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INDUSTRIA
Comisión PermanenteOf. Administrativa: Piso P01 Oficina 106
Miércoles 12.00hs
Of. Administrativa: (054-11) 6075-2107 Internos 2107/06/68
cindustria@hcdn.gob.ar
- LEGISLACION GENERAL
- INDUSTRIA
- INTERESES MARITIMOS, FLUVIALES, PESQUEROS Y PORTUARIOS
Reunión del día 14/11/2017
- CONJUNTA
- En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a los 14 días del mes de noviembre de 2017, a la hora 16 y 24:
SR. PRESIDENTE SOLANAS Damos comienzo a la reunión conjunta de las comisiones de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios, de Legislación General, de Industria y de Presupuesto y Hacienda.
De modo tal que voy a poner a consideración el temario de la reunión conjunta. Trataremos el expediente 0293-s-2016, proyecto de ley en revisión por el que se crea el Régimen de Promoción de la Industria Naval Argentina; y el expediente 0294-s-2016, proyecto de ley en revisión por el cual se establece el desarrollo de la Marina Mercante Nacional y la Integración Fluvial Regional.
Iniciada la reunión de comisiones, queda abierta la lista de oradores para los diputados y diputadas que quieran hacer uso de ella.
Tiene la palabra la señora diputada Passo.
De modo tal que voy a poner a consideración el temario de la reunión conjunta. Trataremos el expediente 0293-s-2016, proyecto de ley en revisión por el que se crea el Régimen de Promoción de la Industria Naval Argentina; y el expediente 0294-s-2016, proyecto de ley en revisión por el cual se establece el desarrollo de la Marina Mercante Nacional y la Integración Fluvial Regional.
Iniciada la reunión de comisiones, queda abierta la lista de oradores para los diputados y diputadas que quieran hacer uso de ella.
Tiene la palabra la señora diputada Passo.
SRA. PASSO Señor presidente: agradezco la presencia y participación de cada uno de los señores diputados presentes en representación de las cuatro comisiones que hoy en forma conjunta van a abordar el tratamiento de estos dos proyectos de ley.
Este día es histórico, como mencionamos recién en la charla con representantes gremiales y de las cámaras empresariales que hoy también están aquí presentes.
Digo "hoy también" porque al formar parte de muchas comisiones, como la mayoría de ustedes, sé que la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios es la única que, a lo largo de estos casi dos años, cada vez que se reúne siempre cuenta con la presencia de público, independientemente del tema que se trate. Siempre vienen las personas que se encuentran interesadas en conocer los temas y proyectos que abordamos y cuáles son las consecuencias inmediatas de su tratamiento.
Agradezco a ellos particularmente su presencia porque han sido los impulsores para que hoy podamos estar aquí tratando estos proyectos que se presentan en el marco de un consenso que ha sido logrado también con el oficialismo, sobre todo en este último tiempo.
La presencia de estos actores no acontece por casualidad sino porque hay un interés común y una necesidad de trabajo y crecimiento del sector y también del desarrollo de las economías regionales que dependen de aquel.
El primer impulsor del sector en nuestra República Argentina fue Juan Domingo Perón, pero lamentablemente debemos decir que llevamos más de treinta años de decadencia de la actividad.
Estos actores saben las necesidades que existen porque las padecen día a día al estar cerca de la gente y, particularmente, de los trabajadores de estos sectores.
Estamos tratando dos proyectos que cuentan con sanción del Senado y que recorrieron un largo camino este año en la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios, que es la cabecera. Este largo camino estuvo plagado de dificultades. Por ejemplo, los días 23 y 30 de mayo y 6, 23 y 27 de junio de este año se intentó sin éxito tratar este tema en esa comisión, no logrando el quórum necesario.
Por otras cuestiones administrativas y por la presión y la solidez con la que muchos nos logramos plantar -de la mano de estos gremios y estas cámaras- ante el presidente de la Cámara de Diputados, logramos que el oficialismo incluyera este tema en la agenda y hoy celebro que estemos juntos impulsando este dictamen.
Seguramente este dictamen no es el ideal. En esta comisión habíamos arribado a lo que podríamos decir era un dictamen ideal o casi un proyecto ideal, pero también es cierto -y somos conscientes- que en esta Cámara estamos dispuestos a acompañar los proyectos posibles. Gracias al debate y al consenso que se ha logrado por parte de todas las fuerzas políticas que integramos esta comisión, hemos arribado a este dictamen que genera diferentes beneficios para los empleadores y los trabajadores y también para todos los representantes del sector.
Estoy segura de que este año estos dos proyectos se convertirán en ley, ya que luego pasarán al Senado y allí existen los consensos necesarios para que esto suceda.
Por eso voy a pedir la voluntad política necesaria para llevarlos adelante, pero también la voluntad política necesaria para que este sea el puntapié inicial, el primer paso, y no se tome como un logro del momento que intenta de alguna manera calmar los intereses y las ganas de los muchos que estuvimos trabajando en defender los intereses del sector. Porque sabemos que queda muchísimo terreno por conquistar.
Este proyecto tiene beneficios, pero de ninguna manera termina de romper con las asimetrías que tenemos con países vecinos, ni más ni menos.
Sancionar estos proyectos es algo importante e histórico, ya que vamos a tener una ley posible que va a generar amplios beneficios para todo el sector marítimo y para la industria naval de nuestro país. Pero también estoy convencida de que es el primer paso en el logro de las conquistas que aún le faltan conseguir al sector.
El compromiso de nuestro bloque es hacer lo posible y para ello, pido nuevamente el compromiso de cada uno de los diputados, de los bloques y de las voluntades políticas que hoy nos presentamos como padrinos, podríamos decir, porque todos hemos intervenido de una o de otra manera, con la mejor voluntad, para que estos proyectos de ley sean posibles.
