Expresar preocupación por la elevada mortandad de flamencos andinos en la Puna catamarqueña adjudicada, por la Secretaría de Ambiente provincial, a cambios climáticos adversos que derivaron en la falta de alimentos y alteraciones físico-químicas en los cuerpos de agua.

Señor presidente:

En Catamarca cohabitan tres especies de flamencos Phoenicoparrus andinus (parina grande), Phoenicoarrus jamesi (parina chica) y Phoenicopterus chilensis (flamenco austral) que le dan gran belleza a los paisajes acuáticos del desierto Altoandino y de la Puna.

Los censos estivales llevados a cabo cada año por técnicos de la Secretaría de Ambiente en conjunto con la Fundación Yuchan y el grupo de investigación Flamencos Altoandinos, han determinado que llegan cerca de 25.000 individuos de las tres especies a pasar el verano, asentándose preferentemente en la Laguna Grande, distrito El Peñón, departamento Antofagasta, en donde se han observado cerca del 80% de la población total que llega a nuestra provincia.

Lamentablemente, hacia fines de diciembre pasado la jefatura de Áreas Naturales Protegidas dependiente de la Dirección de Bosques Nativos, que pertenece a la Secretaria de Ambiente de la provincia de Catamarca, atribuyó la mortandad de flamencos registrada en la zona de la Puna, a unos 4.000 metros sobre el nivel del mar, a la falta de alimentos ya que escasearon las algas de las que se nutren. Efectivamente, las poblaciones de flamencos andinos son abundantes en los estíos, cuando instalan sus colonias de cría y cuando la oferta trófica presenta diatomeas halófilas de gran tamaño -tales como Surirella sella- sobre las que preda preferentemente.

El organismo provincial destacó que en la zona de Lagunas Grande, Pabellón y Diamante, se registró a fines de 2015 una alta mortandad de flamencos, por lo que técnicos y guardaparques realizaron recorridos y tomaron muestras de órganos y de agua de las lagunas. La zona donde se registraron las mayores mortandades integra el Sitio Ramsar "Lagunas Altoandinas y Puneñas de Catamarca", que es la distinción de carácter internacional que se ha otorgado a las lagunas de alto valor de conservación que existen en nuestra Puna, de los Departamentos Antofagasta de la Sierra, Belén y Tinogasta.

El estudio descartó que las muertes se hayan producido por causas de toxicidad con bacterias pero sí se pudo comprobar la escasa presencia de diatomeas, que son algas microscópicas integrantes del plancton de las lagunas. Asimismo, se indicó que las muestras tomadas se realizaron sobre animales que tenían bajo peso lo que hace presuponer, como primera hipótesis de la mortandad, la baja oferta de alimento de estas lagunas que normalmente en esta época del año sustentan a miles de flamencos.

Sin embargo, significativamente en noviembre de 2015 un guía de turismo registró un evento poco usual: la mortandad de alrededor de un centenar de parinas en un sector de Laguna Grande y cerca de 30 flamencos muertos en la zona de Laguna Pabellón que se encuentra en el interior del Volcán Galán, donde se observó un cambio en la coloración normal de la misma. Este dato no es menor, puesto que podría estar indicando un fenómeno de eutrofización provocado por el crecimiento desmesurado en los cuerpos de agua de ciertas poblaciones de microorganismos como algas, cianobacterias, etc.

Este fenómeno consiste en a la reducción de la cantidad de oxígeno disuelto en agua, que provoca muerte en organismos aerobios y aumento en la fermentación y liberación de gases que son tóxicos como el metano. Las parinas son aves filtradoras, siendo posible que estas algas primitivas (cianobacterias) y otras bacterias generadoras de toxinas, como la botulínica, presentes en estas lagunas produzcan la agonía y muerte de los flamencos.

Asimismo, existe otra posible explicación para estos eventos de mortandad ocurrida en dos Lagunas Altoandinas, y que se podría adjudicar a una caída de granizo en la zona que haya producido la muerte por traumatismos a los flamencos alcanzados, tal como ocurrió en la Laguna Llancanelo, Provincia de Mendoza. Pobladores locales de Antofagasta de la Sierra comentan sobre ese tipo de eventos acaecidos en años anteriores.

Con respecto a algunas opiniones que han surgido últimamente sobre una posible contaminación por residuos producto de la minería hay que descartar prácticamente tal hipótesis. Puesto que no hay actividad minera en la zona que pueda generar esta situación. Además hay que tener en cuenta que estos casos han sido puntuales. Y de ser así, habría reportes en lagunas cercanas a empresas mineras como Laguna Caro, o Laguna del Salar del Hombre Muerto.

Indudablemente, el calentamiento global es responsable directo de la reducción del hábitat natural del flamenco por la alteración de los parámetros climáticos lo que provoca una reducción de alimentos y la temporada de reproducción de las aves. Efectivamente, las condiciones actuales de extrema sequía en la Puna determinaron que las lagunas se retrajeran a volúmenes mínimos, imposibilitando la sustentación de una población importante de flamencos.

Por las razones expuestas, señor Presidente, y con el espíritu de difundir las graves derivaciones que el cambio climático determina sobre la supervivencia de las especies y la pérdida de una biodiversidad que nos incluye como humanos, solicito el acompañamiento de mis pares para la aprobación del presente proyecto.