeros, la Santa Sede y las entidades internacionales en todos los campos del accionar de la República, y en particular:

1. Entender en la determinación de los ob- jetivos y políticas del área de su competencia.

2. Ejecutar los planes, programas y proyec- tos del área de su competencia elaborados conforme las directivas que imparta el Po- der Ejecutivo nacional.

3. Entender, desde el punto de vista de la política exterior, en todas las reuniones, congresos y conferencias de carácter interna- cional y en las misiones especiales ante los gobiernos extranjeros, organismos y enti- dades internacionales, así como en las instrucciones que corresponda impartir en cada caso, y su ejecución.

4. Entender en las relaciones con el cuerpo diplomático y consular extranjero, y con los representantes gubernamentales, de orga- nismos y entidades intergubernamentales en la República.

5. Entender, desde el punto de vista de la política exterior, en la elaboración, registro e interpretación de los tratados, pactos, convenios, protocolos, acuerdos, arreglos o cualquier otro instrumento de naturaleza internacional, en todas las etapas de la negociación, adopción, adhesión, accesión y denuncia.

6. Entender, desde el punto de vista de la política exterior, en todo lo inherente a las actividades de las misiones especiales en- viadas a la República por los gobiernos extranjeros o por organismos o entidades in- ternacionales."

Entre otras facultades

Que por lo tanto no corresponde que fun- cionarios ajenos al Ministerio de Relaciones Exteriores desempeñen acciones, inter- cambios, gestiones vinculadas a la política exterior o comercial al margen de dicha Cartera, que tiene la facultad y obligación de centralizar y coordinar esas accio- nes.

Durante este fin de semana, hemos tomado conocimiento de situaciones y documentación del propio Ministerio de Relaciones Ex- teriores, que confirman esas sospechas y preocupaciones. En particular, un cable in- terno de hace solo 10 días emitido por el Subsecretario de Integración Económica Americana y Mercosur Eduardo Sigal, acerca del tratamiento dado a algunas empre- sas argentinas, de donde se deduce la existencia de hijos y entenados, favoritos y discriminados, por las decisiones políticas tomadas en relación a la participación de éstas en negociaciones con la República de Venezuela. Dice textualmente el cable recientemente difundido: "La referida exclusión de las empresas argentinas se habría originado en una reunión paralela organizada por el Sr. José María Olazagasti - secretario privado del Ministro de Planificación Julio De Vido- en ocasión de la COBAN (Comisión Binacinal de Alto Nivel), de la que habrían participado únicamente las em- presas que aparecen como signatarias del mencionado programa (las menciona), se- gún surge de la copia del documento del citado programa de trabajo); pero a la que no fueron convocadas otras empresas participantes de la COBAN..."

El mencionado documento no puede inter- pretarse sino como una denuncia sobre el estado de situación y la existencia, induda- ble a esta altura, de esa diplomacia paralela manejada desde el Ministerio de Planifi- cación Federal. Se agrega a esto las declaraciones del ex vicegobernador de la Pro- vincia de Santa Cruz, Eduardo Arnold acerca de un viaje del que él mismo había parti- cipado en abril del 2005 a Caracas.

En los últimos tiempos, la puesta a luz de esta situación tornó en insostenible la permanencia en su cargo del entonces Ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto Dr. Jorge Taiana y sin duda, en ello, radica el fundamento principal de su renuncia. La pretensión de que Cancillería siguiera convalidando en silencio una sucesiva serie de episodios escandalosos en la referida relación bilateral con Venezuela, terminó con uno de los integrantes más res- petados del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.

Sobran por tanto los motivos que funda- mentan este pedido, en el ejercicio de nuestro deber de control institucional y las facul- tades que nos confiere la Constitución Nacional en su art.71. Y es por ello que solici- tamos de nuestros colegas el acompañamiento al proyecto que presentamos para hacer venir al Plenario de la Cámara de Diputados a los Ministros de Planificación Fe- deral, Inversión y Servicios, Julio De Vido, y al de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Héctor Timerman, a brindar las explicaciones e informes que se le requieran en oportunidad de su presencia.