- RECOPILACION DE TODA DOCUMENTACION SOBRE LOS ORIGENES DE LA UNION CIVICA RADICAL Y DEL PARTIDO SOCIALISTA EN LA BIBLIOTECA DEL HONORABLE CONGRESO DE LA NACION-

El Senado y Cámara de Diputados de la Nación Argentina...

Artículo 1º- Dispóngase la recopilación, clasificación y edición de todo tipo de documentación existente sobre los orígenes de la Unión Cívica Radical y del Partido Socialista.

Artículo 2º- La tarea de compilación deberá incluir todo el material bibliográfico, documental, filmográfico, taquigráfico, fonográfico, audiovisual y todo otro documento, en cualquier tipo soporte en que se encuentre editado, cuya contenido se refiera de manera directa o indirecta a los orígenes de la Unión Cívica Radical y del Partido Socialista.

Artículo 3º- Encárgase a la Biblioteca del Congreso de la Nación la realización de la tarea ordenada en la presente ley.

Artículo 4º- El gasto que demande el cumplimiento de la presente ley será imputado a una partida específica de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación.

Artículo 5º A los fines establecidos en el artículo 1º de la presente ley, podrán realizarse las adquisiciones a título oneroso o gratuito que resulten pertinentes al cumplimiento de la presente ley.

Artículo 6º Comuníquese al Poder Ejecutivo.

Señor presidente:

La historia de los partidos políticos es la historia de nuestra democracia, existen tres partidos históricos y tradicionales en la República Argentina, el Partido Justicialista, el Partido Socialista y la Unión Cívica Radical, de los cuales, solo el primero tiene el honor de contar con una colección ordenada en la Biblioteca del Congreso de la Nación, este proyecto intenta emular el gran trabajo realizado por los trabajadores legislativos en la colección sobre Peronismo, ampliándolo hacia las otras tradiciones políticas que traccionan el pensamiento nacional.

La reforma de la constitucional nacional en el año 1994 reconoció en su art. 37 a los partidos políticos como “instituciones fundamentales de la democracia”, obligando así al Estado Nacional a financiar su funcionamiento y a los partidos a cumplir la tarea fundamental de formar a sus dirigentes y garantizar la publicidad sobre el origen de los fondos para su financiamiento como así también del uso dado a los mismos.

Desde el retorno a la democracia el estudio del sistema de partidos y coaliciones de nuestro país ha tomado una enorme relevancia; durante la década del 80 y principios de los noventa su estudio sirvió para explicar en gran medida la inestabilidad de los regímenes democráticos en nuestro continente, posteriormente y con la implosión del sistema de partidos que vivimos en 2001, su saber se diversifico, intentado explicar la formación de coaliciones de gobierno.

Para facilitar el estudio de los partidos políticos el presente proyecto intenta ordenar la recopilación del material sobre el periodo más relevante de estos partidos centenarios, su origen y mitos fundantes, intentado superar la dispersión del material existente, facilitar el acceso a los contenidos disponibles e incrementar la producción bibliográfica sobre este periodo de la vida partidaria, facilitando a intelectuales, investigadores y público en general la posibilidad de acceder a un período de nuestra historia, que merece ser profundizado, les permitirá un conocimiento integral de la producción existente, como así también, un acceso organizado, sistematizado y actualizado a esas fuentes.

La Unión Cívica Radical nace como partido el 26 de junio de 1891 fecha en la cual los seguidores de Leandro N. Alem constituyeron formalmente la Unión Cívica Antiacuerdista, que cambiaría el nombre, el 2 de julio, a Unión Cívica Radical.

Un observador contemporáneo y testigo presencial afirmaba que "Mirando objetivamente hasta mayores lejanías, el 90 resultaba, por arriba de las tristes causas ocasionales, un episodio de la formación de una democracia, fruto espontáneo e incontenible de la sangre y de la tierra". El Pacto Roca-Mitre, la fractura de la Unión Cívica y el nacimiento de la UCR como consecuencia de un acuerdo suscripto entre el sector de la Unión Cívica que respondían a Mitre y sectores oficialistas cercanos a Roca, se produce la fractura de la Unión Cívica y el nacimiento de la llamada UNION CIVICA RADICAL, el agregado de "Radical" es tomado de Leandro N. Alem, algunos afirman que ocurrió luego de la siguiente declaración: "Yo no acepto el acuerdo; soy radical contra el acuerdo; soy radical intransigente".

