Su enérgico repudio a la agresión sufrida por los periodistas Magdalena Ruiz Guiñazú, Gabriel Michi y Jorge Lanata mientras disertaban en el marco de la apertura del VI Congreso Nacional e Internacional del Foro de Periodismo Argentino (Fopea), que se realizó el día 3 de noviembre del corriente en la Universidad de Palermo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Señor presidente:

El día jueves 3 de noviembre del corriente, mientras participaban de la apertura del VI Congreso Nacional e Internacional del Foro de Periodistas Argentinos (FOPEA), Magdalena Ruiz Guiñazú, Gabriel Michi y Jorge Lanata fueron agredidos desde una azotea cercana al lugar donde se desarrollaba el debate en dependencias de la Universidad de Palermo sita en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, por un grupo de personas que aún no han sido identificadas.

No necesitamos fundamentar lo motivos del presente proyecto. Las crónicas periodísticas del hecho hablan por sí solas.

Un grupo de personas, en su mayoría periodistas, participaban de la apertura del congreso realizado por una organización cuyo objetivo principal es defender los derechos de los trabajadores de prensa, cuando en forma totalmente cobarde y aprovechando que el evento se realiza al aire libre, un grupo de pseudo militantes comienza a agredir verbalmente a los oradores para concluir apedreando a la concurrencia.

Hechos de esta naturaleza deben cesar en forma definitiva en nuestro país. Y es responsabilidad exclusiva del Poder Ejecutivo Nacional, que a través de los organismos competentes debe realizar una rigurosa investigación para identificar a los autores de esta violación a los derechos básicos de nuestra sociedad y a las libertades y llevarlos así ante la Justicia.

Esta agresión no es un hecho aislado. Se inscribe en una larga lista de acontecimientos en los cuales distintos medios de comunicación y trabajadores de prensa han sido calumniados, intimidados y agredidos. Hemos denunciado cada una de estas acciones, las últimas han sido la destrucción de las antenas de transmisión de las radios Pop y Mega y el incendio de la FM 93.3 de Zárate. En todos los casos solicitamos se tomaran medidas para evitar nuevas agresiones. Indudablemente no hemos sido escuchados por las autoridades responsables y la escalada de violencia continúa su ascenso.

En este caso particular y, si bien han existido con anterioridad agresiones físicas, el hecho reviste una gravedad simbólica mayor.

La mecánica utilizada remite directamente a las prácticas del fascismo, cuando patotas de seguidores del régimen amedrentaban a opositores y minorías con prácticas idénticas a las exhibidas en el lamentable episodio al que nos estamos refiriendo.

La falta de respuesta de quienes tienen la responsabilidad de poner fin a estos atropellos no logrará que dejemos de denunciar las violaciones que se vienen cometiendo en forma sistemática contra el derecho a la Libertad de Expresión, que garantiza nuestra Constitución Nacional y los distintos Tratados Internacionales suscriptos por nuestro país en la materia.

El Preámbulo de la Declaración de Chapultepec, sostiene: "Solo mediante la libre expresión y circulación de ideas, la búsqueda y difusión de informaciones, la posibilidad de indagar y cuestionar, de exponer y reaccionar, de coincidir y discrepar, de dialogar y confrontar, de publicar y transmitir, es posible mantener una sociedad libre. Solo mediante la práctica de estos principios será posible garantizar a los ciudadanos y grupos su derecho a recibir información imparcial y oportuna."

Una vez más, y con el profundo deseo de que no vuelva a ser necesario, instamos a todos los actores involucrados a poner fin a la sucesión de agresiones a los medios y trabajadores de prensa que como queda en evidencia no ha hecho más que profundizarse en los últimos tiempos.

Finalmente reiteramos nuestra exigencia de una exhaustiva investigación judicial y solicitamos a las autoridades que tomen nota sobre los cada vez más frecuentes ataques actuando para llevar tranquilidad a los periodistas y ciudadanos a fin de que todos puedan ejercer sus libertades como corresponde en democracia.

Por todo lo expuesto Señor presidente es que solicitamos la aprobación del presente proyecto de Declaración.