PREVISION Y SEGURIDAD SOCIAL
Comisión PermanenteOf. Administrativa: Piso P04 Oficina 430
Jefe SR. AMBOADE FABIO JAVIER
Martes 16.00hs
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- PREVISION Y SEGURIDAD SOCIAL
Reunión del día 29/06/2010
- .
En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a los veintinueve días del mes de junio de 2010, a la hora 17 y 36:
SR. PRESIDENTE IBARRA Damos comienzo a la reunión de la Comisión de Previsión y Seguridad Social convocada para el día de la fecha, haciendo constar a los señores diputados presentes que se ha formulado una invitación al presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda a efectos de que también participara en la reunión conjunta para debatir los temas en cuestión, que tienen que ver con la convocatoria que han recibido cada uno de los señores diputados.
No habiendo convocado a la reunión conjunta el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, tal cual reza el artículo 102 del reglamento, ésta quedaría sin efecto, dejándole a la presente la naturaleza de reunión de la Comisión de Previsión y Seguridad Social, la que queda reglamentariamente habilitada para discutir los temas que han sido propuestos en la convocatoria y con posibilidad de emitir dictamen.
Atento a ello, solicito al secretario de la comisión que pase asistencia de los señores diputados presentes de la Comisión de Previsión y Seguridad Social a los efectos reglamentarios.
No habiendo convocado a la reunión conjunta el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, tal cual reza el artículo 102 del reglamento, ésta quedaría sin efecto, dejándole a la presente la naturaleza de reunión de la Comisión de Previsión y Seguridad Social, la que queda reglamentariamente habilitada para discutir los temas que han sido propuestos en la convocatoria y con posibilidad de emitir dictamen.
Atento a ello, solicito al secretario de la comisión que pase asistencia de los señores diputados presentes de la Comisión de Previsión y Seguridad Social a los efectos reglamentarios.
- Se pasa lista registrándose la presencia de los señores diputados Ibarra, Díaz Roig, Serebrinsky, Iturraspe, Terada, Mendoza, Alizegui, Arena, Asef, Buryaile, Calchaquí, Ciciliani, Damilano, Fiad, Gallardo, Gardella, Lorges, Luna de Marcos, Majdalani, Martínez, Morán, Parada, Portela, Reyes, Rioboo, Rossi y Torfe.
SR. PRESIDENTE IBARRA Me informan por Secretaría que se encuentran presentes veintisiete señores diputados de los treinta y uno que conforman la comisión. Por lo tanto, contamos con quórum para llevar adelante la reunión.
Tiene la palabra el señor diputado Giubergia.
Tiene la palabra el señor diputado Giubergia.
SR. GIUBERGIA Como vicepresidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda lamento que nuestro presidente no haya convocado a una reunión conjunta con esta comisión para dar solución a un problema largamente sentido y reclamado por toda nuestra sociedad, fundamentalmente por nuestros jubilados.
A comienzos de este mes formulé una moción en la Comisión de Presupuesto y Hacienda para que como mínimo se reuniera cada quince días a los fines de debatir y analizar los distintos proyectos de los señores diputados. Por esta razón, en nuestra próxima reunión solicitaremos el urgente tratamiento de este proyecto de ley.
De todas maneras queremos dejar perfectamente aclarado, tal como reza el artículo 102 del reglamento que: "Cuando un asunto sea girado a una o más comisiones especializadas y también a la de Presupuesto y Hacienda, aquella o aquellas formularán su anteproyecto y ésta deberá despacharlo en el plazo de un mes. Si así no lo hiciera el anteproyecto de la o de las comisiones especializadas pasará a la Cámara como despacho de la o las comisiones respectivas, haciéndose constar esta circunstancia en el Orden del Día correspondiente."
Por lo tanto, entiendo que las trabas que pretende poner el oficialismo al tratamiento de este derecho largamente reclamado por nuestros jubilados a lo largo y ancho de todo nuestro país no le sirven.
Hubiera sido importante que hoy también estuviese reunida la Comisión de Presupuesto y Hacienda para que analizáramos en forma conjunta la manera de dar solución a nuestros jubilados, cosa que lamentablemente no se ha hecho porque el oficialismo está mirando para otro lado.
Cuando conformamos las comisiones fuimos claros, dijimos que desde este sector que tenía la mayoría íbamos a respetar las comisiones de gestión del oficialismo. Ello significa que cada una de las comisiones funcione y no que suceda lo que hoy ocurre con la ausencia en esta reunión -por la falta de convocatoria de su presidente- de los miembros de la Comisión de Presupuesto y Hacienda frente a un asunto largamente sentido y reclamado por toda la sociedad argentina.
A comienzos de este mes formulé una moción en la Comisión de Presupuesto y Hacienda para que como mínimo se reuniera cada quince días a los fines de debatir y analizar los distintos proyectos de los señores diputados. Por esta razón, en nuestra próxima reunión solicitaremos el urgente tratamiento de este proyecto de ley.
De todas maneras queremos dejar perfectamente aclarado, tal como reza el artículo 102 del reglamento que: "Cuando un asunto sea girado a una o más comisiones especializadas y también a la de Presupuesto y Hacienda, aquella o aquellas formularán su anteproyecto y ésta deberá despacharlo en el plazo de un mes. Si así no lo hiciera el anteproyecto de la o de las comisiones especializadas pasará a la Cámara como despacho de la o las comisiones respectivas, haciéndose constar esta circunstancia en el Orden del Día correspondiente."
Por lo tanto, entiendo que las trabas que pretende poner el oficialismo al tratamiento de este derecho largamente reclamado por nuestros jubilados a lo largo y ancho de todo nuestro país no le sirven.
Hubiera sido importante que hoy también estuviese reunida la Comisión de Presupuesto y Hacienda para que analizáramos en forma conjunta la manera de dar solución a nuestros jubilados, cosa que lamentablemente no se ha hecho porque el oficialismo está mirando para otro lado.
Cuando conformamos las comisiones fuimos claros, dijimos que desde este sector que tenía la mayoría íbamos a respetar las comisiones de gestión del oficialismo. Ello significa que cada una de las comisiones funcione y no que suceda lo que hoy ocurre con la ausencia en esta reunión -por la falta de convocatoria de su presidente- de los miembros de la Comisión de Presupuesto y Hacienda frente a un asunto largamente sentido y reclamado por toda la sociedad argentina.
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra la señora diputada Mendoza.
SRA. MENDOZA En principio quiero decir al señor diputado preopinante -que se ofusca con el oficialismo-, que estamos tratando un tema muy serio.
Yo soy oficialista de los jubilados y de la ANSES. Junto con todo mi bloque hemos constituido y aumentado los haberes mínimos en estos últimos años.
Independientemente del color político, los discursos demagógicos acá no sirven; lo que sirve es que nos pongamos de acuerdo.
Si en esta comisión vamos a hablar del reglamento, debemos decir que se lo está violando en varios sentidos. En primer lugar, esta comisión se reúne de vez en cuando, cosa que debe saber todo el mundo. Somos ciudadanos transparentes elegidos por el pueblo y buscamos la calidad de las instituciones. Yo la busco y lo he hecho siempre, pero en base a no violar el reglamento. El temario que teníamos para esta reunión de la Comisión de Previsión y Seguridad Social era otro y no se está cumpliendo.
Nadie puede decir que los diputados, oficialistas o no, sean del partido que fueran, no quieren que se mejoren los haberes. De hecho, la ANSES ha realizado un corte con las AFJP y con los fondos buitres de semejantes corporaciones. Desde este punto de vista creo que todos vamos a estar de acuerdo.
No obstante, quiero dejar asentada mi posición en el sentido de que estoy de acuerdo con que se cumpla el reglamento, pero no se lo está haciendo en este momento. El temario era otro.
Creo que este tema tan importante debe ser considerado por la Comisión de Presupuesto y Hacienda. Pero antes la Comisión de Previsión y Seguridad Social debe aprobar dictámenes que fueron elaborados hace tres años o más y que están en la agenda.
Quiero dejar constancia de que el oficialismo siempre va a estar de acuerdo. Me refiero al oficialismo presidencial, porque en la Cámara de Diputados nosotros no tenemos mayoría. Pero como yo soy pluralista acepto debatir siempre y cuando lo hagamos con consideración. Quién más que yo quisiera que mi madre cobre mejor y que el día de mañana yo pueda tener los aportes correspondientes, así como también mucha otra gente.
Dejo constancia de que me voy a quedar acá, no me voy a ir, pero quiero señalar que esta comisión está violando el reglamento.
Estamos de acuerdo con que este tema hay que tratarlo con conciencia, pero faltan puntales. No podemos hablar de esta cuestión sin que antes sea considerada por la Comisión de Presupuesto y Hacienda, para que luego la discutamos todos juntos.
Alguno podrá decir que sí, pero no es así. Y les voy a decir por qué, dado que el tema de la ANSES es una de mis maestrías. El haber jubilatorio es una vergüenza y los otros gobiernos, no éste, fueron buitres con las AFJP. Hagamos las cosas con leal interés y conforme al reglamento porque este tema nos afecta a todos.
Yo soy oficialista de los jubilados y de la ANSES. Junto con todo mi bloque hemos constituido y aumentado los haberes mínimos en estos últimos años.
Independientemente del color político, los discursos demagógicos acá no sirven; lo que sirve es que nos pongamos de acuerdo.
Si en esta comisión vamos a hablar del reglamento, debemos decir que se lo está violando en varios sentidos. En primer lugar, esta comisión se reúne de vez en cuando, cosa que debe saber todo el mundo. Somos ciudadanos transparentes elegidos por el pueblo y buscamos la calidad de las instituciones. Yo la busco y lo he hecho siempre, pero en base a no violar el reglamento. El temario que teníamos para esta reunión de la Comisión de Previsión y Seguridad Social era otro y no se está cumpliendo.
Nadie puede decir que los diputados, oficialistas o no, sean del partido que fueran, no quieren que se mejoren los haberes. De hecho, la ANSES ha realizado un corte con las AFJP y con los fondos buitres de semejantes corporaciones. Desde este punto de vista creo que todos vamos a estar de acuerdo.
No obstante, quiero dejar asentada mi posición en el sentido de que estoy de acuerdo con que se cumpla el reglamento, pero no se lo está haciendo en este momento. El temario era otro.
Creo que este tema tan importante debe ser considerado por la Comisión de Presupuesto y Hacienda. Pero antes la Comisión de Previsión y Seguridad Social debe aprobar dictámenes que fueron elaborados hace tres años o más y que están en la agenda.
Quiero dejar constancia de que el oficialismo siempre va a estar de acuerdo. Me refiero al oficialismo presidencial, porque en la Cámara de Diputados nosotros no tenemos mayoría. Pero como yo soy pluralista acepto debatir siempre y cuando lo hagamos con consideración. Quién más que yo quisiera que mi madre cobre mejor y que el día de mañana yo pueda tener los aportes correspondientes, así como también mucha otra gente.
Dejo constancia de que me voy a quedar acá, no me voy a ir, pero quiero señalar que esta comisión está violando el reglamento.
Estamos de acuerdo con que este tema hay que tratarlo con conciencia, pero faltan puntales. No podemos hablar de esta cuestión sin que antes sea considerada por la Comisión de Presupuesto y Hacienda, para que luego la discutamos todos juntos.
Alguno podrá decir que sí, pero no es así. Y les voy a decir por qué, dado que el tema de la ANSES es una de mis maestrías. El haber jubilatorio es una vergüenza y los otros gobiernos, no éste, fueron buitres con las AFJP. Hagamos las cosas con leal interés y conforme al reglamento porque este tema nos afecta a todos.
SR. PRESIDENTE IBARRA Agradezco la adhesión que manifiesta la diputada Mendoza a los temas que están incluidos en el temario de hoy, precisamente, para ser discutidos. En cuanto a lo reglamentario, desde esta Presidencia hemos actuado con absoluto apego a lo que marca el reglamento de esta Cámara.
Tiene la palabra la diputada Reyes.
Tiene la palabra la diputada Reyes.
SRA. REYES La verdad que me parece que éste es un día histórico. Hoy tenemos la posibilidad de dictaminar para que los jubilados tengan lo que les corresponde por derecho constitucional, de manera tal que es una gran alegría que esta comisión esté determinando dónde están las prioridades en el país. Y las prioridades para todos nosotros son los jubilados, en primer lugar, y obviamente también los niños, tal como lo establecimos con la asignación universal para la niñez, cuando fue presentada por las diputadas Carca y Carrió.
Hay diferentes proyectos presentados sobre este tema. El nuestro claramente establecía que el haber mínimo tenía que ser elevado al ciento por ciento del salario mínimo vital y móvil, la recomposición de los haberes jubilatorios y que la movilidad estuviera atada al salario. Imagino que después vamos a establecer cuál será, en definitiva, el dictamen, pero en estos puntos hay consenso.
Lo cierto es que muchos hablan de los recursos, de dónde van a sacar la plata. Y el gobierno anda diciendo que necesita casi 145 mil millones de pesos.
En la Argentina siempre se habló de los recursos cuando no se quiso pagar a los jubilados lo que les correspondía, y se utilizaron los recursos para los gobiernos de turno. Nunca jamás ninguna reforma, ni la privatización de los 90 con las AFJP ni tampoco el traspaso de los fondos de las AFJP a la ANSES en el 2008, tuvieron que ver con mejorar la situación de los jubilados. Absolutamente siempre fue para la caja del gobierno. (Aplausos.)
Por eso vamos a solicitar al presidente de la comisión que avancemos con la firma del dictamen, que es lo que todos los jubilados están esperando de esta Cámara: que les demos una respuesta inmediata. (Aplausos.)
Hay diferentes proyectos presentados sobre este tema. El nuestro claramente establecía que el haber mínimo tenía que ser elevado al ciento por ciento del salario mínimo vital y móvil, la recomposición de los haberes jubilatorios y que la movilidad estuviera atada al salario. Imagino que después vamos a establecer cuál será, en definitiva, el dictamen, pero en estos puntos hay consenso.
Lo cierto es que muchos hablan de los recursos, de dónde van a sacar la plata. Y el gobierno anda diciendo que necesita casi 145 mil millones de pesos.
En la Argentina siempre se habló de los recursos cuando no se quiso pagar a los jubilados lo que les correspondía, y se utilizaron los recursos para los gobiernos de turno. Nunca jamás ninguna reforma, ni la privatización de los 90 con las AFJP ni tampoco el traspaso de los fondos de las AFJP a la ANSES en el 2008, tuvieron que ver con mejorar la situación de los jubilados. Absolutamente siempre fue para la caja del gobierno. (Aplausos.)
Por eso vamos a solicitar al presidente de la comisión que avancemos con la firma del dictamen, que es lo que todos los jubilados están esperando de esta Cámara: que les demos una respuesta inmediata. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE IBARRA La Presidencia va a establecer un orden para la discusión. En primer lugar, quiero hacer algunas consideraciones con respecto a la ausencia de la Comisión de Presupuesto, convocada para esta reunión.
Como el vicepresidente de dicha comisión tuvo oportunidad de hacer uso de la palabra y expresar su posición, es decisión de esta Presidencia que los diputados que representan a otras fuerzas también hagan consideraciones al respecto. Luego vamos a abocarnos a lo que tiene que ver con el temario previsto para esta reunión.
Tiene la palabra el diputado Morán.
Como el vicepresidente de dicha comisión tuvo oportunidad de hacer uso de la palabra y expresar su posición, es decisión de esta Presidencia que los diputados que representan a otras fuerzas también hagan consideraciones al respecto. Luego vamos a abocarnos a lo que tiene que ver con el temario previsto para esta reunión.
Tiene la palabra el diputado Morán.
SR. MORÁN Señor presidente: ratificando todo lo que dijo el diputado Giubergia, pero sobre todo porque creo que lo que hay que debatir son los temas que nos convocan -y hablo en mi carácter de integrante tanto de la Comisión de Previsión y Seguridad Social como de la Comisión de Presupuesto-, mociono que comencemos con el debate.
En el día de mañana va a haber sesión y seguramente va a haber algunos planteos -por lo menos por parte de nuestro bloque- en el sentido de que no es éste el único proyecto cuya consideración se ha solicitado en tratamiento conjunto con la Comisión de Presupuesto, ya que hay otros tantos. Me refiero especialmente a algunos relacionados con energía. Por lo tanto, mañana en el recinto los distintos bloques vamos a tener oportunidad de opinar sobre esta cuestión reglamentaria.
En el día de mañana va a haber sesión y seguramente va a haber algunos planteos -por lo menos por parte de nuestro bloque- en el sentido de que no es éste el único proyecto cuya consideración se ha solicitado en tratamiento conjunto con la Comisión de Presupuesto, ya que hay otros tantos. Me refiero especialmente a algunos relacionados con energía. Por lo tanto, mañana en el recinto los distintos bloques vamos a tener oportunidad de opinar sobre esta cuestión reglamentaria.
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra la diputada Patricia Fadel.
SRA. FADEL Señor presidente: soy miembro de la Comisión de Presupuesto pero más allá de eso, soy una diputada y agradezco que el presidente de esta comisión me dé el derecho a expresarme, que lo tengo, aunque no pueda votar ni firmar un dictamen.
La verdad es que como bloque oficialista venimos con autoridad moral para hablar del tema previsional.