Alem era muy afecto a la palabra "radical", Gabriel del Mazo, uno de los principales historiadores del radicalismo, afirma que la expresión surgió "por primera vez en una conversación en la casa de Alem de la calle Cuyo (...) Fue usada por el doctor Saldías, escritor, historiador, afectísimo amigo de Don Leandro. Con esa palabra calificó la actitud terminante, en vista del fondo del problema, que tomarían en lo interno significando que así debería ser llamada la actitud tajante que proyectaba. Alem se incorporó en su asiento y exclamó: "Ese debe ser nuestro distintivo". Inmediatamente después comenzó a popularizarse su uso".

El día 2 de Julio de 1891 la mayoría del Comité Nacional de la Unión Cívica lanza un manifiesto, anunciando la ruptura de la agrupación y el repudio al acuerdo Roca-Mitre. "Conciudadanos: el desarrollo de acontecimientos graves y precipitados en los últimos días, coloca al Comité Nacional de la Unión Cívica en la necesidad de dirigir el presente manifiesto a sus correligionarios y a los pueblos de la república (...) Una minoría del Comité Nacional, formada por los partidarios del acuerdo con la agrupación dominante, acaba de romper la unidad de la Unión Cívica, y llamándose Comité Nacional de la misma ha resuelto reorganizarla. (...) es el caso recordar el carácter esencial de la Unión Cívica, y los trabajos

personalistas que desnaturalizando el programa de nuestra institución, han hecho dentro de la misma algunos amigos del General Mitre, hasta llegar a la escisión actual. La Unión Cívica fue desde el principio la coalición de los hombres de bien, vinculados para destruir el sistema de gobierno imperante que ha producido tan graves perturbaciones en la República (...).

No lo entendieron así los que a toda costa querían proclamar la candidatura del general Mitre, entonces, la Unión Cívica Radical, hace su aparición en la escena política argentina. Entre sus principales dirigentes se encontraban además de Alem y su sobrino Hipólito Yrigoyen, Marcelo T. de Alvear, Deodoro Roca, Lisandro de la Torre, Pelagio Luna, José Lencinas, Angel Gallardo, Tomas A. Le Bretón, José Luis Cantilo, Felipe Senillosa, Bernardo de Irigoyen, Aristóbulo del Valle y otro

Muy cercano en el tiempo a los orígenes de la UCR, la fundación del Partido Socialista data del El 28 de junio de 1896, fecha en la cual, un grupo de delegados de agrupaciones socialistas y gremiales encabezados por el “maestro” Juan B. Justo, se reunieron en el local de la agrupación alemana “Vorwarts” en lo que fue el Congreso Constituyente del Partido Socialista, que coronaba el proceso organizativo del socialismo argentino cuyo origen se remonta a los primeros años de la década de 1890.

En aquellas históricas jornadas se aprobaron la Declaración de Principios, el Estatuto y el Programa Mínimo de la nueva agrupación de los trabajadores, que funda en nuestro país la acción política independiente de la clase obrera, constituyéndose en el hito fundamental de la historia del proletariado argentino.

El Partido Socialista, que encontraría su centro ideológico y político en la figura de Juan B. Justo, encarnó -en palabras de José Aricó- el “proyecto más coherente de nacionalización de las masas, de incorporación de los trabajadores a la vida nacional y de construcción de una democracia social avanzada”. El socialismo intentaba así encarnar la modernización democrática y la transformación social, en un proyecto de sociedad en que ambos valores se entrelazaran en caminos simultáneos.

Los socialistas imprimirán desde entonces una impronta decisiva sobre la clase obrera, la política y la sociedad argentina, a través de una vasta actividad política, cooperativa, sindical y cultural, que quedará plasmada en la saga fundacional que emprenderá Juan B. Justo desde finales del siglo XIX, la cual consistió en: el periódico La Vanguardia, en 1894; la Sociedad Obrera de Socorros Mutuos, en 1898; la Sociedad Luz, en 1899, para culminar en 1905 con la Cooperativa El Hogar Obrero.

Tanto el Radicalismo como el Partido Socialismo son partidos centenarios fundados en el siglo XIX, desde sus filas han surgidos personalidades que han animado el debate político y cultural de la República, sus historias y principios han empapado la identidad de la Nación, figuras éticas como Juan b. Justo, Lisandro de la Torre y Leandro N. Alem, presidentes de la Nación como Hipólito Irigoyen y Marcelo Torcuato de Alvear, han formado parte del periodo de formación de nuestro sistema de partidos.

Por lo expuesto, es que solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto