La Honorable Cámara de Diputados de la Nación vería con agrado que el Poder Ejecutivo Nacional disponga que el emblema de los pueblos originarios denominado “Wiphala” sea izado en los actos oficiales y educativos en mástiles separados de la Bandera Nacional en todas las escuelas públicas de la Nación.

Señor presidente:

La Wiphala es una bandera cuadrangular que consta de cuarenta y nueve (49) cuadrados repartidos en siete (7) columnas por siete (7) filas y contiene siete (7) colores (verde, azul, violeta, rojo, naranja, amarillo y blanco), con la diagonal central de color blanco de forma descendente de izquierda a derecha.

El concepto de bandera como estandarte, no formaba parte de la cosmovisión de los pueblos originarios, sin embargo hoy en día la Wiphala se ha convertido por uso y costumbre en el emblema y símbolo amerindio más reconocido por toda la sociedad, tanto es así que tiene presencia en todas las manifestaciones sociales y culturales de las identidades diversas de los pueblos originarios.

El presente Proyecto de Declaración de esta Honorable Cámara tiene su origen e inspiración en el proyecto “WIPHALA”, desarrollado por estudiantes de 4° año secundario de la Escuela “Cacique Martín Iquín” de Quilmes, provincia de Tucumán, que fuera ganador de la “Feria de Innovación Educativa: Arte, Ciencia, Tecnología y Cultura” el 28 de junio de 2017. En este proyecto estudiantil, que se adjunta, se expresa el valor y el significado de la Wiphala como expresión de unidad e igualdad, de filosofía andina y como calendario cósmico, así como se interpretan los significados de sus colores y los distintas clases de emblemas andinos.

Recomendar el izado de la Wiphala a la par de la Bandera Nacional en las escuelas públicas de la Nación es valorar un símbolo que se ha desarrollado como un medio para resumir el espíritu de los pueblos originarios y la revaloración de su existencia, sus idiomas, culturas y cosmovisiones. Esto es fundamental para enriquecer nuestra sociedad abogando para fortalecer el diálogo y el respeto a la diversidad cultural actual y la de las futuras generaciones.

No se está reconociendo una acción de identificación por parte de los pueblos originarios, quienes poseen la libertad de darse o no darse una bandera que los represente; sino que el reconocimiento de la Wiphala implica una interpelación positiva de esos mismos pueblos originarios por parte del resto de la sociedad.

Buscamos fomentar de esta manera el fortalecimiento del respeto a la identidad garantizado por la Constitución Nacional (art.75) a los pueblos indígenas argentinos.

Como antecedente tenemos la provincia de Tucumán, cuya Legislatura el 18/05/2017, modificando el art. 7° de la ley 8291, ha declarado a la Wiphala como una de las tres banderas de ceremonia de la provincia, junto a la Bandera Nacional, la Bandera Nacional de la Libertad Civil y la Bandera Provincial (se adjunta).

Izar la Wiphala a la par de la Bandera Nacional no es un reconocimiento que se hace a una bandera exclusiva para la Argentina, sino a una bandera indigenista o indígena como emblema de los pueblos originarios de América. Es el reconocimiento de dimensión cultural como parte constitutiva de nuestro ser nacional argentino, que fue conformado por innumerables orígenes étnicos, lingüísticos y culturales.

Por los motivos expuestos, les pido a mis colegas me acompañen en el tratamiento y aprobación de la presente iniciativa.