Su más enérgico repudio al secuestro y torturas realizados contra Corina De Bonis, docente del Centro Educación Complementario Nº 801 de la Localidad de Moreno, Provincia de Buenos Aires perpetrado el día 12 de Septiembre de 2018.

Instar a las autoridades competentes a arbitrar todos los medios necesarios a los efectos de que a la mayor brevedad investigue, esclarezca los hechos y se proceda a actuar en consecuencia.

Señor presidente:

El presente proyecto tiene por objeto el repudio al secuestro y torturas contra Corina De Bonis, docente del Centro Educación Complementario Nº 801 de la Localidad de Moreno, Provincia de Buenos Aires.

Según se ha informado a través de diversos medios periodísticos, y denunciado públicamente por los gremios docentes, en horas de la tarde del 12 de Septiembre, desconocidos abordaron a la docente, la obligaron a subir a un auto, la golpearon y con un objeto punzante escribieron en su abdomen “ollas no”, para luego liberarla, no sin antes amenazarla de muerte.

La gravedad del hecho de esta naturaleza, hace que debamos actuar con rapidez y firmeza exigiendo una pronta investigación de los hechos denunciados, y merece sin dudas nuestro repudio.

Que estos se hayan dado en un contexto de conflicto, nos exige brindar sin dilaciones una respuesta institucional que no deje lugar a dudas de nuestro rechazo a la violencia, la persecución política, como métodos de resolución o disuasión de protestas.

Como dirigentes políticos y representantes del pueblo no podemos permanecer callados ante hechos como el de referencia y tenemos el deber ético de involucrarnos no sólo para exigir justicia sino para intentar ayudar con nuestro decir y nuestro hacer a la paz social.

Recordemos que la Sra. De Bonis es una docente comprometida con la realidad social, en un Distrito donde de 324 establecimientos educativos alrededor de 280 se encuentran cerrados por diversos problemas de infraestructura, y donde hace poco tiempo, sus colegas, Sandra y Ruben perdieron la vida por la explosión del colegio donde cumplían sus tareas. Debido a esta situación, Corina brindaba clases y alimentos a los alumnos de su comunidad con los elementos a su alcance: las ollas populares, motivo por el cual ya había recibido amenazas.

El silencio ante situaciones de estas características no es una opción posible, ya que ello nos haría cómplices pasivos de prácticas nefastas que fueron parte de los momentos más oscuros de la historia de nuestro país.

Por los motivos expuestos, solicitamos la aprobación de la presente iniciativa.