Expresar su rechazo total y absoluto a la pretensión del Reino Unido de extender la potestad sobre la plataforma continental del límite exterior de las Islas Malvinas de 200 a 350 millas hacia el Este, ante la Convención sobre el Derecho del Mar de la Organización de las Naciones Unidas.

Señor presidente:

Una vez más nos vemos obligados a reafirmar los derechos soberanos de nuestro país sobre las Islas Malvinas. En esta oportunidad, para expresar nuestro total y absoluto rechazo a la pretensión del Reino Unido de extender la potestad sobre la plataforma continental del límite exterior de nuestras Islas de 200 a 350 millas hacia el Este, en el ámbito de la Convención sobre el Derecho del Mar (Convemar) de las Naciones Unidas.

En efecto, el pasado 22 de septiembre de 2007, la representación diplomática del gobierno británico en Buenos Aires admitió que "el Reino Unido está considerando la posibilidad de hacer la presentación ante esa oficina de la ONU sobre la plataforma continental alrededor de las islas", pese a haberse aclarado que "aún no hay ninguna decisión tomada".

En este sentido, debe recordarse que la Convención sobre el Derecho del Mar, que se inició el 10 de diciembre de 1982, estableció que para pasar la soberanía marítima de 200 a 350 millas, existen tres opciones: a) Presentar un estudio científico unilateral y que el otro país no presente oposición; b) Dos Estados deciden realizar la presentación en forma conjunta, sin que ninguno resigne el reclamo de soberanía; c) Si un Estado se opone al a presentación del otro, la Convención archiva el estudio hasta tanto se resuelva el conflicto.

Por otra parte, debe tenerse en cuenta que el Comité de Descolonización de la ONU viene aceptando desde el año 1965 que la Argentina y el Reino Unido se disputan la soberanía sobre las Islas Malvinas, lo cual sienta las bases para una oposición de nuestro país contra la presentación del estudio científico inglés.

Además, existen en la Convención del Derecho del Mar de la ONU antecedentes que respaldan la posición argentina. En efecto, esta Convención ya archivó una presentación de Rusia sobre un área que mantiene en disputa con Japón.

Debe también destacarse que el plazo para la presentación del estudio científico vence en el mes de mayo de 2009. Varios Estados han presentado ya su estudio científico, como Australia, Noruega y Nueva Zelanda; mientras que Francia lo hizo en forma parcial, a Brasil se le realizaron objeciones y a Rusia, como se ha dicho, se le rechazó toda la propuesta.

En nuestro caso, el relevamiento está casi concluido y se podrá cumplir tranquilamente con esa fecha, con lo cual la Argentina podría crecer 1.400.000 kilómetros cuadrados.

Debe tenerse en cuenta que la pretensión de los distintos Estados de extender su potestad sobre las áreas marítimas responde principalmente al objetivo de explorar y explotar recursos naturales, como las especies pesqueras, el petróleo y el gas, entre otros.

En suma, si bien el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto de nuestro país posee las herramientas para plantear objeciones ante la Convención del Derecho del Mar contra la presentación del Reino Unido, considero que esta Honorable Cámara debe también expresar su más enérgico rechazo a semejante pretensión, que una vez más atenta directamente contra nuestros derechos soberanos sobre las Islas Malvinas, Georgias y Sándwich del Sur.

Por todo lo antes expuesto, solicito a mis pares que me acompañen con la aprobación del presente Proyecto de Resolución.