INDUSTRIA
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Reunión del día 28/06/2016
- CONJUNTA
En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a los veintiocho días del mes de junio de 2016, a la hora 14 y 41:
SR. PRESIDENTE LASPINA Queda abierta la reunión.
Está a consideración en el temario el expediente 0656-d-2016, proyecto de ley del señor diputado Romero, Oscar Alberto, Roberti, Miranda, Bossio, Ziliotto, Snopek, David Néstor Javier, Macías, Madera, Tomassi y Kosiner, de desarrollo y fortalecimiento del autopartismo argentino, beneficios e incentivos.
Tiene la palabra el señor diputado Roberti.
Está a consideración en el temario el expediente 0656-d-2016, proyecto de ley del señor diputado Romero, Oscar Alberto, Roberti, Miranda, Bossio, Ziliotto, Snopek, David Néstor Javier, Macías, Madera, Tomassi y Kosiner, de desarrollo y fortalecimiento del autopartismo argentino, beneficios e incentivos.
Tiene la palabra el señor diputado Roberti.
SR. ROBERTI Quiero poner como comentario para que quede debidamente extractado en las actas respectivas de este plenario de comisiones que esto surge de un acuerdo y, además, del plenario de las comisiones de Industria, de Presupuesto y Hacienda y de Legislación del Trabajo. Hemos alcanzado hace poco tiempo un acuerdo en relación con la redacción del dictamen y entendemos que es abarcativo a toda la problemática que aflige a los distintos señores y señoras diputadas. Por lo tanto, si no hay consideraciones que agregar, nosotros procederíamos a la firma.
Tiene la palabra el señor diputado González.
Tiene la palabra el señor diputado González.
SR. GONZÁLEZ Señor presidente: solamente quiero agregar algo que le hice llegar al presidente de la Comisión de Presupuesto que no sé si fue volcado en el proyecto definitivo. En el inciso a) del artículo 10, donde habla del artículo 52 de la Ley de Contrato de Trabajo, ley 20.744 (t.o. 1976) y sus modificaciones, yo sugiero que en lugar de decir del período comprendido entre julio de 2015 y junio de 2016, inclusive, diga "al momento de presentar el proyecto de inversión".
SR. ROBERTI No le doy entidad desde el punto de vista del método. Se perdería el vigor de lo que significa el amparo para los trabajadores. Se trata de una opinión particular. De cualquier manera, tomamos su sugerencia.
Tiene la palabra el señor diputado Bossio.
Tiene la palabra el señor diputado Bossio.
SR. BOSSIO Reafirmo lo que dice el señor diputado Roberti. El criterio de esta ley es incentivar la industria autopartista y automotriz argentina, y tomar como punto de partida, en el marco del trabajo, la actual situación de los trabajadores que están involucrados en ella.
El proyecto prevé cinco años para presentar iniciativas, con lo cual nosotros, como punto de partida en términos laborales, queremos tomar este período porque pretendemos no solo incentivar la industria sino que haya más trabajo industrial y de mejor calidad. Por lo tanto, creemos apropiado ese período comprendido entre 2015 y 2016 inclusive.
El proyecto prevé cinco años para presentar iniciativas, con lo cual nosotros, como punto de partida en términos laborales, queremos tomar este período porque pretendemos no solo incentivar la industria sino que haya más trabajo industrial y de mejor calidad. Por lo tanto, creemos apropiado ese período comprendido entre 2015 y 2016 inclusive.
SR. ROBERTI Tiene la palabra el señor diputado Kicillof.
SR. KICILLOF Quiero hacer una presentación, supongo que hoy no para no extender demasiado la reunión, pero en primer lugar deseo comentar nuestra posición acerca de la evolución del sector, particularmente del crecimiento acelerado, con el récord absoluto de venta y producción de autos que tuvo lugar durante estos últimos 10 años, y cuáles fueron las políticas que posibilitaron obviamente que eso ocurriera.
Creemos, como sucede con tantas otras cosas, entre ellas las leyes sectoriales, que un factor central para fortalecer la producción automotriz es el fomento de la demanda interna, y hoy lo que está faltando no se puede resolver con este proyecto, justamente el poder adquisitivo de la clase media y de la clase trabajadora, que no puede acceder a un automóvil. Esto es central para cualquier ley de promoción y emergencia del sector, es decir que la gente pueda comprar un auto, cosa que hoy está mucho más complicada, tal como exhiben las estadísticas que se están observando.
Estos últimos días hubo una nueva mala noticia para el sector en términos de venta, y también hubo malas noticias en términos de incremento de las exportaciones. Por eso creo que estamos en una coyuntura difícil para el sector debido a cuestiones que no se dirimen en esta iniciativa, que tienen que ver con las políticas económicas en curso y con la pérdida de poder adquisitivo de los salarios e ingresos en general y, por lo tanto, con el debilitamiento del mercado interno en la compra de automóviles, tanto importados como nacionales.
En este aspecto tenemos un agravante. Estamos creando una ley indudablemente para fortalecer el autopartismo y la producción automotriz argentina, pero nos encontramos con una novedad: este último mes fue uno de los récords en términos de venta de automóviles importados. Entonces, estamos ante una situación compleja porque si los argentinos van a comprar automóviles importados, por más que hagamos esfuerzos para fomentar el autopartismo, esto tiene que ver con la política de regulación del comercio exterior, particularmente de crédito y creación de mercado interno.
Nosotros sabemos muy bien que hace unos años se batió el récord de ventas de automóviles en el mercado local y que se alcanzó el millón de unidades vendidas, particularmente a partir de la crisis de Brasil. Además, el sector automotriz argentino es muy difícil de comprender sin analizar la integración que existe entre Brasil y Argentina, tanto en términos de modelos como de autopartes. Tenemos esta paradoja que es que los autos que se compran en la Argentina, por la particularidad del mercado argentino desde el punto de vista de la demanda, son en su mayoría producidos en Brasil, así como buena parte de los autos que producimos en la Argentina, se colocan en el mercado brasileño.
El concepto que dice que los efectos de la situación económica brasileña sobre Argentina son fuertes, se potencia en el sector automotriz porque nosotros vendemos autos mayormente a Brasil y los que compramos, se producen en Brasil. Hemos podido corregir esto levemente en los últimos años en base a acuerdos con Brasil, pero básicamente teniendo en cuenta políticas domésticas.
También quiero aclarar y denunciar, para que lo entienda este Parlamento, que en Brasil se creó un programa que se conoce como Innova Auto, que da muchísimos beneficios a la radicación de empresas en ese país, y esto lamentablemente ha tenido como resultado la exportación de industrias.
Acá me acompañan sindicalistas del sector y todos saben que se han radicado industrias en Brasil, que antes producían en la Argentina en base a programas creados por el gobierno brasileño. Nosotros, a pesar de la hermandad que existió durante estos últimos años con el gobierno de Dilma Rousseff, planteamos nuestras protestas a nivel diplomático, incluso con respecto a que estos programas perjudicaban a la industria nacional. Esto mismo fue planteado ante la OMC, que ha condenado algunos de estos programas porque priorizaban, de una forma que para nosotros no era la debida, a través de incentivos fiscales la radicación y producción de productos automotrices en Brasil, en contra de Argentina.
Dicho esto tengo que mencionar que el Frente para la Victoria comparte el espíritu de fortalecer el autopartismo argentino e incrementar, obviamente, el contenido nacional. Hemos sido parte de las discusiones a nivel de asesores de estos días y sabemos que se han introducido algunas mejoras al proyecto original que van a aparecer reflejadas en el dictamen de la mayoría. Sin embargo, no podemos acompañar sino con disidencias ese dictamen porque encontramos que hay algunos puntos centrales que mejorarían sustancialmente el proyecto tal cual está y son temas que creemos que hay oportunidad de discutir desde aquí hasta la sesión del día jueves. Sabemos que todos los bloques han hablado entre sí pero también hemos hablado con los diferentes representantes del sector, tanto del autopartismo como de las terminales, en las diferentes regiones donde esto ocurre.
Celebramos que el proyecto de ley, por lo menos tal como está, se haya ampliado para incluir además de las terminales y de la industria automotriz lo que tiene que ver con la producción de maquinaria agrícola, la fundición, la forja y los herramentales. También se ha incluido la industria vinculada a la producción de camiones, es decir que ha habido un inmenso avance con respecto al planteo original porque nosotros creemos que una ley que fomente la producción nacional de autopartes debe ser muy abarcativa de las diferentes modalidades y productos que surgen del sector.
Entonces, tengo bastantes diferencias para plantear pero quiero centrarme en las más importantes. La primera tiene que ver con el artículo 10, para ir en orden. Sabemos que hay muchos diputados que representan al sector sindical y aquí se establece en el artículo 10 que los beneficiarios de este régimen tienen que cumplir ciertas condiciones, me refiero al inciso a) de ese artículo. Se pide algo con lo que estamos de acuerdo para mantener la continuidad en el régimen y se dice que tiene que haber un mantenimiento de la cantidad de trabajadores en promedio en relación de dependencia. Básicamente fija que para sostener el beneficio tiene que haber un mantenimiento de la planta de personal y esto es muy importante, porque si le vamos a dar incentivos a las empresas también tenemos que ponerles condiciones. La condición de mantener al personal es algo en lo que estamos de acuerdo.
Estamos discutiendo con los diferentes bloques la posibilidad de que también haya una condición de mantener la antigüedad media del personal. ¿Qué quiere decir esto? Que se puede mantener la misma cantidad de personal pero cambiando la composición etaria, de forma tal de hacer una sustitución de trabajadores con más altos niveles de antigüedad por trabajadores con menor nivel. Básicamente, es algo que resulta perverso y no es porque no estemos de acuerdo en que se incorpore personal joven. Por supuesto que estamos de acuerdo con que eso suceda. El problema es que esto no se convierta en una modalidad de sustitución para que quienes tienen mayor antigüedad, experiencia, categoría y mejores sueldos, sean reemplazados por trabajadores de menor categoría y menor sueldo y eso signifique una pérdida para la clase trabajadora en su conjunto. Es una forma de introducir reformas laborales que disminuyan los derechos de los trabajadores o que tiendan a la reducción salarial encubierta a través de la sustitución de trabajadores con más antigüedad por aquellos que tienen menor antigüedad. Por eso, planteamos un sostenimiento de la antigüedad media del personal.
Voy a formular una breve introducción respecto del artículo 10, el cual es muy importante para nosotros.
De la misma forma, hay un punto que hemos discutido con los diferentes bloques que tiene que ver con el artículo 12. Me refiero a la famosa formulita para medir el componente nacional. ¿Es una cuestión técnica? Sí. ¿Tiene alguna complejidad? Sí. ¿Tiene dificultades de medición? Sí. Pero apunta estrictamente a garantizar el objetivo de esta ley. Por eso para nosotros es tan importante modificar la fórmula, tanto del artículo 12 como del 16.
Me voy a permitir introducir en nuestro dictamen la modificación en el artículo 16 y quiero plantear cuál es la idea subyacente. Lo quiero explicar para aquellos diputados que no son técnicos en la materia y creo que son la gran mayoría. Nuestro bloque está tratando de preservar lo relativo a la mayor integración nacional.
Esto lo quiero plantear claramente para que lo entienda todo el mundo acerca de la importancia y la lógica de nuestra objeción.
¿Cómo vemos el contenido nacional de un vehículo? Uno puede decir que la modalidad más sencilla para ver el contenido nacional es comparar y sacar un porcentaje entre las piezas, las autopartes y los diferentes sistemas. En los automóviles encontramos todas estas formas de medición. El automóvil está compuesto por piezas, autopartes y sistemas. Concretamente, un sistema es un conjunto de autopartes. El sistema de frenos está compuesto por el pedal, la transmisión, los sistemas de frenos en las ruedas y por las pastillas. O sea, son muchas autopartes que componen un sistema.
¿Cómo sabemos qué parte de un vehículo terminado es nacional y cuál es extranjera? Una forma es comparar las autopartes nacionales dividido la cantidad total de autopartes nacionales más importadas. Eso me da un porcentaje, por ejemplo, que puede ser del 30 por ciento. Es decir, del 100 por ciento de las autopartes, el 30 por ciento son nacionales. Entonces, le daré un beneficio a aquel que tenga un contenido nacional del 30 por ciento. Porque el 30 por ciento de las autopartes que componen un vehículo son de origen nacional. Efectivamente, el 30 por ciento es un número muy importante porque a partir de ahí se empieza a dar un determinado bono o beneficio.
