Que a partir de la publicación de la Resolución 2018-178-APN-MA con fecha del 28 de junio de 2018 y sobre Expediente 2018-30333072-APN-DGD #MA Delegación de Facultades en el SAFCyDT (Monotributo Social Agropecuario) solicitar al Poder Ejecutivo Nacional que, a través del organismo correspondiente, informe:

Cuáles son las razones del reempadronamiento propuesto para las familias inscriptas en el régimen del Monotributo Social Agropecuario.

De qué manera la actualización de los datos correspondientes a los beneficiarios del régimen del Monotributo Social Agropecuario asegurará la promoción de la formalización de la economía del agricultor familiar.

Cuáles son las gestiones y decisiones correspondientes a la continuidad del régimen de Monotributo Social Agropecuario que se tomarán a partir del 1 de enero de 2019.

En el caso de decidir la continuidad del régimen del Monotributo Social Agropecuario cuáles serán las nuevas condiciones y requisitos que deberán cumplir los beneficiarios del régimen a partir del 1 de enero de 2019.

Señor presidente:

El Monotributo Social Agropecuario (MSA) es una herramienta fundamental para la restitución de derechos de las personas que integran distintas organizaciones indígenas, campesinas, de pequeños productores y de la agricultura familiar de nuestro país inscriptas en el Registro Nacional de la Agricultura Familiar y que facturan hasta $72.000 por año.

El MSA fue creado en 2019 y permite a este grupo de trabajadores agropecuarios ejercer el derecho de acceso a los servicios de salud a través de la obra social, el acceso a la jubilación por medio de los aportes jubilatorios y otorga un marco regulatorio que ayuda a formalizar las actividades de comercialización de los productos de la Agricultura Familiar. Sus principales beneficiarios son pequeños productores caprinos, porcinos, huerteros, apicultores, ganaderos de muy baja escala.

El MSA es la única herramienta que regulariza la actividad productiva de la agricultura familiar. Este sector, durante muchísimos años se ha visto obligado a que toda su cadena de producción se realizase en la informalidad, con los perjuicios que ello implica. La posibilidad de facturación que permitió el MSA posibilitó avanzar mucho en los mercados locales e institucionales de manera directa, sin necesidad de recurrir a intermediarios.

La Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT) es una organización de tipo gremial que agrupa a familias pequeño productoras agropecuarias de distintas provincias del país que día a día trabajan la tierra con su propio esfuerzo. Esta organización cuenta con presencia en 16 provincias y está integrada por más de 15.000 productores. Según datos aportados por la UTT, este sector de la agricultura nacional produce más de la mitad de los alimentos que se consumen en el país y es considerado, según la FAO, un actor clave para combatir la malnutrición y la pobreza rural.

Los integrantes de la UTT denuncian que desde 2017 desde la Secretaría de Agricultura Familiar, Coordinación y Desarrollo Territorial dificultan el ingreso de nuevos perceptores al régimen del MSA: no se inscriben nuevos agricultores y tampoco aceptan a los nuevos integrantes de las familias que ya están inscriptas, lo que les impide gozar de los beneficios de la obra social.

Según la Resolución 2018-178-APN emitida el 28 de junio de 2018 por el Ministerio de Agroindustria de la Nación, se delega en la Secretaría de Agricultura Familiar, Coordinación y Desarrollo Territorial las facultades sobre el MSA. Esta Resolución establece un reempadronamiento de los actuales beneficiarios del régimen que deberá realizarse hasta el 10 de agosto de 2018.

Según lo publicado en la página web https://www.argentina.gob.ar/noticias/actualizacion-de-datos-del-monotributo-social-agropecuario del Ministerio de Agroindustria de la Nación los agricultores reempadronados seguirán teniendo acceso gratuito al MSA hasta fin de este año y, a partir del 1 de enero de 2019, continuarán dentro del Registro de Efectores Sociales del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y seguirán siendo beneficiarios del actual MSA. Pero desde esa fecha, el Estado Nacional sólo aportaría el 75% del beneficio. Los beneficiarios del MSA podrían optar por darse de baja del régimen o por cubrir el 25% del beneficio, porcentaje que actualmente es pagado por el Ministerio de Agroindustria. Además, el agricultor debería pagar la proporción de la obra social que corresponde a cada uno de los integrantes de su familia. Estas medidas resultarían muy perjudiciales para las familias agricultoras.

Las modificaciones en el régimen del MSA comunicado por el Ministerio de Agroindustria perjudica y atenta contra derechos básicos e irrenunciables de estas personas. Son más de 50 mil familias que pierden el derecho a regularizar su trabajo y más de 100 mil personas que pierden el derecho de acceso a la salud.

Señor Presidente, es nuestro deber como representantes de todos los habitantes de la Nación Argentina, garantizar que todos tengan garantizados el acceso y el goce de los derechos humanos básicos.

Por todo lo anterior, y por la importancia que reviste la presencia del Estado junto a los sectores más vulnerables, pido a mis pares que me acompañen en este proyecto.