¿Por qué hablo de autoridad moral? Porque no vinimos acá a extender la edad jubilatoria -como en algún momento se hizo en la Argentina-, ni a anunciar el congelamiento de jubilaciones y pensiones, cosa que también se hizo en nuestro país. Tenemos autoridad moral porque tampoco vinimos a anunciar recortes de haberes jubilatorios, respecto de lo cual todos recordarán lo sucedido en los años 2000 y 2001.
No queremos privatizar la seguridad social, y la verdad es que veo aquí al arco opositor que votó a favor de las AFJP.
Venimos acá a defender un sistema de seguridad social que nos permita garantizar en el tiempo más y mejores haberes para quienes hoy son jubilados, pero también para aquellos que lo serán en un futuro no tan lejano.
Venimos a este debate con la autoridad moral de ser parte de un espacio político que como ningún otro en los últimos treinta y cinco años se ha preocupado por nuestros adultos mayores; a las pruebas me remito.
Somos el espacio político que incrementó en un 80 por ciento la cantidad de beneficiarios del sistema previsional argentino. Incluimos 2.357.227 adultos mayores que antes estaban fuera del sistema. Cuando vamos por la calle, solemos escuchar a muchas mujeres que nos dan las gracias por esto.
Somos el espacio político que aumentó un 66 por ciento la cantidad de aportantes al sistema, pasando de cerca de 5 millones a casi 8,4 millones gracias a la creación de empleo y la formalización de las relaciones laborales.
Somos los mismos que elevamos el haber mínimo en un 238 por ciento; multiplicamos por cuatro los recursos del sistema, pasando de 22 mil millones en 2003 hasta 107 mil millones en 2009, y llevamos el gasto previsional de 21 millones en 2003 a 103 mil millones en 2009.
En 2004, el gasto de la ANSES era del 5,6 por ciento de un PBI que empezaba a crecer después de la crisis. En 2009, el gasto de la ANSES fue del 9,1 por ciento de un PBI que creció en cinco de los últimos seis años.
En síntesis, no somos los autores de la exclusión y del congelamiento de los haberes de los noventa ni somos quienes ajustamos los haberes jubilatorios, como se hizo durante la gestión del doctor de la Rúa, por ejemplo.
No somos quienes llevamos a cientos de miles de jubilados a la indigencia después de la devaluación de 2002. Tampoco fuimos nosotros quienes privatizamos el sistema jubilatorio.
La verdad es que como bloque oficialista venimos con autoridad moral para hablar del tema previsional.
¿Por qué hablo de autoridad moral? Porque no vinimos acá a extender la edad jubilatoria -como en algún momento se hizo en la Argentina-, ni a anunciar el congelamiento de jubilaciones y pensiones, cosa que también se hizo en nuestro país. Tenemos autoridad moral porque tampoco vinimos a anunciar recortes de haberes jubilatorios, respecto de lo cual todos recordarán lo sucedido en los años 2000 y 2001.
No queremos privatizar la seguridad social, y la verdad es que veo aquí al arco opositor que votó a favor de las AFJP.
Venimos acá a defender un sistema de seguridad social que nos permita garantizar en el tiempo más y mejores haberes para quienes hoy son jubilados, pero también para aquellos que lo serán en un futuro no tan lejano.
Venimos a este debate con la autoridad moral de ser parte de un espacio político que como ningún otro en los últimos treinta y cinco años se ha preocupado por nuestros adultos mayores; a las pruebas me remito.
Somos el espacio político que incrementó en un 80 por ciento la cantidad de beneficiarios del sistema previsional argentino. Incluimos 2.357.227 adultos mayores que antes estaban fuera del sistema. Cuando vamos por la calle, solemos escuchar a muchas mujeres que nos dan las gracias por esto.
Somos el espacio político que aumentó un 66 por ciento la cantidad de aportantes al sistema, pasando de cerca de 5 millones a casi 8,4 millones gracias a la creación de empleo y la formalización de las relaciones laborales.
Somos los mismos que elevamos el haber mínimo en un 238 por ciento; multiplicamos por cuatro los recursos del sistema, pasando de 22 mil millones en 2003 hasta 107 mil millones en 2009, y llevamos el gasto previsional de 21 millones en 2003 a 103 mil millones en 2009.
En 2004, el gasto de la ANSES era del 5,6 por ciento de un PBI que empezaba a crecer después de la crisis. En 2009, el gasto de la ANSES fue del 9,1 por ciento de un PBI que creció en cinco de los últimos seis años.
En síntesis, no somos los autores de la exclusión y del congelamiento de los haberes de los noventa ni somos quienes ajustamos los haberes jubilatorios, como se hizo durante la gestión del doctor de la Rúa, por ejemplo.
No somos quienes llevamos a cientos de miles de jubilados a la indigencia después de la devaluación de 2002. Tampoco fuimos nosotros quienes privatizamos el sistema jubilatorio.
- Manifestaciones entre los señores diputados y el público asistente.
SRA. FADEL Me parece magnífico que muchos de los que impulsaron estas medidas se hayan arrepentido y quieran mejorar su reputación política ante los jubilados argentinos. Eso me parece bien, pero nunca hicimos ni haremos demagogia barata.
- Manifestaciones entre los señores diputados y el público asistente.
SR. PRESIDENTEN IBARRA Por favor, guarden silencio.
SRA. FADEL Queremos que nuestros jubilados cobren haberes dignos dentro de cinco años y siempre. Me parece que a veces desde la oposición es fácil repartir la plata que no se tiene...
- Manifestaciones entre los señores diputados y el público asistente.
SR. PRESIDENTE IBARRA Se solicita a los presentes que guarden silencio.
SRA. FADEL Es fácil hacer demagogia sin pensar qué va a pasar dentro de cuatro años con esos jubilados que ya pasaron por el ajuste y que hace siete años cobraban 150 pesos mensuales. Por supuesto que quisiéramos que ganen mucho más, pero preferimos ser prudentes y no hacer más demagogia que la que hace la oposición.
Hoy podemos discutir porque existe un fondo de sustentabilidad, que no existía para los legisladores de la oposición que votaron a favor de las AFJP. Esa plata no estaba en el Estado, y hoy la tenemos porque fue decisión de este gobierno volver a tomar las cajas para conformar dicho fondo.
Ahora, como la oposición está ávida de dar algunas respuestas a las promesas de campaña que hicieron el año pasado, está apurada por repartir la plata ajena.
Hoy podemos discutir porque existe un fondo de sustentabilidad, que no existía para los legisladores de la oposición que votaron a favor de las AFJP. Esa plata no estaba en el Estado, y hoy la tenemos porque fue decisión de este gobierno volver a tomar las cajas para conformar dicho fondo.
Ahora, como la oposición está ávida de dar algunas respuestas a las promesas de campaña que hicieron el año pasado, está apurada por repartir la plata ajena.
- Manifestaciones entre los señores diputados y el público asistente.
SRA. FADELLos diputados oficialistas vamos a ser prudentes en las decisiones. Pedimos cautela y que piensen responsablemente.
En 2011 hay elecciones y asume un nuevo gobierno que puede ser de cualquier signo político; pensemos un poco. ¿Hasta cuándo devastar las cajas del Estado?
En 2011 hay elecciones y asume un nuevo gobierno que puede ser de cualquier signo político; pensemos un poco. ¿Hasta cuándo devastar las cajas del Estado?
- Manifestaciones en la sala.
SRA. FADEL ¿Con qué van a poder sostenerse los jubilados dentro de cuatro años? Este sistema que ha costado volver a construir hoy tiene dinero acumulado gracias a que devolvimos las AFJP al Estado.
Pensemos responsablemente amigos, compañeros y correligionarios. Un tema tan afecto a todos tiene que ser debatido con seriedad y veo que ya ha circulado por las mesas el dictamen de las comisiones de previsión y de presupuesto. Sinceramente me parece poco serio que un tema que no ha tenido ninguna evaluación económica ni una discusión responsable ya cuente con dictamen de dos comisiones que hoy no están reunidas, porque aquí sólo está presente la comisión de previsión y seguridad social.
Esta comisión podrá dar la discusión y emitir un predictamen para que la Comisión de Presupuesto y Hacienda dictamine, pero no me parece responsable que sin ninguna discusión esté circulando un dictamen.
Vuelvo a pedir a la oposición prudencia y responsabilidad. Hoy cuentan con el número suficiente para hacer lo que se les dé la gana pero traten de no dejar al Estado devastado de herramientas que le impidan seguir creciendo como lo vino haciendo la Argentina a pesar de la crisis.
Nuestro país siguió creciendo al 8 por ciento durante los seis años anteriores, hoy lo hace en menor escala y seguirá haciéndolo pese a que a la oposición le cueste entender que ello beneficia a todos los argentinos.
Pensemos responsablemente amigos, compañeros y correligionarios. Un tema tan afecto a todos tiene que ser debatido con seriedad y veo que ya ha circulado por las mesas el dictamen de las comisiones de previsión y de presupuesto. Sinceramente me parece poco serio que un tema que no ha tenido ninguna evaluación económica ni una discusión responsable ya cuente con dictamen de dos comisiones que hoy no están reunidas, porque aquí sólo está presente la comisión de previsión y seguridad social.
Esta comisión podrá dar la discusión y emitir un predictamen para que la Comisión de Presupuesto y Hacienda dictamine, pero no me parece responsable que sin ninguna discusión esté circulando un dictamen.
Vuelvo a pedir a la oposición prudencia y responsabilidad. Hoy cuentan con el número suficiente para hacer lo que se les dé la gana pero traten de no dejar al Estado devastado de herramientas que le impidan seguir creciendo como lo vino haciendo la Argentina a pesar de la crisis.
Nuestro país siguió creciendo al 8 por ciento durante los seis años anteriores, hoy lo hace en menor escala y seguirá haciéndolo pese a que a la oposición le cueste entender que ello beneficia a todos los argentinos.
SR. PRESIDENTE IBARRA Me ha mentido, señora diputada, porque al principio aclaramos que la discusión era sobre la no asistencia a esta reunión de la Comisión de Presupuesto. Usted ha ido haciendo un racconto...
SRA. FADEL Discúlpeme, como diputada también tengo derecho a tener voz. Si a usted le ha molestado, le pido disculpas.
SR. PRESIDENTE IBARRA Con gusto va a tener voz, pero habíamos aclarado tener un orden para discutir temas vinculados con la no presencia de la Comisión de Presupuesto y Hacienda.
Con gusto la hemos escuchado y a mi parecer faltan un par de renglones más en el listado que enumeró, por ejemplo, el futuro de los jubilados que tiene que ver con la decisión que seguramente esta comisión va a tomar en unos minutos más.
Tiene la palabra la señora diputada Carrió.
Con gusto la hemos escuchado y a mi parecer faltan un par de renglones más en el listado que enumeró, por ejemplo, el futuro de los jubilados que tiene que ver con la decisión que seguramente esta comisión va a tomar en unos minutos más.
Tiene la palabra la señora diputada Carrió.
SRA. CARRIÓ De conformidad con el artículo 102 del reglamento, reunida en plenario una de las comisiones, la Comisión de Presupuesto y Hacienda tiene un plazo de treinta días y si no emite dictamen el asunto pasa al recinto.
Es gravísimo institucionalmente y es responsabilidad del oficialismo -en los acuerdos realizados se reconoció que la Presidencia de la Comisión de Presupuesto y Hacienda la tenía el gobierno- que se hayan violado tan reiteradamente dichos acuerdos.
Los presidentes son votados para tener reuniones, no para ausentarse. (Aplausos.)
De modo tal que responsabilizo al señor presidente Marconato por falta de cumplimiento en sus funciones y a la orden dada por el bloque del Frente para la Victoria; nos pagan para esto.
En segundo lugar, la Corte Suprema de Justicia de la Nación en innumerables fallos ha declarado la necesidad de la actualización de los haberes de los jubilados y ha determinado la recomposición de los haberes. De modo tal que lo único que está haciendo esta Cámara de Diputados es cumplir con el criterio y los fallos del máximo tribunal de la República Argentina que es precisamente la Corte Suprema de Justicia y no la presidencia de la República. (Aplausos.)
En tercer lugar, es verdad que muchos bloques opositores hemos trabajado durante mucho tiempo. Los diputados de esta comisión -a quienes felicito- y también los presidentes de bloque de la oposición -acá estamos con Federico Pinedo, Oscar Aguad y Felipe Solá- hemos trabajado mucho para que se cumpla ese fallo de la Corte y garantizar la actualización.
Es un deber, es un acto de justicia. Si van a tener 50 mil millones de pesos de excedente presupuestario, deben ser para los jubilados y no para la caja del señor De Vido. (Aplausos.)
Es gravísimo institucionalmente y es responsabilidad del oficialismo -en los acuerdos realizados se reconoció que la Presidencia de la Comisión de Presupuesto y Hacienda la tenía el gobierno- que se hayan violado tan reiteradamente dichos acuerdos.
Los presidentes son votados para tener reuniones, no para ausentarse. (Aplausos.)
De modo tal que responsabilizo al señor presidente Marconato por falta de cumplimiento en sus funciones y a la orden dada por el bloque del Frente para la Victoria; nos pagan para esto.
En segundo lugar, la Corte Suprema de Justicia de la Nación en innumerables fallos ha declarado la necesidad de la actualización de los haberes de los jubilados y ha determinado la recomposición de los haberes. De modo tal que lo único que está haciendo esta Cámara de Diputados es cumplir con el criterio y los fallos del máximo tribunal de la República Argentina que es precisamente la Corte Suprema de Justicia y no la presidencia de la República. (Aplausos.)
En tercer lugar, es verdad que muchos bloques opositores hemos trabajado durante mucho tiempo. Los diputados de esta comisión -a quienes felicito- y también los presidentes de bloque de la oposición -acá estamos con Federico Pinedo, Oscar Aguad y Felipe Solá- hemos trabajado mucho para que se cumpla ese fallo de la Corte y garantizar la actualización.
Es un deber, es un acto de justicia. Si van a tener 50 mil millones de pesos de excedente presupuestario, deben ser para los jubilados y no para la caja del señor De Vido. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra señora diputada Giúdici.
SRA. GIÚDICI Señor presidente: parte de lo que iba a decir lo expresó la diputada Carrió. Creo que los diputados que integran esta comisión han trabajado arduamente en la búsqueda de consensos. El borrador del cual la diputada Fadel dice sorprenderse es el producto de mucho trabajo de consenso y de mucho trabajo de diálogo. Que el oficialismo no haya querido participar de ese trabajo de consenso y de diálogo no es una responsabilidad que pueda asignarse a los bloques de la oposición.
En el mismo sentido, para poder concluir esta reunión con la firma de un dictamen que le devuelva a los jubilados lo que nunca debió habérseles quitado y que el 82 por ciento para toda la clase pasiva en la Argentina sea una realidad, no voy a fundamentar el proyecto que sostengo y que vengo presentado desde el año 2005, sino que sólo voy a decir que los mismos argumentos que esgrimimos cuando en este Congreso se discutió la fórmula de movilidad van a plasmarse hoy en un dictamen y se va a hacer justicia.
Si nos hubieran hecho caso cuando se discutió la fórmula de movilidad, hoy los jubilados estarían en un haber de 1.200 pesos, que es lo mismo que significa hoy el haber mínimo garantizado. Esto es lo que vamos a abordar hoy con este dictamen.
Llevar las jubilaciones de 895 pesos a 1.230 pesos -que es lo que estamos expresando con el 82 por ciento mínimo- no desfinancia ninguna caja. Se hace justicia. El dinero de la ANSES alcanza para financiar este aumento; el dinero de la ANSES alcanza para dar una fórmula de movilidad digna a los jubilados y que se ate automáticamente el aumento del salario mínimo, vital y móvil al haber jubilatorio, que es sustitutivo del salario y que es lo que tenemos que abordar constitucionalmente, como lo manda nuestra Constitución.
Por último, quiero decir que es absolutamente tramposo plantear que la oposición hace política con la plata ajena. En todo caso, los que hacen política con la plata ajena son los que se llenan los bolsillos y financian programas políticos eludiendo al Congreso Nacional. (Aplausos.) Estos argumentos los vamos a ampliar en el momento de llevar este proyecto al recinto; estamos absolutamente dispuestos a hacerlo.
En este consenso que se alcanzó hemos dejado para más adelante algunos de los presupuestos que esgrimíamos en nuestros proyectos porque creemos que así como el 82 por ciento de haber mínimo es justicia también es justicia la recomposición de la pirámide previsional y tenemos que dar ese debate para adelante con la reforma integral del sistema previsional argentino. (Aplausos.)
Me alegro, señor presidente, por poder estar en esta reunión y que los diputados de la Comisión de Previsión y Seguridad Social aborden hoy el dictamen de mayoría. (Aplausos.)
En el mismo sentido, para poder concluir esta reunión con la firma de un dictamen que le devuelva a los jubilados lo que nunca debió habérseles quitado y que el 82 por ciento para toda la clase pasiva en la Argentina sea una realidad, no voy a fundamentar el proyecto que sostengo y que vengo presentado desde el año 2005, sino que sólo voy a decir que los mismos argumentos que esgrimimos cuando en este Congreso se discutió la fórmula de movilidad van a plasmarse hoy en un dictamen y se va a hacer justicia.
