1) Adherir a la "Declaración en Defensa de los Derechos Humanos de los Migrantes (MERCOSUL/PM/DECL. 10/2008)", adoptada por el Parlamento del MERCOSUR el pasado 27 de junio en la Ciudad de San Miguel de Tucumán, en rechazo a la adopción de la denominada "Directiva Retorno" por parte de la Unión Europea.

2) Solicitar a los miembros del Grupo Parlamentario de Amistad con la Unión Europea transmitan a sus pares europeos la preocupación de esta H. Cámara ante estas medidas, por ser gravemente discriminatorias y contrarias a los Derechos Humanos fundamentales.

Señor presidente:

El Parlamento Europeo aprobó recientemente una directiva sobre expulsión de inmigrantes ilegales en territorio de la Unión. Esta acción se enmarca en el endurecimiento de la política migratoria por parte de los países de la unión respecto de aquellas personas que ingresen de manera irregular a territorio europeo

La Directiva Retorno es, sin lugar a dudas, un fuerte retroceso en el proceso internacional para la protección de los Derechos Humanos fundamentales. Las medidas que los países europeos de ahora en más podrán implementar, en particular el arresto de hasta 18 meses, implican una grave discriminación para todos aquellos hombres y mujeres que, en busca de una vida mejor, intentan ingresar al Viejo Continente de manera irregular.

Nuevamente, señor Presidente, los principales países del mundo incurren en el error de considerar al problema migratorio desde una perspectiva sesgada, parcializada y contraproducente. La cuestión migratoria no es un problema de los "países de recepción". La cuestión migratoria es un problema global, cuyas alternativas de solución atañen tanto a los "países de envío" como a los "países de recepción".Aquellas medidas unilaterales como las adoptadas poco contribuyen a fortalecer los mecanismos de cooperación a efectos de contrarrestar este flagelo.

Por ello, señor Presidente, estamos convencidos que la voz de nuestra región debe ser escuchada. Nosotros hemos sido tanto "país de envío" como "país de recepción". Nuestra historia nacional y latinoamericana está cruzada por inmigrantes y emigrantes, por hombres y mujeres que atraviesan fronteras en busca de aquellas oportunidades que muchas veces sus propios países, por errores propios o ajenos, les niegan.

Si el Siglo XX fue el siglo de un mundo divido en dos, este Siglo XXI debe ser el siglo de la cooperación, aquel en el cual los hombres y mujeres del mundo avanzamos aprendiendo de los errores de antaño.

Proponemos aquí adherir a la Declaración aprobada por el Parlamento del MERCOSUR mediante la cual manifiesta "su rechazo a la resolución emanada del Parlamento Europeo denominada "Directiva de Retorno" que constituye una violación a los Derechos Humanos básicos y en particular al derecho a la libre circulación internacional..." (Art. 1 de la Declaración del 27 de junio de 2008). Coincidimos también en la apreciación de que el aumento a 18 meses de la internación de inmigrantes sin papeles constituye una verdadera pena de prisión.

Asimismo, sería de gran importancia el poder transmitir a los legisladores europeos la preocupación de este Congreso por la adopción de tales medidas. Creemos que es importante en este sentido aprovechar los mecanismos vigentes, como son los Grupos Parlamentarios de Amistad.

Por todo lo expuesto, solicito nos acompañen en la aprobación del presente proyecto.