PROGRAMA. DIFUSIÓN PARA EL BIENESTAR FÍSICO, PSÍQUICO Y SOCIAL DE LAS PERSONAS ADULTAS MAYORES. ENVEJECIMIENTO ACTIVO.

Artículo 1°: Entiéndase envejecimiento activo aquel que tiende al bienestar físico, psíquico y social de las personas adultas mayores.

Artículo 2°: El objeto de éste Programa es propender a una óptima calidad de vida en edades avanzadas, promover las actividades físicas y culturales dirigidas a las personas adultas mayores mediante la organización de eventos a tales fines, como asimismo a través de la realización de campañas nacionales de información, educación y concientización.

Artículo 3°: La difusión de las campañas nacionales de información, educación y concientización a favor de la vejez activa será implementada con la participación de medios gráficos, radiofónicos, audiovisuales y digitales de todo el país en lengua castellana, sistema braille y lenguaje de señas, según criterio de la Autoridad de Aplicación.

Artículo 4°: La Autoridad de Aplicación propiciará medidas tendientes a lograr la incorporación del sector privado a los programas que se elaboren.

Artículo 5°: Invítase a las Provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a adherir a la presente ley.

Artículo 6°: Comuníquese al Poder Ejecutivo.

Señor presidente:

La calidad de vida en la vejez es un asunto trascendental que afecta no solo a las personas mayores y a sus familias, sino también al conjunto de la sociedad y al Estado mismo.

La OMS define en envejecimiento activo como el proceso de optimización de las oportunidades de salud, participación y seguridad con el fin de mejorar la calidad de vida a medida que las personas envejecen. El envejecimiento activo se aplica tanto a los individuos como a los grupos de población.

De ese modo, con la presente iniciativa se promueve entre los adultos mayores, distintos eventos, actividades y talleres orientados a una participación activa del sector de la tercera edad en lo social, cultural y comunitario, y asimismo la realización de campañas nacionales a tales fines.

El envejecimiento es uno de los retos demográficos más importantes a los que se enfrentarán los países de la región en el siglo XXI. Ello así, la salud psicofísica de los adultos mayores no solo reviste vital importancia para los mismos y sus grupos familiares, sino para toda la sociedad, lo que exige un papel activo del Estado.

Se estima que la proporción de personas de edad en el mundo seguirá aumentando durante las próximas décadas.

Tradicionalmente la vejez se asociaba con enfermedades, dependencia y falta de productividad. Sin embargo, en la actualidad, la realidad no coincide con esta opinión. Con la edad, la mayoría de las personas se adaptan al cambio y se convierten en recursos potenciales para la comunidad. Contribuyen a través de actividades tanto remuneradas como voluntarias.

Hacer ejercicio físico, actividades sociales y recreativas de forma sistemática, puede mejorar significativamente la salud y el bienestar de las personas. Los beneficios múltiples e inmediatos para la salud incluyen: mejor balance, coordinación, fuerza muscular,flexibilidad, resistencia aeróbica/cardiovascular y un mejor metabolismo. Todo ello también aporta la prevención y tratamiento de enfermedades, incluyendo enfermedades cardiovasculares, osteoporosis, diabetes tipo II y algunos tipos de cáncer.

Por todo lo expuesto, solicito a mis pares el acompañamiento del presente proyecto de ley.