POBLACION Y DESARROLLO HUMANO
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PROYECTO DE LEY
Expediente: 5487-D-2006
Sumario: INCORPORACION DE LA MEDICINA ABORIGEN AL SISTEMA OFICIAL DE SALUD.
Fecha: 19/09/2006
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 135
Art. 1- El Ministerio de Salud de la
Nación, desarrollara planes sanitarios adaptados a las diversas comunidades de
nuestro país, considerando el derecho de todo ciudadano argentino o
perteneciente a un pueblo originario a recibir su propia medicina si lo desea en
forma conjunta con la medicina convencional.
Art. 2- El Ministerio de Salud de la
Nación, incorporara la medicina aborigen al sistema oficial de salud, relacionando
la medicina convencional con los conocimientos autóctonos.
Art. 3- La presente Ley, será
reglamentada a los 90 días de su promulgación.
Art. 4- Comuníquese al Poder
Ejecutivo Nacional
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
Grandes regiones de nuestro país,
han sido habitadas desde antiguo por una diversidad de pueblos aborigen que han
adaptado sus modos de vida a las características ecológicas de la zona. La
irrupción del hombre occidental con sistemas económicos y políticos ajenos a sus
pautas culturales, provocó alteraciones de todo tipo.
La supervivencia como pueblos con
identidad y cultura diferentes fueron rechazadas por la sociedad, con resultados de
rechazo a tomar en consideración modos de ser y de obrar distintos a los propios.
Desde hace unos años, se fueron desarrollando acciones en el campo de la salud,
con el apoyo de técnicos, promotores o misioneros de distintos credos.
Después de un exhaustivo sistema de
reflexiones y propuestas por parte de las diversas comunidades aborígenes de
nuestro país, que abarcaron diversos temas de interés, concluyeron con similares
inquietudes referentes al tema salud.
En este respecto, manifestaron que
los médicos aborígenes, aceptados por las comunidades que curan y sanan,
trabajen en conjunto con los médicos blancos, como asimismo que las parteras
aborígenes reconocidas, tengan resguardo legal y reconocimiento salarial.
Las comunidades aborígenes poseen
idiosincrasia propia, por lo que necesitan que el sistema médico actual sea un
sistema participativo con capacitación y actualización para ejercer la propia
medicina tradicional, no solo en las comunidades sino en los centros de salud y
hospitales.
Desde tiempos inmemoriales la
profesión del médico propio de las comunidades aborígenes, se las concibe como
un llamado que lleva a poner en práctica las dotes naturales, desarrolladas
instintivamente y asistidas por una gran fuerza espiritual. Estos miembros del
pueblo son los custodios de las tradiciones, el saber de estos médicos no es
adquirido por estudios intelectuales, parte del desarrollo de dotes personales, de la
observación y la paciencia.
Los médicos reconocidos por las
comunidades son requeridos tanto en trances difíciles de dolencias y enfermedades
del cuerpo, como así también en problemas de comportamiento o de relación entre
personas y comunidad, los pacientes son atendidos con otros elementos, como
medicina natural como asimismo concejos generales de comportamiento,
conocidos por tradiciones de sus antepasados.
Existen experiencias en los hospitales
zonales de la provincia del Chaco, donde hombres y mujeres de distintas etnias
acudían al hospital confiando en que la medicina blanca les iba a proporcionar la
curación y alivio, pero también querían recibir la medicina del médico de su propia
comunidad, quedando expresado la valoración de la partera indígena y del médico
propio.
La medicina natural parte de una
cosmovisión que atribuye la enfermedad a algún desbalance en la íntima relación
del hombre con la naturaleza, que se procura superar con hierbas y prácticas, es
decir la curación no con medicinas elaboradas en laboratorios, sino un cambio de
comportamiento y actitud por parte del paciente.
El médico aborigen aprendió estas
técnicas en el traslado oral de la sabiduría de sus antepasados, pero su práctica se
ve obnubilada por los recursos de la medicina actual, las personas buscan los
paliativos en las farmacias, olvidando las viejas tradiciones.
Con el nombre de medicina popular,
tradicional o folklórica, se agrupan prácticas complementarias o alternativas al
sistema oficial o científico, que responden al mecanismo de creencias propias de
un grupo humano particular, con fuertes bases en un enfoque cultural.
Existe un profundo interés en la OMS
(Organización Mundial de la Salud) por un enfoque integral de la salud, el derecho
a la autodeterminación, el respeto y la revitalización de las culturas indígenas.
Hace mas de 10 años que esta organización ha aconsejado a los gobiernos apoyar
el desarrollo de los modelos alternativos.
Actualmente, no son pocos los
profesionales que están comenzando a utilizar formas mixtas de diagnostico y
curación, tomando lo más útil de cada técnica y no considerando solamente lo
estudiado en una Universidad, o lo aprendido por tradición oral, lo importante es
curar.
Lo ideal es combinar lo nuevo con lo
viejo, obteniendo así un resultado más satisfactorio, hoy existe una tecnología
demasiado importante como para ser descartada y un ancestral conocimiento que
no debe perderse en los divagues del tiempo.
Por otra parte, la Argentina ha
firmado su adhesión al Convenio 169 de la OIT sobre Pueblos Indígenas, que en su
artículo 25, expresa: "Los servicios de salud deberán tener en cuenta las prácticas
curativas y medicamentos tradicionales de los pueblos indígenas.
Por todo lo brevemente acá expuesto,
solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto de Ley.
| Firmante | Distrito | Bloque |
|---|---|---|
| SARTORI, DIEGO HORACIO | MISIONES | FRENTE PARA LA VICTORIA - PJ |
Giro a comisiones en Diputados
| Comisión |
|---|
| ACCION SOCIAL Y SALUD PUBLICA (Primera Competencia) |
| POBLACION Y DESARROLLO HUMANO |