Sigamos empujando y trabajando en el futuro para que el sector siga creciendo, de la mano de las decisiones que podemos tomar cada uno de nosotros como legisladores. (Aplausos.)
Este día es histórico, como mencionamos recién en la charla con representantes gremiales y de las cámaras empresariales que hoy también están aquí presentes.
Digo "hoy también" porque al formar parte de muchas comisiones, como la mayoría de ustedes, sé que la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios es la única que, a lo largo de estos casi dos años, cada vez que se reúne siempre cuenta con la presencia de público, independientemente del tema que se trate. Siempre vienen las personas que se encuentran interesadas en conocer los temas y proyectos que abordamos y cuáles son las consecuencias inmediatas de su tratamiento.
Agradezco a ellos particularmente su presencia porque han sido los impulsores para que hoy podamos estar aquí tratando estos proyectos que se presentan en el marco de un consenso que ha sido logrado también con el oficialismo, sobre todo en este último tiempo.
La presencia de estos actores no acontece por casualidad sino porque hay un interés común y una necesidad de trabajo y crecimiento del sector y también del desarrollo de las economías regionales que dependen de aquel.
El primer impulsor del sector en nuestra República Argentina fue Juan Domingo Perón, pero lamentablemente debemos decir que llevamos más de treinta años de decadencia de la actividad.
Estos actores saben las necesidades que existen porque las padecen día a día al estar cerca de la gente y, particularmente, de los trabajadores de estos sectores.
Estamos tratando dos proyectos que cuentan con sanción del Senado y que recorrieron un largo camino este año en la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios, que es la cabecera. Este largo camino estuvo plagado de dificultades. Por ejemplo, los días 23 y 30 de mayo y 6, 23 y 27 de junio de este año se intentó sin éxito tratar este tema en esa comisión, no logrando el quórum necesario.
Por otras cuestiones administrativas y por la presión y la solidez con la que muchos nos logramos plantar -de la mano de estos gremios y estas cámaras- ante el presidente de la Cámara de Diputados, logramos que el oficialismo incluyera este tema en la agenda y hoy celebro que estemos juntos impulsando este dictamen.
Seguramente este dictamen no es el ideal. En esta comisión habíamos arribado a lo que podríamos decir era un dictamen ideal o casi un proyecto ideal, pero también es cierto -y somos conscientes- que en esta Cámara estamos dispuestos a acompañar los proyectos posibles. Gracias al debate y al consenso que se ha logrado por parte de todas las fuerzas políticas que integramos esta comisión, hemos arribado a este dictamen que genera diferentes beneficios para los empleadores y los trabajadores y también para todos los representantes del sector.
Estoy segura de que este año estos dos proyectos se convertirán en ley, ya que luego pasarán al Senado y allí existen los consensos necesarios para que esto suceda.
Por eso voy a pedir la voluntad política necesaria para llevarlos adelante, pero también la voluntad política necesaria para que este sea el puntapié inicial, el primer paso, y no se tome como un logro del momento que intenta de alguna manera calmar los intereses y las ganas de los muchos que estuvimos trabajando en defender los intereses del sector. Porque sabemos que queda muchísimo terreno por conquistar.
Este proyecto tiene beneficios, pero de ninguna manera termina de romper con las asimetrías que tenemos con países vecinos, ni más ni menos.
Sancionar estos proyectos es algo importante e histórico, ya que vamos a tener una ley posible que va a generar amplios beneficios para todo el sector marítimo y para la industria naval de nuestro país. Pero también estoy convencida de que es el primer paso en el logro de las conquistas que aún le faltan conseguir al sector.
El compromiso de nuestro bloque es hacer lo posible y para ello, pido nuevamente el compromiso de cada uno de los diputados, de los bloques y de las voluntades políticas que hoy nos presentamos como padrinos, podríamos decir, porque todos hemos intervenido de una o de otra manera, con la mejor voluntad, para que estos proyectos de ley sean posibles.
Sigamos empujando y trabajando en el futuro para que el sector siga creciendo, de la mano de las decisiones que podemos tomar cada uno de nosotros como legisladores. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE SOLANAS Tiene la palabra el señor presidente de la Comisión de Industria, diputado De Mendiguren.
SR. DE MENDIGUREN Señor presidente: continuando con lo que dijo la diputada Passo, creo que hoy es un día muy importante. Por un lado, por los proyectos de ley que vamos a tratar y, por el otro, porque el Congreso volvió a encontrar coincidencias, como lo hizo en el año 2016.
Se han hecho debates, que se han enriquecido, en un tema que hace a la producción nacional. En ese sentido, veo esto como una continuidad de otras leyes que sancionamos, como fue la de ley de pymes, la de autopartes y la de maquinaria agrícola. De manera que vamos en un buen sentido.
Para nosotros, el tema de la industria naval, es emblemático. Argentina fue uno de los países en vías de desarrollo que tuvo una de las más pujantes industrias navales y, a principios de siglo, el dique para reparar a seco de Puerto Belgrano fue de los más grandes en Sudamérica. Además, hace más de tres décadas, teníamos astilleros que hacían buques de primer nivel y también tuvimos la universidad de la marina mercante.
Para un país que está en el fin del mundo, es clave contar con un sistema portuario para mejorar su competitividad y poder llegar a los mercados. Ese sistema portuario no tiene que ver solo con los barcos, sino con los armadores y con las terminales portuarias.
Hoy sabemos que el mundo le pone mucha atención a este tema porque existe el peligro de la cartelización de las terminales portuarias en manos de muy poca gente y de los armadores en manos de muy poca gente. Entonces, un país, que dentro de su visión estratégica no tenga en claro contar con instituciones sólidas y fuertes que puedan protegerse de eso, va a estar complicado.
Para los Estado Unidos este tema es de prioridad y por eso creó el consejo de cargadores, que depende directamente del presidente de la Nación. Esto es así por la importancia estratégica que se le da al manejo coordinado de todo su aspecto de transporte. De esa manera, se busca evitar que alguna terminal o algún armador carterice esos negocios y puedan dificultar muchísimo el comercio exterior de dicho país.
Por lo tanto, esto es el puntapié inicial. Yo voy a acompañar el proyecto con una disidencia parcial, porque creo que lo que hay que hacer es compatibilizar. Por un lado, tenemos las urgencias del momento, porque necesitamos los buques ya. Entonces, puede ser que para navegar por la hidrovía necesitemos anticiparnos y tener las barcazas en forma inmediata. Pero no puede ser que la inmediatez no nos permita contemplar la producción local, porque en el caso de las barcazas, sabemos que Argentina perfectamente puede hacerlas en sus talleres metalúrgicos. No puede ser -como nos ha pasado- que la hidrovía sea nuestra, el tráfico sea producido por la Argentina, Brasil y Paraguay, pero terminamos importando barcazas usadas de Misisipi.
Felicito a todas las comisiones que forman parte de este plenario y a mi Comisión de Industria, que trató el tema con mucha urgencia y con una gran predisposición para hacerlo y hoy está acá dando quórum y también proyectos.
Ninguno va a quedar cien por ciento satisfecho con este proyecto. En algunos casos porque creemos que hay que avanzar más rápido, en otros casos porque creemos que la industria naval nos está pidiendo poder producir rápidamente, como lo hizo. Pero sabemos que tenemos que compatibilizar la urgencia que requiere el comercio exterior argentino, con el crecimiento paulatino y lo más rápido posible de la industria naval.
Agradezco muchísimo a todos los diputados la forma en que han trabajado y que hoy estemos presentes para firmar el dictamen de estos proyectos de ley.
Se han hecho debates, que se han enriquecido, en un tema que hace a la producción nacional. En ese sentido, veo esto como una continuidad de otras leyes que sancionamos, como fue la de ley de pymes, la de autopartes y la de maquinaria agrícola. De manera que vamos en un buen sentido.
Para nosotros, el tema de la industria naval, es emblemático. Argentina fue uno de los países en vías de desarrollo que tuvo una de las más pujantes industrias navales y, a principios de siglo, el dique para reparar a seco de Puerto Belgrano fue de los más grandes en Sudamérica. Además, hace más de tres décadas, teníamos astilleros que hacían buques de primer nivel y también tuvimos la universidad de la marina mercante.
Para un país que está en el fin del mundo, es clave contar con un sistema portuario para mejorar su competitividad y poder llegar a los mercados. Ese sistema portuario no tiene que ver solo con los barcos, sino con los armadores y con las terminales portuarias.
Hoy sabemos que el mundo le pone mucha atención a este tema porque existe el peligro de la cartelización de las terminales portuarias en manos de muy poca gente y de los armadores en manos de muy poca gente. Entonces, un país, que dentro de su visión estratégica no tenga en claro contar con instituciones sólidas y fuertes que puedan protegerse de eso, va a estar complicado.
Para los Estado Unidos este tema es de prioridad y por eso creó el consejo de cargadores, que depende directamente del presidente de la Nación. Esto es así por la importancia estratégica que se le da al manejo coordinado de todo su aspecto de transporte. De esa manera, se busca evitar que alguna terminal o algún armador carterice esos negocios y puedan dificultar muchísimo el comercio exterior de dicho país.
Por lo tanto, esto es el puntapié inicial. Yo voy a acompañar el proyecto con una disidencia parcial, porque creo que lo que hay que hacer es compatibilizar. Por un lado, tenemos las urgencias del momento, porque necesitamos los buques ya. Entonces, puede ser que para navegar por la hidrovía necesitemos anticiparnos y tener las barcazas en forma inmediata. Pero no puede ser que la inmediatez no nos permita contemplar la producción local, porque en el caso de las barcazas, sabemos que Argentina perfectamente puede hacerlas en sus talleres metalúrgicos. No puede ser -como nos ha pasado- que la hidrovía sea nuestra, el tráfico sea producido por la Argentina, Brasil y Paraguay, pero terminamos importando barcazas usadas de Misisipi.
Felicito a todas las comisiones que forman parte de este plenario y a mi Comisión de Industria, que trató el tema con mucha urgencia y con una gran predisposición para hacerlo y hoy está acá dando quórum y también proyectos.
Ninguno va a quedar cien por ciento satisfecho con este proyecto. En algunos casos porque creemos que hay que avanzar más rápido, en otros casos porque creemos que la industria naval nos está pidiendo poder producir rápidamente, como lo hizo. Pero sabemos que tenemos que compatibilizar la urgencia que requiere el comercio exterior argentino, con el crecimiento paulatino y lo más rápido posible de la industria naval.
Agradezco muchísimo a todos los diputados la forma en que han trabajado y que hoy estemos presentes para firmar el dictamen de estos proyectos de ley.
SR. PRESIDENTE SOLANAS Tiene la palabra la señora diputada Ferreyra.
SRA. FERREYRA Señor presidente: quería sumarme a los reconocimientos porque, la verdad, tanto cuando éramos oficialistas como ahora, estos proyectos de ley fueron álgidos en su debate porque, sin duda, tocan intereses.
Todo lo que tenga que ver con el puerto y el litoral marítimo han marcado la historia de nuestro país, incluso a sangre y fuego. Por eso, tal vez, lo que no pudimos lograr en la Cámara de Diputados vino de la Cámara de Senadores, que es la Cámara donde la representación de todas las provincias es igualitaria, dato que no debe ser menor.
Por otro lado, saludo con mucha alegría que un senador de mi provincia, el senador Espínola, sea el autor de un proyecto que ya venía siendo presentado desde distintos lugares. Sin embargo, él tuvo la capacidad para dar el puntapié inicial de algo que nosotros trabajamos con el aporte de los gremios y los trabajadores del sector, que han sido los grandes impulsores de este dictamen que vamos a firmar hoy.
También quiero hacer un reconocimiento, señor presidente. Sé que es difícil dejar pasar la situación enojosa que se generó con relación a las impugnaciones que se hicieron a los dictámenes de la comisión, que fueron una de las tantas maniobras dilatorias que tuvimos que sortear, por suerte con éxito.
Hoy vamos a sancionar el proyecto de ley de marina mercante y de industria naval, y tengo la palabra del senador Espínola del acompañamiento político de los senadores para aceptar las modificaciones que estamos introduciendo.
En ese sentido, voy a pedir reponer el artículo 39 en su totalidad. Ahora le acerco el texto, señor presidente, para ver si lo podemos consensuar.
Todos hemos tenido que dejar intereses y posiciones para llegar a este consenso. De manea que felicito a los miembros de esta comisión que sí han trabajado, que sí han estado tomando los temas y que han hecho un seguimiento cotidiano para poder alcanzar este consenso.
En mi provincia, dentro de poco, se está por inaugurar un puerto en Itá Ibaté. En ese sentido, reconozco las políticas públicas que son acertadas. Yo no tengo inconveniente es saludar y celebrar, que un gobierno del cual soy firme adversaria, está implementando una política de construcción de puertos que desde hace años no se hacía.
Pero de la misma manera y con la misma firmeza, vuelvo a decir que no vamos a permitir lo que se hizo acá, de meter por la ventana una traba para que no pueda funcionar la comisión. No lo voy a plantear ahora de manera reglamentaria para que se pueda avanzar y para que los dictámenes salgan como están firmados. Pero terminado esto, propongo que se rechace la resolución infundada con la que quisieron estafarnos, porque con los dos tercios de los votos de esta comisión se había sacado un despacho que era mejor que este. No obstante, vamos a avalar estos proyectos.
Somos un país con un enorme litoral marítimo -más de 5.000 kilómetros- y, como recién lo decía el presidente de la Comisión de Industria, tenemos una de las hidrovías más importantes.
Así que es hora de que podamos regularizar esta situación, que se vuelvan a abrir los astilleros que fueron cerrados, que se creen nuevos, y que se fabriquen barcazas de producción local con mano de obra local, sobre todo, para que no siga pasando lo que venían denunciando los gremios sobre la cantidad de hundimientos que vienen sucediéndose. Hay barcos que no están en condiciones siquiera de estar anclados y mucho menos de estar en circulación.
Por cada uno de esos trabajadores que perdieron la vida en el mar por esa negligencia empresarial y la mora en sancionar esta ley, y especialmente en memoria de cada uno de los muertos por el hundimiento de El Repunte, es que adelantamos el acompañamiento de este proyecto. (Aplausos.)
Todo lo que tenga que ver con el puerto y el litoral marítimo han marcado la historia de nuestro país, incluso a sangre y fuego. Por eso, tal vez, lo que no pudimos lograr en la Cámara de Diputados vino de la Cámara de Senadores, que es la Cámara donde la representación de todas las provincias es igualitaria, dato que no debe ser menor.
Por otro lado, saludo con mucha alegría que un senador de mi provincia, el senador Espínola, sea el autor de un proyecto que ya venía siendo presentado desde distintos lugares. Sin embargo, él tuvo la capacidad para dar el puntapié inicial de algo que nosotros trabajamos con el aporte de los gremios y los trabajadores del sector, que han sido los grandes impulsores de este dictamen que vamos a firmar hoy.
También quiero hacer un reconocimiento, señor presidente. Sé que es difícil dejar pasar la situación enojosa que se generó con relación a las impugnaciones que se hicieron a los dictámenes de la comisión, que fueron una de las tantas maniobras dilatorias que tuvimos que sortear, por suerte con éxito.
Hoy vamos a sancionar el proyecto de ley de marina mercante y de industria naval, y tengo la palabra del senador Espínola del acompañamiento político de los senadores para aceptar las modificaciones que estamos introduciendo.
En ese sentido, voy a pedir reponer el artículo 39 en su totalidad. Ahora le acerco el texto, señor presidente, para ver si lo podemos consensuar.
Todos hemos tenido que dejar intereses y posiciones para llegar a este consenso. De manea que felicito a los miembros de esta comisión que sí han trabajado, que sí han estado tomando los temas y que han hecho un seguimiento cotidiano para poder alcanzar este consenso.
En mi provincia, dentro de poco, se está por inaugurar un puerto en Itá Ibaté. En ese sentido, reconozco las políticas públicas que son acertadas. Yo no tengo inconveniente es saludar y celebrar, que un gobierno del cual soy firme adversaria, está implementando una política de construcción de puertos que desde hace años no se hacía.
Pero de la misma manera y con la misma firmeza, vuelvo a decir que no vamos a permitir lo que se hizo acá, de meter por la ventana una traba para que no pueda funcionar la comisión. No lo voy a plantear ahora de manera reglamentaria para que se pueda avanzar y para que los dictámenes salgan como están firmados. Pero terminado esto, propongo que se rechace la resolución infundada con la que quisieron estafarnos, porque con los dos tercios de los votos de esta comisión se había sacado un despacho que era mejor que este. No obstante, vamos a avalar estos proyectos.
Somos un país con un enorme litoral marítimo -más de 5.000 kilómetros- y, como recién lo decía el presidente de la Comisión de Industria, tenemos una de las hidrovías más importantes.
Así que es hora de que podamos regularizar esta situación, que se vuelvan a abrir los astilleros que fueron cerrados, que se creen nuevos, y que se fabriquen barcazas de producción local con mano de obra local, sobre todo, para que no siga pasando lo que venían denunciando los gremios sobre la cantidad de hundimientos que vienen sucediéndose. Hay barcos que no están en condiciones siquiera de estar anclados y mucho menos de estar en circulación.
Por cada uno de esos trabajadores que perdieron la vida en el mar por esa negligencia empresarial y la mora en sancionar esta ley, y especialmente en memoria de cada uno de los muertos por el hundimiento de El Repunte, es que adelantamos el acompañamiento de este proyecto. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE SOLANAS Tiene la palabra el señor diputado Alonso.
SR. ALONSO Señor presidente: voy a reiterar algunos de los conceptos que acá se expresaron porque estos proyectos no solamente merecieron un debate muy profundo, hubo un trabajo interdisciplinario permanentemente en consulta con los actores del sector; me refiero a los dirigentes sindicales y a los empresarios. ¿Por qué no señalarlo? Se trata de un dictamen vinculado al tema que estamos considerando que tuvo una fuerte controversia en la Cámara de Diputados.
Todos hemos puesto lo mejor para avanzar hacia ese consenso para que este anhelo largamente postergado comience a ser una realidad.
En función de ello, señor presidente, como tenemos algunas urgencias, vamos a acompañar el dictamen y lo vamos a firmar en disidencia parcial. Pero queremos que esa disidencia se considere en el recinto.
Y como días atrás la última sesión especial lamentablemente no pudo concluir -y no hace falta que explicite las razones-, también le quiero pedir a los presidentes de estas cuatro comisiones que hablen con los presidentes de bloque y la autoridad de la Cámara para que en una próxima sesión especial este dictamen sea considerado en la Cámara de Diputados para que vuelva rápidamente al Senado.
Reitero lo que decía la diputada preopinante en cuanto a que hemos encontrado en el Senado vocación para que se trate antes de que concluya el año legislativo.
Entonces, sugiero que, en función de los debates que se han dado en las distintas comisiones que integran este plenario, rápidamente firmemos los dictámenes porque ya han sido considerados en profundidad. Esta es una demanda largamente postergada. Y, reitero, mi solicitud de que las disidencias sean consideradas en el recinto en la próxima sesión especial.
Todos hemos puesto lo mejor para avanzar hacia ese consenso para que este anhelo largamente postergado comience a ser una realidad.
En función de ello, señor presidente, como tenemos algunas urgencias, vamos a acompañar el dictamen y lo vamos a firmar en disidencia parcial. Pero queremos que esa disidencia se considere en el recinto.
Y como días atrás la última sesión especial lamentablemente no pudo concluir -y no hace falta que explicite las razones-, también le quiero pedir a los presidentes de estas cuatro comisiones que hablen con los presidentes de bloque y la autoridad de la Cámara para que en una próxima sesión especial este dictamen sea considerado en la Cámara de Diputados para que vuelva rápidamente al Senado.
Reitero lo que decía la diputada preopinante en cuanto a que hemos encontrado en el Senado vocación para que se trate antes de que concluya el año legislativo.
Entonces, sugiero que, en función de los debates que se han dado en las distintas comisiones que integran este plenario, rápidamente firmemos los dictámenes porque ya han sido considerados en profundidad. Esta es una demanda largamente postergada. Y, reitero, mi solicitud de que las disidencias sean consideradas en el recinto en la próxima sesión especial.
SR. PRESIDENTE SOLANAS Tiene la palabra el señor diputado Martínez Campos.
SR. MARTÍNEZ CAMPOS Señor presidente: llegamos a esta fecha culminando prácticamente el período de un mandato en que tuve el honor de representar no solo a los intereses de mi provincia sino a los de las economías regionales del norte argentino, y a los intereses de ese litoral al que el general Perón hacía referencia designándolo como la autopista de integración de la patria grande.
Habló de la hidrovía que unía el Orinoco con la cuenca del Plata, y de su desarrollo e integración así como también el de los pueblos que vivían con su actividad portuaria e industrial, ya que es impensable un puerto sin industria o sin un sistema de transporte multimodal como al que tenemos que apuntar.
El transporte por agua es un componente del transporte multimodal de cargas que tiene que ver con el desarrollo argentino, ya que fundamentalmente potencia las economías regionales a las que hacía referencia la diputada Passo. Por eso es importante este día.
¿Cómo se inició esta gesta de recuperación de nuestra soberanía y de los buques de bandera nacional a lo largo y a lo ancho de nuestro país? Me acuerdo cuando en marzo de 2014 traté de entrevistar a los primeros dirigentes gremiales del sector que representaban la comunidad del trabajo fluvial y marítimo. Eran los embajadores, portadores y transportadores del esfuerzo nacional a lo largo y a lo ancho del mundo. Les dije que era necesario poner en práctica aquello que nos señaló Perón acerca de que la fuerza del trabajo y la fuerza de la política tenían que confluir en una alianza político sindical para lograr el desarrollo de nuestra Nación. En ese sentido, éste era un paso fundamental.
Fuimos avanzando y conversando con representantes de absolutamente todas las cámaras empresarias de nuestro país. Recorrimos el país con los dirigentes gremiales y empresarios.
Fuimos a la ciudad de Posadas, provincia de Misiones, cuyo actual gobernador -quien entonces era presidente de este cuerpo- nos cedió la Cámara de Diputados para debatir el desarrollo de las hidrovías y de las provincias del Norte, ya que la marina mercante y la marina fluvial con su desarrollo portuario y logístico podían facilitar la actividad económica en esa región.
También visitamos la Universidad Tecnológica Nacional de Ushuaia invitados por su cuerpo directivo y por los alumnos de la Facultad de Ingeniería Pesquera. Junto con los dirigentes sindicales fuimos a Trelew, a Mar del Plata, a La Plata, a Buenos Aires, a Corrientes y al Chaco.
De esta forma, fuimos sensibilizando y motorizando una fuerza que diera concreción a este primer y gran paso que vamos a lograr hoy por consenso.
La diputada Passo me recordó cuando decíamos que sin consenso nunca iba a haber ley. Por eso, compañeros, con este gesto y este dictamen de las cuatro comisiones que constituyen la columna vertebral del desarrollo productivo, económico e industrial de nuestro país, se logra promover una nueva Argentina, que es la que todos necesitamos.
Es por ello que quiero agradecer el esfuerzo y el sacrificio puesto por los compañeros dirigentes gremiales con los que hemos navegado por el canal del Beagle, almorzado en la isla Redonda recorriendo sus puertos, el puerto austral de la Argentina, y reconociendo las islas de los Estados, Georgias del Sur y demás. Hemos hecho un trabajo con compromiso.
Ese es el compromiso que debe honrar a esa dirigencia gremial que se intenta denostar desde los sectores del poder liberal.
Por eso digo que esta es una actitud que va a marcar, seguramente, el crecimiento de nuestro país. Nosotros perdemos anualmente más de 6.000 millones de dólares en valor de flete.
Ahora, con las nuevas medidas del gobierno, nos enteramos que se van de nuestros puertos, sin pagar un solo mango, llevando aceite, harina y productos alimenticios. Eso debe ser transportado por buques de bandera argentina, utilizando esta herramienta.
Acá estamos todos. Los del bloque Justicialista, queremos y soñamos con esa flota mercante de Perón, con esos 137 buques de ultramar que tenía Argentina en los años 50, con esos 137 buques petroleros que tenía Argentina, con esas dragas que hacían todo el desarrollo y preservaban el curso natural de nuestros ríos interiores. Eso es lo que queremos los que hemos impulsado esta ley.
¿Saben qué, compañeros y compañeras diputados, señor presidente? Hemos recurrido al Senado. Cuando me convocó el senador correntino Mauricio Espínola -un hombre que conoce del río desde la actividad deportiva- fui con el grupo que trabajamos junto con los dirigentes gremiales, los empresarios, los hombres de las universidades y los estudiantes y entregamos los dos proyectos: el de industria naval y el de marina mercante, para que desde el Senado se pudiera aprobar y dar el puntapié inicial. Ahora, compañeros, ese partido se juega en nuestra casa.
Adhiero con el voto positivo por esta nueva Argentina, con buques de bandera nacional, con empleo genuino en una industria que va a ser nuestra, para siempre y por siempre. Por eso adhiero con el voto positivo del bloque Justicialista. (Aplausos.)
Habló de la hidrovía que unía el Orinoco con la cuenca del Plata, y de su desarrollo e integración así como también el de los pueblos que vivían con su actividad portuaria e industrial, ya que es impensable un puerto sin industria o sin un sistema de transporte multimodal como al que tenemos que apuntar.
El transporte por agua es un componente del transporte multimodal de cargas que tiene que ver con el desarrollo argentino, ya que fundamentalmente potencia las economías regionales a las que hacía referencia la diputada Passo. Por eso es importante este día.
¿Cómo se inició esta gesta de recuperación de nuestra soberanía y de los buques de bandera nacional a lo largo y a lo ancho de nuestro país? Me acuerdo cuando en marzo de 2014 traté de entrevistar a los primeros dirigentes gremiales del sector que representaban la comunidad del trabajo fluvial y marítimo. Eran los embajadores, portadores y transportadores del esfuerzo nacional a lo largo y a lo ancho del mundo. Les dije que era necesario poner en práctica aquello que nos señaló Perón acerca de que la fuerza del trabajo y la fuerza de la política tenían que confluir en una alianza político sindical para lograr el desarrollo de nuestra Nación. En ese sentido, éste era un paso fundamental.
Fuimos avanzando y conversando con representantes de absolutamente todas las cámaras empresarias de nuestro país. Recorrimos el país con los dirigentes gremiales y empresarios.
Fuimos a la ciudad de Posadas, provincia de Misiones, cuyo actual gobernador -quien entonces era presidente de este cuerpo- nos cedió la Cámara de Diputados para debatir el desarrollo de las hidrovías y de las provincias del Norte, ya que la marina mercante y la marina fluvial con su desarrollo portuario y logístico podían facilitar la actividad económica en esa región.
También visitamos la Universidad Tecnológica Nacional de Ushuaia invitados por su cuerpo directivo y por los alumnos de la Facultad de Ingeniería Pesquera. Junto con los dirigentes sindicales fuimos a Trelew, a Mar del Plata, a La Plata, a Buenos Aires, a Corrientes y al Chaco.
De esta forma, fuimos sensibilizando y motorizando una fuerza que diera concreción a este primer y gran paso que vamos a lograr hoy por consenso.
La diputada Passo me recordó cuando decíamos que sin consenso nunca iba a haber ley. Por eso, compañeros, con este gesto y este dictamen de las cuatro comisiones que constituyen la columna vertebral del desarrollo productivo, económico e industrial de nuestro país, se logra promover una nueva Argentina, que es la que todos necesitamos.
Es por ello que quiero agradecer el esfuerzo y el sacrificio puesto por los compañeros dirigentes gremiales con los que hemos navegado por el canal del Beagle, almorzado en la isla Redonda recorriendo sus puertos, el puerto austral de la Argentina, y reconociendo las islas de los Estados, Georgias del Sur y demás. Hemos hecho un trabajo con compromiso.
Ese es el compromiso que debe honrar a esa dirigencia gremial que se intenta denostar desde los sectores del poder liberal.
Por eso digo que esta es una actitud que va a marcar, seguramente, el crecimiento de nuestro país. Nosotros perdemos anualmente más de 6.000 millones de dólares en valor de flete.
Ahora, con las nuevas medidas del gobierno, nos enteramos que se van de nuestros puertos, sin pagar un solo mango, llevando aceite, harina y productos alimenticios. Eso debe ser transportado por buques de bandera argentina, utilizando esta herramienta.
Acá estamos todos. Los del bloque Justicialista, queremos y soñamos con esa flota mercante de Perón, con esos 137 buques de ultramar que tenía Argentina en los años 50, con esos 137 buques petroleros que tenía Argentina, con esas dragas que hacían todo el desarrollo y preservaban el curso natural de nuestros ríos interiores. Eso es lo que queremos los que hemos impulsado esta ley.
¿Saben qué, compañeros y compañeras diputados, señor presidente? Hemos recurrido al Senado. Cuando me convocó el senador correntino Mauricio Espínola -un hombre que conoce del río desde la actividad deportiva- fui con el grupo que trabajamos junto con los dirigentes gremiales, los empresarios, los hombres de las universidades y los estudiantes y entregamos los dos proyectos: el de industria naval y el de marina mercante, para que desde el Senado se pudiera aprobar y dar el puntapié inicial. Ahora, compañeros, ese partido se juega en nuestra casa.
Adhiero con el voto positivo por esta nueva Argentina, con buques de bandera nacional, con empleo genuino en una industria que va a ser nuestra, para siempre y por siempre. Por eso adhiero con el voto positivo del bloque Justicialista. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE SOLANAS Tiene la palabra el señor diputado Marcucci.
SR. MARCUCCI Señor presidente: coincido con el diputado preopinante Martínez Campos en muchos aspectos que él planteaba.
Como diputado santafesino estoy planamente de acuerdo con esa hidrovía, con esa avenida, que planteaba Perón. Además, los radicales estamos muy próximos al tema, ya que quien crea la marina mercante es don Hipólito Yrigoyen.
Quiero destacar el consenso, el debate y sumarme a la idea de que sin consenso -como se decía- no hay ley, pero con mayorías circunstanciales no hay ley en el tiempo. Y creo que estamos venciendo esas dos premisas con el esfuerzo que se hizo desde los distintos bloques.
Simplemente quiero plantear un pequeño artículo, que en definitiva es un artículo transitorio. En esta idea del pabellón nacional en los barcos argentinos, quiero plantear una modificación al artículo 14 en reemplazo del que está propuesto. Dice así: "Dentro del término de dos (2) años de la entrada en vigencia, los remolcadores de empuje y artefactos navales con propulsión propia para la navegación fluvial de más de siete (7) años de antigüedad y hasta veinticinco (25) años de antigüedad, comprendidos en el presente régimen, y que hubieren prestado servicios bajo el pabellón nacional, serán considerados como nuevos sin uso a los fines de su importación definitiva."
La propuesta va en el sentido de generar más empleo, más trabajo y más barcos con el pabellón nacional.
De no incorporarse esta propuesta de modificación al artículo 14, señor presidente, firmaría con disidencias parciales.
Como diputado santafesino estoy planamente de acuerdo con esa hidrovía, con esa avenida, que planteaba Perón. Además, los radicales estamos muy próximos al tema, ya que quien crea la marina mercante es don Hipólito Yrigoyen.
Quiero destacar el consenso, el debate y sumarme a la idea de que sin consenso -como se decía- no hay ley, pero con mayorías circunstanciales no hay ley en el tiempo. Y creo que estamos venciendo esas dos premisas con el esfuerzo que se hizo desde los distintos bloques.
Simplemente quiero plantear un pequeño artículo, que en definitiva es un artículo transitorio. En esta idea del pabellón nacional en los barcos argentinos, quiero plantear una modificación al artículo 14 en reemplazo del que está propuesto. Dice así: "Dentro del término de dos (2) años de la entrada en vigencia, los remolcadores de empuje y artefactos navales con propulsión propia para la navegación fluvial de más de siete (7) años de antigüedad y hasta veinticinco (25) años de antigüedad, comprendidos en el presente régimen, y que hubieren prestado servicios bajo el pabellón nacional, serán considerados como nuevos sin uso a los fines de su importación definitiva."
La propuesta va en el sentido de generar más empleo, más trabajo y más barcos con el pabellón nacional.
De no incorporarse esta propuesta de modificación al artículo 14, señor presidente, firmaría con disidencias parciales.
SR. PRESIDENTE SOLANAS Tiene la palabra el señor diputado López.
SR. LÓPEZ Señor presiente: no nos cabe ninguna duda que es importante el desarrollo de la marina mercante y de la industria naval, pero no acordamos con las premisas que establecen estos dos proyectos que están en discusión.
En primer lugar, no acordamos porque ambos prevén una enorme cantidad de subsidios para las empresas. Incluso, en el proyecto sobre industria naval, se prevé la constitución de un fondo que es superior a los montos de los que se habla desde el gobierno de la provincia de Buenos Aires, por ejemplo, para ajustar el astillero Río Santiago, cuyos trabajadores hoy están enfrentando su vaciamiento y la posibilidad incluso de que ese ajuste produzca pérdidas de puestos de trabajo. Es decir que mientras se dice que se quiere impulsar la industria naval, el astillero Río Santiago está siendo vaciado.