Si nos hubieran hecho caso cuando se discutió la fórmula de movilidad, hoy los jubilados estarían en un haber de 1.200 pesos, que es lo mismo que significa hoy el haber mínimo garantizado. Esto es lo que vamos a abordar hoy con este dictamen.
Llevar las jubilaciones de 895 pesos a 1.230 pesos -que es lo que estamos expresando con el 82 por ciento mínimo- no desfinancia ninguna caja. Se hace justicia. El dinero de la ANSES alcanza para financiar este aumento; el dinero de la ANSES alcanza para dar una fórmula de movilidad digna a los jubilados y que se ate automáticamente el aumento del salario mínimo, vital y móvil al haber jubilatorio, que es sustitutivo del salario y que es lo que tenemos que abordar constitucionalmente, como lo manda nuestra Constitución.
Por último, quiero decir que es absolutamente tramposo plantear que la oposición hace política con la plata ajena. En todo caso, los que hacen política con la plata ajena son los que se llenan los bolsillos y financian programas políticos eludiendo al Congreso Nacional. (Aplausos.) Estos argumentos los vamos a ampliar en el momento de llevar este proyecto al recinto; estamos absolutamente dispuestos a hacerlo.
En este consenso que se alcanzó hemos dejado para más adelante algunos de los presupuestos que esgrimíamos en nuestros proyectos porque creemos que así como el 82 por ciento de haber mínimo es justicia también es justicia la recomposición de la pirámide previsional y tenemos que dar ese debate para adelante con la reforma integral del sistema previsional argentino. (Aplausos.)
Me alegro, señor presidente, por poder estar en esta reunión y que los diputados de la Comisión de Previsión y Seguridad Social aborden hoy el dictamen de mayoría. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra el señor diputado Ledesma.
SR. LEDESMA Señor presidente: simplemente quiero aclarar los motivos de mi presencia en esta reunión.
Cuando pedí la palabra no me di cuenta de que se estaba tratando el tema del reglamento. En este sentido, lo ideal hubiese sido que se consensuara una reunión con la Comisión de Presupuesto y Hacienda a los efectos de que este tema se trate una sola vez.
Pero como, juntamente con otros compañeros, soy autor de este tan anhelado 82 por ciento, me parece que sería irresponsable no afrontar esta tarea y tratar hoy este tema.
Por lo tanto, creo que tenemos que seguir dando curso al tratamiento para que luego lo considere la Comisión de Presupuesto.
Cuando pedí la palabra no me di cuenta de que se estaba tratando el tema del reglamento. En este sentido, lo ideal hubiese sido que se consensuara una reunión con la Comisión de Presupuesto y Hacienda a los efectos de que este tema se trate una sola vez.
Pero como, juntamente con otros compañeros, soy autor de este tan anhelado 82 por ciento, me parece que sería irresponsable no afrontar esta tarea y tratar hoy este tema.
Por lo tanto, creo que tenemos que seguir dando curso al tratamiento para que luego lo considere la Comisión de Presupuesto.
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra el diputado Díaz Roig.
SR. DÍAZ ROIG Señor presidente: la verdad que es una tarde triste porque para los que desde hace tantos años venimos trabajando por la seguridad social, los pocos que hemos combatido las causas principales del desfase provisional, los pocos que estuvimos invitados por Imizcoz en el primer acto de los jubilados -creo que aquí hay sólo dos o tres-; para los que nos hemos opuesto con todas nuestras fuerzas al sistema de las AFJP, encontrarnos con esto nos provoca varias cosas.
La primera es la reglamentaria. Como hay taquígrafos, hago la reserva de recurrir a la Corte Suprema de Justicia de la Nación por el vicio de inconstitucionalidad de esta reunión, porque no existe la convocatoria conjunta, que es de lo que he sido notificado.
En segundo lugar, nunca en los cuatro años y medio que llevo en la Comisión de Previsión y Seguridad Social se nos ocurrió traer a dictamen algo que no se haya trabajado entre los asesores.
Recién se dijo que el Frente para la Victoria no participó del debate, pero el debate se hace en asesores. Estos temas no fueron tratados en reunión de asesores. Viene directamente un dictamen sobre un asunto donde teníamos diversos tipos de diferencias.
Pero lo principal -y en absoluto quiero descalificar a ningún militante político de otra idea, pero esto es obvio, así que disculpen la vehemencia, si la tuviera- es la siguiente cuestión: ¿cómo puede ser que el problema central de la jubilación argentina provenga de las dos leyes de congelamiento de los haberes jubilatorios dictadas una durante el gobierno del doctor Alfonsín y la otra durante la gestión del doctor De la Rúa? Esta es la causa de la gran cantidad de juicios.
Dicho sea de paso, ya que citaron el caso Badaro, este caso ordenó a este Congreso fijar el criterio de movilidad, y aplicar una escala para éste y otros casos semejantes, hasta que se dictara la movilidad. Este es el abecé.
La otra cuestión que debo decir con respecto a lo que recién escuché acá es que no hay que decir mentiras. Recién se afirmó que cuando se dictó la ley de movilidad, si se hubiera seguido el criterio de pari passu con los salarios, que es el proyecto de la oposición, se hubiera tenido en este momento un mayor haber jubilatorio, lo cual es falso. En realidad, los salarios han aumentado un 21 por ciento, mientras que el haber jubilatorio se incrementó en un 30 por ciento por aplicación de la ley de movilidad. De modo que esto tampoco es cierto.
Por ello, con toda sinceridad quiero pedirles que repensemos esto, volvamos el asunto a los asesores, busquemos un consenso, llamemos a la ANSES, a las organizaciones de jubilados.
Cuando tratamos el proyecto de ley de movilidad atendimos a 300 organizaciones de jubilados. Ayer y antes de ayer estuve reunido con varios jubilados, que saben que en este momento nuestro sistema no está en condiciones, y están muy agradecidos...
La primera es la reglamentaria. Como hay taquígrafos, hago la reserva de recurrir a la Corte Suprema de Justicia de la Nación por el vicio de inconstitucionalidad de esta reunión, porque no existe la convocatoria conjunta, que es de lo que he sido notificado.
En segundo lugar, nunca en los cuatro años y medio que llevo en la Comisión de Previsión y Seguridad Social se nos ocurrió traer a dictamen algo que no se haya trabajado entre los asesores.
Recién se dijo que el Frente para la Victoria no participó del debate, pero el debate se hace en asesores. Estos temas no fueron tratados en reunión de asesores. Viene directamente un dictamen sobre un asunto donde teníamos diversos tipos de diferencias.
Pero lo principal -y en absoluto quiero descalificar a ningún militante político de otra idea, pero esto es obvio, así que disculpen la vehemencia, si la tuviera- es la siguiente cuestión: ¿cómo puede ser que el problema central de la jubilación argentina provenga de las dos leyes de congelamiento de los haberes jubilatorios dictadas una durante el gobierno del doctor Alfonsín y la otra durante la gestión del doctor De la Rúa? Esta es la causa de la gran cantidad de juicios.
Dicho sea de paso, ya que citaron el caso Badaro, este caso ordenó a este Congreso fijar el criterio de movilidad, y aplicar una escala para éste y otros casos semejantes, hasta que se dictara la movilidad. Este es el abecé.
La otra cuestión que debo decir con respecto a lo que recién escuché acá es que no hay que decir mentiras. Recién se afirmó que cuando se dictó la ley de movilidad, si se hubiera seguido el criterio de pari passu con los salarios, que es el proyecto de la oposición, se hubiera tenido en este momento un mayor haber jubilatorio, lo cual es falso. En realidad, los salarios han aumentado un 21 por ciento, mientras que el haber jubilatorio se incrementó en un 30 por ciento por aplicación de la ley de movilidad. De modo que esto tampoco es cierto.
Por ello, con toda sinceridad quiero pedirles que repensemos esto, volvamos el asunto a los asesores, busquemos un consenso, llamemos a la ANSES, a las organizaciones de jubilados.
Cuando tratamos el proyecto de ley de movilidad atendimos a 300 organizaciones de jubilados. Ayer y antes de ayer estuve reunido con varios jubilados, que saben que en este momento nuestro sistema no está en condiciones, y están muy agradecidos...
Manifestaciones entre el público asistente.
SR. DÍAZ ROIG Hace muchos años que los respeto y que lucho por ustedes. Nosotros no fuimos los que votamos las AFJP.
Resulta que quienes votaron a favor las AFJP y en contra de la ley de movilidad -y voy a dejar en Secretaría el resultado de esas dos votaciones-, y quienes no querían que esos fondos volvieran al Estado, hoy afirman que hay que repartir más del 60 por ciento.
Como dijo la diputada Fadel, aquellos que inmovilizaron los haberes y les quitaron el 13 por ciento, son los mismos que hoy nos vienen a decir que quieren dar el 82 por ciento.
A todos ellos les pido de corazón que no politicemos el tema de los jubilados. Se trata de una causa demasiado grande para quienes venimos militando desde hace años en la seguridad social.
Esta es una maniobra -y discúlpenme si cometo algún agravio, pero yo lo veo así-, para que el Frente para la Victoria se oponga a esta medida -porque saben que técnica y económicamente no se puede cumplir- y la oposición se lleve el voto de los jubilados. Este es el planteo político que hay. Esto es lamentable y les voy a decir por qué.
En primer lugar, los gobiernos de Néstor y de Cristina Kirchner son los que más han hecho por los jubilados desde Juan Domingo Perón a la fecha, y esto es indiscutible. Si nombran a cualquier otro presidente que haya hecho más que ellos, entonces voy a rectificar mis dichos y vamos a hacer los números.
En segundo lugar, el sistema previsional argentino de reparto es el mejor de América Latina, y lo decíamos en conjunto con el presidente y vicepresidente de los otros dos bloques en un congreso internacional en México hace menos de quince días. Allí decíamos que teníamos unidad de concepción y que íbamos a trabajar juntos. Tenemos una nutrida agenda de temas -que luego se las puedo leer-, entre los cuales está incluido éste, es decir, en qué medida podemos mejorar la situación de los jubilados.
A propósito de esto último, la tasa de la sustitución de la mínima es de más del 60 por ciento en este momento, y cuando se aplique el índice de septiembre retroactivo al 1º de julio en virtud de la ley de movilidad va a rondar el 70 por ciento. Lejos, es la tasa de movilidad de la mínima más alta de toda América Latina.
Al respecto, uno se pregunta por qué países como México o potencias como Brasil no pueden llegar a estos números, y acá tengo todas las tablas de nivel internacional que ustedes quieran. ¿No será porque técnicamente es muy complejo?
Aquí también tengo material -puedo dejarlo en la comisión- sobre la situación actual en Europa. Qué es lo que pasa en Grecia, Francia, el Reino Unido, España, Italia y Alemania, donde...
Resulta que quienes votaron a favor las AFJP y en contra de la ley de movilidad -y voy a dejar en Secretaría el resultado de esas dos votaciones-, y quienes no querían que esos fondos volvieran al Estado, hoy afirman que hay que repartir más del 60 por ciento.
Como dijo la diputada Fadel, aquellos que inmovilizaron los haberes y les quitaron el 13 por ciento, son los mismos que hoy nos vienen a decir que quieren dar el 82 por ciento.
A todos ellos les pido de corazón que no politicemos el tema de los jubilados. Se trata de una causa demasiado grande para quienes venimos militando desde hace años en la seguridad social.
Esta es una maniobra -y discúlpenme si cometo algún agravio, pero yo lo veo así-, para que el Frente para la Victoria se oponga a esta medida -porque saben que técnica y económicamente no se puede cumplir- y la oposición se lleve el voto de los jubilados. Este es el planteo político que hay. Esto es lamentable y les voy a decir por qué.
En primer lugar, los gobiernos de Néstor y de Cristina Kirchner son los que más han hecho por los jubilados desde Juan Domingo Perón a la fecha, y esto es indiscutible. Si nombran a cualquier otro presidente que haya hecho más que ellos, entonces voy a rectificar mis dichos y vamos a hacer los números.
En segundo lugar, el sistema previsional argentino de reparto es el mejor de América Latina, y lo decíamos en conjunto con el presidente y vicepresidente de los otros dos bloques en un congreso internacional en México hace menos de quince días. Allí decíamos que teníamos unidad de concepción y que íbamos a trabajar juntos. Tenemos una nutrida agenda de temas -que luego se las puedo leer-, entre los cuales está incluido éste, es decir, en qué medida podemos mejorar la situación de los jubilados.
A propósito de esto último, la tasa de la sustitución de la mínima es de más del 60 por ciento en este momento, y cuando se aplique el índice de septiembre retroactivo al 1º de julio en virtud de la ley de movilidad va a rondar el 70 por ciento. Lejos, es la tasa de movilidad de la mínima más alta de toda América Latina.
Al respecto, uno se pregunta por qué países como México o potencias como Brasil no pueden llegar a estos números, y acá tengo todas las tablas de nivel internacional que ustedes quieran. ¿No será porque técnicamente es muy complejo?
Aquí también tengo material -puedo dejarlo en la comisión- sobre la situación actual en Europa. Qué es lo que pasa en Grecia, Francia, el Reino Unido, España, Italia y Alemania, donde...
Varios señores hablan a la vez.
SR. PRESIDENTE IBARRA Silencio, por favor.
SR. DÍAZ ROIG Señor presidente: le pido que nos garantice que podremos seguir haciendo uso de la palabra o, de lo contrario, deberemos retirarnos.
SR. PRESIDENTE IBARRA Esta Presidencia lo garantiza, señor diputado.
SR. DÍAZ ROIG En todos estos sistemas se está haciendo una ampliación de edades o de años de aportes -que en algunos casos llegan al 42 o 43 por ciento-, y todos los días se ven muchas manifestaciones. Este no es un dato menor.
Yo creo que esto debería volver a asesores, trabajarse con la ANSES, con el Ministerio de Economía y con las organizaciones de jubilados, ya que algunas comparten este criterio y otras no.
Quiero decirles que esta tasa de sustitución del haber mínimo es realmente la más importante de América Latina, y se ha demostrado que año a año este sistema va ampliando la cobertura en cuanto hay excedente, sobre todo respecto de la mínima.
Como acá se dijo, entre otros, tenemos dos grandes problemas. El primero es la mínima; el segundo, reconstituir la pirámide, lo cual obviamente significa buscar la solución al problema de todas las causas judiciales. Pero estas causas son las que provienen del congelamiento de los haberes jubilatorios del gobierno radical. Por favor, hagámonos cargo: no fueron las leyes de este gobierno las que las originaron las deudas ni los juicios. Siendo así, entonces, por qué no creer que este gobierno es el que más ha hecho por los jubilados desde Juan Domingo Perón, con absoluta certeza.
Este gobierno va a hacer todo lo que esté a su alcance -quizás mejorando la mínima- para resolver el problema de la pirámide, y no solamente éste porque también hay muchos otros. Tengo una lista de ocho o nueve temas que eran los que veníamos a discutir especialmente con el presidente y el vicepresidente, cuyo afecto personal me honra y no se va a enturbiar por este debate, más allá de la firmeza de mis convicciones.
Tenemos que convertir los juicios de los jubilados en sumarísimos y cambiar el modo de determinación del haber inicial. Tenemos que pedir el presupuesto necesario en justicia para que se amplíe la sala de seguridad con una sala más en las cámaras de la seguridad social, y contar por lo menos con cuatro juzgados más.
Tenemos una infinidad de temas con los proyectos previstos y debemos buscar una solución.
El año pasado hablamos sobre la posibilidad de ponernos de acuerdo con el gobierno y los partidos -y está presente la señora María América González- sobre una ley de moratoria para que, trabajando con el Poder Ejecutivo se pague la deuda, se actualicen las liquidaciones y se paguen en bonos -o en una cosa semejante- porque todos sabemos que la retroactividad es compleja.
Una cosa es si trabajamos todos juntos pero esto se ha roto. En forma intempestiva, sin tratarse con los asesores, sin un número técnico de valor, con suposiciones e informaciones de los diarios se pretende quedar bien con los jubilados prometiendo una cifra. Obviamente el costo, más allá de si el salario mínimo vital y móvil vuelve a subir, va a estar arriba de los 25 mil millones de pesos y en cinco años volveríamos al sistema anterior a pesar de esos 150 mil millones de pesos que tanto nos costaron conseguir.
En realidad, aquí se esconden algunos y lamento el fallecimiento del señor diputado Albrisi que si bien mientras estuvo en la comisión era mi principal opositor, tenía una concepción a favor de las AFJP porque creía que eran lo mejor.
Sin embargo, el señor diputado Albrisi cuidaba al SIPA y estoy seguro de que si estuviera presente no acompañaría este proyecto, más allá de las opciones políticas que le dieran. Lo digo con absoluta certeza y consta en sus manifestaciones en esta comisión.
Les pido realmente, desde mis la firmeza de mis convicciones y desde mi humildad, que replanteen este tema porque no va a terminar bien. Sólo terminará bien si tenemos la grandeza de levantar las mayorías circunstanciales, nos ponemos a estudiar en serio, nos dedicamos a ver cómo realmente podemos beneficiar a los jubilados que cobran la mínima y cómo podemos resolver el problema de la pirámide. Estos temas debemos resolverlos juntos.
