Expresar beneplácito por la labor del Centro Experimental de Cría de Yaguareté (CECY) en su tarea de reintroducir en los lugares donde se encuentra actualmente extinto al yaguareté pantera onca.

Señor presidente:

El yaguareté es el mayor felino de América. Su propio nombre tiene origen guaraní y el animal aparece como protagonista de innumerables leyendas, canciones folclóricas, cuentos y localidades. Pertenece a la familia de los félidos y dentro de ella a la subfamilia de los pantherinos, que agrupa especies de gran tamaño capaces de rugir. Las especies más conocidas del grupo (león, tigre, leopardo y yaguareté) están agrupadas en el género Panthera, siendo pantera onca el nombre científico que designa al yaguareté.

Esta especie se encuentra declarada como Monumento Natural Nacional por Ley Nº 25.463 y está oficialmente catalogado como especie en peligro crítico de extinción en la Argentina. En Corrientes se extinguió a mediados del siglo pasado por culpa de la cacería y la destrucción de su hábitat. El yaguareté no sólo es una especie esencial para mantener la salud y la integridad de los ecosistemas silvestres, sino que también tiene el potencial de convertirse en un atractivo de primer orden para los turistas que visitan Corrientes en busca de su fauna silvestre y paisajes naturales.

Argentina no cuenta con suficientes yaguaretés silvestres como para que puedan ser trasladados y liberados en el Iberá. El Centro Experimental de Cría de Yaguaretés (CECY), manejado por técnicos de Conservation Land Trust (CLT) con asesoría de expertos nacionales e internacionales y autorización de las autoridades provinciales, es el primer centro del mundo dedicado a crear yaguaretés destinados exclusivamente a ser reintroducidos en la vida silvestre.

CECY desarrolla técnicas que buscan reproducir yaguaretés procedentes del cautiverio en el corazón de la Reserva Natural Iberá. Se busca que las crías estén en condiciones de cazar por sí mismos y sean independientes de los seres humanos para que finalmente estén aptos para ser liberados en cualquier lugar de Argentina.

Este año, después de al menos siete décadas de ausencia, nacieron los primeros cachorros de Yaguareté en el Iberá en la Isla de San Alonso, en tierras que pronto conformarán el Parque Nacional del Iberá gracias al trabajo del Centro Experimental de Cría de Yaguareté (CECY).

Frente a esta situación, la Reserva Natural Iberá en Corrientes se destaca por reunir las mejores condiciones en toda América Latina para restaurar una población desaparecida de esta especie. Esto se debe a la existencia de un área protegida de 1.300.000 hectáreas de superficie que alberga extensas áreas despobladas de personas y ganado, y que además cuenta con abundantes animales silvestres que pueden sustentar una población a largo plazo de yaguaretés.

La protección de la especie es vital. Se encuentran sólo tres poblaciones separadas geográficamente y se estima que solo quedan 200 ejemplares en Argentina tras perder el 95% de su distribución original.

Además, el yaguareté está exhibido en el billete argentino de 500 pesos el cual contiene imágenes de la fauna autóctona de las distintas regiones de Argentina, con el fin de preservar la especie y crear conciencia ambiental. Fue elegido como el mejor billete del mundo entre los emitidos en 2016 y obtuvo por ello el Premio Nexonum de España, conforme informó el Banco Central (BCRA).

Por ello, resulta esencial reconocer tan noble iniciativa, no sólo porque es una parte importante del patrimonio natural y cultural de los correntinos en particular y de los argentinos en general, sino también por sus implicancias en torno al futuro Parque Nacional Iberá que sin dudas es una fuente potencial de riqueza y empleo a través del turismo donde decenas de miles de turistas tendrán la posibilidad de ver a este gran felino.