Derecho a seguir y apoyar la escolaridad de los hijos

Artículo 1º: Las personas que trabajan bajo relación de dependencia cualquiera fuere su situación de revista, régimen laboral o modalidad de contrato de trabajo, tendrán derecho a gozar una franquicia laboral con percepción íntegra de salario, de hasta cinco (5) días por año calendario, para concurrir al establecimiento escolar al que asiste su hija, hijo, representada o representado, durante el periodo de educación inicial, primaria y secundaria, con motivo de actos, actividades, citaciones, reuniones o entrevistas vinculados a su educación. Dicha franquicia podrá ser de jornada completa o media jornada laboral, a elección del trabajador, de acuerdo a las particularidades de cada caso.

Artículo 2°: Comuníquese, publíquese, regístrese y archívese.

Señor presidente:

A nadie escapa la importancia que tiene la presencia y participación activa de los padres en la educación de sus hijos.

Muchas y muy diversas son las modalidades y circunstancias en que puede realizarse este acompañamiento.

Queremos destacar en esta oportunidad la insustituible presencia de los padres en la escuela, cuando se los convoca en algunas ocasiones especiales.

El primer día de clases, los actos escolares, la fiesta de fin de año y las reuniones de padres son algunos ejemplos de citaciones ordinarias. A ellas debe agregarse las citaciones cursadas para tratar sobre situaciones particulares.

La Ley 26.206 enuncia claramente los derechos y deberes de los padres respecto a su participación en la educación de los hijos. En particular el Inciso c) del Artículo 129 enuncia el deber de "Seguir y apoyar la evolución del proceso educativo de sus hijos/as."

En numerosas ocasiones este derecho-deber entra en conflicto con las obligaciones laborales de los padres quienes se ven en la disyuntiva de solicitar permiso, asumiendo posibles consecuencias negativas, o no concurrir a la convocatoria escolar.

Considero que el ejercicio de este derecho-deber de los padres no puede quedar a discreción del empleador y al mismo tiempo es deber del estado garantizarlo.

Sancionar una franquicia universal que permita a todos los trabajadores disponer del tiempo necesario para acompañar la escolaridad obligatoria de sus hijos, viene a resolver una silenciosa problemática que por diversos motivos ha quedado postergada.

Asimismo creo conveniente que dicha franquicia sea flexible para permitir a los padres decidir el momento para su goce y limitada para impedir su uso abusivo. En ese sentido el proyecto no prevé requisitos probatorios previos o posteriores ya que podrían entorpecer la administración escolar y por ende la eficacia de la norma. Basta con que la persona sea el padre, o madre, o representante legal de uno o más niños en edad escolar. Cinco días por año permitiría una disponibilidad razonable y suficiente para cumplir tanto con las convocatorias ordinarias como las particulares.

La franquicia va desde permitir llegar más tarde o retirarse anticipadamente, hasta ausentarse todo el día si las características de la actividad o reunión y el tiempo de los traslados así lo requiriese.

Por todo lo expuesto invito a mis colegas legisladores a convertir en ley este proyecto.