No hagamos de los jubilados una lucha política más. Los jubilados saben bien quiénes hemos respondido y quienes les hemos dado todos los beneficios; saben bien que lo que nosotros no queremos, y algunos de los que firmaron este proyecto sí quieren, es que el sistema público que hemos construido se funda para que vuelva el sistema privado de las AFJP.
Estaban presentes el presidente y el vicepresidente cuando tuve un debate en el Consejo Interamericano de Seguridad Social ante el planteo que nos hizo un representante del BID por teleconferencia respecto a que era menester tender al sistema de AFJP. Esto es lo que está en juego y lo que no quiero que enturbie porque estoy seguro de que el setenta y pico por ciento que el año pasado votó por la movilidad, por la libre opción jubilatoria y por el cambio de sistema no quiere que volvamos a las AFJP.
¿Qué costaría volver este asunto al grupo de asesores, llamar a la ANSES y empezar a trabajar? Contratemos técnicos en demografía, en estadística o técnicos financieros que nos demuestren la viabilidad y la factibilidad de lo que proponen. Con seguridad que muchos de nosotros los acompañaremos con nuestras mayores o menores diferencias.
Sinceramente, como militante de la seguridad social y como referente del grupo del Frente para la Victoria no puedo acompañar este proyecto porque me parece absolutamente descomedido, pasa en virtud de títulos falsos, compromete todo nuestro sistema -sobre todo el fondo de garantía de la seguridad social- y mezcla argumentos con una tendencia preocupante.
Por último quiero decir a los jubilados que si el gobierno en el que milito el año que viene -que es un año electoral- llegara a otorgar, por ejemplo, beneficios que pusieran en peligro este sistema de seguridad social, seguramente yo no lo acompañaría.
En algo sí pueden tener confianza: este gobierno es el que ha dado el 600 por ciento de aumento a la jubilación mínima en ocho años. Este gobierno ha dado...
Yo creo que esto debería volver a asesores, trabajarse con la ANSES, con el Ministerio de Economía y con las organizaciones de jubilados, ya que algunas comparten este criterio y otras no.
Quiero decirles que esta tasa de sustitución del haber mínimo es realmente la más importante de América Latina, y se ha demostrado que año a año este sistema va ampliando la cobertura en cuanto hay excedente, sobre todo respecto de la mínima.
Como acá se dijo, entre otros, tenemos dos grandes problemas. El primero es la mínima; el segundo, reconstituir la pirámide, lo cual obviamente significa buscar la solución al problema de todas las causas judiciales. Pero estas causas son las que provienen del congelamiento de los haberes jubilatorios del gobierno radical. Por favor, hagámonos cargo: no fueron las leyes de este gobierno las que las originaron las deudas ni los juicios. Siendo así, entonces, por qué no creer que este gobierno es el que más ha hecho por los jubilados desde Juan Domingo Perón, con absoluta certeza.
Este gobierno va a hacer todo lo que esté a su alcance -quizás mejorando la mínima- para resolver el problema de la pirámide, y no solamente éste porque también hay muchos otros. Tengo una lista de ocho o nueve temas que eran los que veníamos a discutir especialmente con el presidente y el vicepresidente, cuyo afecto personal me honra y no se va a enturbiar por este debate, más allá de la firmeza de mis convicciones.
Tenemos que convertir los juicios de los jubilados en sumarísimos y cambiar el modo de determinación del haber inicial. Tenemos que pedir el presupuesto necesario en justicia para que se amplíe la sala de seguridad con una sala más en las cámaras de la seguridad social, y contar por lo menos con cuatro juzgados más.
Tenemos una infinidad de temas con los proyectos previstos y debemos buscar una solución.
El año pasado hablamos sobre la posibilidad de ponernos de acuerdo con el gobierno y los partidos -y está presente la señora María América González- sobre una ley de moratoria para que, trabajando con el Poder Ejecutivo se pague la deuda, se actualicen las liquidaciones y se paguen en bonos -o en una cosa semejante- porque todos sabemos que la retroactividad es compleja.
Una cosa es si trabajamos todos juntos pero esto se ha roto. En forma intempestiva, sin tratarse con los asesores, sin un número técnico de valor, con suposiciones e informaciones de los diarios se pretende quedar bien con los jubilados prometiendo una cifra. Obviamente el costo, más allá de si el salario mínimo vital y móvil vuelve a subir, va a estar arriba de los 25 mil millones de pesos y en cinco años volveríamos al sistema anterior a pesar de esos 150 mil millones de pesos que tanto nos costaron conseguir.
En realidad, aquí se esconden algunos y lamento el fallecimiento del señor diputado Albrisi que si bien mientras estuvo en la comisión era mi principal opositor, tenía una concepción a favor de las AFJP porque creía que eran lo mejor.
Sin embargo, el señor diputado Albrisi cuidaba al SIPA y estoy seguro de que si estuviera presente no acompañaría este proyecto, más allá de las opciones políticas que le dieran. Lo digo con absoluta certeza y consta en sus manifestaciones en esta comisión.
Les pido realmente, desde mis la firmeza de mis convicciones y desde mi humildad, que replanteen este tema porque no va a terminar bien. Sólo terminará bien si tenemos la grandeza de levantar las mayorías circunstanciales, nos ponemos a estudiar en serio, nos dedicamos a ver cómo realmente podemos beneficiar a los jubilados que cobran la mínima y cómo podemos resolver el problema de la pirámide. Estos temas debemos resolverlos juntos.
No hagamos de los jubilados una lucha política más. Los jubilados saben bien quiénes hemos respondido y quienes les hemos dado todos los beneficios; saben bien que lo que nosotros no queremos, y algunos de los que firmaron este proyecto sí quieren, es que el sistema público que hemos construido se funda para que vuelva el sistema privado de las AFJP.
Estaban presentes el presidente y el vicepresidente cuando tuve un debate en el Consejo Interamericano de Seguridad Social ante el planteo que nos hizo un representante del BID por teleconferencia respecto a que era menester tender al sistema de AFJP. Esto es lo que está en juego y lo que no quiero que enturbie porque estoy seguro de que el setenta y pico por ciento que el año pasado votó por la movilidad, por la libre opción jubilatoria y por el cambio de sistema no quiere que volvamos a las AFJP.
¿Qué costaría volver este asunto al grupo de asesores, llamar a la ANSES y empezar a trabajar? Contratemos técnicos en demografía, en estadística o técnicos financieros que nos demuestren la viabilidad y la factibilidad de lo que proponen. Con seguridad que muchos de nosotros los acompañaremos con nuestras mayores o menores diferencias.
Sinceramente, como militante de la seguridad social y como referente del grupo del Frente para la Victoria no puedo acompañar este proyecto porque me parece absolutamente descomedido, pasa en virtud de títulos falsos, compromete todo nuestro sistema -sobre todo el fondo de garantía de la seguridad social- y mezcla argumentos con una tendencia preocupante.
Por último quiero decir a los jubilados que si el gobierno en el que milito el año que viene -que es un año electoral- llegara a otorgar, por ejemplo, beneficios que pusieran en peligro este sistema de seguridad social, seguramente yo no lo acompañaría.
En algo sí pueden tener confianza: este gobierno es el que ha dado el 600 por ciento de aumento a la jubilación mínima en ocho años. Este gobierno ha dado...
- Manifestaciones en la sala.
SR. PRESIDENTE IBARRA Silencio por favor. Pido respeto hacia los señores diputados, que están hablando sobre la base de sus convicciones.
Una participante.- ¡Pero que no mienta!
Una participante.- ¡Pero que no mienta!
SR. DÍAZ ROIG Yo no miento. Tengo treinta años en esto y jamás ningún jubilado me pudo decir que yo he venido a mentir.
- Manifestaciones en la sala.
SR. PRESIDENTE IBARRA Continúe, señor diputado.
- Varios hablan a la vez.
- Varios hablan a la vez.
SR. DÍAZ ROIG Si usted no tiene potestad para poner orden...
SR. PRESIDENTE IBARRA Pido a los asistentes que hagan silencio y respeten a los oradores.
SR. DÍAZ ROIG Usted sabe y todos saben cómo se me conceptúa a nivel internacional. ¿Saben por qué? Porque llevo treinta años trabajando y luchando contra estas cosas. Pero no voy a jactarme; no tengo elecciones el año que viene ni soy candidato a nada. Lo que yo quiero decirles es otra cosa.
Realmente estamos ante una oportunidad histórica de construir un muy buen sistema. Tenemos la oportunidad histórica de mejorar todas estas cosas, pero de esta forma es muy difícil. Les pido por favor que no les generen una expectativa a los jubilados que después, ante la imposibilidad de los números, deba ser desestimada en el Congreso o en cualquier otro lugar. Respetemos a los jubilados y procuremos restablecer el diálogo ameno y constructivo, la discusión franca que había en la comisión hasta el martes de la semana pasada. Si es así, señor presidente, señor vicepresidente, miembros de la comisión, todos ustedes van a contar conmigo para trabajar. Todos ustedes saben que soy capaz -así como también todos los que me acompañan- de reconocer errores si los hubiera.
Por último, cuando uno decide iniciar la militancia en la seguridad social -o es llevado a ello por las circunstancias- tiene dos formas de hacerlo. Una es siendo abogado de los jubilados y la otra es haciendo política previsional, donde se deben tener en cuenta otros aspectos y matices.
En nombre de nuestro bloque nosotros venimos a sostener con toda firmeza que no estamos de acuerdo, que no vamos a acompañar el dictamen y que vamos a plantear la nulidad. Pero con toda humildad les vuelvo a pedir que procuren hacer el esfuerzo para que este dictamen sea regresado a asesores, para que podamos convocar a la ANSES, a los jubilados y a los técnicos de la seguridad social. Hagamos un trabajo serio y con seguridad quien les habla y todo el resto del bloque del Frente para la Victoria los vamos a acompañar.
Realmente estamos ante una oportunidad histórica de construir un muy buen sistema. Tenemos la oportunidad histórica de mejorar todas estas cosas, pero de esta forma es muy difícil. Les pido por favor que no les generen una expectativa a los jubilados que después, ante la imposibilidad de los números, deba ser desestimada en el Congreso o en cualquier otro lugar. Respetemos a los jubilados y procuremos restablecer el diálogo ameno y constructivo, la discusión franca que había en la comisión hasta el martes de la semana pasada. Si es así, señor presidente, señor vicepresidente, miembros de la comisión, todos ustedes van a contar conmigo para trabajar. Todos ustedes saben que soy capaz -así como también todos los que me acompañan- de reconocer errores si los hubiera.
Por último, cuando uno decide iniciar la militancia en la seguridad social -o es llevado a ello por las circunstancias- tiene dos formas de hacerlo. Una es siendo abogado de los jubilados y la otra es haciendo política previsional, donde se deben tener en cuenta otros aspectos y matices.
En nombre de nuestro bloque nosotros venimos a sostener con toda firmeza que no estamos de acuerdo, que no vamos a acompañar el dictamen y que vamos a plantear la nulidad. Pero con toda humildad les vuelvo a pedir que procuren hacer el esfuerzo para que este dictamen sea regresado a asesores, para que podamos convocar a la ANSES, a los jubilados y a los técnicos de la seguridad social. Hagamos un trabajo serio y con seguridad quien les habla y todo el resto del bloque del Frente para la Victoria los vamos a acompañar.
SR. PRESIDENTE IBARRA Quisiera aclarar que el comportamiento que ha tenido la comisión es de absoluto apego a lo que marca el reglamento. Quienes están habilitados para la discusión de los proyectos en la Cámara de Diputados son los representantes genuinos del pueblo, que son los diputados. Acá estamos reunidos señores diputados con representación constitucional para debatir estos temas; no son los asesores. Si bien esa puede ser una técnica de debate o de análisis de un proyecto de ley o una herramienta de la cual nos valemos los legisladores, no son los asesores quienes tienen que debatir los problemas de los argentinos. Por eso estamos reunidos acá los diputados.
SR. DÍAZ ROIG Quizás me expresé confusamente. Yo voy a plantear la nulidad por el tema de la convocatoria conjunta. El tema de los asesores es un pedido.
SR. PRESIDENTE IBARRA Por otra parte, conforme el reglamento se notificó al presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda y, además, personalmente fui a hablar con él para que tenga a bien reunirse a discutir estos temas. En igual sentido de lo que usted está planteando se le manifestó al presidente de dicha comisión que era la oportunidad para discutir, de dar número y de alguna manera de alimentar este debate. Pero no vino.
La discusión que usted plantea no la tiene que dar con nosotros sino dentro de su propio bloque y con el presidente de esa comisión, porque es precisamente él quien debe estar presente acá para debatir estos temas. (Aplausos.) Si me permite, señor diputado, no son los legisladores presentes quienes están rehuyendo la posibilidad de debatir estos temas que le importan a los argentinos; son los diputados que no están presentes, como el presidente Marconato, con quien tuve la amabilidad de comunicarle personalmente la posibilidad de que viniera a esta reunión.
El tercer tema que debo informarle al señor diputado es que lo que se está tratando hoy es un proyecto también de su autoría. Los diputados estamos reunidos acá para tratar un proyecto suyo, entre los muchos que hay, y cuyo artículo 1° reza que el haber mínimo de los beneficiarios de las jubilaciones y pensiones otorgadas por la Administración Nacional de la Seguridad Social de acuerdo con la ley 24.241 será equivalente al 82 por ciento del salario mínimo, vital y móvil fijado para los trabajadores activos por el Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario. (Aplausos.)
Para terminar, observo que sus palabras no coinciden con su pensamiento, expresado al menos en este proyecto, del que más bien surge una coincidencia entre diputados del Frente para la Victoria y diputados pertenecientes a otros sectores políticos.
Por lo tanto, el tono que deberíamos estar utilizando en esta reunión es el del acuerdo y del consenso, para viabilizar la posibilidad de que los jubilados en la Argentina estén mejor, según reza el proyecto que ustedes han presentado. (Aplausos.)
La discusión que usted plantea no la tiene que dar con nosotros sino dentro de su propio bloque y con el presidente de esa comisión, porque es precisamente él quien debe estar presente acá para debatir estos temas. (Aplausos.) Si me permite, señor diputado, no son los legisladores presentes quienes están rehuyendo la posibilidad de debatir estos temas que le importan a los argentinos; son los diputados que no están presentes, como el presidente Marconato, con quien tuve la amabilidad de comunicarle personalmente la posibilidad de que viniera a esta reunión.
El tercer tema que debo informarle al señor diputado es que lo que se está tratando hoy es un proyecto también de su autoría. Los diputados estamos reunidos acá para tratar un proyecto suyo, entre los muchos que hay, y cuyo artículo 1° reza que el haber mínimo de los beneficiarios de las jubilaciones y pensiones otorgadas por la Administración Nacional de la Seguridad Social de acuerdo con la ley 24.241 será equivalente al 82 por ciento del salario mínimo, vital y móvil fijado para los trabajadores activos por el Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario. (Aplausos.)
Para terminar, observo que sus palabras no coinciden con su pensamiento, expresado al menos en este proyecto, del que más bien surge una coincidencia entre diputados del Frente para la Victoria y diputados pertenecientes a otros sectores políticos.
Por lo tanto, el tono que deberíamos estar utilizando en esta reunión es el del acuerdo y del consenso, para viabilizar la posibilidad de que los jubilados en la Argentina estén mejor, según reza el proyecto que ustedes han presentado. (Aplausos.)
SR. DÍAZ ROIG Esto lo hemos conversado muchas veces con usted, con Serebrinsky y con otros señores diputados; mis asesores también lo han conversado con sus asesores y todos saben muy bien que he modificado hace tiempo ese criterio.
Manifestaciones entre el público asistente.
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra la diputada Iturraspe y luego el diputado López Arias.
SR. LÓPEZ ARIAS Señor presidente: lamento que me deje sin posibilidad de hablar, porque tengo que ir a la reunión de la Comisión de Labor Parlamentaria.
SR. PRESIDENTE IBARRA Disculpe, señor diputado.
SRA. ITURRAPSE Señor presidente: coincido con algunos de los diputados preopinantes en que este es un día histórico, porque si hay un sector de nuestro pueblo que no tiene tiempo para esperar, ese es el de nuestros mayores.
SR. PRESIDENTE IBARRA Perdón que la interrumpa, señora diputada.
¿Podríamos acotar las intervenciones a cinco minutos, de forma tal que todos puedan hacer uso de la palabra?
¿Podríamos acotar las intervenciones a cinco minutos, de forma tal que todos puedan hacer uso de la palabra?
SRA. ITURRASPE De acuerdo, señor presidente.
Por ese motivo creo que hay tres temas que estamos abocados a discutir hoy, que a nuestro modo de ver sólo pueden ser un preámbulo de una discusión profunda, a fondo, estratégica, sobre una reforma integral de lo que es el sistema de la seguridad social en la Argentina.
Vengo hoy acá a hablar en nombre también de proyectos presentados por la doctora María América González mientras integró esta Cámara, quien hoy nos está honrando representándonos en la Legislatura porteña. Son múltiples los proyectos que presentó pero hay algunos que específicamente tienen que ver con los temas que estamos tratando el día de hoy.
Hoy estamos tratando el tema de un haber mínimo garantizado, que de acuerdo con un consenso acordado se fijó en un 82 por ciento del salario mínimo vital y móvil. Hay quienes pensamos que incluso debería ser más, que debería ser del ciento por ciento.
