Rechazar en todos sus términos la nota enviada por la Primera Ministra del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte Theresa May, al presidente Mauricio Macri, por pretender condicionar la relación bilateral a la modificación de leyes sancionadas con amplio consenso por Congreso de la Nación y desconocer la existencia de una controversia sobre soberanía en los términos de la Resolución 2065 de la Asamblea General de Naciones Unidas.

Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional que se abstenga de comprometer la vigencia de decisiones legislativas en cualquier instancia diplomática y/o de negociación que lleve adelante con el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte.

Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional respete lo establecido en la Disposición Transitoria Primera de la Constitución Nacional en su relación con Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte.

Disponer que se remita al Presidente Mauricio Mari a través de la presidencia de la Cámara copia autenticada de la Declaración de Ushuaia, aprobada por unanimidad por este Congreso.

Señor presidente:

El nuevo enfoque de las relaciones bilaterales con el Reino Unido de Gran Bretaña impulsado por el gobierno de Mauricio Macri, pone en crisis una verdadera política de Estado, al minimizar el legítimo reclamo de soberanía sobre las Islas Malvinas que viene sosteniendo nuestro país en todos los foros internacionales. El mandato que emana de la Constitución Nacional es claro, contundente y no puede quedar subordinado a estrategias comerciales ni diplomáticas: “La Nación Argentina ratifica su legítima e imprescriptible soberanía sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos e insulares correspondientes, por ser parte integrante del territorio nacional”.

En el día de la fecha, se difundió la carta que la Primera Ministra del Reino Unido, Theresa May, envió al presidente Macri en respuesta a la nota por la cual el mandatario informaba sobre la postulación de la Canciller, Susana Malcorra, a la Secretaría General de la ONU. En ella, May expresa su deseo de que las relaciones entre ambos países entren en “una fase más productivas” y celebra el avance en proyectos de cooperación mutuo. Como parte de esta nueva agenda, la mandataria británica demanda avanzar en el establecimiento de conexiones aéreas desde el continente con nuestras Islas Malvinas y la derogación de la legislación que protege los yacimientos hidrocarburiferos que la argentina posee en su plataforma continental (ley 26.659 y su modificatoria, ley 26.915).

Esta comunicación oficial es un nuevo episodio en el preocupante modo en que el gobierno de la Alianza Cambiemos ha decidido encarar su relación diplomática con el Reino Unido. Ante esta irresponsable y peligrosa actitud de subordinación de los interesas de nuestra Nación, consideramos preciso recordar que:

- El Reino de Gran Bretaña ejerce una ocupación ilegítima de las Islas Malvinas, a partir del ejercicio de la fuerza e incumpliendo las reiteradas resoluciones del ONU que exhortan a las partes a sentarse a la mesa de negociaciones desde hace 50 años.

- La Base Mount Pleasant (Monte Placentero) es la base militar de la OTAN más grande del Atlántico Sur y una amenaza constante para toda la región suramericana.

- La explotación ilegítima de recursos naturales en la zona de litigio es una violación a lo establecido por las Naciones Unidas (Resolución 31/49) y a la Ley 29.615; posición que se ha visto reforzada por la resolución de la COPLA que reconoce esos territorios en litigio diplomático. Expresamos esta preocupación en el Proyecto de Resolución 3147/D/2016 cuando denunciamos las operaciones de exploración de la empresa británica Rockhooper Exploration Plc, en el área de Sea Lion en la Cuenca Norte de las Islas Malvinas.

- También hay que recordar que, en marzo del 2012, la entonces presidenta Cristina Kirchner anunció la intención de renegociar con el Reino Unido la posibilidad de incrementar a tres los vuelos semanales al archipiélago con la condición que los viajes se hagan desde Buenos Aires y a través de Aerolíneas Argentinas. El Foreing Office respondió con escepticismo e ironía.

Cuando a comienzos de 2012, todas las fuerzas políticas con representación parlamentaria aprobaron por unanimidad la Declaración de Ushuaia, creíamos haber fijado en consenso y unidad los lineamientos fundamentales de la posición argentina respecto a la Cuestión Malvinas. Es por eso que consideramos inaceptable acceder a los nuevos términos en que se busca plantear la relación bilateral. Además de violar la Constitución Nacional y la legislación vigente, esta nueva agenda no hace más que favorecer la perpetuación de la flagrante amenaza bélica que representa la Base Mount Peasant y resignar nuestros derechos sobre los recursos estratégicos que garantizan el buen vivir de las próximas generaciones de argentinos.

Es por eso que volvemos a manifestar nuestra preocupación ante estos gestos diplomáticos alarmantes que se vienen registrando y reiteramos que de ninguna manera admitiremos que nuestro reclamo soberano sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes y la memoria de nuestros héroes caídos en combate, sean una carta de negociación en el tablero de la geopolítica global.

Por lo expuesto es que solicitamos a nuestros pares nos acompañen en la aprobación de la presente iniciativa