Expresar su preocupación por la decisión del gobierno nacional de despedir a más de 350 trabajadores de la Agencia Oficial de Noticias Télam.

Señor presidente:

El día 26 de junio de 2018, 354 empleados de la agencia de noticias estatal Télam recibieron un telegrama anunciando su cesantía laboral. Un comunicado emitido por el directorio de la agencia justificó los despidos argumentando que “luego de una minuciosa evaluación en cada área, hemos decidido desvincular a empleados que no responden al perfil que buscamos para una agencia pública de noticias que debe avanzar hacia un mejor y eficaz funcionamiento”.

Cabe destacar que en dicho comunicado, el directorio de Télam no aclara cuál es ese perfil nuevo para la agencia, al que estos empleados cesanteados no estarían respondiendo.

Otro aspecto a considerar es que esos 354 despidos representan el 40% del total de la planta de empleados de la Agencia Télam, que sus autoridades dan a entender que estaría sobredimensionado. Sin embargo, debemos considerar que en los últimos años la revolución y diversificación tecnológica en los medios ha demandado mayor cantidad de personal, y así se ha reflejado en el paso del tiempo. En el año 2003 la agencia gubernamental de noticias solo prestaba servicio de cables, servicio fotográfico, el área de administración y publicidad. Quince años después la agencia contaba con infografías, videos, podcast, archivo fotográfico y audiovisual, streaming, especiales multimedia, una redacción dedicada al portal web, 27 corresponsalías en todo el país y seis corresponsalías internacionales.

Amén de resultar polémica la afirmación de sobredimensionamiento de personal por los motivos expuestos en el párrafo precedente, debemos hacer notar que un despido masivo de trabajadores por parte del Estado en un contexto de recesión económica donde la actividad privada lejos de absorber mano de obra también la está expulsando, resulta de una extrema gravedad, dejar a familias argentinas desocupadas.

Otra afirmación poco feliz de las autoridades de Télam es que los empleados despedidos “no contaban con formación ni experiencia” cuando resulta fácilmente comprobable que algunos de ellos hace más de 20 años que se desempeñaban en la empresa.

En virtud de que los argumentos que sostienen tan drástica medida, no me resultan convincentes es que solicito se agoten todas las instancias de revisión y replanteo de nuestra agencia oficial de noticias, poniendo como objetivo primordial y prioritario la defensa de las fuentes laborales.

Por todo lo expuesto, solicito el acompañamiento de mis pares para con la presente iniciativa.