Sabemos que ese monto del salario mínimo vital y móvil está subvaluado y es difícil pensar que en el tramo final de nuestras vidas no necesitamos mejor nutrición, mejor abrigo y mejores medicamentos. Sin embargo, en ese esfuerzo de construcción de consensos acordamos que ese monto mejoraría sensiblemente, al día de hoy, la situación de nuestros jubilados.
Estamos totalmente en desacuerdo con la compactación de la pirámide que ha ocurrido durante los últimos siete u ocho años. Debemos recordar que en el año 93 sólo el 20 por ciento de los jubilados cobraba la mínima. Hoy el 76 por ciento de nuestros jubilados cobra la jubilación mínima. Y con el incremento que se piensa establecer, casi el 90 por ciento va a cobrar la mínima. Por esta razón nos vemos obligados a abordar también la generalización del caso Sánchez y Badaro, que no son más que deudas que como Nación, como gobierno, como Estado, tenemos con nuestros jubilados desde hace muchísimo tiempo.
Es deber entonces de esta Cámara, que levanta el guante, que se hace cargo, que trata de ser coherente poniendo la cabeza, el corazón y las manos en una misma dirección, que decimos que tiene que ser universalizada sin más trámite esta recomposición para el conjunto de los jubilados.
También debemos tratar el tema de la movilidad, terminando con esta alquimia matemática que nos han impuesto desde hace dos años, que es tan compleja que la entienden sólo los técnicos. Y como decía Scalabrini Ortiz, si no entendemos una fórmula matemática es porque nos están jorbando. (Aplausos.)
Al margen de esto, creemos que la movilidad sólo puede estar atada a la evolución de los salarios. Pensamos que esa es la manera de recuperar la dignidad y de saber que seguimos siendo trabajadores, aunque sea en condición de retiro. Por eso, nuestra suerte está ineludiblemente atada -y esperemos que en un tiempo no muy lejano efectivamente lo esté- a la evolución del cargo y función que cumplíamos cuando estábamos en actividad.
En virtud de todo esto, también creemos que es fundamental plantear de dónde salen los fondos para financiar toda esta reforma. Estos disparates que hemos leído en los diarios en cuanto a sumas varias veces millonarias y demás, no tienen asidero. Debemos decir que en realidad el incremento del haber mínimo garantizado es, en términos anuales, de 16.500 millones de pesos. También debemos decir que la extensión del caso Badaro implica unos 9.700 millones, y otros 7 mil millones respecto del caso Sánchez.
En este caso, podremos hacerlo con los fondos que ya tiene la ANSES, con los 10 ó 12 mil millones de pesos que va a tener de superávit en el curso de este año y con la restitución de los aportes patronales, que desde 1993 han sido cercenados y que proponemos reponer de manera inmediata para todas las grandes empresas, exceptuando a las medianas y pequeñas, que son las verdaderas dadoras de empleo.
Estamos planteando restituir los aportes patronales para aquellas empresas que tengan más de cuarenta empleados y una facturación anual de 10 mil millones de pesos.
Creemos que con estas medidas de estricta justicia, sumadas a la certeza de los fondos de la recaudación previsional, más ese fondo de garantía de sustentabilidad que hasta este momento tiene 160 mil millones de pesos -sobre el cual pensamos que hay que fijar un tope de 119 mil millones para el monto que realmente pueda ser pasible de ser usado por el Estado-, tenemos ahí un excedente de recursos, de utilidades y de intereses que tranquilamente sustentan nuestra propuesta y la sostienen a través de los años.
Por ese motivo estamos presentando esta propuesta, suscripta por los diputados del GEN, el socialismo y el interbloque al que pertenezco -Movimiento Proyecto Sur- para acompañar los primeros puntos, no obstante lo cual también apoyamos un proyecto propio en función de agregar el tema de la financiación. (Aplausos.)
Por ese motivo creo que hay tres temas que estamos abocados a discutir hoy, que a nuestro modo de ver sólo pueden ser un preámbulo de una discusión profunda, a fondo, estratégica, sobre una reforma integral de lo que es el sistema de la seguridad social en la Argentina.
Vengo hoy acá a hablar en nombre también de proyectos presentados por la doctora María América González mientras integró esta Cámara, quien hoy nos está honrando representándonos en la Legislatura porteña. Son múltiples los proyectos que presentó pero hay algunos que específicamente tienen que ver con los temas que estamos tratando el día de hoy.
Hoy estamos tratando el tema de un haber mínimo garantizado, que de acuerdo con un consenso acordado se fijó en un 82 por ciento del salario mínimo vital y móvil. Hay quienes pensamos que incluso debería ser más, que debería ser del ciento por ciento.
Sabemos que ese monto del salario mínimo vital y móvil está subvaluado y es difícil pensar que en el tramo final de nuestras vidas no necesitamos mejor nutrición, mejor abrigo y mejores medicamentos. Sin embargo, en ese esfuerzo de construcción de consensos acordamos que ese monto mejoraría sensiblemente, al día de hoy, la situación de nuestros jubilados.
Estamos totalmente en desacuerdo con la compactación de la pirámide que ha ocurrido durante los últimos siete u ocho años. Debemos recordar que en el año 93 sólo el 20 por ciento de los jubilados cobraba la mínima. Hoy el 76 por ciento de nuestros jubilados cobra la jubilación mínima. Y con el incremento que se piensa establecer, casi el 90 por ciento va a cobrar la mínima. Por esta razón nos vemos obligados a abordar también la generalización del caso Sánchez y Badaro, que no son más que deudas que como Nación, como gobierno, como Estado, tenemos con nuestros jubilados desde hace muchísimo tiempo.
Es deber entonces de esta Cámara, que levanta el guante, que se hace cargo, que trata de ser coherente poniendo la cabeza, el corazón y las manos en una misma dirección, que decimos que tiene que ser universalizada sin más trámite esta recomposición para el conjunto de los jubilados.
También debemos tratar el tema de la movilidad, terminando con esta alquimia matemática que nos han impuesto desde hace dos años, que es tan compleja que la entienden sólo los técnicos. Y como decía Scalabrini Ortiz, si no entendemos una fórmula matemática es porque nos están jorbando. (Aplausos.)
Al margen de esto, creemos que la movilidad sólo puede estar atada a la evolución de los salarios. Pensamos que esa es la manera de recuperar la dignidad y de saber que seguimos siendo trabajadores, aunque sea en condición de retiro. Por eso, nuestra suerte está ineludiblemente atada -y esperemos que en un tiempo no muy lejano efectivamente lo esté- a la evolución del cargo y función que cumplíamos cuando estábamos en actividad.
En virtud de todo esto, también creemos que es fundamental plantear de dónde salen los fondos para financiar toda esta reforma. Estos disparates que hemos leído en los diarios en cuanto a sumas varias veces millonarias y demás, no tienen asidero. Debemos decir que en realidad el incremento del haber mínimo garantizado es, en términos anuales, de 16.500 millones de pesos. También debemos decir que la extensión del caso Badaro implica unos 9.700 millones, y otros 7 mil millones respecto del caso Sánchez.
En este caso, podremos hacerlo con los fondos que ya tiene la ANSES, con los 10 ó 12 mil millones de pesos que va a tener de superávit en el curso de este año y con la restitución de los aportes patronales, que desde 1993 han sido cercenados y que proponemos reponer de manera inmediata para todas las grandes empresas, exceptuando a las medianas y pequeñas, que son las verdaderas dadoras de empleo.
Estamos planteando restituir los aportes patronales para aquellas empresas que tengan más de cuarenta empleados y una facturación anual de 10 mil millones de pesos.
Creemos que con estas medidas de estricta justicia, sumadas a la certeza de los fondos de la recaudación previsional, más ese fondo de garantía de sustentabilidad que hasta este momento tiene 160 mil millones de pesos -sobre el cual pensamos que hay que fijar un tope de 119 mil millones para el monto que realmente pueda ser pasible de ser usado por el Estado-, tenemos ahí un excedente de recursos, de utilidades y de intereses que tranquilamente sustentan nuestra propuesta y la sostienen a través de los años.
Por ese motivo estamos presentando esta propuesta, suscripta por los diputados del GEN, el socialismo y el interbloque al que pertenezco -Movimiento Proyecto Sur- para acompañar los primeros puntos, no obstante lo cual también apoyamos un proyecto propio en función de agregar el tema de la financiación. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra el señor diputado Lozano.
SRA. CALCHAQUÍ ¿Me concede una breve interrupción, señor diputado?
SR. LOZANO Preferiría no hacerlo, porque ya debo retirarme, y la verdad es que como integrante de la Comisión de Presupuesto y Hacienda quiero dejar constancia de que si acá no está participando esa comisión fue por decisión de su presidente.
La mayor parte de los diputados que integramos la Comisión de Presupuesto y Hacienda tenemos interés en que exista plenario de comisiones y en que se debatan estos temas, pero no ha habido modo de conseguirlo porque lo que está haciendo el oficialismo en este sentido es transformar a la Comisión de Presupuesto y Hacienda -que como todos sabemos, es comisión obligada de casi cuanta norma se quiera discutir en este Congreso-, en una suerte de tapón para no poder emitir dictámenes que podamos luego debatir en el recinto. (Aplausos.)
Dicho esto, también quiero señalar que, por lo menos desde el Movimiento Proyecto Sur y con toda claridad, en ningún momento hemos objetado las definiciones que se tomaron respecto de las recomposiciones del haber mínimo. Éstas nos parecieron absolutamente razonables, siempre como marco para la salida de la crisis.
Pero cuando esto se transforma en la única política previsional el resultado es la situación imperante, en la que prácticamente la totalidad de los mayores termina ubicados en la mínima.
El resultado de esta definición termina consumando un diseño previsional que es un sistema que paga pensiones para pobres y que abre la puerta para que quienes aportaron durante treinta años no le encuentren sentido a dicho aporte. (Aplausos.)
Es más, abre la puerta para que hoy se esté discutiendo con los bancos de plaza la restitución de un complemento individual de capitalización para aquellos que tienen capacidad de ahorro.
Por lo tanto, aceptando que en los contextos de crisis tiene sentido recomponer el haber mínimo, creemos que hay que poner en debate el diseño del sistema. En dirección a ese objetivo están planteados los puntos que acaba de mencionar la señora diputada Iturraspe.
Quiero señalar también que somos parte de una oposición política que apoyó la estatización de las administradoras de fondos de jubilaciones y pensiones porque creemos en el sistema público previsional. Pero no apoyamos que la disponibilidad de la recursos en lugar de tener por destino la necesaria reforma previsional tenga por destino financiar gasto corriente, deuda pública u otro tipo de financiamiento de créditos a los que ni siquiera los jubilados pueden acceder. (Aplausos.)
En ese marco quiero recordar que durante el año 2009 prácticamente 5.300 millones de pesos del fondo de garantía de sustentabilidad tuvieron por destino el financiamiento de gastos corrientes. Desde ese punto de vista sí comparto la idea de que estamos en un día histórico, porque lo que planteamos aquí es aumentar el nivel de inversión en materia de seguridad social.
Digo esto para que quede claro: no hay solución a este problema sin aumentar la inversión de recursos al sistema de seguridad social. ¿Por qué digo esto y por qué dije antes que hay un diseño de jubilaciones para pobres? Porque en realidad desde que comenzó este gobierno la cantidad de beneficiarios del sistema creció un 82 por ciento pero la cantidad de recursos del sistema se incrementó en un 51 por ciento.
Es decir, los recursos que se invierten son inferiores a la cantidad de beneficiarios, lo que hace que quienes aportan terminen financiando la recomposición de la jubilación mínima en lugar de hacer esto con inversión de rentas generales. (Aplausos.)
Es este punto el que determina que la jubilación promedio de hoy en la Argentina sea un 20 por ciento inferior a valores reales a la del año 2001. (Aplausos.)
Si bien es cierto que se recompuso el haber mínimo, hay que ser justos y poner en línea el aumento de los precios con el aumento del haber mínimo. No hubo un aumento del 500 por ciento del haber mínimo sino que en términos reales fue del 50 por ciento. (Aplausos.)
Tal como lo planteaba la señora diputada Iturraspe, para garantizar la recomposición de los haberes jubilatorios y el 82 por ciento del salario mínimo -para el haber mínimo en las actuales condiciones- se necesitan aproximadamente 32 mil millones de pesos en términos brutos. Como esto genera autofinanciamiento, en términos netos implica no más de 26 mil millones de pesos.
La restitución de las contribuciones patronales para las grandes firmas a los niveles del año 1993 y el superávit financiero de la ANSES al año 2010 permiten hacernos cargo de esto con recursos previsionales. Ni que hablar que con el simple hecho de disponer de reservas y utilidades del Banco Central y de mayor recaudación este gobierno tiene, para el año 2010, 82 mil millones de pesos por mayores recursos; es en este Parlamento donde debería discutir para qué los va a destinar.
Por lo tanto, no hay un problema de recursos para hacer viable lo que se plantea sino que lo que debe haber es la necesidad de definir la vocación política que nos permita ir a fondo respecto de cuál es el diseño del sistema previsional que queremos tener en la Argentina. (Aplausos.)
La mayor parte de los diputados que integramos la Comisión de Presupuesto y Hacienda tenemos interés en que exista plenario de comisiones y en que se debatan estos temas, pero no ha habido modo de conseguirlo porque lo que está haciendo el oficialismo en este sentido es transformar a la Comisión de Presupuesto y Hacienda -que como todos sabemos, es comisión obligada de casi cuanta norma se quiera discutir en este Congreso-, en una suerte de tapón para no poder emitir dictámenes que podamos luego debatir en el recinto. (Aplausos.)
Dicho esto, también quiero señalar que, por lo menos desde el Movimiento Proyecto Sur y con toda claridad, en ningún momento hemos objetado las definiciones que se tomaron respecto de las recomposiciones del haber mínimo. Éstas nos parecieron absolutamente razonables, siempre como marco para la salida de la crisis.
Pero cuando esto se transforma en la única política previsional el resultado es la situación imperante, en la que prácticamente la totalidad de los mayores termina ubicados en la mínima.
El resultado de esta definición termina consumando un diseño previsional que es un sistema que paga pensiones para pobres y que abre la puerta para que quienes aportaron durante treinta años no le encuentren sentido a dicho aporte. (Aplausos.)
Es más, abre la puerta para que hoy se esté discutiendo con los bancos de plaza la restitución de un complemento individual de capitalización para aquellos que tienen capacidad de ahorro.
Por lo tanto, aceptando que en los contextos de crisis tiene sentido recomponer el haber mínimo, creemos que hay que poner en debate el diseño del sistema. En dirección a ese objetivo están planteados los puntos que acaba de mencionar la señora diputada Iturraspe.
Quiero señalar también que somos parte de una oposición política que apoyó la estatización de las administradoras de fondos de jubilaciones y pensiones porque creemos en el sistema público previsional. Pero no apoyamos que la disponibilidad de la recursos en lugar de tener por destino la necesaria reforma previsional tenga por destino financiar gasto corriente, deuda pública u otro tipo de financiamiento de créditos a los que ni siquiera los jubilados pueden acceder. (Aplausos.)
En ese marco quiero recordar que durante el año 2009 prácticamente 5.300 millones de pesos del fondo de garantía de sustentabilidad tuvieron por destino el financiamiento de gastos corrientes. Desde ese punto de vista sí comparto la idea de que estamos en un día histórico, porque lo que planteamos aquí es aumentar el nivel de inversión en materia de seguridad social.
Digo esto para que quede claro: no hay solución a este problema sin aumentar la inversión de recursos al sistema de seguridad social. ¿Por qué digo esto y por qué dije antes que hay un diseño de jubilaciones para pobres? Porque en realidad desde que comenzó este gobierno la cantidad de beneficiarios del sistema creció un 82 por ciento pero la cantidad de recursos del sistema se incrementó en un 51 por ciento.
Es decir, los recursos que se invierten son inferiores a la cantidad de beneficiarios, lo que hace que quienes aportan terminen financiando la recomposición de la jubilación mínima en lugar de hacer esto con inversión de rentas generales. (Aplausos.)
Es este punto el que determina que la jubilación promedio de hoy en la Argentina sea un 20 por ciento inferior a valores reales a la del año 2001. (Aplausos.)
Si bien es cierto que se recompuso el haber mínimo, hay que ser justos y poner en línea el aumento de los precios con el aumento del haber mínimo. No hubo un aumento del 500 por ciento del haber mínimo sino que en términos reales fue del 50 por ciento. (Aplausos.)
Tal como lo planteaba la señora diputada Iturraspe, para garantizar la recomposición de los haberes jubilatorios y el 82 por ciento del salario mínimo -para el haber mínimo en las actuales condiciones- se necesitan aproximadamente 32 mil millones de pesos en términos brutos. Como esto genera autofinanciamiento, en términos netos implica no más de 26 mil millones de pesos.
La restitución de las contribuciones patronales para las grandes firmas a los niveles del año 1993 y el superávit financiero de la ANSES al año 2010 permiten hacernos cargo de esto con recursos previsionales. Ni que hablar que con el simple hecho de disponer de reservas y utilidades del Banco Central y de mayor recaudación este gobierno tiene, para el año 2010, 82 mil millones de pesos por mayores recursos; es en este Parlamento donde debería discutir para qué los va a destinar.
