Su solidaridad con los Agentes de Propaganda Médica, trabajadores agrupados en la Federación Argentina de Agentes de Propaganda Médica (F.A.A.P.R.O.M.E.), en el conflicto que mantienen con las Cámaras Empresariales de la Industria Farmacéutica, representadas por CAEME, CILFA, y COOPERARLA, en reclamo para que se avance en la negociación paritaria, actualizando los salarios de los trabajadores.

Señor presidente:

En virtud de la ruptura de la convertibilidad y en función del nuevo modelo económico vigente, resulta inminente el reacomodamiento de las relaciones laborales, y unido a ello, la actualización salarial . A tal efecto los trabajadores de APM vienen desde hace tiempo tratando de negociar nuevas condiciones con las cámaras empresariales, lo que se ha convertido en algo infructuoso dado que la Industria Farmacéutica se niega a firmar el convenio colectivo del sector y a actualizar el básico de convenio que rige en la actualidad para los trabajadores APM que asciende a la suma de $ 630.-. Esta actitud solo puede entenderse a al luz de la pretensión de seguir pagando despidos baratos, fundamentalmente en sus múltiples "reestructuraciones" donde la variable de ajuste son los trabajadores.

Resulta a todas luces indigno mantener un básico de convenio que ha quedado por debajo del salario mínimo, vital y móvil establecido por el Consejo Nacional del Empleo la productividad y el Salario Mínimo Vital y Móvil en la cifra de $760 escalonado hasta llegar a los $800 en el mes de noviembre del corriente.

Siendo el diálogo la vía por excelencia para conciliar entre las partes, las cámaras empresariales solo responden con conductas elusivas e impeditivas. A tal efecto los trabajadores solicitan terminar con ellas generar una respuesta que sea de posible acuerdo entre las partes.

Es notorio que este honorable cuerpo legislativo, como máxima expresión del sistema republicano democrático, no puede desatender reclamos de los sectores más débiles de la sociedad que peticionan apoyo institucional ante prácticas abusivas o groseramente lesivas de los derechos fundamentales, como se trata, en este caso, de percibir un salario digno, garantizado por la Constitución Nacional y los tratados internacionales con jerarquía constitucional y los convenios de la Organización Internacional del Trabajo, investidos de rango superior a las leyes (artículo 75, inciso 22, CN).

Por todo ello solicitamos la aprobación del presente proyecto .