La Honorable Cámara de Diputados de la Nación declara su repudio por la profundización de las acciones represivas del gobierno nicaragüense contra sus opositores; y en especial por la detención de defensores de los derechos humanos ocurridas este domingo 14 de octubre, que representan un agravamiento de la crisis social y política que vive ese país.

Asimismo, afirma que éstas acciones significan una profundización en la limitación de las libertades individuales, incompatibles con los derechos más elementales de los ciudadanos; y que además violan todos los compromisos internacionales que defienden el funcionamiento pleno de la democracia.

Por ello la Honorable Cámara de Diputados de la Nación acompaña las acciones que está desarrollando la Comunidad Internacional para frenar ésta opresión al pueblo nicaragüense y adhiere al Comunicado de los Cancilleres de los países del Mercosur ante los nuevos hechos de violencia registrados en Nicaragua firmado en Montevideo el 15 de octubre de 2018.

Señor presidente:

Desde hace ya varios meses el pueblo nicaragüense viene sufriendo un durísimo proceso represivo por parte de su Gobierno, que ha costado más de 200 muertos; ha instalado el terror en la vida cotidiana y avanza en una escalada de impredecibles consecuencias.

Ignorando los llamados de la comunidad internacional, se profundiza la metodología represiva, a través de la detención ilegal de 20 defensores de derechos humanos -entre ellos 13 mujeres- y la emisión de un comunicado amenazante por parte de la Policía Nacional prohibiendo cualquier acción de protesta que no cuente con autorización, lo que vulnera el Art. 53 de la Constitución Política de Nicaragua, el cual reconoce el derecho de reunión pacífica sin permiso previo.

La experiencia nos dice que el camino que ha elegido el gobierno nicaragüense solo puede traer más violencia en detrimento de los derechos básicos de su pueblo.

Por ello es necesario que nuestra Honorable Cámara de Diputados se pronuncie con énfasis rechazando este procedimiento dictatorial y continúe con más acciones que fuercen al gobierno de ese país hermano a respetar los derechos humanos y el pleno funcionamiento de la democracia.

Asimismo, solicitamos a la Presidencia que haga saber de esta Declaración a nuestros pares del Congreso Nicaragüense.