Por lo tanto, no hay un problema de recursos para hacer viable lo que se plantea sino que lo que debe haber es la necesidad de definir la vocación política que nos permita ir a fondo respecto de cuál es el diseño del sistema previsional que queremos tener en la Argentina. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra la señora diputada Ciciliani.
SRA. CICILIANI En nombre del bloque del Partido Socialista...
SRA. CALCHAQUÍ Señor presidente: seguía yo en el orden de la palabra, conforme el listado que me mostró el secretario. Le voy a agradecer que me dé la palabra, si es posible.
SR. PRESIDENTE IBARRA La señora diputada Ciciliani está dos lugares antes que la señora diputada Calchaquí.
Continúa en el uso de la palabra la señora diputada Ciciliani.
Continúa en el uso de la palabra la señora diputada Ciciliani.
SRA. CICILIANI Decía que en nombre del Partido Socialista es para mí una satisfacción muy grande poner en debate el sistema previsional de la Argentina.
También quiero decir que venimos a hablar a este Congreso con la autoridad moral de que en el bloque del Partido Socialista tenemos una historia de trabajo respecto del tema previsional argentino, una historia de haber votado en contra de la privatización del sistema jubilatorio argentino y una historia de haber apoyado con gran júbilo la reestatización del sistema jubilatorio.
Es por eso que hoy creemos que con absoluta responsabilidad tenemos que mirar el financiamiento del sistema y pensar en los jubilados presentes y en los jubilados futuros. No hay sistema previsional posible que se sustente en el tiempo con 1,3 aportantes activos para un pasivo. Para terminar con este sistema tenemos que mirar esa economía y ese trabajo en negro, que en la Argentina representa más del 30 por ciento.
Por supuesto que reconocemos en la tarea del Frente para la Victoria el hecho de haber sumado a dos millones de trabajadores que seguramente no han sido los responsables porque sus empleadores no les hayan hecho los aportes a lo largo del tiempo a fin de que el ciento por ciento de las personas mayores de 60 años tengan un piso mínimo de protección social hoy en la Argentina. Pero tenemos que ver con responsabilidad que eso no alcanza para salir de la pobreza y tenemos que ver con responsabilidad el hecho de la judicialización del sistema.
No podemos permitir que cada ciudadano tenga que buscarse un asistente legal para pedir el reconocimiento de sus derechos. Para eso estamos el Estado y los representantes del Estado, es decir, para abordar este tema con la responsabilidad que merece. Y para hacerlo con esa responsabilidad nosotros creemos, como lo han dicho la diputada Iturraspe y el diputado preopinante, que tenemos que trabajar juntos para ver la financiación del sistema jubilatorio. (Aplausos.)
También quiero decir que venimos a hablar a este Congreso con la autoridad moral de que en el bloque del Partido Socialista tenemos una historia de trabajo respecto del tema previsional argentino, una historia de haber votado en contra de la privatización del sistema jubilatorio argentino y una historia de haber apoyado con gran júbilo la reestatización del sistema jubilatorio.
Es por eso que hoy creemos que con absoluta responsabilidad tenemos que mirar el financiamiento del sistema y pensar en los jubilados presentes y en los jubilados futuros. No hay sistema previsional posible que se sustente en el tiempo con 1,3 aportantes activos para un pasivo. Para terminar con este sistema tenemos que mirar esa economía y ese trabajo en negro, que en la Argentina representa más del 30 por ciento.
Por supuesto que reconocemos en la tarea del Frente para la Victoria el hecho de haber sumado a dos millones de trabajadores que seguramente no han sido los responsables porque sus empleadores no les hayan hecho los aportes a lo largo del tiempo a fin de que el ciento por ciento de las personas mayores de 60 años tengan un piso mínimo de protección social hoy en la Argentina. Pero tenemos que ver con responsabilidad que eso no alcanza para salir de la pobreza y tenemos que ver con responsabilidad el hecho de la judicialización del sistema.
No podemos permitir que cada ciudadano tenga que buscarse un asistente legal para pedir el reconocimiento de sus derechos. Para eso estamos el Estado y los representantes del Estado, es decir, para abordar este tema con la responsabilidad que merece. Y para hacerlo con esa responsabilidad nosotros creemos, como lo han dicho la diputada Iturraspe y el diputado preopinante, que tenemos que trabajar juntos para ver la financiación del sistema jubilatorio. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra el señor diputado Adrián Pérez.
SR. PÉREZ Señor presidente: yo también integro la Comisión de Presupuesto y Hacienda y lo primero que quiero señalar es que hoy nosotros estamos actuando con mucha responsabilidad, contrariamente a lo que han dicho algunos miembros del bloque oficialista. No es falta de responsabilidad sino que por el contrario es actuar con una enorme responsabilidad fijar un orden de prioridades sensato en la Argentina, que hace mucho tiempo que no se fija.
Lo que estamos diciendo en ese sentido es que en el orden de prioridades hay que poner primero a un sector que ha sido castigado desde hace muchos años y quizás desde que yo tengo memoria, como es el sector de los jubilados. Lo que estamos haciendo es simplemente decir que los jubilados pasen a ser una prioridad en la Argentina y que podamos establecer con los recursos existentes una jubilación digna para ese sector pasivo después de tanta vida de trabajo. De eso se trata el proyecto.
Lamento que los diputados del oficialismo digan que no hay recursos y que no convoquen a la comisión que tendría que estar analizando ese tema.
Pero lo cierto es que hoy la ANSES tiene un fondo de sustentabilidad de 150 mil millones de pesos, que el flujo es superior a los 100 mil millones de pesos y que, además, este año tenemos un superávit fiscal de unos 40 mil millones de pesos. De modo tal que nadie puede decir que no hay dinero para generar el 82 por ciento móvil y restablecer la pirámide. En todo caso, lo que ha habido es una decisión política de que el dinero y los recursos de la ANSES que debían estar destinados a jubilaciones dignas estén aplicados a financiar cualquier otro tipo de programa e, inclusive, a gastos corrientes del Estado. (Aplausos.)
Dicho esto, en el año 96 nosotros presentamos el proyecto del ingreso universal a la niñez, y la primera reacción fue bastante similar a la que escuchamos hoy: "No hay plata, por qué a los niños, no hay plata para los niños. Lamento mucho, entiendo la necesidad de los niños, entiendo que hay mucha pobreza en la niñez pero no hay plata". Hasta dos meses antes de que dictara el decreto, el gobierno seguía insistiendo con que no había plata para los niños.
Entre todos los bloques decidimos que igualmente íbamos a avanzar en el proyecto del ingreso universal para la niñez, y la reacción del gobierno fue dictar un decreto para que haya un ingreso universal para los niños.
Hoy estamos diciendo que vamos a avanzar con el 82 por ciento móvil, y estoy seguro que el gobierno va a tener que hacer las cuentas necesarias para que haya dinero para pagar la mínima jubilación que merecen los jubilados. (Aplausos.)
Desde luego que nosotros nos merecemos -y en esto coincido con el diputado preopinante- un debate en serio respecto del sistema previsional, pero que no está necesariamente atado a esto. Hoy la prioridad es poder establecer el 82 por ciento móvil. Hoy la prioridad es dar dignidad a nuestros jubilados, y eso es lo que estamos haciendo. Pero seguramente, en forma paralela, debemos dar un debate con respecto a un sistema provisional que demuestra que hace agua por todos lados.
Como recién decía la diputada Ciciliani, es insostenible que haya 1,3 activo por un pasivo. Esto es así porque hay un 40 por ciento del mercado laboral que no está registrado. Este es un tema central sobre el que ineludiblemente debemos trabajar.
Otro tema que hay que poner sobre el tapete es que, sin lugar a dudas, se ha extendido la esperanza de vida.
Por otro lado, estoy convencido de que el sistema de seguridad social debe estar garantizado por el Estado. Creo en el Estado y en el sistema público como garante de la seguridad social.
Dicho esto, establecer que uno se jubila con el promedio de los últimos diez años es retrógrado, porque en la Argentina de hoy esos son los peores diez años en la vida remunerativa de una persona.
Entonces, hay dos etapas que nosotros tendríamos que poder afrontar. La primera etapa, lo urgente, lo necesario, lo imprescindible hoy es el 82 por ciento móvil y la recomposición de haberes, de acuerdo con lo que ha dicho la Justicia. Y a partir de mañana, empezar a trabajar en la reformulación del sistema previsional, que es una deuda, siempre señalando que nosotros creemos que el sistema de seguridad social debe estar garantizado por el Estado y debe ser público. (Aplausos.)
Lo que estamos diciendo en ese sentido es que en el orden de prioridades hay que poner primero a un sector que ha sido castigado desde hace muchos años y quizás desde que yo tengo memoria, como es el sector de los jubilados. Lo que estamos haciendo es simplemente decir que los jubilados pasen a ser una prioridad en la Argentina y que podamos establecer con los recursos existentes una jubilación digna para ese sector pasivo después de tanta vida de trabajo. De eso se trata el proyecto.
Lamento que los diputados del oficialismo digan que no hay recursos y que no convoquen a la comisión que tendría que estar analizando ese tema.
Pero lo cierto es que hoy la ANSES tiene un fondo de sustentabilidad de 150 mil millones de pesos, que el flujo es superior a los 100 mil millones de pesos y que, además, este año tenemos un superávit fiscal de unos 40 mil millones de pesos. De modo tal que nadie puede decir que no hay dinero para generar el 82 por ciento móvil y restablecer la pirámide. En todo caso, lo que ha habido es una decisión política de que el dinero y los recursos de la ANSES que debían estar destinados a jubilaciones dignas estén aplicados a financiar cualquier otro tipo de programa e, inclusive, a gastos corrientes del Estado. (Aplausos.)
Dicho esto, en el año 96 nosotros presentamos el proyecto del ingreso universal a la niñez, y la primera reacción fue bastante similar a la que escuchamos hoy: "No hay plata, por qué a los niños, no hay plata para los niños. Lamento mucho, entiendo la necesidad de los niños, entiendo que hay mucha pobreza en la niñez pero no hay plata". Hasta dos meses antes de que dictara el decreto, el gobierno seguía insistiendo con que no había plata para los niños.
Entre todos los bloques decidimos que igualmente íbamos a avanzar en el proyecto del ingreso universal para la niñez, y la reacción del gobierno fue dictar un decreto para que haya un ingreso universal para los niños.
Hoy estamos diciendo que vamos a avanzar con el 82 por ciento móvil, y estoy seguro que el gobierno va a tener que hacer las cuentas necesarias para que haya dinero para pagar la mínima jubilación que merecen los jubilados. (Aplausos.)
Desde luego que nosotros nos merecemos -y en esto coincido con el diputado preopinante- un debate en serio respecto del sistema previsional, pero que no está necesariamente atado a esto. Hoy la prioridad es poder establecer el 82 por ciento móvil. Hoy la prioridad es dar dignidad a nuestros jubilados, y eso es lo que estamos haciendo. Pero seguramente, en forma paralela, debemos dar un debate con respecto a un sistema provisional que demuestra que hace agua por todos lados.
Como recién decía la diputada Ciciliani, es insostenible que haya 1,3 activo por un pasivo. Esto es así porque hay un 40 por ciento del mercado laboral que no está registrado. Este es un tema central sobre el que ineludiblemente debemos trabajar.
Otro tema que hay que poner sobre el tapete es que, sin lugar a dudas, se ha extendido la esperanza de vida.
Por otro lado, estoy convencido de que el sistema de seguridad social debe estar garantizado por el Estado. Creo en el Estado y en el sistema público como garante de la seguridad social.
Dicho esto, establecer que uno se jubila con el promedio de los últimos diez años es retrógrado, porque en la Argentina de hoy esos son los peores diez años en la vida remunerativa de una persona.
Entonces, hay dos etapas que nosotros tendríamos que poder afrontar. La primera etapa, lo urgente, lo necesario, lo imprescindible hoy es el 82 por ciento móvil y la recomposición de haberes, de acuerdo con lo que ha dicho la Justicia. Y a partir de mañana, empezar a trabajar en la reformulación del sistema previsional, que es una deuda, siempre señalando que nosotros creemos que el sistema de seguridad social debe estar garantizado por el Estado y debe ser público. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE IBARRA Habiéndose retirado la señora diputada Calchaquí, tiene la palabra el diputado Ledesma.
SR. LEDESMA Simplemente quería profundizar sobre el motivo que nos lleva a acompañar el despacho de esta comisión, porque en el bloque al que pertenezco -o en el interbloque que estamos intentando componer- nos hemos fijado como política acompañar políticas de Estado. Y cuando hablamos de políticas de Estado obviamente asumimos los compromisos políticos que esto requiere.
Ello, porque no se puede decir por un lado: "presentamos una de las últimas leyes del 82 por ciento móvil con vistas a un amplio sector laboral de la vida Argentina, que son los empleados de comercio."
Hoy en día, de los 5 millones de aportantes -un poco más o un poco menos-, entre 1 y 1,1 millón son empleados de comercio, con el agregado de que absolutamente la mayoría hemos aportado más de treinta años.
Cuando presentamos este proyecto, lo hicimos como una hipótesis o como una posibilidad, porque veíamos que en el anterior debate de la ley de jubilaciones hubo muchas posiciones -con RIPTE o no, con qué porcentajes y sobre qué-, hubo distintas ecuaciones y se llegó a una que todavía no entiendo.
Si hoy el salario mínimo vital está cerca de los 1.580 pesos, honestamente creo que al Estado no le va a implicar un mayor esfuerzo pagar 1.340 y chirolas, siempre y cuando mantengamos este tipo de recaudación que tiene que ver con políticas de Estado que está llevando a cabo este gobierno.
Nosotros asumimos y decimos que no somos la oposición por la oposición misma. Argumentamos nuestro criterio y trabajamos con nuestras verdades relativas. Entonces, quienes llevamos adelante este proyecto y aquellos que inteligentemente unificaron todas las iniciativas que había dando vueltas no hicimos más que acompañar una política de éste, el Estado peronista. Me refiero a fijar el 82 por ciento móvil, que hoy más que una necesidad es un derecho.
Por eso, lamento que no esté la Comisión de Presupuesto y Hacienda, y espero que quienes la componen escudriñen al máximo las posibilidades futuras respecto de esta norma porque en esto también hay que ser serios, como dijo la diputada Fadel.
Hay que hacer las previsiones, pero primero tenemos que dar el 82 por ciento móvil a nuestros jubilados y a todos los trabajadores. Por eso, nosotros acompañamos este dictamen y vamos a seguir apoyando -reitero- políticas de Estado serias que tengan contenido social, sensibilidad y que respondan a las necesidades de la sociedad que nos eligió, a la cual representamos. (Aplausos.)
Ello, porque no se puede decir por un lado: "presentamos una de las últimas leyes del 82 por ciento móvil con vistas a un amplio sector laboral de la vida Argentina, que son los empleados de comercio."
Hoy en día, de los 5 millones de aportantes -un poco más o un poco menos-, entre 1 y 1,1 millón son empleados de comercio, con el agregado de que absolutamente la mayoría hemos aportado más de treinta años.
Cuando presentamos este proyecto, lo hicimos como una hipótesis o como una posibilidad, porque veíamos que en el anterior debate de la ley de jubilaciones hubo muchas posiciones -con RIPTE o no, con qué porcentajes y sobre qué-, hubo distintas ecuaciones y se llegó a una que todavía no entiendo.
Si hoy el salario mínimo vital está cerca de los 1.580 pesos, honestamente creo que al Estado no le va a implicar un mayor esfuerzo pagar 1.340 y chirolas, siempre y cuando mantengamos este tipo de recaudación que tiene que ver con políticas de Estado que está llevando a cabo este gobierno.
Nosotros asumimos y decimos que no somos la oposición por la oposición misma. Argumentamos nuestro criterio y trabajamos con nuestras verdades relativas. Entonces, quienes llevamos adelante este proyecto y aquellos que inteligentemente unificaron todas las iniciativas que había dando vueltas no hicimos más que acompañar una política de éste, el Estado peronista. Me refiero a fijar el 82 por ciento móvil, que hoy más que una necesidad es un derecho.
Por eso, lamento que no esté la Comisión de Presupuesto y Hacienda, y espero que quienes la componen escudriñen al máximo las posibilidades futuras respecto de esta norma porque en esto también hay que ser serios, como dijo la diputada Fadel.
Hay que hacer las previsiones, pero primero tenemos que dar el 82 por ciento móvil a nuestros jubilados y a todos los trabajadores. Por eso, nosotros acompañamos este dictamen y vamos a seguir apoyando -reitero- políticas de Estado serias que tengan contenido social, sensibilidad y que respondan a las necesidades de la sociedad que nos eligió, a la cual representamos. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra el señor diputado Triaca.
SR. TRIACA He venido aquí en calidad de invitado, pero como miembro de la Comisión de Presupuesto y Hacienda me hubiese encantado discutir las cuestiones presupuestarias que conciernen a este proyecto.
Creo que aquí tenemos algo en claro: estamos discutiendo sobre dar seguridad jurídica a uno de los sectores más importantes de la sociedad argentina.
