Dirigirse al Poder Ejecutivo para que a través de los organismos que correspondan informe a esta Honorable Cámara sobre diversas cuestiones relacionadas con la puesta en marcha de la central atómica Atucha II.

i) Costo total de la inversión a la fecha y costos parciales diferenciados por rubros y por años.

ii) Si al momento de la reactivación de la construcción de la central nuclear fueron evaluados proyectos alternativos. En caso afirmativo, cuál fue el monto total de la contratación efectuada y el de cada uno de estos proyectos.

iii) Cuál fue el tipo de reactor utilizado y por cuáles motivos.

iv) Con qué sistemas de seguridad cuenta y si se ajustan a los parámetros internacionales.

v) Si hubo actualización tecnológica respecto del proyecto original iniciado en 1982 y paralizado desde 1994.

vi) Cuál es la media nacional actual del costo del megavatio y cuál el costo final estimado de los que producirá Atucha II.

vii) Cuáles han sido los recursos humanos empleados, cuál la labor realizada y su año de ingreso.

viii) Cuáles han sido los informes anuales de la Autoridad Regulatoria Nuclear Argentina (ARN) sobre las actividades llevadas a cabo por la central y si hubo sugerencias de dicha entidad sobre medidas a adoptar en beneficio del interés público.

ix) Cuál ha sido el plan de trabajo detallado llevado adelante, detallando todas las actividades de ingeniería, construcción y montaje pertinentes para la finalización de la central.

Señor presidente:

El 29 de septiembre del corriente año, la presidenta Cristina Kirchner inauguró -sin poner en marcha- la central atómica Atucha II, una obra que estuvo paralizada por casi dos décadas y que con la reactivación del plan nuclear argentino en 2006 se convirtió en una de las apuestas energéticas del gobierno. Con una inversión de $10.200 millones, según se informó oficialmente, la central tiene una potencia de 745 megavatios y empezará a aportar energía al sistema nacional a partir del segundo semestre del año que viene, cuando alcance su fase operativa máxima. También se aseguró oficialmente que casi el 90% de los insumos y mano de obra de Atucha II es argentino y que ochocientos técnicos y operarios calificados regresaron al país desde la reactivación del programa nuclear.

En la página web oficial de Atucha II (http://www.atucha2.com/) se informa que la central se está construyendo de acuerdo con la licencia de construcción, las normas y el programa de inspección oportunamente dispuesto por la Autoridad Regulatoria Nuclear Argentina, una entidad autárquica bajo jurisdicción de la Secretaría General de la Presidencia de la Nación, creada en 1997 mediante la Ley Nacional de la Actividad Nuclear (N° 24.804). En el artículo 16 de esta ley se establece que la ARN deberá someter anualmente al Poder Ejecutivo nacional y al Honorable Congreso de la Nación un informe sobre las actividades del año y sugerencias sobre medidas a adoptar en beneficio del interés público.

El Gobierno Nacional ha determinado que el desarrollo y mantenimiento de la opción nuclear en la generación masiva de energía y otras aplicaciones es de importancia estratégica para la República Argentina, que es esencial para el desarrollo nacional, a fin de plasmar el desarrollo industrial científico y tecnológico. Por medio de los Decretos Nros. 981/05 y 1085/06 el Poder Ejecutivo Nacional ratificó la decisión de continuar con las actividades de diseño, construcción, adquisición de bienes y servicios, montaje, puesta en marcha y operación de la Central Nuclear Atucha II, e iniciar en el menor plazo posible su operación comercial, encomendando a la empresa Nucleoeléctrica Argentina Sociedad Anónima (NASA) la realización de los actos que fuere menester para la puesta en operación de esa central nuclear de 750 MWe.

La finalización de Atucha II esta técnicamente en manos de Nucleoeléctrica Argentina S.A.(NASA), empresa cuyo capital esta constituido por 99 por ciento de acciones del Estado Nacional, y 1 por ciento del Ente Binacional de Proyectos Energéticos S.A. NASA tiene a su cargo además la producción y comercialización de la energía producida por Atucha I (357 MW) y Embalse. Durante 2008 la generación de estas dos centrales alcanzó a 7,4 millones de MWh, con una facturación anual de 730 millones de pesos. A pesar de las buenas intenciones declamadas, no queda clara la partida comprometida al proyecto como tampoco si hubo un correcto análisis de la viabilidad de la reactivación de la obra, ni si se contemplaron planes alternativos, ni a qué costo será producido el megavatio en el futuro. Por lo expuesto, solicito a mis colegas se acompañe el presente pedido de informes al poder ejecutivo.