¿Qué es lo que vemos nosotros que fuimos funcionarios interesados en el tema? Esto fue charlado con representantes del sector. El problema es que una autoparte puede ser nacional porque es industria nacional; su caja dice "industria argentina". Pero cuando uno va a ver el contenido en sus insumos -en las partes más pequeñas- encuentra que una buena proporción de éstas -que figuran como nacionales- en realidad son de origen extranjero.
Para decirlo de una manera sencilla y que todo el mundo entienda, puede que el volante sea industria nacional, pero el cuero que lo recubre, importado, lo que va por dentro, importado, el eje del volante, importado, que sea montado nacionalmente pero todos los insumos sean importados. Entonces, uno tendría que el volante aparece como nacional, porque hay una empresa nacional que lo monta y que toma todos esos insumos importados, los reúne y los suma. Efectivamente, esto tiene alguna importancia porque hay ahí mano de obra nacional trabajando en ese proceso de montaje. Pero, es difícil ver si esa pieza -o esa autoparte para llamarlo así, podríamos decir autopartes como una caja de cambios- es nacional o extranjera.
Entonces, lo que nosotros proponemos es una modificación a la fórmula que va a permitir medir esto de una forma más precisa, que es tomar para medir el contenido nacional, no solamente la autoparte sino la autoparte menos los insumos extranjeros, es decir, restando los insumos extranjeros. Esta es sencillamente la cuenta que pedimos hacer, porque es una cuenta mucho más rigurosa, es una cuenta mucho más precisa y mucho más realista. Uno puede creer que el contenido nacional es un 30 por ciento, pero cuando uno va a estudiar más en profundidad encuentra que los insumos importados son una proporción mucho mayor.
Entonces, estamos proponiendo una forma de medir más realista con respecto a esta situación. Obviamente, en todos los casos, esta tabla que se presenta en el artículo 13, basada en un componente nacional calculado como dice el artículo 12, va a quedar desactualizada, porque si restamos los insumos importados, lo que parecía un 30 por ciento de contenido nacional, va a terminar siendo, con esta nueva medida, un 20 por ciento sobre una misma realidad. Estamos de acuerdo y vamos a presentar una tabla que sea menos exigente, pero una medición que sea más precisa.
Si no, nos vamos a estar engañando y éste no es sólo el problema. Supongamos que hoy lo que para nosotros da 20 -por poner un ejemplo- al restar los insumos, en esta tabla dé 30 y sea el mismo caso. Nosotros no hablamos de sacarlo del beneficio, pero sí nos preguntamos cuál sería el efecto de medirlo de esta forma y el efecto puede ser muy perverso, porque el día de mañana se puede reemplazar un insumo nacional por un insumo extranjero y, sin embargo, según la fórmula que se plantea en la ley dé exactamente lo mismo.
En adelante se puede extranjerizar parte de la producción, es decir que una autopartista reemplace un insumo nacional por un insumo extranjero y, sin embargo, en esta fórmula quede igual, porque como termina siendo una autoparte nacional, de una empresa nacional, aunque ahora con más insumos extranjeros, puede hacerse acreedor del beneficio. Es decir, nos preocupa más la película que la foto.
Y nos preocupa que si este Congreso va a estar dando un incentivo, un bono o un estímulo, ese estímulo no sea utilizado de manera incorrecta para que en lugar de llegar a esta cuestión de más autopartes y fortalecer el autopartismo argentino se haga lo contrario en nombre de esta misma ley y se obtenga un beneficio indebido. Si computamos el contenido nacional a nivel de autoparte sin restar los insumos extranjeros corremos ese peligro. Por eso lo queremos presentar como algo que hay que modificar.
Nos presentaban objeciones por el lado de los problemas de medición. Es cierto, para ver qué piezas son importadas y qué piezas son nacionales hay que hacer una medición más precisa. Nosotros proponemos una declaración jurada y que esa declaración jurada se presente ante un organismo que nosotros estamos proponiendo aquí también y aparecería como un nuevo artículo 23. Se trataría de un organismo que se dedique precisamente a hacer algo que ha sido uno de los grandes problemas.
Perdón, no es en el artículo 23 sino en el 29. Me refiero a una autoridad de aplicación que conforma un comité técnico de certificación de contenido nacional.
¿Por qué estamos proponiendo un comité técnico? Ese comité técnico, según nuestra propuesta, va a estar integrado por un representante del INTI, uno de la universidad nacional de la zona productiva y otro de las representaciones gremiales.
Uno de los grandes problemas que hemos tenido con la industria automotriz es precisamente el reemplazo de proveedores nacionales por proveedores extranjeros porque a través de mecanismos de venta intrafirma, de montaje y nacionalización simulada, se pierde el rastro de qué parte de los vehículos o de las autopartes es genuinamente de producción nacional. Como todos compartimos que tenemos que promover la producción nacional, que implica cuestiones técnicas y de ingeniería de bastante complejidad, nosotros proponemos que esto no sea simplemente una declaración o algo que solo haga el Ministerio de Industria, sino que sea un comité técnico especial el que se ponga a estudiar cómo se están produciendo los autos y hasta qué punto se está respetando el espíritu de esta ley en cada modelo, en cada autoparte, en cada autopartista, en cada sistemista y en cada región.
De otro modo vamos a aprobar leyes, como tantas veces pasó en cuestiones referidas a la promoción, que están pensadas en esta casa para un determinado objetivo y el resultado ha sido, como sucedió en alguna época, galpones vacíos donde se pretendía hacer producción nacional pero la verdad es que lo único que se hacía era embalaje y packaging de cosas producidas en el extranjero para cobrar determinados incentivos. Entonces nosotros abordamos la cuestión de esta manera.
Además, en el artículo 13 proponemos modificar el beneficio de los bienes a los que se refiere el artículo 6°, o sea, planteamos básicamente cambiar el porcentaje del 6 al 8 por ciento. Esto es para fomentar sobre todo al sector autopartista con un porcentaje mayor. Lo mismo -para no aburrir con cuestiones técnicas- estamos proponiendo para el caso del artículo 14, es decir, pasar del 5 al 10 por ciento.
También hemos hecho cálculos del costo fiscal y en el artículo 14 -de la misma manera lo proponemos para el artículo 18- planteamos pasar el adelanto del 15 al 20 por ciento. Pero estas son cuestiones del marco de la propia norma, que por supuesto van a traer beneficios para el sector.
Por otro lado, en el artículo 17 estamos proponiendo un arancel del 10 por ciento; estas son cuestiones tributarias y de incentivo.
Por último, quiero plantear lo que a nosotros nos aparece como un nuevo artículo, el 23, que fija algo que no está previsto en el proyecto pero que nuevamente creemos que va en la línea y en el espíritu que se traza en esta iniciativa. Me refiero a un reintegro a las exportaciones para aquellas empresas que produzcan en la industria local tanto piezas como autopartes, conjuntos, subconjuntos y sistemas. Reitero, estamos proponiendo elevar el reintegro a las exportaciones para los que producen en la Argentina. Para quien no conoce estos regímenes quiero decir que básicamente se trata de un incentivo fiscal para la exportación.
Sabemos que a nivel internacional se está dando un proceso de mayor integración productiva en base al libre comercio y que se han abierto mercados nuevos. Si nosotros queremos incentivar la producción de autopartes, piezas, conjuntos y sistemas para las terminales que producen en el mercado local o incluso dentro del Mercosur, nuestra idea es proponer un incentivo para aquellos que quieran exportar fuera del Mercosur a fin de que puedan acceder a un reintegro. Entonces, para el caso de piezas y autopartes el reintegro sería del 12 por ciento y para conjuntos, subconjuntos y sistemas, del 8 por ciento. Hoy existe un reintegro que es del 6 por ciento y nosotros proponemos elevarlo para que las pymes locales que puedan acceder a mercados extrazona, o sea fuera del Mercosur, tengan un incentivo todavía mayor.
Creo que no me olvido de decir nada sustancial. Entonces, vamos a presentar una disidencia al dictamen de mayoría. Sabemos que el dictamen de mayoría tampoco es conocido por el pleno de las comisiones porque todavía se estaban introduciendo modificaciones y algunas van en sentido de lo que nosotros estamos proponiendo. Sintéticamente, creemos que hay que promover al sector, no queremos caer en ese falso dilema de favorecer a las terminales, pero sabemos que en los pequeños productores de automotores y de maquinaria agrícola y en las pymes es donde está el grueso nacional del sector de la producción. Todos conocemos muy bien que las terminales tienen trabajo argentino y por eso hay que apoyar a que se radiquen en la Argentina para que sigan produciendo aquí, pero también sabemos que las once terminales que producen hoy en nuestro país son trasnacionales y por eso es que el corazón del sistema automotor argentino se encuentra en los autopartistas.
Entonces, para favorecer al sector tenemos que focalizarnos, tal como marca el título de este proyecto de ley, principalmente en el sector autopartista porque esas son las pymes nacionales. Muchas gracias. (Aplausos.)
Creemos, como sucede con tantas otras cosas, entre ellas las leyes sectoriales, que un factor central para fortalecer la producción automotriz es el fomento de la demanda interna, y hoy lo que está faltando no se puede resolver con este proyecto, justamente el poder adquisitivo de la clase media y de la clase trabajadora, que no puede acceder a un automóvil. Esto es central para cualquier ley de promoción y emergencia del sector, es decir que la gente pueda comprar un auto, cosa que hoy está mucho más complicada, tal como exhiben las estadísticas que se están observando.
Estos últimos días hubo una nueva mala noticia para el sector en términos de venta, y también hubo malas noticias en términos de incremento de las exportaciones. Por eso creo que estamos en una coyuntura difícil para el sector debido a cuestiones que no se dirimen en esta iniciativa, que tienen que ver con las políticas económicas en curso y con la pérdida de poder adquisitivo de los salarios e ingresos en general y, por lo tanto, con el debilitamiento del mercado interno en la compra de automóviles, tanto importados como nacionales.
En este aspecto tenemos un agravante. Estamos creando una ley indudablemente para fortalecer el autopartismo y la producción automotriz argentina, pero nos encontramos con una novedad: este último mes fue uno de los récords en términos de venta de automóviles importados. Entonces, estamos ante una situación compleja porque si los argentinos van a comprar automóviles importados, por más que hagamos esfuerzos para fomentar el autopartismo, esto tiene que ver con la política de regulación del comercio exterior, particularmente de crédito y creación de mercado interno.
Nosotros sabemos muy bien que hace unos años se batió el récord de ventas de automóviles en el mercado local y que se alcanzó el millón de unidades vendidas, particularmente a partir de la crisis de Brasil. Además, el sector automotriz argentino es muy difícil de comprender sin analizar la integración que existe entre Brasil y Argentina, tanto en términos de modelos como de autopartes. Tenemos esta paradoja que es que los autos que se compran en la Argentina, por la particularidad del mercado argentino desde el punto de vista de la demanda, son en su mayoría producidos en Brasil, así como buena parte de los autos que producimos en la Argentina, se colocan en el mercado brasileño.
El concepto que dice que los efectos de la situación económica brasileña sobre Argentina son fuertes, se potencia en el sector automotriz porque nosotros vendemos autos mayormente a Brasil y los que compramos, se producen en Brasil. Hemos podido corregir esto levemente en los últimos años en base a acuerdos con Brasil, pero básicamente teniendo en cuenta políticas domésticas.
También quiero aclarar y denunciar, para que lo entienda este Parlamento, que en Brasil se creó un programa que se conoce como Innova Auto, que da muchísimos beneficios a la radicación de empresas en ese país, y esto lamentablemente ha tenido como resultado la exportación de industrias.
Acá me acompañan sindicalistas del sector y todos saben que se han radicado industrias en Brasil, que antes producían en la Argentina en base a programas creados por el gobierno brasileño. Nosotros, a pesar de la hermandad que existió durante estos últimos años con el gobierno de Dilma Rousseff, planteamos nuestras protestas a nivel diplomático, incluso con respecto a que estos programas perjudicaban a la industria nacional. Esto mismo fue planteado ante la OMC, que ha condenado algunos de estos programas porque priorizaban, de una forma que para nosotros no era la debida, a través de incentivos fiscales la radicación y producción de productos automotrices en Brasil, en contra de Argentina.
Dicho esto tengo que mencionar que el Frente para la Victoria comparte el espíritu de fortalecer el autopartismo argentino e incrementar, obviamente, el contenido nacional. Hemos sido parte de las discusiones a nivel de asesores de estos días y sabemos que se han introducido algunas mejoras al proyecto original que van a aparecer reflejadas en el dictamen de la mayoría. Sin embargo, no podemos acompañar sino con disidencias ese dictamen porque encontramos que hay algunos puntos centrales que mejorarían sustancialmente el proyecto tal cual está y son temas que creemos que hay oportunidad de discutir desde aquí hasta la sesión del día jueves. Sabemos que todos los bloques han hablado entre sí pero también hemos hablado con los diferentes representantes del sector, tanto del autopartismo como de las terminales, en las diferentes regiones donde esto ocurre.
Celebramos que el proyecto de ley, por lo menos tal como está, se haya ampliado para incluir además de las terminales y de la industria automotriz lo que tiene que ver con la producción de maquinaria agrícola, la fundición, la forja y los herramentales. También se ha incluido la industria vinculada a la producción de camiones, es decir que ha habido un inmenso avance con respecto al planteo original porque nosotros creemos que una ley que fomente la producción nacional de autopartes debe ser muy abarcativa de las diferentes modalidades y productos que surgen del sector.
Entonces, tengo bastantes diferencias para plantear pero quiero centrarme en las más importantes. La primera tiene que ver con el artículo 10, para ir en orden. Sabemos que hay muchos diputados que representan al sector sindical y aquí se establece en el artículo 10 que los beneficiarios de este régimen tienen que cumplir ciertas condiciones, me refiero al inciso a) de ese artículo. Se pide algo con lo que estamos de acuerdo para mantener la continuidad en el régimen y se dice que tiene que haber un mantenimiento de la cantidad de trabajadores en promedio en relación de dependencia. Básicamente fija que para sostener el beneficio tiene que haber un mantenimiento de la planta de personal y esto es muy importante, porque si le vamos a dar incentivos a las empresas también tenemos que ponerles condiciones. La condición de mantener al personal es algo en lo que estamos de acuerdo.
Estamos discutiendo con los diferentes bloques la posibilidad de que también haya una condición de mantener la antigüedad media del personal. ¿Qué quiere decir esto? Que se puede mantener la misma cantidad de personal pero cambiando la composición etaria, de forma tal de hacer una sustitución de trabajadores con más altos niveles de antigüedad por trabajadores con menor nivel. Básicamente, es algo que resulta perverso y no es porque no estemos de acuerdo en que se incorpore personal joven. Por supuesto que estamos de acuerdo con que eso suceda. El problema es que esto no se convierta en una modalidad de sustitución para que quienes tienen mayor antigüedad, experiencia, categoría y mejores sueldos, sean reemplazados por trabajadores de menor categoría y menor sueldo y eso signifique una pérdida para la clase trabajadora en su conjunto. Es una forma de introducir reformas laborales que disminuyan los derechos de los trabajadores o que tiendan a la reducción salarial encubierta a través de la sustitución de trabajadores con más antigüedad por aquellos que tienen menor antigüedad. Por eso, planteamos un sostenimiento de la antigüedad media del personal.
Voy a formular una breve introducción respecto del artículo 10, el cual es muy importante para nosotros.
De la misma forma, hay un punto que hemos discutido con los diferentes bloques que tiene que ver con el artículo 12. Me refiero a la famosa formulita para medir el componente nacional. ¿Es una cuestión técnica? Sí. ¿Tiene alguna complejidad? Sí. ¿Tiene dificultades de medición? Sí. Pero apunta estrictamente a garantizar el objetivo de esta ley. Por eso para nosotros es tan importante modificar la fórmula, tanto del artículo 12 como del 16.
Me voy a permitir introducir en nuestro dictamen la modificación en el artículo 16 y quiero plantear cuál es la idea subyacente. Lo quiero explicar para aquellos diputados que no son técnicos en la materia y creo que son la gran mayoría. Nuestro bloque está tratando de preservar lo relativo a la mayor integración nacional.
Esto lo quiero plantear claramente para que lo entienda todo el mundo acerca de la importancia y la lógica de nuestra objeción.
¿Cómo vemos el contenido nacional de un vehículo? Uno puede decir que la modalidad más sencilla para ver el contenido nacional es comparar y sacar un porcentaje entre las piezas, las autopartes y los diferentes sistemas. En los automóviles encontramos todas estas formas de medición. El automóvil está compuesto por piezas, autopartes y sistemas. Concretamente, un sistema es un conjunto de autopartes. El sistema de frenos está compuesto por el pedal, la transmisión, los sistemas de frenos en las ruedas y por las pastillas. O sea, son muchas autopartes que componen un sistema.
¿Cómo sabemos qué parte de un vehículo terminado es nacional y cuál es extranjera? Una forma es comparar las autopartes nacionales dividido la cantidad total de autopartes nacionales más importadas. Eso me da un porcentaje, por ejemplo, que puede ser del 30 por ciento. Es decir, del 100 por ciento de las autopartes, el 30 por ciento son nacionales. Entonces, le daré un beneficio a aquel que tenga un contenido nacional del 30 por ciento. Porque el 30 por ciento de las autopartes que componen un vehículo son de origen nacional. Efectivamente, el 30 por ciento es un número muy importante porque a partir de ahí se empieza a dar un determinado bono o beneficio.
¿Qué es lo que vemos nosotros que fuimos funcionarios interesados en el tema? Esto fue charlado con representantes del sector. El problema es que una autoparte puede ser nacional porque es industria nacional; su caja dice "industria argentina". Pero cuando uno va a ver el contenido en sus insumos -en las partes más pequeñas- encuentra que una buena proporción de éstas -que figuran como nacionales- en realidad son de origen extranjero.
Para decirlo de una manera sencilla y que todo el mundo entienda, puede que el volante sea industria nacional, pero el cuero que lo recubre, importado, lo que va por dentro, importado, el eje del volante, importado, que sea montado nacionalmente pero todos los insumos sean importados. Entonces, uno tendría que el volante aparece como nacional, porque hay una empresa nacional que lo monta y que toma todos esos insumos importados, los reúne y los suma. Efectivamente, esto tiene alguna importancia porque hay ahí mano de obra nacional trabajando en ese proceso de montaje. Pero, es difícil ver si esa pieza -o esa autoparte para llamarlo así, podríamos decir autopartes como una caja de cambios- es nacional o extranjera.
Entonces, lo que nosotros proponemos es una modificación a la fórmula que va a permitir medir esto de una forma más precisa, que es tomar para medir el contenido nacional, no solamente la autoparte sino la autoparte menos los insumos extranjeros, es decir, restando los insumos extranjeros. Esta es sencillamente la cuenta que pedimos hacer, porque es una cuenta mucho más rigurosa, es una cuenta mucho más precisa y mucho más realista. Uno puede creer que el contenido nacional es un 30 por ciento, pero cuando uno va a estudiar más en profundidad encuentra que los insumos importados son una proporción mucho mayor.
Entonces, estamos proponiendo una forma de medir más realista con respecto a esta situación. Obviamente, en todos los casos, esta tabla que se presenta en el artículo 13, basada en un componente nacional calculado como dice el artículo 12, va a quedar desactualizada, porque si restamos los insumos importados, lo que parecía un 30 por ciento de contenido nacional, va a terminar siendo, con esta nueva medida, un 20 por ciento sobre una misma realidad. Estamos de acuerdo y vamos a presentar una tabla que sea menos exigente, pero una medición que sea más precisa.
Si no, nos vamos a estar engañando y éste no es sólo el problema. Supongamos que hoy lo que para nosotros da 20 -por poner un ejemplo- al restar los insumos, en esta tabla dé 30 y sea el mismo caso. Nosotros no hablamos de sacarlo del beneficio, pero sí nos preguntamos cuál sería el efecto de medirlo de esta forma y el efecto puede ser muy perverso, porque el día de mañana se puede reemplazar un insumo nacional por un insumo extranjero y, sin embargo, según la fórmula que se plantea en la ley dé exactamente lo mismo.
En adelante se puede extranjerizar parte de la producción, es decir que una autopartista reemplace un insumo nacional por un insumo extranjero y, sin embargo, en esta fórmula quede igual, porque como termina siendo una autoparte nacional, de una empresa nacional, aunque ahora con más insumos extranjeros, puede hacerse acreedor del beneficio. Es decir, nos preocupa más la película que la foto.
Y nos preocupa que si este Congreso va a estar dando un incentivo, un bono o un estímulo, ese estímulo no sea utilizado de manera incorrecta para que en lugar de llegar a esta cuestión de más autopartes y fortalecer el autopartismo argentino se haga lo contrario en nombre de esta misma ley y se obtenga un beneficio indebido. Si computamos el contenido nacional a nivel de autoparte sin restar los insumos extranjeros corremos ese peligro. Por eso lo queremos presentar como algo que hay que modificar.
Nos presentaban objeciones por el lado de los problemas de medición. Es cierto, para ver qué piezas son importadas y qué piezas son nacionales hay que hacer una medición más precisa. Nosotros proponemos una declaración jurada y que esa declaración jurada se presente ante un organismo que nosotros estamos proponiendo aquí también y aparecería como un nuevo artículo 23. Se trataría de un organismo que se dedique precisamente a hacer algo que ha sido uno de los grandes problemas.
Perdón, no es en el artículo 23 sino en el 29. Me refiero a una autoridad de aplicación que conforma un comité técnico de certificación de contenido nacional.
¿Por qué estamos proponiendo un comité técnico? Ese comité técnico, según nuestra propuesta, va a estar integrado por un representante del INTI, uno de la universidad nacional de la zona productiva y otro de las representaciones gremiales.
Uno de los grandes problemas que hemos tenido con la industria automotriz es precisamente el reemplazo de proveedores nacionales por proveedores extranjeros porque a través de mecanismos de venta intrafirma, de montaje y nacionalización simulada, se pierde el rastro de qué parte de los vehículos o de las autopartes es genuinamente de producción nacional. Como todos compartimos que tenemos que promover la producción nacional, que implica cuestiones técnicas y de ingeniería de bastante complejidad, nosotros proponemos que esto no sea simplemente una declaración o algo que solo haga el Ministerio de Industria, sino que sea un comité técnico especial el que se ponga a estudiar cómo se están produciendo los autos y hasta qué punto se está respetando el espíritu de esta ley en cada modelo, en cada autoparte, en cada autopartista, en cada sistemista y en cada región.
De otro modo vamos a aprobar leyes, como tantas veces pasó en cuestiones referidas a la promoción, que están pensadas en esta casa para un determinado objetivo y el resultado ha sido, como sucedió en alguna época, galpones vacíos donde se pretendía hacer producción nacional pero la verdad es que lo único que se hacía era embalaje y packaging de cosas producidas en el extranjero para cobrar determinados incentivos. Entonces nosotros abordamos la cuestión de esta manera.
Además, en el artículo 13 proponemos modificar el beneficio de los bienes a los que se refiere el artículo 6°, o sea, planteamos básicamente cambiar el porcentaje del 6 al 8 por ciento. Esto es para fomentar sobre todo al sector autopartista con un porcentaje mayor. Lo mismo -para no aburrir con cuestiones técnicas- estamos proponiendo para el caso del artículo 14, es decir, pasar del 5 al 10 por ciento.
También hemos hecho cálculos del costo fiscal y en el artículo 14 -de la misma manera lo proponemos para el artículo 18- planteamos pasar el adelanto del 15 al 20 por ciento. Pero estas son cuestiones del marco de la propia norma, que por supuesto van a traer beneficios para el sector.
Por otro lado, en el artículo 17 estamos proponiendo un arancel del 10 por ciento; estas son cuestiones tributarias y de incentivo.
Por último, quiero plantear lo que a nosotros nos aparece como un nuevo artículo, el 23, que fija algo que no está previsto en el proyecto pero que nuevamente creemos que va en la línea y en el espíritu que se traza en esta iniciativa. Me refiero a un reintegro a las exportaciones para aquellas empresas que produzcan en la industria local tanto piezas como autopartes, conjuntos, subconjuntos y sistemas. Reitero, estamos proponiendo elevar el reintegro a las exportaciones para los que producen en la Argentina. Para quien no conoce estos regímenes quiero decir que básicamente se trata de un incentivo fiscal para la exportación.
Sabemos que a nivel internacional se está dando un proceso de mayor integración productiva en base al libre comercio y que se han abierto mercados nuevos. Si nosotros queremos incentivar la producción de autopartes, piezas, conjuntos y sistemas para las terminales que producen en el mercado local o incluso dentro del Mercosur, nuestra idea es proponer un incentivo para aquellos que quieran exportar fuera del Mercosur a fin de que puedan acceder a un reintegro. Entonces, para el caso de piezas y autopartes el reintegro sería del 12 por ciento y para conjuntos, subconjuntos y sistemas, del 8 por ciento. Hoy existe un reintegro que es del 6 por ciento y nosotros proponemos elevarlo para que las pymes locales que puedan acceder a mercados extrazona, o sea fuera del Mercosur, tengan un incentivo todavía mayor.
Creo que no me olvido de decir nada sustancial. Entonces, vamos a presentar una disidencia al dictamen de mayoría. Sabemos que el dictamen de mayoría tampoco es conocido por el pleno de las comisiones porque todavía se estaban introduciendo modificaciones y algunas van en sentido de lo que nosotros estamos proponiendo. Sintéticamente, creemos que hay que promover al sector, no queremos caer en ese falso dilema de favorecer a las terminales, pero sabemos que en los pequeños productores de automotores y de maquinaria agrícola y en las pymes es donde está el grueso nacional del sector de la producción. Todos conocemos muy bien que las terminales tienen trabajo argentino y por eso hay que apoyar a que se radiquen en la Argentina para que sigan produciendo aquí, pero también sabemos que las once terminales que producen hoy en nuestro país son trasnacionales y por eso es que el corazón del sistema automotor argentino se encuentra en los autopartistas.
Entonces, para favorecer al sector tenemos que focalizarnos, tal como marca el título de este proyecto de ley, principalmente en el sector autopartista porque esas son las pymes nacionales. Muchas gracias. (Aplausos.)
SR. ROBERTI Ahora van a hacer uso de la palabra algunos diputados que están anotados, pero en primer lugar quiero solicitar al señor diputado Laspina, porque la comisión que él preside, Presupuesto y Hacienda, es la cabecera de este plenario de tres comisiones, que lea las modificaciones que hemos estado introduciendo antes de empezar esta reunión porque este no es un cabildo abierto; esto ya está. Hay un dictamen de mayoría y si hay, como recién escuchábamos, una posibilidad de ejercitar un dictamen de minoría, seguramente así se hará.
Entonces, según el dictamen de mayoría y lo acordado entre los distintos bloques, sería bueno que el diputado Laspina -espero que me hayan entendido con el afecto y la tolerancia que todos nos tenemos- haga uso de la palabra y manifieste las correcciones.
Tiene la palabra el señor diputado Solanas.
Entonces, según el dictamen de mayoría y lo acordado entre los distintos bloques, sería bueno que el diputado Laspina -espero que me hayan entendido con el afecto y la tolerancia que todos nos tenemos- haga uso de la palabra y manifieste las correcciones.
Tiene la palabra el señor diputado Solanas.
SR. SOLANAS Con toda humildad quiero decir al diputado preopinante que considero lo que ha dicho como una falta absoluta de respeto al pleno. Creo que está exacerbando una cuestión que venimos notando los diputados.
Hemos visto proyectos que se han modificado totalmente en el recinto, se está trabajando en reuniones de asesores y en las comisiones y evidentemente se está soslayando la tarea del legislador.
Solicito al diputado preopinante que se rectifique porque en realidad le ha faltado al respeto al pleno de las comisiones cuando dice: "Ya está". Es un principio de autoritarismo no permitido y además descabellado.
Hemos visto proyectos que se han modificado totalmente en el recinto, se está trabajando en reuniones de asesores y en las comisiones y evidentemente se está soslayando la tarea del legislador.
Solicito al diputado preopinante que se rectifique porque en realidad le ha faltado al respeto al pleno de las comisiones cuando dice: "Ya está". Es un principio de autoritarismo no permitido y además descabellado.
SR. PRESIDENTE LASPINA Le aclaro al señor diputado Roberti que la cabecera de esta comisión conjunta es Presupuesto y Hacienda. Por eso, le agradezco que me ceda el uso de la palabra cuando el que lo debe hacer soy yo. Vamos a dejar las cosas en claro. Tuve paciencia hasta acá. Voy a tratar de presidir esta reunión conjunta. A mi lado se encuentra el señor diputado De Mendiguren, presidente de la Comisión de Industria, que integra este plenario de comisiones.
Siguiendo la recomendación del diputado Roberti, pues me parece muy atinada, voy a comentar algunas modificaciones al proyecto de ley y en base a lo manifestado por el señor diputado Romero. Dichos aspectos los trabajamos en estas horas y me parece que van en la dirección de lo que planteaba el diputado Kicillof acerca de incorporar algunas modificaciones, aclaraciones y mejoras a una iniciativa que, de por sí, ya tiene un amplio respaldo de toda la industria autopartista y, por supuesto, involucra a la industria automotriz en general, fundamentalmente a las pequeñas y medianas empresas. Con ellas nos hemos reunido en estos días y no han hecho más que manifestar su apoyo a la sanción de la presente ley y ni que hablar de las organizaciones gremiales cuyos trabajadores van a ser beneficiados por distintas condiciones. Se trata de un beneficio que esta ley va a generar para toda la industria de autopartes.
Voy a referirme al artículo 2° para dejar bien en claro la cuestión referida a cuándo se considera una plataforma nueva, en particular para el caso de la industria automotriz, porque eso se presta a ciertas subjetividades, por ejemplo, cuando un modelo es actualizado en alguno de sus aspectos de diseño pero esto no necesariamente puede ser considerado una nueva plataforma. Siguiendo la filosofía que existía en regímenes anteriores de promoción a la industria de autopartes, establecimos en el segundo párrafo del artículo 2° el siguiente texto: "En el caso de las terminales automotrices, para que una plataforma de producción sea considerada nueva, deberá involucrar una inversión mínima de 60 millones de dólares estadounidenses. Sin perjuicio de lo anterior, la autoridad de aplicación dictará las normas aclaratorias y los criterios que sean necesarios." Básicamente colocamos un criterio cuantitativo -además de lo cualitativo- que puede fijar la autoridad de aplicación para fijar un monto mínimo a partir del cual un desarrollo inversor de una nueva plataforma es considerada como tal.
El artículo 4° tiene algunas modificaciones de forma. En dicho artículo hemos incorporado, a pedido del Frente para la Victoria y del Frente Renovador, un aspecto que nosotros también compartimos. La idea es incorporar los términos "remolques" y "semirremolques" al régimen de promoción. Además incorporamos los términos "maquinaria agrícola y vial propulsada". Se trata de una buena noticia para mi provincia -Santa Fe- y otras que son líderes en lo relativo a maquinaria agrícola. El inciso c) está bien aclarado. El inciso d) separa camiones, chasis con y sin cabina, y ómnibus. El inciso e) habla de remolques y semirremolques. El inciso f) se refiere a la maquinaria agrícola vial autopropulsada. El resto tiene cambios en la numeración.
El artículo 9° queda tal como está. Hay una versión que le hemos entregado al señor diputado Kicillof y lo vamos a dejar tal cual como está en el proyecto original respecto a que se mantienen los volúmenes mínimos de compra previstos en la solicitud del beneficio. Eso no se modifica, más allá de que en la versión que circula estaba tachada esta cuestión. Lo vamos a dejar de esa forma.
Hay acuerdo acá con el diputado Roberti y el diputado de Mendiguren y también está de acuerdo el diputado Romero, autor del proyecto, en dejarlo tal cual él lo había expresado.
En el artículo 10, referido a la cuestión del empleo, se planteaban una serie de discusiones y teníamos el planteo de algunos sectores empresarios respecto de poner como condición para gozar de los beneficios del presente régimen mantener la cantidad de personal. Por supuesto la postura unánime de los diputados fue que esto era una condición innegociable, pero atendiendo a una razón muy atinada, podría ocurrir la eventualidad de que la industria se encuentre, por alguna razón exógena de fuerza mayor, en una crisis que podría implicar que el hecho de no ajustar personal -Dios no lo permita- lleve a la quiebra a toda una compañía o, en el otro caso, que la reducción de personal lleve a una compañía a perder los beneficios de este régimen justo en el momento en el cual está la compañía en crisis, con lo cual sería una medida procíclica, de manera que sería muy perjudicial.
Pero, a fin de no renunciar a la condición inicial -que es que los beneficios de esta ley sólo se otorgan en tanto y en cuanto haya un compromiso de sostenimiento de la planta, de la cantidad de empleados-, siendo ésta la condición fundamental para acceder a este beneficio, se agrega una condición que permitirá evaluar esa circunstancia excepcional o crítica. Una empresa o sector en particular podrá ameritar esta cuestión, pero siempre con la participación, como voy a leer en un segundo, de las organizaciones gremiales y del Ministerio de la Producción, que son las que van a tener que evaluar, coincidir y dictaminar con respecto a que se puede efectuar la excepción al régimen en un caso particular.
Entonces, en el artículo 10, después del inciso b) que arranca con "Presentar una declaración jurada en los mismos términos al 10 de diciembre de cada año...", se agregaría el siguiente párrafo: "Las excepciones al primer párrafo del presente inciso, deberán ser evaluadas y autorizadas por una comisión conformada por un representante de la autoridad de aplicación, un representante del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, un representante de las cámaras empresariales del sector, y un representante de las organizaciones gremiales con personería jurídica". Ahí terminaría el artículo, salvo que haya alguna modificación de forma, como la que quiere hacer el diputado Daer.
Siguiendo la recomendación del diputado Roberti, pues me parece muy atinada, voy a comentar algunas modificaciones al proyecto de ley y en base a lo manifestado por el señor diputado Romero. Dichos aspectos los trabajamos en estas horas y me parece que van en la dirección de lo que planteaba el diputado Kicillof acerca de incorporar algunas modificaciones, aclaraciones y mejoras a una iniciativa que, de por sí, ya tiene un amplio respaldo de toda la industria autopartista y, por supuesto, involucra a la industria automotriz en general, fundamentalmente a las pequeñas y medianas empresas. Con ellas nos hemos reunido en estos días y no han hecho más que manifestar su apoyo a la sanción de la presente ley y ni que hablar de las organizaciones gremiales cuyos trabajadores van a ser beneficiados por distintas condiciones. Se trata de un beneficio que esta ley va a generar para toda la industria de autopartes.
Voy a referirme al artículo 2° para dejar bien en claro la cuestión referida a cuándo se considera una plataforma nueva, en particular para el caso de la industria automotriz, porque eso se presta a ciertas subjetividades, por ejemplo, cuando un modelo es actualizado en alguno de sus aspectos de diseño pero esto no necesariamente puede ser considerado una nueva plataforma. Siguiendo la filosofía que existía en regímenes anteriores de promoción a la industria de autopartes, establecimos en el segundo párrafo del artículo 2° el siguiente texto: "En el caso de las terminales automotrices, para que una plataforma de producción sea considerada nueva, deberá involucrar una inversión mínima de 60 millones de dólares estadounidenses. Sin perjuicio de lo anterior, la autoridad de aplicación dictará las normas aclaratorias y los criterios que sean necesarios." Básicamente colocamos un criterio cuantitativo -además de lo cualitativo- que puede fijar la autoridad de aplicación para fijar un monto mínimo a partir del cual un desarrollo inversor de una nueva plataforma es considerada como tal.
El artículo 4° tiene algunas modificaciones de forma. En dicho artículo hemos incorporado, a pedido del Frente para la Victoria y del Frente Renovador, un aspecto que nosotros también compartimos. La idea es incorporar los términos "remolques" y "semirremolques" al régimen de promoción. Además incorporamos los términos "maquinaria agrícola y vial propulsada". Se trata de una buena noticia para mi provincia -Santa Fe- y otras que son líderes en lo relativo a maquinaria agrícola. El inciso c) está bien aclarado. El inciso d) separa camiones, chasis con y sin cabina, y ómnibus. El inciso e) habla de remolques y semirremolques. El inciso f) se refiere a la maquinaria agrícola vial autopropulsada. El resto tiene cambios en la numeración.
El artículo 9° queda tal como está. Hay una versión que le hemos entregado al señor diputado Kicillof y lo vamos a dejar tal cual como está en el proyecto original respecto a que se mantienen los volúmenes mínimos de compra previstos en la solicitud del beneficio. Eso no se modifica, más allá de que en la versión que circula estaba tachada esta cuestión. Lo vamos a dejar de esa forma.
Hay acuerdo acá con el diputado Roberti y el diputado de Mendiguren y también está de acuerdo el diputado Romero, autor del proyecto, en dejarlo tal cual él lo había expresado.
En el artículo 10, referido a la cuestión del empleo, se planteaban una serie de discusiones y teníamos el planteo de algunos sectores empresarios respecto de poner como condición para gozar de los beneficios del presente régimen mantener la cantidad de personal. Por supuesto la postura unánime de los diputados fue que esto era una condición innegociable, pero atendiendo a una razón muy atinada, podría ocurrir la eventualidad de que la industria se encuentre, por alguna razón exógena de fuerza mayor, en una crisis que podría implicar que el hecho de no ajustar personal -Dios no lo permita- lleve a la quiebra a toda una compañía o, en el otro caso, que la reducción de personal lleve a una compañía a perder los beneficios de este régimen justo en el momento en el cual está la compañía en crisis, con lo cual sería una medida procíclica, de manera que sería muy perjudicial.
Pero, a fin de no renunciar a la condición inicial -que es que los beneficios de esta ley sólo se otorgan en tanto y en cuanto haya un compromiso de sostenimiento de la planta, de la cantidad de empleados-, siendo ésta la condición fundamental para acceder a este beneficio, se agrega una condición que permitirá evaluar esa circunstancia excepcional o crítica. Una empresa o sector en particular podrá ameritar esta cuestión, pero siempre con la participación, como voy a leer en un segundo, de las organizaciones gremiales y del Ministerio de la Producción, que son las que van a tener que evaluar, coincidir y dictaminar con respecto a que se puede efectuar la excepción al régimen en un caso particular.
Entonces, en el artículo 10, después del inciso b) que arranca con "Presentar una declaración jurada en los mismos términos al 10 de diciembre de cada año...", se agregaría el siguiente párrafo: "Las excepciones al primer párrafo del presente inciso, deberán ser evaluadas y autorizadas por una comisión conformada por un representante de la autoridad de aplicación, un representante del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, un representante de las cámaras empresariales del sector, y un representante de las organizaciones gremiales con personería jurídica". Ahí terminaría el artículo, salvo que haya alguna modificación de forma, como la que quiere hacer el diputado Daer.
SR. DAER Señor presidente: las organizaciones son sindicales, con personería gremial.
SR. PRESIDENTE LASPINA Con la modificación propuesta por el compañero Daer quedaría: "un representante de las organizaciones sindicales con personería gremial".
SR. GONZÁLEZ Ha vuelto la democracia y quiero agradecerle la aclaración que ha hecho, porque me parecía a mí que como estaba y había quedado, era una foto para regular una película, pero con la aclaración me parece que habiendo una autoridad de aplicación está zanjado el inconveniente.
SR. PRESIDENTE LASPINA En el artículo 12 hacemos también una aclaración de forma, cuando a continuación de la famosa fórmula, como decía el diputado Kicillof del artículo 12, se refiere a las facturas electrónicas de compra. Quedará el párrafo redactado de la siguiente manera, que es básicamente sacar esta cuestión de la factura electrónica de compra y reemplazarla por "cualquier otro comprobante de compra..." -que mayormente hoy son electrónicos- "...autorizado por la AFIP."
Con lo cual quedaría redactado de la siguiente manera: "El valor de las autopartes nacionales adquiridas será el valor ex-fábrica de las autopartes, netos del Impuesto al Valor Agregado (IVA), gastos financieros, y de descuentos y bonificaciones, que surja de los respectivos comprobantes de facturación autorizados por la Administración Federal de Ingresos Públicos."
Tiene la palabra el señor diputado Bossio.
Con lo cual quedaría redactado de la siguiente manera: "El valor de las autopartes nacionales adquiridas será el valor ex-fábrica de las autopartes, netos del Impuesto al Valor Agregado (IVA), gastos financieros, y de descuentos y bonificaciones, que surja de los respectivos comprobantes de facturación autorizados por la Administración Federal de Ingresos Públicos."
Tiene la palabra el señor diputado Bossio.
SR. BOSSIO Quiero volver, si me disculpa, al artículo 2°, plataforma nueva, cuando usted pone el umbral de los 60 millones de dólares para considerar plataforma nueva según la base del año 2008. En ese año el umbral era de 15 millones de dólares y nosotros vemos más apropiado ese valor que el de 60 millones de dólares. Entiendo el concepto y estamos de acuerdo pero creemos que tuvo una razón en su momento, en 2008, y consideramos que tiene mucha más lógica 15 millones de dólares.
SR. PRESIDENTE LASPINA Dado que todavía tenemos algunos días hasta que se trate el proyecto, propongo revisar bien este supuesto que fue chequeado con algunos expertos del sector, a fin de poder llegar a un número razonable. Tomo el compromiso de revisarlo y lo plantearé, en todo caso, en el recinto.
Con respecto al artículo 13, después de la tabla con la fórmula que establece los beneficios, hemos consensuado elevar del 6 al 8 por ciento, por pedido del Frente para la Victoria y de otros bloques, para el caso de las matriceras a las cuales refiere el artículo 6° del proyecto.
En cuanto al artículo 14, también por pedido de algunos bloques, hemos elevado del 5 al 7 por ciento la devolución que se establece.
En el artículo 15 también hay que hacer una aclaración de forma, eliminar: "...facturas electrónicas de compra..." y reemplazarlo por: "...comprobantes de facturación autorizados por la Administración Federal de Ingresos Públicos...", con lo cual quedaría redactado de la siguiente manera: "Los beneficios señalados previamente surgirán de los respectivos comprobantes de facturación autorizados por la Administración Federal de Ingresos Públicos y tendrán vigencia a partir de la fecha de inicio del programa de producción aprobado por la Autoridad de Aplicación."
En el artículo 16 tomamos los comentarios realizados por el diputado Kicillof y entendemos la filosofía. Ese artículo precisamente da algunas definiciones de lo que debe ser considerado como una pieza de origen nacional. Por supuesto que es opinable respecto a la definición, si es muy o poco ambiciosa pero se trata de una definición clara respecto de cómo se considera una pieza de origen nacional a la hora del cómputo de la fórmula establecida en el artículo 12.
En cuanto al artículo 26 el diputado Pastori realizó un comentario relativo a las empresas que cometan alguna falta. Aquí se cambian las palabras "parte imputada" por "parte en cuestión" y esto tiene que ver con que el término imputado refiere a la consecución de un delito. En realidad en este artículo queremos referir que hay una cuestión o alguna anomalía que está siendo evaluada por la autoridad de aplicación respecto de esa empresa y no se trata de una imputación de carácter legal.
Tiene la palabra el señor diputado Pastori.
Con respecto al artículo 13, después de la tabla con la fórmula que establece los beneficios, hemos consensuado elevar del 6 al 8 por ciento, por pedido del Frente para la Victoria y de otros bloques, para el caso de las matriceras a las cuales refiere el artículo 6° del proyecto.
En cuanto al artículo 14, también por pedido de algunos bloques, hemos elevado del 5 al 7 por ciento la devolución que se establece.
En el artículo 15 también hay que hacer una aclaración de forma, eliminar: "...facturas electrónicas de compra..." y reemplazarlo por: "...comprobantes de facturación autorizados por la Administración Federal de Ingresos Públicos...", con lo cual quedaría redactado de la siguiente manera: "Los beneficios señalados previamente surgirán de los respectivos comprobantes de facturación autorizados por la Administración Federal de Ingresos Públicos y tendrán vigencia a partir de la fecha de inicio del programa de producción aprobado por la Autoridad de Aplicación."
En el artículo 16 tomamos los comentarios realizados por el diputado Kicillof y entendemos la filosofía. Ese artículo precisamente da algunas definiciones de lo que debe ser considerado como una pieza de origen nacional. Por supuesto que es opinable respecto a la definición, si es muy o poco ambiciosa pero se trata de una definición clara respecto de cómo se considera una pieza de origen nacional a la hora del cómputo de la fórmula establecida en el artículo 12.
En cuanto al artículo 26 el diputado Pastori realizó un comentario relativo a las empresas que cometan alguna falta. Aquí se cambian las palabras "parte imputada" por "parte en cuestión" y esto tiene que ver con que el término imputado refiere a la consecución de un delito. En realidad en este artículo queremos referir que hay una cuestión o alguna anomalía que está siendo evaluada por la autoridad de aplicación respecto de esa empresa y no se trata de una imputación de carácter legal.
Tiene la palabra el señor diputado Pastori.
SR. PASTORI En el mismo sentido, en el artículo anterior, el 25, también habría que hacer un cambio porque termina diciendo: "La graduación de las mismas se realizará de acuerdo al monto del beneficio y a los antecedentes en el cumplimiento del Régimen de la empresa imputada." Sugiero que se utilice el mismo criterio para cambiar esta palabra en el artículo 25.
SR. PRESIDENTE LASPINA Así se hará, diputado Pastori.
SR. PASTORI Aprovecho para solicitar una modificación y que en el final del primer párrafo del artículo 25 donde dice: "...del artículo 22 de la presente medida.", diga: "...del artículo 22 de la presente ley."
Por otro lado, en el comienzo del segundo párrafo de ese mismo artículo, donde dice: "La aplicación podrá hacerse en forma conjunta o alternativa...", propongo que se establezca: "Dicha sanción podrá aplicarse en forma conjunta o alternativa..." Considero que queda mejor redactado de este modo.
Por otro lado, en el comienzo del segundo párrafo de ese mismo artículo, donde dice: "La aplicación podrá hacerse en forma conjunta o alternativa...", propongo que se establezca: "Dicha sanción podrá aplicarse en forma conjunta o alternativa..." Considero que queda mejor redactado de este modo.
SR. PRESIDENTE LASPINA Así se hará, diputado. Quedan incorporadas en nuestro dictamen las modificaciones propuestas por el diputado Pastori.
Queda un cambio a este dictamen que estamos presentando y es la incorporación en el artículo 34 de la invitación a las provincias a adherir al régimen. Este es un punto importante.
Más allá de que todos somos diputados que representamos a distintas provincias de nuestro país, el gobierno nacional está haciendo un esfuerzo muy importante desde el punto de vista fiscal al promocionar la industria automotriz, la industria de autopartes, y al beneficiar impositivamente a las pymes. Este es el tema que vamos a tratar en la reunión de las 17. De modo tal que creemos que es hora de que las provincias también hagan su aporte y su contribución a las autopartistas y a las pequeñas y medianas empresas adhiriendo a este régimen, y por supuesto a los beneficios de la ley pyme.
Todos sabemos que nunca la situación fiscal en la Argentina es la mejor, pero vivimos momentos en los que se han dado una serie de cuestiones a partir de la llegada del nuevo gobierno del presidente Macri. La primera es la devolución gradual, en algunos casos y en otros rápidamente, del 15 por ciento de precoparticipación a las provincias. La segunda es la recuperación del acceso al crédito, ya hemos visto empresas que tenían que caminar mucho para obtener un peso de crédito a largo plazo o salir a los mercados internacionales para poder colocar productos de manera exitosa. Y la tercera es el proyecto de ley que ahora está en tratamiento en el Senado, es decir lo relativo a las cajas previsionales provinciales. Esto significa que no sabemos en qué medida una parte del déficit de las cajas previsionales provinciales va a ser financiado por el gobierno nacional. De modo tal que se dan tres condiciones nuevas, que no estaban, por las cuales las provincias ahora sí pueden revertir parte del tremendo aumento de impuestos que ha operado por distintos motivos en los últimos años.
Por lo tanto, en el artículo 34 -tenemos el consenso de todos los sectores políticos- invitamos a las provincias a adherirse al presente régimen, que significa que la provincia que quiere beneficiar a su industria autopartista o automotriz tiene un mecanismo que está fiscalizado, monitoreado e implementado por el gobierno nacional para sumarse y poner al bono electrónico del gobierno nacional un porcentaje de un bono electrónico provincial de la misma medida, que pueda ser computado para el pago de los impuestos, por ejemplo, una reducción de ingresos brutos para el sector, etcétera. Tienen la forma de hacerlo, el mecanismo y el régimen.
Me parece que todos los diputados, y obviamente los trabajadores y los empresarios, tienen una gran oportunidad con esta ley de ir a tocarle la puerta a los gobernadores y a los intendentes para que den una mano al sector, de la misma forma que lo deberían hacer con las pequeñas y medianas empresas, porque me parece que corresponde.
Entonces, el artículo 34 quedaría redactado de la siguiente forma: "Invitase a las Provincias, a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y a los Municipios a adherir al presente régimen de promoción mediante la extensión de bonos electrónicos de crédito fiscal, que podrán ser cedidos a terceros, para el pago de impuestos provinciales y/o tasas municipales."
Con eso, más allá del cambio de forma en el articulado, no tenemos más modificaciones.
Tiene la palabra el señor diputado Pastori.
Queda un cambio a este dictamen que estamos presentando y es la incorporación en el artículo 34 de la invitación a las provincias a adherir al régimen. Este es un punto importante.
Más allá de que todos somos diputados que representamos a distintas provincias de nuestro país, el gobierno nacional está haciendo un esfuerzo muy importante desde el punto de vista fiscal al promocionar la industria automotriz, la industria de autopartes, y al beneficiar impositivamente a las pymes. Este es el tema que vamos a tratar en la reunión de las 17. De modo tal que creemos que es hora de que las provincias también hagan su aporte y su contribución a las autopartistas y a las pequeñas y medianas empresas adhiriendo a este régimen, y por supuesto a los beneficios de la ley pyme.
Todos sabemos que nunca la situación fiscal en la Argentina es la mejor, pero vivimos momentos en los que se han dado una serie de cuestiones a partir de la llegada del nuevo gobierno del presidente Macri. La primera es la devolución gradual, en algunos casos y en otros rápidamente, del 15 por ciento de precoparticipación a las provincias. La segunda es la recuperación del acceso al crédito, ya hemos visto empresas que tenían que caminar mucho para obtener un peso de crédito a largo plazo o salir a los mercados internacionales para poder colocar productos de manera exitosa. Y la tercera es el proyecto de ley que ahora está en tratamiento en el Senado, es decir lo relativo a las cajas previsionales provinciales. Esto significa que no sabemos en qué medida una parte del déficit de las cajas previsionales provinciales va a ser financiado por el gobierno nacional. De modo tal que se dan tres condiciones nuevas, que no estaban, por las cuales las provincias ahora sí pueden revertir parte del tremendo aumento de impuestos que ha operado por distintos motivos en los últimos años.
Por lo tanto, en el artículo 34 -tenemos el consenso de todos los sectores políticos- invitamos a las provincias a adherirse al presente régimen, que significa que la provincia que quiere beneficiar a su industria autopartista o automotriz tiene un mecanismo que está fiscalizado, monitoreado e implementado por el gobierno nacional para sumarse y poner al bono electrónico del gobierno nacional un porcentaje de un bono electrónico provincial de la misma medida, que pueda ser computado para el pago de los impuestos, por ejemplo, una reducción de ingresos brutos para el sector, etcétera. Tienen la forma de hacerlo, el mecanismo y el régimen.
Me parece que todos los diputados, y obviamente los trabajadores y los empresarios, tienen una gran oportunidad con esta ley de ir a tocarle la puerta a los gobernadores y a los intendentes para que den una mano al sector, de la misma forma que lo deberían hacer con las pequeñas y medianas empresas, porque me parece que corresponde.
Entonces, el artículo 34 quedaría redactado de la siguiente forma: "Invitase a las Provincias, a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y a los Municipios a adherir al presente régimen de promoción mediante la extensión de bonos electrónicos de crédito fiscal, que podrán ser cedidos a terceros, para el pago de impuestos provinciales y/o tasas municipales."
Con eso, más allá del cambio de forma en el articulado, no tenemos más modificaciones.
Tiene la palabra el señor diputado Pastori.
SR. PASTORI Señor presidente: solamente quiero salvar dos errores en la redacción del artículo 12. En el último párrafo dice: "Asimismo, los productores de los bienes correspondientes a los incisos e), f) y g) del artículo 4° podrán..." -y ahí viene el tema- "...solicitar el mismo establecido en el punto anterior." Faltaría la palabra "beneficio".
SR. PRESIDENTE LASPINA ¿A qué artículo se refiere, señor diputado?
SR. PASTORI Me refiero al último párrafo del artículo 12.
Donde dice: "Podrán solicitar el mismo beneficio." Eso debería figurar antes de la palabra "establecido". Y después, más adelante, cuando dice: "...hacia terceros países y formen parte de un proceso de internalización." Y debería decir "internacionalización". Eso está en el mismo artículo 12 al final.
Donde dice: "Podrán solicitar el mismo beneficio." Eso debería figurar antes de la palabra "establecido". Y después, más adelante, cuando dice: "...hacia terceros países y formen parte de un proceso de internalización." Y debería decir "internacionalización". Eso está en el mismo artículo 12 al final.
SR. PRESIDENTE LASPINA Evidentemente está mal escrito.
Tiene la palabra el señor diputado Romero.
Tiene la palabra el señor diputado Romero.
SR. ROMERO Señor presidente: tenía muchas cosas para decir después de escuchar al ex ministro de Economía del gobierno del cual fui parte.
Este es el cuarto proyecto de ley que presento vinculado con este sector. Las tres primeras iniciativas no fueron sancionadas por decisión del ex ministro, quien hoy nos quiso dar una clase sobre mecánica y la verdad es que después de escucharlo no sé si entiende la diferencia entre un tanque de nafta y el tren delantero de un vehículo. Por ello, algunas cosas me las voy a guardar para el recinto.
Hemos hecho un esfuerzo enorme y lo quiero reconocer, extendido a todos los presidentes de bloque que han apoyado y acompañado con las sugerencias y los aportes que nos han brindado.
Este es un proyecto de ley muy importante, no solamente para la organización a la cual pertenezco, que es SMATA. El sector autopartista tiene más de un millón de puestos de trabajo. Hay trabajadores de la Unión Obrera Metalúrgica, textiles, del caucho, químicos y plásticos. Son muchos los gremios que participan de esta actividad. Estamos elaborando una ley que, en primer lugar, va a garantizar los puestos de trabajo para un sector que hoy está complicado. En segundo lugar, al llevar adelante esta ley, podemos generar puestos de trabajo.
Hoy tenemos un nivel de integración de piezas que no supera el 20 por ciento, salvo una rara excepción. Estamos hablando de una mano de obra del 3 por ciento. Esto lo digo para que los diputados tengan una dimensión del tema que estamos analizando.
Cada punto que sumemos a la integración de piezas nacionales son cinco mil puestos de trabajo directos que podemos crear. Esta es la dimensión de la ley y es lo que vamos a votar el jueves. Por eso, les comunico que mi organización ese día ha decidido movilizarse al Congreso para apoyar este proyecto. Gracias, señor presidente.
Este es el cuarto proyecto de ley que presento vinculado con este sector. Las tres primeras iniciativas no fueron sancionadas por decisión del ex ministro, quien hoy nos quiso dar una clase sobre mecánica y la verdad es que después de escucharlo no sé si entiende la diferencia entre un tanque de nafta y el tren delantero de un vehículo. Por ello, algunas cosas me las voy a guardar para el recinto.
Hemos hecho un esfuerzo enorme y lo quiero reconocer, extendido a todos los presidentes de bloque que han apoyado y acompañado con las sugerencias y los aportes que nos han brindado.
Este es un proyecto de ley muy importante, no solamente para la organización a la cual pertenezco, que es SMATA. El sector autopartista tiene más de un millón de puestos de trabajo. Hay trabajadores de la Unión Obrera Metalúrgica, textiles, del caucho, químicos y plásticos. Son muchos los gremios que participan de esta actividad. Estamos elaborando una ley que, en primer lugar, va a garantizar los puestos de trabajo para un sector que hoy está complicado. En segundo lugar, al llevar adelante esta ley, podemos generar puestos de trabajo.
Hoy tenemos un nivel de integración de piezas que no supera el 20 por ciento, salvo una rara excepción. Estamos hablando de una mano de obra del 3 por ciento. Esto lo digo para que los diputados tengan una dimensión del tema que estamos analizando.
Cada punto que sumemos a la integración de piezas nacionales son cinco mil puestos de trabajo directos que podemos crear. Esta es la dimensión de la ley y es lo que vamos a votar el jueves. Por eso, les comunico que mi organización ese día ha decidido movilizarse al Congreso para apoyar este proyecto. Gracias, señor presidente.
SR. PRESIDENTE LASPINA Tiene la palabra el señor diputado Grandinetti.
SR. GRANDINETTI Señor presidente: festejo lo que acaba de mencionar el señor diputado preopinante acerca del impacto en el empleo privado que tiene esta norma y el consenso que se ha logrado. Particularmente quisiera destacar algunos puntos que usted estuvo mencionando.
Uno muy particular habla de la provincia de Santa Fe, que no somos ajenos, por lo menos nosotros y algún otro diputado que estaba opinando recién, y la inclusión de la maquinaria agrícola, porque, en realidad, hemos notado que en los últimos años la han pasado muy mal y que una norma que tenga como fin el fortalecimiento del autopartismo en la República Argentina, con impacto en el empleo, particularmente para la provincia de Santa Fe, donde está el gran grueso de la maquinaria agrícola, era absolutamente indispensable. Por eso creo que es justo incorporarla como usted la había mencionado.
A mí no me quedó claro, en el inciso h) del artículo 4° que lo hemos redactado podría quedar como "maquinaria agrícola, maquinaria vial autopropulsada, remolques y semirremolques." Estaba como e) y f) también, pero la redacción no importa, es una cuestión de forma.
También creo que habría que modificar el artículo 13, en particular el cuadro, porque ahí tendríamos que incorporar, precisamente, la maquinaria agrícola que estábamos mencionando.
El otro punto a destacar -y coincidiendo con las modificaciones que se llevaron adelante- es la mejora del beneficio a las herramentales. Efectivamente, es muy necesario esto de pasarlo del 6 al 8 por ciento, y si se permite quedaría redactado el artículo 13 de la siguiente manera: "En el caso del beneficio sobre los bienes referidos en el artículo 6°, el porcentaje establecido será del 8 por ciento, aplicable únicamente sobre el valor ex fabrica de los mismos neto del impuesto al valor Agregado (IVA), gastos financieros, descuentos y bonificaciones."
Entonces, la mejora y mayor beneficio para las herramentales pasaría de 6 al 8 por ciento, según usted comentaba.
El otro punto que me parece también destacar es el de incrementar el beneficio a la forja y fundiciones, que realmente la están pasando muy mal. La aspiración era llegar en vez de 5 al 10, pero me parece que, por lo menos, el 7 por ciento es mejorar de forma considerable y creo que la redacción para el artículo 14 podría ser la siguiente: "Sin perjuicio de lo establecido en el artículo 13, la adquisición de piezas forjadas o fundidas de metal ferroso, o no ferroso, tanto para su incorporación para el vehículo como destinada a la producción in house de autopartes percibirá un beneficio adicional del 7 por ciento, siempre que cumplan con las condiciones de producto nacional establecido en los incisos b.1 y b.2 del artículo 16, aplicable sobre el valor ex fabrica de dichos bienes, neto del impuesto al valor agregado (IVA), gastos financieros, descuentos, bonificaciones."
Por último, y esto usted no lo había mencionado, pero me parece que también sería importante, y lo dejamos a consideración y espero que sea la metodología habitual, que no digamos que todo está cerrado. Más allá de felicitar al diputado Romero por la iniciativa, estamos acá para discutir.
En el artículo 18 proponemos eliminar directamente la optatividad del anticipo financiero y para eliminar esta posibilidad de que la autoridad de aplicación pueda evaluar la relevancia del instrumento en el adelanto del beneficio, considerando la alternativa de financiamiento que pudiera existir, proponemos eliminar la última oración del artículo 18.
Uno muy particular habla de la provincia de Santa Fe, que no somos ajenos, por lo menos nosotros y algún otro diputado que estaba opinando recién, y la inclusión de la maquinaria agrícola, porque, en realidad, hemos notado que en los últimos años la han pasado muy mal y que una norma que tenga como fin el fortalecimiento del autopartismo en la República Argentina, con impacto en el empleo, particularmente para la provincia de Santa Fe, donde está el gran grueso de la maquinaria agrícola, era absolutamente indispensable. Por eso creo que es justo incorporarla como usted la había mencionado.
A mí no me quedó claro, en el inciso h) del artículo 4° que lo hemos redactado podría quedar como "maquinaria agrícola, maquinaria vial autopropulsada, remolques y semirremolques." Estaba como e) y f) también, pero la redacción no importa, es una cuestión de forma.
También creo que habría que modificar el artículo 13, en particular el cuadro, porque ahí tendríamos que incorporar, precisamente, la maquinaria agrícola que estábamos mencionando.
El otro punto a destacar -y coincidiendo con las modificaciones que se llevaron adelante- es la mejora del beneficio a las herramentales. Efectivamente, es muy necesario esto de pasarlo del 6 al 8 por ciento, y si se permite quedaría redactado el artículo 13 de la siguiente manera: "En el caso del beneficio sobre los bienes referidos en el artículo 6°, el porcentaje establecido será del 8 por ciento, aplicable únicamente sobre el valor ex fabrica de los mismos neto del impuesto al valor Agregado (IVA), gastos financieros, descuentos y bonificaciones."
Entonces, la mejora y mayor beneficio para las herramentales pasaría de 6 al 8 por ciento, según usted comentaba.
El otro punto que me parece también destacar es el de incrementar el beneficio a la forja y fundiciones, que realmente la están pasando muy mal. La aspiración era llegar en vez de 5 al 10, pero me parece que, por lo menos, el 7 por ciento es mejorar de forma considerable y creo que la redacción para el artículo 14 podría ser la siguiente: "Sin perjuicio de lo establecido en el artículo 13, la adquisición de piezas forjadas o fundidas de metal ferroso, o no ferroso, tanto para su incorporación para el vehículo como destinada a la producción in house de autopartes percibirá un beneficio adicional del 7 por ciento, siempre que cumplan con las condiciones de producto nacional establecido en los incisos b.1 y b.2 del artículo 16, aplicable sobre el valor ex fabrica de dichos bienes, neto del impuesto al valor agregado (IVA), gastos financieros, descuentos, bonificaciones."
Por último, y esto usted no lo había mencionado, pero me parece que también sería importante, y lo dejamos a consideración y espero que sea la metodología habitual, que no digamos que todo está cerrado. Más allá de felicitar al diputado Romero por la iniciativa, estamos acá para discutir.
En el artículo 18 proponemos eliminar directamente la optatividad del anticipo financiero y para eliminar esta posibilidad de que la autoridad de aplicación pueda evaluar la relevancia del instrumento en el adelanto del beneficio, considerando la alternativa de financiamiento que pudiera existir, proponemos eliminar la última oración del artículo 18.
SR. PRESIDENTE LASPINA Respecto de esta última cuestión, nosotros habíamos recibido sugerencias de subir ese porcentaje. Creemos que, por un lado, realmente el gobierno está haciendo un gran esfuerzo en financiar con este anticipo del 15 por ciento de futuros impuestos, que van a ser reintegrados o desgravados al sector autopartista, es decir está haciendo un doble esfuerzo al reducir impuestos y, además, anticipárselos; pero también hay que considerar, a la hora de legislar, el riesgo que implica para el fisco asociarse a este proyecto de financiamiento.
Nosotros tenemos que dejar descansar en la reglamentación de la autoridad de aplicación un criterio de equilibrio para determinar quién y cómo merece ser beneficiado por este esfuerzo financiero y de toma de riesgo que va a hacer el Estado nacional. Por eso pensamos que la automatización, si bien va en la dirección de hacer lo más beneficioso para las compañías, debería ser evaluada en términos del riesgo que se asume con esta operación. Por eso sugerimos mantenerlo y así lo habíamos comentado.
Con respecto a la tabla modificada del artículo 13, es un buen punto. Lo estamos modificando. Por supuesto compartimos el resto de los cambios.
Tiene la palabra el señor diputado Bossio.
Nosotros tenemos que dejar descansar en la reglamentación de la autoridad de aplicación un criterio de equilibrio para determinar quién y cómo merece ser beneficiado por este esfuerzo financiero y de toma de riesgo que va a hacer el Estado nacional. Por eso pensamos que la automatización, si bien va en la dirección de hacer lo más beneficioso para las compañías, debería ser evaluada en términos del riesgo que se asume con esta operación. Por eso sugerimos mantenerlo y así lo habíamos comentado.
Con respecto a la tabla modificada del artículo 13, es un buen punto. Lo estamos modificando. Por supuesto compartimos el resto de los cambios.
Tiene la palabra el señor diputado Bossio.
SR. BOSSIO El bloque Justicialista no solo trabajó en soledad esta norma hace unos años sino que también lo hizo con las distintas cámaras empresarias, en consulta con el sindicato de SMATA y otros. Se trata de una tarea muy profesional y estudiada del diputado Romero y no solo quiero felicitarlo a él sino también reconocer el esfuerzo que ha hecho para que el tema se vea plasmado en un dictamen de comisión.
El segundo punto que me parece importante destacar es que la Argentina es uno de los pocos países que tiene terminales automotrices, una industria automotriz, y eso tiene que ver con una iniciativa que surgió allá por mitad de los años 50, quizás antes, fortalecida con el ex presidente Illia.
La verdad es que el desarrollo de la industria automotriz con el ex presidente Arturo Illia fue increíble y se llegó no solo a la instalación de once terminales automotrices sino fundamentalmente a la concepción de que esos autos debían tener partes nacionales. El nivel de integración en la Argentina llegó al 70 por ciento. El compañero Romero me comentaba que un Falcon en la Argentina llegó a tener el 90 por ciento de sus partes nacionales. Es decir que cuando hay industria, hay calidad de trabajo y la existencia de la industria no solo es buena para la Argentina sino también para el trabajador. Está comprobado que la industria argentina genera mejor calidad de trabajo, mejores condiciones de trabajo y mejores perspectivas para las familias, con lo cual a nosotros nos gustaría, sobre todo a mí que vengo del peronismo, que todos podamos apoyar de manera unánime el primer proyecto de ley que estamos trabajando para la industria nacional.
Los temas que tienen que ver con el trabajo fueron muy bien abordados por Oscar Romero y por el resto de los compañeros diputados, pero hay un punto que no es menor, me refiero a la brecha que se ha dado durante todos estos años.
La cuestión de la demanda es otra discusión. Claramente hay un problema de demanda. Si bien se han vendido más autos que en el mismo período del año anterior, es cierto que las exportaciones han caído, se vendió más a nivel local, cayeron las exportaciones fundamentalmente a Brasil pero en forma independiente a la demanda, que es un tema a discutir y tiene que ver con otro tipo de políticas. Acá estamos discutiendo un tema central no solo para la industria sino para la macroeconomía, es decir, la cuestión de las divisas.
Las discusiones en los equipos económicos en torno a los regímenes del sector automotriz y al régimen de Tierra del Fuego se basan en si son o no deficitarios en materia de divisas. El régimen automotriz es deficitario en materia de divisas por una cuestión de fondo que tiene que ver con la poca integración de partes nacionales de los autos. Por lo tanto, no solo estamos generando trabajo sino que estamos formando industria y además estamos dando incentivos, desde una idea muy moderna y que otros países también aplican. Porque el programa Innova Auto -como hacía referencia un diputado preopinante- existe en Brasil y ha dado la posibilidad de desarrollo de industrias que tienen en cuenta la escala y que son globales. Además, hay que tener plataformas no solo para producir en la Argentina sino para producir extra Argentina y se incorporó no solo la industria automotriz sino también la agroindustria, la vial, las cajas de transmisión y sus componentes.
Yo vengo de la provincia de Buenos Aires donde hay muchísimas pymes vinculadas con la industria automotriz. No solo es la provincia que tiene mayor cantidad de terminales sino que además hay una serie de industrias de autopartes en materia automotriz y también de matriceros y de herramentales.
Recién el diputado Grandinetti se refirió a los herramentales, las fundiciones y las matriceras. El artículo 6° de la iniciativa también es una innovación para las matriceras, que están viviendo un momento complicado y difícil. Tanto este proyecto como el de pymes son saludables y van en esa línea.
Nosotros no somos técnicos pero entendemos algunas cosas, no subestimamos a quien no es técnico, y tenemos la humildad de saber y de decir que durante el período anterior creció la demanda y la producción de autos pero aumentó mucho menos la producción de autopartes, entonces, hay un problema. Creció 500 o 600 por ciento la producción de autos, se vendió más, hubo un pico de producción y de ventas en el año 2013 y esto claramente generó un problema de divisas.
Recuerdo miles de charlas con la ex presidenta, soy absolutamente franco, con respecto a cómo se formaban las partes. Les presento un caso: en las primeras netbooks que compramos hasta la caja venía de China. En la segunda parte que compramos, mandamos el pliego a la Secretaría de Industria, al Ministerio de Economía, para que nos asesorara a ver de qué manera los manuales, las cajas, las carcasas y las baterías se podían hacer en la Argentina. En el pliego pusimos toda una serie de elementos para incorporar partes de las netbooks que se les daban a los chicos. Quizás esto lo saben quienes pertenecen a Tierra del Fuego. Se desarrollaron cuatro o cinco empresas no solo de ensamblaje sino fundamentalmente de baterías, que no llegaban a cubrir la cantidad de demanda.
Entonces, mi primera experiencia al respecto es que no hay posibilidad de que se fabriquen más autopartes argentinas si no existe decisión política. Acá hay zanahoria y hay decisión política, acá hay zanahoria porque hay un bono electrónico pero fundamentalmente hay una decisión política de aumentar el nivel de integración de las partes de los autos que producimos en la Argentina y además de ponernos en sintonía con el mundo, no solo para las partes locales de los autos locales sino fundamentalmente para lo que producen otros países.
Por eso creemos, señor presidente, que estamos analizando un proyecto de ley del cual tenemos que sentirnos orgullosos. Seguramente hay muchas cosas para mejorar, es clave la autoridad de aplicación y la Secretaria de Industria tiene una trayectoria al respecto. También son claves los formularios, este no es un derecho, no se debe a que existan quinientas empresas de autopartes y no se tiene el bono solo por ser autopartista. Hay que presentar un proyecto, lo tienen que aprobar, existen dificultades en la presentación del proyecto, no es sencillo, hay cuestiones técnicas complejas asociadas a una historia en la Secretaría de Industria. También es cierto que han fracasado muchos y por eso es importante que el Congreso, la Auditoría General de la Nación y los organismos de control estén detrás de esta historia.
Además, se va a derogar la ley 21.932. ¿Saben quién la sancionó? Videla. Está vigente hasta que nosotros sancionemos una nueva ley del sistema de autopartes, con lo cual también hay una cuestión simbólica porque el proceso de desindustrialización en la Argentina arrancó con la dictadura, si bien en los últimos años -me consta- quisimos reparar e hicimos un gran esfuerzo para volver a los niveles de demanda, ser una industria y un motor, todavía como Estado no hemos terminado.
Ha cambiado mucho el mundo. El 40 por ciento de las autopartes para los autos del futuro están compuestas por sistemas. Este proyecto no funcionaría si tampoco existiera una ley de software. Hay una ley de software y entiendo que también debemos mejorar algunas cuestiones porque los avances tecnológicos son tan rápidos que muchas veces quedan por detrás de las leyes.
Quiero decir al presidente de la comisión que estamos orgullosos del bloque Justicialista. Agradecemos al Poder Ejecutivo y al resto de los bloques la posibilidad de que hoy estemos debatiendo este proyecto, artículo por artículo, como un aprendizaje, para que no lleguemos al recinto a discutir los 36 artículos, votándolos nominalmente, y que efectivamente podamos lograr un salto para aquellas pequeñas y medianas empresas que quieren desarrollarse.
Hay talento, desarrollo e invento argentino y me parece que puede estar a disposición de una industria que es central, no sólo para generar empleo, sino fundamentalmente para la estructura de nuestra balanza comercial y concretamente la generación de divisas.
El segundo punto que me parece importante destacar es que la Argentina es uno de los pocos países que tiene terminales automotrices, una industria automotriz, y eso tiene que ver con una iniciativa que surgió allá por mitad de los años 50, quizás antes, fortalecida con el ex presidente Illia.
La verdad es que el desarrollo de la industria automotriz con el ex presidente Arturo Illia fue increíble y se llegó no solo a la instalación de once terminales automotrices sino fundamentalmente a la concepción de que esos autos debían tener partes nacionales. El nivel de integración en la Argentina llegó al 70 por ciento. El compañero Romero me comentaba que un Falcon en la Argentina llegó a tener el 90 por ciento de sus partes nacionales. Es decir que cuando hay industria, hay calidad de trabajo y la existencia de la industria no solo es buena para la Argentina sino también para el trabajador. Está comprobado que la industria argentina genera mejor calidad de trabajo, mejores condiciones de trabajo y mejores perspectivas para las familias, con lo cual a nosotros nos gustaría, sobre todo a mí que vengo del peronismo, que todos podamos apoyar de manera unánime el primer proyecto de ley que estamos trabajando para la industria nacional.
Los temas que tienen que ver con el trabajo fueron muy bien abordados por Oscar Romero y por el resto de los compañeros diputados, pero hay un punto que no es menor, me refiero a la brecha que se ha dado durante todos estos años.
La cuestión de la demanda es otra discusión. Claramente hay un problema de demanda. Si bien se han vendido más autos que en el mismo período del año anterior, es cierto que las exportaciones han caído, se vendió más a nivel local, cayeron las exportaciones fundamentalmente a Brasil pero en forma independiente a la demanda, que es un tema a discutir y tiene que ver con otro tipo de políticas. Acá estamos discutiendo un tema central no solo para la industria sino para la macroeconomía, es decir, la cuestión de las divisas.
Las discusiones en los equipos económicos en torno a los regímenes del sector automotriz y al régimen de Tierra del Fuego se basan en si son o no deficitarios en materia de divisas. El régimen automotriz es deficitario en materia de divisas por una cuestión de fondo que tiene que ver con la poca integración de partes nacionales de los autos. Por lo tanto, no solo estamos generando trabajo sino que estamos formando industria y además estamos dando incentivos, desde una idea muy moderna y que otros países también aplican. Porque el programa Innova Auto -como hacía referencia un diputado preopinante- existe en Brasil y ha dado la posibilidad de desarrollo de industrias que tienen en cuenta la escala y que son globales. Además, hay que tener plataformas no solo para producir en la Argentina sino para producir extra Argentina y se incorporó no solo la industria automotriz sino también la agroindustria, la vial, las cajas de transmisión y sus componentes.
Yo vengo de la provincia de Buenos Aires donde hay muchísimas pymes vinculadas con la industria automotriz. No solo es la provincia que tiene mayor cantidad de terminales sino que además hay una serie de industrias de autopartes en materia automotriz y también de matriceros y de herramentales.
Recién el diputado Grandinetti se refirió a los herramentales, las fundiciones y las matriceras. El artículo 6° de la iniciativa también es una innovación para las matriceras, que están viviendo un momento complicado y difícil. Tanto este proyecto como el de pymes son saludables y van en esa línea.
Nosotros no somos técnicos pero entendemos algunas cosas, no subestimamos a quien no es técnico, y tenemos la humildad de saber y de decir que durante el período anterior creció la demanda y la producción de autos pero aumentó mucho menos la producción de autopartes, entonces, hay un problema. Creció 500 o 600 por ciento la producción de autos, se vendió más, hubo un pico de producción y de ventas en el año 2013 y esto claramente generó un problema de divisas.
Recuerdo miles de charlas con la ex presidenta, soy absolutamente franco, con respecto a cómo se formaban las partes. Les presento un caso: en las primeras netbooks que compramos hasta la caja venía de China. En la segunda parte que compramos, mandamos el pliego a la Secretaría de Industria, al Ministerio de Economía, para que nos asesorara a ver de qué manera los manuales, las cajas, las carcasas y las baterías se podían hacer en la Argentina. En el pliego pusimos toda una serie de elementos para incorporar partes de las netbooks que se les daban a los chicos. Quizás esto lo saben quienes pertenecen a Tierra del Fuego. Se desarrollaron cuatro o cinco empresas no solo de ensamblaje sino fundamentalmente de baterías, que no llegaban a cubrir la cantidad de demanda.
Entonces, mi primera experiencia al respecto es que no hay posibilidad de que se fabriquen más autopartes argentinas si no existe decisión política. Acá hay zanahoria y hay decisión política, acá hay zanahoria porque hay un bono electrónico pero fundamentalmente hay una decisión política de aumentar el nivel de integración de las partes de los autos que producimos en la Argentina y además de ponernos en sintonía con el mundo, no solo para las partes locales de los autos locales sino fundamentalmente para lo que producen otros países.
Por eso creemos, señor presidente, que estamos analizando un proyecto de ley del cual tenemos que sentirnos orgullosos. Seguramente hay muchas cosas para mejorar, es clave la autoridad de aplicación y la Secretaria de Industria tiene una trayectoria al respecto. También son claves los formularios, este no es un derecho, no se debe a que existan quinientas empresas de autopartes y no se tiene el bono solo por ser autopartista. Hay que presentar un proyecto, lo tienen que aprobar, existen dificultades en la presentación del proyecto, no es sencillo, hay cuestiones técnicas complejas asociadas a una historia en la Secretaría de Industria. También es cierto que han fracasado muchos y por eso es importante que el Congreso, la Auditoría General de la Nación y los organismos de control estén detrás de esta historia.
Además, se va a derogar la ley 21.932. ¿Saben quién la sancionó? Videla. Está vigente hasta que nosotros sancionemos una nueva ley del sistema de autopartes, con lo cual también hay una cuestión simbólica porque el proceso de desindustrialización en la Argentina arrancó con la dictadura, si bien en los últimos años -me consta- quisimos reparar e hicimos un gran esfuerzo para volver a los niveles de demanda, ser una industria y un motor, todavía como Estado no hemos terminado.
Ha cambiado mucho el mundo. El 40 por ciento de las autopartes para los autos del futuro están compuestas por sistemas. Este proyecto no funcionaría si tampoco existiera una ley de software. Hay una ley de software y entiendo que también debemos mejorar algunas cuestiones porque los avances tecnológicos son tan rápidos que muchas veces quedan por detrás de las leyes.
Quiero decir al presidente de la comisión que estamos orgullosos del bloque Justicialista. Agradecemos al Poder Ejecutivo y al resto de los bloques la posibilidad de que hoy estemos debatiendo este proyecto, artículo por artículo, como un aprendizaje, para que no lleguemos al recinto a discutir los 36 artículos, votándolos nominalmente, y que efectivamente podamos lograr un salto para aquellas pequeñas y medianas empresas que quieren desarrollarse.
Hay talento, desarrollo e invento argentino y me parece que puede estar a disposición de una industria que es central, no sólo para generar empleo, sino fundamentalmente para la estructura de nuestra balanza comercial y concretamente la generación de divisas.
SR. PRESIDENTE LASPINA Tiene la palabra el señor diputado De Mendiguren.
SR. DE MENDIGUREN Señor presidente: estamos llegando al final de una reunión de comisión -no digo histórica- pero para mí muy importante.
Más allá de lo que hemos legislado y aprobado, acá ha habido una semana de mucho trabajo. Felicito a los integrantes de las comisiones intervinientes. En la comisión que presido -Industria- hubo más de siete reuniones de asesores para poder llegar a estos acuerdos.
Es una iniciativa que ha encontrado trabajando juntos al movimiento obrero y a los empresarios nacionales. Es una norma -hoy lo hablábamos con el diputado Kicillof- que marca un rumbo. Se trata de un rumbo importante que es tener en claro -y no que parezcan cosas confusas- qué es lo que realmente estamos brindando al trabajo argentino. Pero hay algo que para mí fue muy importante y no quiero dejarlo pasar. Me refiero al hecho de que hayamos incorporado el sistema de maquinaria agrícola y el de maquinaria vial autopropulsada. Esto puede implicar para Argentina una señal mucho más profunda. Es difícil que nuestro país pueda ser un jugador a escala mundial en la industria automotriz. Ya las marcas existen y están instaladas. Corea lo hizo pero hace muchos años. Pero no me cabe ninguna duda -y en eso vamos a trabajar estos dos años con toda intensidad en nuestra comisión- que Argentina debe ser un jugador importantísimo en el negocio de la maquinaria agrícola a nivel internacional. Tenemos los desarrollos en siembra directa y una tecnología nacional que, cada vez que la macroeconomía se lo permitió, demostró lo que se avanzó en especialización.
La industria de la agricultura de precisión en la Argentina en los últimos cinco años pasó, de no existir, a ocupar el cuarto lugar en innovación a nivel mundial y primera en Latinoamérica.
Fíjense ustedes que tenemos el expertise de contar con una de las tierras más fértiles del mundo y una base empresarial con muchos años de historia que, insisto, no puede pelear contra la década del 90 ni contra políticas neoliberales que no permitieron que se desarrollara. Además, hoy toda esa ciencia y tecnología que se está agregando al sector ya está incorporada en una cosechadora. Hoy, una cosechadora en la Argentina es capaz de sembrar potrero por potrero y dosificar la semilla en cada lugar de esos potreros. Además, se trabaja con navegador satelital. Entonces, felicito a todos ustedes. Esta reunión es una síntesis de la Argentina que todos queremos ver venir. Se trata de un Congreso trabajando, negociando, buscando debatir una norma y, sobre todo, mostrando un rumbo. Por eso espero que esta ley marque eso. La idea es que esto sea el principio. Es decir, el principio de un nuevo diálogo entre los trabajadores. Eso es lo que me gustaría ver reflejado en algún Consejo Económico y Social. Nos sentamos a discutir futuro; nos sentamos a proteger empleo; nos sentamos a coordinar nuevo empleo con tecnología, pensando en el futuro.
Agradezco y espero que sea un ejemplo que podamos seguir repitiendo en los próximos dos años.
Más allá de lo que hemos legislado y aprobado, acá ha habido una semana de mucho trabajo. Felicito a los integrantes de las comisiones intervinientes. En la comisión que presido -Industria- hubo más de siete reuniones de asesores para poder llegar a estos acuerdos.
Es una iniciativa que ha encontrado trabajando juntos al movimiento obrero y a los empresarios nacionales. Es una norma -hoy lo hablábamos con el diputado Kicillof- que marca un rumbo. Se trata de un rumbo importante que es tener en claro -y no que parezcan cosas confusas- qué es lo que realmente estamos brindando al trabajo argentino. Pero hay algo que para mí fue muy importante y no quiero dejarlo pasar. Me refiero al hecho de que hayamos incorporado el sistema de maquinaria agrícola y el de maquinaria vial autopropulsada. Esto puede implicar para Argentina una señal mucho más profunda. Es difícil que nuestro país pueda ser un jugador a escala mundial en la industria automotriz. Ya las marcas existen y están instaladas. Corea lo hizo pero hace muchos años. Pero no me cabe ninguna duda -y en eso vamos a trabajar estos dos años con toda intensidad en nuestra comisión- que Argentina debe ser un jugador importantísimo en el negocio de la maquinaria agrícola a nivel internacional. Tenemos los desarrollos en siembra directa y una tecnología nacional que, cada vez que la macroeconomía se lo permitió, demostró lo que se avanzó en especialización.
La industria de la agricultura de precisión en la Argentina en los últimos cinco años pasó, de no existir, a ocupar el cuarto lugar en innovación a nivel mundial y primera en Latinoamérica.
Fíjense ustedes que tenemos el expertise de contar con una de las tierras más fértiles del mundo y una base empresarial con muchos años de historia que, insisto, no puede pelear contra la década del 90 ni contra políticas neoliberales que no permitieron que se desarrollara. Además, hoy toda esa ciencia y tecnología que se está agregando al sector ya está incorporada en una cosechadora. Hoy, una cosechadora en la Argentina es capaz de sembrar potrero por potrero y dosificar la semilla en cada lugar de esos potreros. Además, se trabaja con navegador satelital. Entonces, felicito a todos ustedes. Esta reunión es una síntesis de la Argentina que todos queremos ver venir. Se trata de un Congreso trabajando, negociando, buscando debatir una norma y, sobre todo, mostrando un rumbo. Por eso espero que esta ley marque eso. La idea es que esto sea el principio. Es decir, el principio de un nuevo diálogo entre los trabajadores. Eso es lo que me gustaría ver reflejado en algún Consejo Económico y Social. Nos sentamos a discutir futuro; nos sentamos a proteger empleo; nos sentamos a coordinar nuevo empleo con tecnología, pensando en el futuro.
Agradezco y espero que sea un ejemplo que podamos seguir repitiendo en los próximos dos años.
SR. PRESIDENTE LASPINA Si no hay más oradores, damos por finalizada la reunión. A las 17 nos volvemos a encontrar para analizar el tema de la ley pymes.
Es la hora 16.