Como habrá resuelto este Congreso en otra ocasión -bien lo señalaba el señor diputado Adrián Pérez anteriormente-, debemos fijar prioridades, y para mí éstas deben estar enfocadas en dos sectores muy importantes de la sociedad: los niños y jóvenes, y los mayores.
Si queremos enseñar a los niños un horizonte y que tengan en claro hacia dónde estamos yendo, debemos ser responsables y cuidar a nuestros mayores. Por eso me parece que la restitución de estos derechos se vincula claramente con el lugar donde tenemos que establecer las prioridades a las cuales recién hacía mención.
Creo que este dictamen contiene una normativa bastante prudente y permite una discusión sobre cómo vamos a reasignar las partidas presupuestarias, pero por supuesto que me hubiese gustado que ese debate se diera en una reunión plenaria conjunta.
Valoro el esfuerzo que ha realizado la presidencia de esta comisión para convocar al presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda y lamento que no podamos llevar adelante una reunión conjunta.
Más allá de eso, quiero dejar asentado no solamente en la comisión de Previsión y Seguridad Social sino también en la de Presupuesto y Hacienda que nuestro bloque acompaña este dictamen.
Creo que aquí tenemos algo en claro: estamos discutiendo sobre dar seguridad jurídica a uno de los sectores más importantes de la sociedad argentina.
Como habrá resuelto este Congreso en otra ocasión -bien lo señalaba el señor diputado Adrián Pérez anteriormente-, debemos fijar prioridades, y para mí éstas deben estar enfocadas en dos sectores muy importantes de la sociedad: los niños y jóvenes, y los mayores.
Si queremos enseñar a los niños un horizonte y que tengan en claro hacia dónde estamos yendo, debemos ser responsables y cuidar a nuestros mayores. Por eso me parece que la restitución de estos derechos se vincula claramente con el lugar donde tenemos que establecer las prioridades a las cuales recién hacía mención.
Creo que este dictamen contiene una normativa bastante prudente y permite una discusión sobre cómo vamos a reasignar las partidas presupuestarias, pero por supuesto que me hubiese gustado que ese debate se diera en una reunión plenaria conjunta.
Valoro el esfuerzo que ha realizado la presidencia de esta comisión para convocar al presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda y lamento que no podamos llevar adelante una reunión conjunta.
Más allá de eso, quiero dejar asentado no solamente en la comisión de Previsión y Seguridad Social sino también en la de Presupuesto y Hacienda que nuestro bloque acompaña este dictamen.
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra el señor diputado Tomas.
SR. TOMAS Seré muy breve, señor presidente.
Por discreción usted no ha mencionado que en conjunto con la señora diputada Arena hemos presentado hace más de tres meses un pedido a la ANSES de los datos necesarios para analizar seriamente este tema.
Además, hace una semana nos presentamos ante la Justicia con un recurso de amparo para que la ANSES se avenga a darnos los datos necesarios para trabajar.
Y este es un tema que no quiero dejar pasar. Estamos hartos de que ver diputados oficialistas esperando en los pasillos a que se caigan las reuniones de las comisiones para no dar el debate que hay que dar. (Aplausos.)
Asimismo, quiero felicitar al señor diputado Díaz Roig quien siempre tuvo la misma actitud y junto con unos pocos diputados más está presente en el día de hoy.
También estamos hartos de ver que el diputado Néstor Kirchner habla en escenarios y en actos partidarios diciendo que esto no se puede hacer, pero sin embargo no viene a discutir donde tiene que hacerlo que es en el Parlamento, en la Cámara de Diputados. (Aplausos.)
Quiero dejarlo expresado porque no es un tema menor. El diputado Néstor Kirchner está manifestando en actos que la plata no alcanza pero no viene a las reuniones de comisión ni tampoco al recinto para discutir en el lugar que corresponde.
Por último, quiero discrepar respetuosamente con el señor diputado Díaz Roig. Él habla de consenso y lo busca pero recuerden la experiencia de la asignación universal -que mencionaba el señor diputado Pérez- que nos explicaban que era imposible y luego salió la señora presidenta a dar ese regalo a todos los argentinos; y el tema del fondo del desendeudamiento argentino, que como saben fue presionado por la Cámara de Diputados por la discusión de la coparticipación del impuesto al cheque. Está claro que no quieren dar debate, no buscan el consenso, buscan dar el anuncio y decir: "Yo te doy", y nada más.
No nos sorprendamos si mañana o la semana próxima Bossio en el Salón Blanco de la Casa Rosada junto con la presidenta de la Nación anuncia un aumento para los jubilados, el ajuste por el caso Badaro y otros temas que estamos trabajando aquí. Seguramente va a pasar, preparémonos y disfrutemos un día tan especial como el de hoy. (Aplausos.)
Por discreción usted no ha mencionado que en conjunto con la señora diputada Arena hemos presentado hace más de tres meses un pedido a la ANSES de los datos necesarios para analizar seriamente este tema.
Además, hace una semana nos presentamos ante la Justicia con un recurso de amparo para que la ANSES se avenga a darnos los datos necesarios para trabajar.
Y este es un tema que no quiero dejar pasar. Estamos hartos de que ver diputados oficialistas esperando en los pasillos a que se caigan las reuniones de las comisiones para no dar el debate que hay que dar. (Aplausos.)
Asimismo, quiero felicitar al señor diputado Díaz Roig quien siempre tuvo la misma actitud y junto con unos pocos diputados más está presente en el día de hoy.
También estamos hartos de ver que el diputado Néstor Kirchner habla en escenarios y en actos partidarios diciendo que esto no se puede hacer, pero sin embargo no viene a discutir donde tiene que hacerlo que es en el Parlamento, en la Cámara de Diputados. (Aplausos.)
Quiero dejarlo expresado porque no es un tema menor. El diputado Néstor Kirchner está manifestando en actos que la plata no alcanza pero no viene a las reuniones de comisión ni tampoco al recinto para discutir en el lugar que corresponde.
Por último, quiero discrepar respetuosamente con el señor diputado Díaz Roig. Él habla de consenso y lo busca pero recuerden la experiencia de la asignación universal -que mencionaba el señor diputado Pérez- que nos explicaban que era imposible y luego salió la señora presidenta a dar ese regalo a todos los argentinos; y el tema del fondo del desendeudamiento argentino, que como saben fue presionado por la Cámara de Diputados por la discusión de la coparticipación del impuesto al cheque. Está claro que no quieren dar debate, no buscan el consenso, buscan dar el anuncio y decir: "Yo te doy", y nada más.
No nos sorprendamos si mañana o la semana próxima Bossio en el Salón Blanco de la Casa Rosada junto con la presidenta de la Nación anuncia un aumento para los jubilados, el ajuste por el caso Badaro y otros temas que estamos trabajando aquí. Seguramente va a pasar, preparémonos y disfrutemos un día tan especial como el de hoy. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra la señora diputada Gallardo.
El señor diputado Díaz Roig le solicita una interrupción, ¿se la concede?
El señor diputado Díaz Roig le solicita una interrupción, ¿se la concede?
SRA. GALLARDO Sí, señor presidente.
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra el señor diputado Díaz Roig.
SR. DÍAZ ROIG Solicité la interrupción nada más que por haber sido mencionado por el amigo Enrique Tomas.
Desde ya creo que la información de la ANSES es pública en la comisión bicameral. Además, en la página web figuran todos los datos y son de fácil acceso, de todos modos me ofrezco a transmitirlos.
Por otro lado, quiero solicitar que por secretaría se contabilice en este momento el total de presentes en la Comisión de Previsión y Seguridad Social porque considero fundamental seguir la vieja práctica tradicional. Es decir, que firme el dictamen la mitad más uno de los diputados que la conforman.
Aunque esto ya ha sido obviado quisiera que por Secretaría se constaten los presentes. Como sé que tienen número, imagino que llamarán a los señores diputados que se retiraron para que regresen a firmar el dictamen.
Digo esto para respetar el reglamento, no para impugnar el dictamen sino para que nos acostumbremos a volver a las buenas prácticas. Dejo planteado esto como una sugerencia.
Desde ya creo que la información de la ANSES es pública en la comisión bicameral. Además, en la página web figuran todos los datos y son de fácil acceso, de todos modos me ofrezco a transmitirlos.
Por otro lado, quiero solicitar que por secretaría se contabilice en este momento el total de presentes en la Comisión de Previsión y Seguridad Social porque considero fundamental seguir la vieja práctica tradicional. Es decir, que firme el dictamen la mitad más uno de los diputados que la conforman.
Aunque esto ya ha sido obviado quisiera que por Secretaría se constaten los presentes. Como sé que tienen número, imagino que llamarán a los señores diputados que se retiraron para que regresen a firmar el dictamen.
Digo esto para respetar el reglamento, no para impugnar el dictamen sino para que nos acostumbremos a volver a las buenas prácticas. Dejo planteado esto como una sugerencia.
SR. PRESIDENTE IBARRA De acuerdo. Antes de darle la palabra a la señora diputada aclaro que el reglamento establece que sólo podrán firmar el dictamen los diputados presentes.
Por lo tanto, como ya ha sido tomada la lista, vamos a constatar por Secretaría que los señores diputados que estuvieron presentes en la discusión sean los que consten en la firma del dictamen.
Tiene la palabra la señora diputada Gallardo.
Por lo tanto, como ya ha sido tomada la lista, vamos a constatar por Secretaría que los señores diputados que estuvieron presentes en la discusión sean los que consten en la firma del dictamen.
Tiene la palabra la señora diputada Gallardo.
SRA. GALLARDO Según tengo entendido, esta reunión de comisión es la primera real luego de celebrada la reunión de su constitución, que fue allá por el 9 de marzo.
A mí me sorprende cuando escucho que estos temas ya se han debatido y trabajado. ¿De qué trabajo me hablan si nunca hemos sido convocados para debatir estos temas y ni siquiera han sido tratados en asesores? Por eso me sorprende que ya tengamos un dictamen de un proyecto de tal envergadura como es el sistema previsional de nuestros jubilados.
Por supuesto que este tema es muy importante, nos compete a todos y todos queremos trabajar y opinar. Pero también queremos escuchar la opinión de los equipos técnicos, de la gente que nos tiene que decir de dónde van a salir los fondos, cómo se va a aplicar este sistema y si este proyecto que va a habilitar este sistema previsional va a ser sustentable en el tiempo.
Por otra parte también me llama la atención y me gustaría que alguien me explique por qué en ningún país del mundo se aplica el 82 por ciento móvil. ¿No será que las cuentas no cierran o que hay algún impedimento técnico para que esto se haga? Quisiera escuchar a los que saben, que se invite a la gente de la ANSES, a un equipo técnico económico, al Ejecutivo, para que podamos hacer un debate en el que todos podamos enterarnos, preguntar, quitarnos las dudas, y donde los propios jubilados -de todo el país- también puedan participar.
Simplemente quería dejar sentada mi preocupación respecto de que este tema tan importante y tan caro a los argentinos sea tratado como corresponde. Es un derecho de nuestros mayores y queremos que sea tratado con responsabilidad, que todos los actores estén presentes, que puedan opinar y que podamos discutirlo con el consenso debido.
A mí me sorprende cuando escucho que estos temas ya se han debatido y trabajado. ¿De qué trabajo me hablan si nunca hemos sido convocados para debatir estos temas y ni siquiera han sido tratados en asesores? Por eso me sorprende que ya tengamos un dictamen de un proyecto de tal envergadura como es el sistema previsional de nuestros jubilados.
Por supuesto que este tema es muy importante, nos compete a todos y todos queremos trabajar y opinar. Pero también queremos escuchar la opinión de los equipos técnicos, de la gente que nos tiene que decir de dónde van a salir los fondos, cómo se va a aplicar este sistema y si este proyecto que va a habilitar este sistema previsional va a ser sustentable en el tiempo.
Por otra parte también me llama la atención y me gustaría que alguien me explique por qué en ningún país del mundo se aplica el 82 por ciento móvil. ¿No será que las cuentas no cierran o que hay algún impedimento técnico para que esto se haga? Quisiera escuchar a los que saben, que se invite a la gente de la ANSES, a un equipo técnico económico, al Ejecutivo, para que podamos hacer un debate en el que todos podamos enterarnos, preguntar, quitarnos las dudas, y donde los propios jubilados -de todo el país- también puedan participar.
Simplemente quería dejar sentada mi preocupación respecto de que este tema tan importante y tan caro a los argentinos sea tratado como corresponde. Es un derecho de nuestros mayores y queremos que sea tratado con responsabilidad, que todos los actores estén presentes, que puedan opinar y que podamos discutirlo con el consenso debido.
SR. PRESIDENTE IBARRA Comparto el espíritu de lo manifestado y vuelvo a aclarar que ese era el sentido de la reunión. El reglamento establece que los temas propios de esa comisión se pueden debatir en una reunión conjunta con ésta comisión. Por lo tanto, comparto el espíritu que usted ha planteado y seguramente se dará ese debate y toda esa información en la Comisión de Presupuesto y Hacienda cuando su presidente quiera convocarla.
SRA. GALLARDO No hablaba sólo de la Comisión de Presupuesto y Hacienda sino también de los organismos del Ejecutivo y todos los actores necesarios para que elaboremos la mejor ley.
SR. PRESIDENTE IBARRA Coincido con usted que ese puede ser el espíritu de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, sin duda.
Tiene la palabra el señor diputado Macaluse.
Tiene la palabra el señor diputado Macaluse.
SR. MACALUSE Yo fui uno de los que votó por la desaparición de las AFJP para que el dinero de los trabajadores activos volviera al Estado y fuera éste quien lo manejara y no los bancos.
Quiero reivindicar ese voto porque muchas veces, por la confusión que se generó en ese debate, había gente que nos paraba en la calle y nos preguntaban por qué le estábamos dando esta caja al gobierno. Yo quiero decir que si hoy estamos discutiendo a dónde va el dinero y qué se hace con el dinero de la ANSES es porque ganamos esa votación, se terminó aprobando y se terminó aplicando. Ese dinero no está hoy en los bancos, está en la ANSES y está en el Estado.
En esa discusión y debate estuvimos codo a codo con los compañeros, como con el señor diputado Díaz Roig, que creo que en algunos casos fue injustamente abucheado porque es una persona que siempre ha defendido este sistema. Por eso creo que algunos gritos han sido injustos con su trayectoria.
Pero no estoy de acuerdo con lo que él está proponiendo.
Nosotros votamos que el dinero de los trabajadores activos fuera completo al Estado y no que fuera a la alcantarilla de los bancos, porque queríamos que los jubilados estuvieran mejor; porque estábamos convencidos que de esa manera iba a poder aumentarse la asignación que tienen los jubilados, que íbamos a poder llegar a tener esta discusión en este momento. Por eso reivindico el voto aquel, aunque fuéramos injustamente castigados por muchos de los que hoy están compartiendo con nosotros el voto para poder dar este dinero a los jubilados.
Decían que deberíamos escuchar a la gente de la ANSES. Comparto la inquietud, y nos hubiera gustado escuchar a la gente de la ANSES cuando se compraban bonos de la deuda externa con la plata de los jubilados. Hubiéramos querido que hubieran venido acá a dar el debate y preguntar si era correcto hacerlo.
El Congreso tiene responsabilidad sobre este tema, y nosotros hemos votado coherentemente con nuestra historia. Votamos para que el dinero de los trabajadores lo administre el Estado, y ahora estamos votando para que el Estado administre ese dinero en forma transparente y lo restituya sus verdaderos dueños, que son los trabajadores que se han jubilado y es con quienes el país tiene una enorme deuda. (Aplausos.)
Donde hay una necesidad, hay un derecho, y los jubilados, los viejos están pasando necesidades. Y si una cosa aprendimos de lo bueno del peronismo es que cuando hay una necesidad, hay un derecho que satisfacer y hay voluntad política, la plata aparece. Entonces, si nosotros queremos votar acá que se establezca que los jubilados deben tener actualizado su mínimo, que deben tener un 82 por ciento, estamos votando para que esa plata aparezca.
Hay una situación singular porque cuando sostenemos estas cosas, algunos -para aportar pícaramente a la confusión- dicen: "Ustedes con este voto le hacen el juego a la derecha". Ahora bien, nosotros estamos planteando que los jubilados tienen que ganar mejor y pareciera que eso es hacerle el juego a la derecha, pero nos dicen: "No hay plata. Dígannos de dónde la vamos a sacar", que claramente es un argumento que la derecha siempre ha tenido en este país cuando no había voluntad de cumplir con la satisfacción de un derecho.
Entonces queremos poner esta discusión en los términos que corresponde. Corresponde que los jubilados ganen más. Está achatada la pirámide. Más del 85 por ciento de las jubilaciones son las mínimas, y se está yendo -como lo decían Claudio Lozano o Graciela Iturraspe- a una jubilación mínima que es la jubilación del pobre, y eso estimula a que vayan por la crema del sistema y reaparezcan nuevamente AFJP que propongan jubilaciones individuales con la gente que gana más, y los van a tentar si estas siguen siendo las jubilaciones de hoy en día.
Para preservar el sistema estatal es imprescindible que se discuta toda la cuestión. Hoy estamos hablando del 82 por ciento, estamos hablando del mínimo, pero hay que hablar del conjunto de la situación que están padeciendo los jubilados. Porque esto que intentamos resolver hoy -y en lo que podremos avanzar si tenemos mayoría- no es lo único que hay que discutir. Tenemos que discutir el conjunto del sistema para que sea un sistema de distribución, un sistema racional, un sistema justo.
Hoy, 29 de junio, cumpliría años mi viejo. Mi viejo era un laburante; trabajó desde los catorce años, se jubiló y le liquidaron mal la jubilación. A fines de los años 90 comenzó un juicio al Estado. El juicio salió favorable el año pasado. Lamentablemente, mi viejo hacía seis años que había muerto. Y esto que estoy diciendo hoy de mi viejo, le pasa a todas las familias.
Pregunten y verán que en todas las familias hay gente a la que le pasa eso. ¿Cuánto tiempo tienen que esperar? (Aplausos.)
Además, la respuesta cínica que no se dice no es: "Vamos a discutir un tiempo para ver cómo resolvemos esto". La respuesta que no se dice es: "Esperemos a que se mueran, démosles tiempo porque no lo van a cobrar nunca." (Aplausos.) Por eso, es imprescindible que avancemos en esto, más allá de que tengamos diferencias.
Sé que en el fondo muchos diputados del Frente para la Victoria -ya me encontraré con algunos de ellos en los pasillos- que quizás están del otro lado del mostrador estarán dándome la razón en esta discusión.
Sabemos que lo que estamos votando acá es justo y es necesario. También sabemos que al resolver esta cuestión tenemos un gran compromiso, porque se apela a nuestra responsabilidad para que digamos de dónde va a salir la plata.
Graciela Iturraspe, junto con otros compañeros del bloque socialista y del GEN van a firmar un dictamen donde claramente explicitan en términos técnicos de dónde va a salir la plata para que esto se pueda pagar y cumplir.
No estamos haciendo demagogia, no estamos votando una cosa que después no sabemos cómo se va a cumplir ni estamos resolviendo una cuestión electoral usando a los jubilados. Estamos diciendo que acá hay derechos conculcados desde hace muchos años, y tal vez en este tema es verdad que el actual gobierno no es de los más responsables; hubo otros gobiernos que hicieron tropelías. Pero eso no obsta para que hoy todos juntos podamos resolver la situación de quienes no pueden esperar más. (Aplausos.)
Quiero reivindicar ese voto porque muchas veces, por la confusión que se generó en ese debate, había gente que nos paraba en la calle y nos preguntaban por qué le estábamos dando esta caja al gobierno. Yo quiero decir que si hoy estamos discutiendo a dónde va el dinero y qué se hace con el dinero de la ANSES es porque ganamos esa votación, se terminó aprobando y se terminó aplicando. Ese dinero no está hoy en los bancos, está en la ANSES y está en el Estado.
En esa discusión y debate estuvimos codo a codo con los compañeros, como con el señor diputado Díaz Roig, que creo que en algunos casos fue injustamente abucheado porque es una persona que siempre ha defendido este sistema. Por eso creo que algunos gritos han sido injustos con su trayectoria.
Pero no estoy de acuerdo con lo que él está proponiendo.
Nosotros votamos que el dinero de los trabajadores activos fuera completo al Estado y no que fuera a la alcantarilla de los bancos, porque queríamos que los jubilados estuvieran mejor; porque estábamos convencidos que de esa manera iba a poder aumentarse la asignación que tienen los jubilados, que íbamos a poder llegar a tener esta discusión en este momento. Por eso reivindico el voto aquel, aunque fuéramos injustamente castigados por muchos de los que hoy están compartiendo con nosotros el voto para poder dar este dinero a los jubilados.
Decían que deberíamos escuchar a la gente de la ANSES. Comparto la inquietud, y nos hubiera gustado escuchar a la gente de la ANSES cuando se compraban bonos de la deuda externa con la plata de los jubilados. Hubiéramos querido que hubieran venido acá a dar el debate y preguntar si era correcto hacerlo.
El Congreso tiene responsabilidad sobre este tema, y nosotros hemos votado coherentemente con nuestra historia. Votamos para que el dinero de los trabajadores lo administre el Estado, y ahora estamos votando para que el Estado administre ese dinero en forma transparente y lo restituya sus verdaderos dueños, que son los trabajadores que se han jubilado y es con quienes el país tiene una enorme deuda. (Aplausos.)
Donde hay una necesidad, hay un derecho, y los jubilados, los viejos están pasando necesidades. Y si una cosa aprendimos de lo bueno del peronismo es que cuando hay una necesidad, hay un derecho que satisfacer y hay voluntad política, la plata aparece. Entonces, si nosotros queremos votar acá que se establezca que los jubilados deben tener actualizado su mínimo, que deben tener un 82 por ciento, estamos votando para que esa plata aparezca.
Hay una situación singular porque cuando sostenemos estas cosas, algunos -para aportar pícaramente a la confusión- dicen: "Ustedes con este voto le hacen el juego a la derecha". Ahora bien, nosotros estamos planteando que los jubilados tienen que ganar mejor y pareciera que eso es hacerle el juego a la derecha, pero nos dicen: "No hay plata. Dígannos de dónde la vamos a sacar", que claramente es un argumento que la derecha siempre ha tenido en este país cuando no había voluntad de cumplir con la satisfacción de un derecho.
Entonces queremos poner esta discusión en los términos que corresponde. Corresponde que los jubilados ganen más. Está achatada la pirámide. Más del 85 por ciento de las jubilaciones son las mínimas, y se está yendo -como lo decían Claudio Lozano o Graciela Iturraspe- a una jubilación mínima que es la jubilación del pobre, y eso estimula a que vayan por la crema del sistema y reaparezcan nuevamente AFJP que propongan jubilaciones individuales con la gente que gana más, y los van a tentar si estas siguen siendo las jubilaciones de hoy en día.
Para preservar el sistema estatal es imprescindible que se discuta toda la cuestión. Hoy estamos hablando del 82 por ciento, estamos hablando del mínimo, pero hay que hablar del conjunto de la situación que están padeciendo los jubilados. Porque esto que intentamos resolver hoy -y en lo que podremos avanzar si tenemos mayoría- no es lo único que hay que discutir. Tenemos que discutir el conjunto del sistema para que sea un sistema de distribución, un sistema racional, un sistema justo.
Hoy, 29 de junio, cumpliría años mi viejo. Mi viejo era un laburante; trabajó desde los catorce años, se jubiló y le liquidaron mal la jubilación. A fines de los años 90 comenzó un juicio al Estado. El juicio salió favorable el año pasado. Lamentablemente, mi viejo hacía seis años que había muerto. Y esto que estoy diciendo hoy de mi viejo, le pasa a todas las familias.
Pregunten y verán que en todas las familias hay gente a la que le pasa eso. ¿Cuánto tiempo tienen que esperar? (Aplausos.)
Además, la respuesta cínica que no se dice no es: "Vamos a discutir un tiempo para ver cómo resolvemos esto". La respuesta que no se dice es: "Esperemos a que se mueran, démosles tiempo porque no lo van a cobrar nunca." (Aplausos.) Por eso, es imprescindible que avancemos en esto, más allá de que tengamos diferencias.
Sé que en el fondo muchos diputados del Frente para la Victoria -ya me encontraré con algunos de ellos en los pasillos- que quizás están del otro lado del mostrador estarán dándome la razón en esta discusión.
Sabemos que lo que estamos votando acá es justo y es necesario. También sabemos que al resolver esta cuestión tenemos un gran compromiso, porque se apela a nuestra responsabilidad para que digamos de dónde va a salir la plata.
Graciela Iturraspe, junto con otros compañeros del bloque socialista y del GEN van a firmar un dictamen donde claramente explicitan en términos técnicos de dónde va a salir la plata para que esto se pueda pagar y cumplir.
No estamos haciendo demagogia, no estamos votando una cosa que después no sabemos cómo se va a cumplir ni estamos resolviendo una cuestión electoral usando a los jubilados. Estamos diciendo que acá hay derechos conculcados desde hace muchos años, y tal vez en este tema es verdad que el actual gobierno no es de los más responsables; hubo otros gobiernos que hicieron tropelías. Pero eso no obsta para que hoy todos juntos podamos resolver la situación de quienes no pueden esperar más. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra el señor diputado Serebrisnky.
SR. SEREBRINSKY Seguramente nos ha tocado a todos trabajar técnicamente -aparentemente hasta el momento hay dos dictámenes-, pero quienes hemos impuesto un dictamen, lo hemos trabajado y tratado de consensuar, queremos decir a nuestros colegas que hace mucho tiempo que venimos dedicándonos a esto y que no se trata de una improvisación sino que es el resultado del sentido común.
Creemos que estamos respetando un mandato que se nos dio hace poco luego de un resultado electoral, en virtud del cual están representados numerosos partidos políticos y muchísimos proyectos individuales. Acá hay siete u ocho iniciativas que se han podido sintetizar con un espíritu amplio y de renuncia por parte de diputados que tenían derecho a acreditar su intelectualidad. Me parece que este es un esfuerzo fundamental.
Esto marca un camino, y es que tenemos que dejar de lado las pequeñas discusiones, banderías y especulaciones políticas y ponernos a trabajar en los temas importantes. Entendemos que no sólo en quienes estamos en este momento en la oposición sino también en muchos hombres del oficialismo está el espíritu de resolver la deuda interna y social que tenemos con los jubilados.
En definitiva, esta es una discusión política. Podemos debatir técnicamente muchísimas cosas, pero este es un ámbito político y aquí debemos dar esa discusión de fondo.
Como decía el señor diputado Macaluse, hay que reconocer las cosas que se hicieron bien. Cómo no reconocer que estuvimos de acuerdo en el caso particular del traspaso de los fondos de las AFJP al Estado, que son viejas banderas que reivindicamos. Pero la discusión de fondo es cómo se distribuye la riqueza.
Me pregunto cómo la Argentina sigue creciendo como lo hace, y sin embargo los sectores de los jubilados y de los asalariados cada vez participan menos de ese crecimiento.
Aquí me detengo y creo que voy a corregir a un amigo, porque la judicialización no se produjo durante los gobiernos radicales. El dictamen del caso Sánchez data de los años 1991 a 1994, precisamente durante el gobierno del doctor Menem, que no era radical. El caso Badaro se produjo esencialmente en 2001, y allí nos hacemos cargo de los desastres que hizo la Alianza y venimos a poner la cara, como lo hicimos siempre. Pero aquello se produjo entre 2001 y 2006, donde ya el país había empezado a crecer fuertemente, y sin embargo esto no se distribuyó como correspondía.
Quiero dar esta discusión porque es falaz manifestar estas cuestiones en forma parcial, del mismo modo que lo es decir que no está el dinero. Se trata de una cuestión de prioridades.
La Argentina hoy es superavitaria y todo indica que va a seguir creciendo igual o más que en los últimos años. La necesidad de marcar las prioridades es lo que nos diferencia del gobierno, queremos saber entre quién se distribuye la riqueza en la Argentina y quiénes son los privilegiados de esa riqueza.
Así como combatimos el modelo neoliberal de la década del 90 que adoraba al mercado, hoy tendremos que combatir a los mismos que están disfrazados de progresistas pero ser formaron en el CEMA, nos dan discursos progresistas, pero en definitiva priorizan la caja -que no es una nueva forma del neoliberalismo para manejar los recursos, tenerlos acumulados sobre el interés general y del pueblo argentino.
En definitiva, creo que esta es la discusión política que tenemos que dar y plantear a la sociedad.
Nadie es irresponsable aquí. Reconozco tanto en el oficialismo como en la oposición militantes de la seguridad social con trayectoria y también reconozco el trabajo realizado en estos últimos meses para lograr este consenso, más allá que tenemos diferentes orígenes y proyectos individuales distintos. Nadie está improvisando, nadie es irresponsable, nadie quiere desfinanciar al Estado. Sostenemos que en la Argentina que viene lo que tenemos que discutir es cómo se redistribuye la riqueza. (Aplausos.)
Creemos que estamos respetando un mandato que se nos dio hace poco luego de un resultado electoral, en virtud del cual están representados numerosos partidos políticos y muchísimos proyectos individuales. Acá hay siete u ocho iniciativas que se han podido sintetizar con un espíritu amplio y de renuncia por parte de diputados que tenían derecho a acreditar su intelectualidad. Me parece que este es un esfuerzo fundamental.
Esto marca un camino, y es que tenemos que dejar de lado las pequeñas discusiones, banderías y especulaciones políticas y ponernos a trabajar en los temas importantes. Entendemos que no sólo en quienes estamos en este momento en la oposición sino también en muchos hombres del oficialismo está el espíritu de resolver la deuda interna y social que tenemos con los jubilados.
En definitiva, esta es una discusión política. Podemos debatir técnicamente muchísimas cosas, pero este es un ámbito político y aquí debemos dar esa discusión de fondo.
Como decía el señor diputado Macaluse, hay que reconocer las cosas que se hicieron bien. Cómo no reconocer que estuvimos de acuerdo en el caso particular del traspaso de los fondos de las AFJP al Estado, que son viejas banderas que reivindicamos. Pero la discusión de fondo es cómo se distribuye la riqueza.
Me pregunto cómo la Argentina sigue creciendo como lo hace, y sin embargo los sectores de los jubilados y de los asalariados cada vez participan menos de ese crecimiento.
Aquí me detengo y creo que voy a corregir a un amigo, porque la judicialización no se produjo durante los gobiernos radicales. El dictamen del caso Sánchez data de los años 1991 a 1994, precisamente durante el gobierno del doctor Menem, que no era radical. El caso Badaro se produjo esencialmente en 2001, y allí nos hacemos cargo de los desastres que hizo la Alianza y venimos a poner la cara, como lo hicimos siempre. Pero aquello se produjo entre 2001 y 2006, donde ya el país había empezado a crecer fuertemente, y sin embargo esto no se distribuyó como correspondía.
Quiero dar esta discusión porque es falaz manifestar estas cuestiones en forma parcial, del mismo modo que lo es decir que no está el dinero. Se trata de una cuestión de prioridades.
La Argentina hoy es superavitaria y todo indica que va a seguir creciendo igual o más que en los últimos años. La necesidad de marcar las prioridades es lo que nos diferencia del gobierno, queremos saber entre quién se distribuye la riqueza en la Argentina y quiénes son los privilegiados de esa riqueza.
Así como combatimos el modelo neoliberal de la década del 90 que adoraba al mercado, hoy tendremos que combatir a los mismos que están disfrazados de progresistas pero ser formaron en el CEMA, nos dan discursos progresistas, pero en definitiva priorizan la caja -que no es una nueva forma del neoliberalismo para manejar los recursos, tenerlos acumulados sobre el interés general y del pueblo argentino.
En definitiva, creo que esta es la discusión política que tenemos que dar y plantear a la sociedad.
Nadie es irresponsable aquí. Reconozco tanto en el oficialismo como en la oposición militantes de la seguridad social con trayectoria y también reconozco el trabajo realizado en estos últimos meses para lograr este consenso, más allá que tenemos diferentes orígenes y proyectos individuales distintos. Nadie está improvisando, nadie es irresponsable, nadie quiere desfinanciar al Estado. Sostenemos que en la Argentina que viene lo que tenemos que discutir es cómo se redistribuye la riqueza. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra el señor diputado Díaz Roig.
SR. DÍAZ ROIG Nada más porque fui mencionado y quiero hacer una corrección.
En realidad los fallos de la década del 90 a los que hace referencia el diputado Serebrinsky se originan por el decreto 648/87 del doctor Alfonsín, que bajó el 82 por ciento a una franja que va del 9 al 40 por ciento de los haberes. Esto fue lo que originó los juicios, más allá de que escuchemos tenaz y persistentemente por radio y televisión que se debe a la política previsional llevada adelante por el doctor Menem quien también me merece respeto. Creo que todos tenemos una ideología y no debemos descalificarnos.
De todos modos, lo que acaba de citar el señor diputado Serebrinsky se origina en un decreto del doctor Alfonsín del año 87, de allí nace el juicio que él citaba.
En realidad los fallos de la década del 90 a los que hace referencia el diputado Serebrinsky se originan por el decreto 648/87 del doctor Alfonsín, que bajó el 82 por ciento a una franja que va del 9 al 40 por ciento de los haberes. Esto fue lo que originó los juicios, más allá de que escuchemos tenaz y persistentemente por radio y televisión que se debe a la política previsional llevada adelante por el doctor Menem quien también me merece respeto. Creo que todos tenemos una ideología y no debemos descalificarnos.
De todos modos, lo que acaba de citar el señor diputado Serebrinsky se origina en un decreto del doctor Alfonsín del año 87, de allí nace el juicio que él citaba.
SR. MORÁN Pido la palabra.
SR. PRESIDENTE IBARRA Tiene la palabra el señor diputado Morán.
SR. MORÁN Señor presidente: solicito se informe por Presidencia -para que conste en la versión taquigráfica- que al cierre del acta hay sólo dos dictámenes.
SR. PRESIDENTE IBARRA Exactamente. En Secretaría hay sólo dos dictámenes que serán comunicados a la Comisión de Presupuesto y Hacienda en los términos del artículo 102 del reglamento de la Honorable Cámara de Diputados. (Aplausos.)
Como no hay más asuntos que tratar, damos por finalizada la reunión.
Como no hay más asuntos que tratar, damos por finalizada la reunión.
- Es la hora 19 y 23.