Por otro lado, hoy hemos discutido una ley de compre nacional. Sin embargo, el proyecto permite la importación de piezas a tasa cero. Una contradicción que además podría provocar que, lejos de tener una industria, tengamos una armaduría y no el desarrollo de una industria naval.
También quiero señalar que, en estos proyectos, en ambos casos, se ha aprovechado para incorporar aspectos de la reforma laboral que el gobierno quiere imponer contra el conjunto de los trabajadores. Uno de ellos es que el Estado se va a hacer cargo de los aportes patronales que deberían poner las empresas, hasta los 10.000 pesos del salario de los trabajadores. Y en el proyecto de marina mercante se plantea la posibilidad de tener pasantes, hasta 8 en las embarcaciones marítimas y 3 en las fluviales. Incluso, el proyecto no prevé el pago de salarios, solamente dice que se cubrirían los gastos.
Es decir que se están incorporando en estos proyectos los mecanismos de explotación y de flexibilización laboral, que prevé la reforma laboral que el gobierno quiere imponer al conjunto de los trabajadores.
Por eso, señor presidente, desde nuestro bloque vamos a presentar dictámenes en minoría en ambos expedientes.
En primer lugar, no acordamos porque ambos prevén una enorme cantidad de subsidios para las empresas. Incluso, en el proyecto sobre industria naval, se prevé la constitución de un fondo que es superior a los montos de los que se habla desde el gobierno de la provincia de Buenos Aires, por ejemplo, para ajustar el astillero Río Santiago, cuyos trabajadores hoy están enfrentando su vaciamiento y la posibilidad incluso de que ese ajuste produzca pérdidas de puestos de trabajo. Es decir que mientras se dice que se quiere impulsar la industria naval, el astillero Río Santiago está siendo vaciado.
Por otro lado, hoy hemos discutido una ley de compre nacional. Sin embargo, el proyecto permite la importación de piezas a tasa cero. Una contradicción que además podría provocar que, lejos de tener una industria, tengamos una armaduría y no el desarrollo de una industria naval.
También quiero señalar que, en estos proyectos, en ambos casos, se ha aprovechado para incorporar aspectos de la reforma laboral que el gobierno quiere imponer contra el conjunto de los trabajadores. Uno de ellos es que el Estado se va a hacer cargo de los aportes patronales que deberían poner las empresas, hasta los 10.000 pesos del salario de los trabajadores. Y en el proyecto de marina mercante se plantea la posibilidad de tener pasantes, hasta 8 en las embarcaciones marítimas y 3 en las fluviales. Incluso, el proyecto no prevé el pago de salarios, solamente dice que se cubrirían los gastos.
Es decir que se están incorporando en estos proyectos los mecanismos de explotación y de flexibilización laboral, que prevé la reforma laboral que el gobierno quiere imponer al conjunto de los trabajadores.
Por eso, señor presidente, desde nuestro bloque vamos a presentar dictámenes en minoría en ambos expedientes.
SR. PRESIDENTE SOLANAS Tiene la palabra el señor diputado Carmona.
SR. CARMONA Señor presidente: puede parecer paradójico que un diputado de la provincia de Mendoza hable sobre el desarrollo de la marina mercante o de la industria naval ya que en mi provincia no tenemos ríos navegables. Los cuyanos sabemos de la dificultad de transitar un río, como mucho, con kayak.
Sin embargo, aquí no estamos ante proyectos que tengan que ver con temas regionales. Esto tiene que ver con el interés nacional y con el interés que tenemos los argentinos en el fuerte desarrollo de la actividad naval, mercante y, sobre todo, de la industria vinculada con lo naval y con lo mercante.
Realmente creo que es auspicioso que se hayan ido encontrando puntos de coincidencia en un momento en el que, desde la perspectiva del Frente para la Victoria PJ, por el proceso de apertura económica, por las condiciones económicas vigentes en el país, por las políticas que se llevan adelante, se está produciendo un proceso de retroceso en materia de industrialización. Por eso consideramos que es auspicioso. Seguramente podemos coincidir con los argumentos críticos que se han vertido en relación a lo que le falta a este proyecto y a los aspectos que deberían contemplarse. Recién hablábamos con algunos compañeros diputados y diputadas sobre la cuestión de las contribuciones patronales, para poner un ejemplo. Pero creemos que es un verdadero avance en esta línea de buscar que la actividad mercante y que la actividad naval esté asociada con el desarrollo industrial en la Argentina. Creemos que esto es ineludible.
Por otro lado, como provinciano de una provincia sin ríos navegables, me veo muy impresionado por los números que los compañeros y compañeras de las provincias del litoral, fundamentalmente, nos pasan. Un 3 por ciento de participación argentina en la hidrovía, la destrucción del 100 por ciento de la flota de mar y la destrucción de un 98 por ciento de la flota mercante. Estos datos contundentes de una realidad muy dura tienen que ser afrontados por iniciativas que a veces salen desde el Poder Ejecutivo y otras veces es el Congreso el que se pone el tema al hombro y lo lleva adelante.
Quiero terminar destacando la actuación de los diputados y diputadas de las comisiones que han intervenido, especialmente la de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios. Quiero destacar muy especialmente la voluntad y la vocación de generar acuerdos y de plantear diferencias de parte del presidente de la Comisión de Intereses Marítimos, el diputado Julio Solanas.
Así que: muchísimas gracias, Julio, por el compromiso. (Aplausos.)
Sin embargo, aquí no estamos ante proyectos que tengan que ver con temas regionales. Esto tiene que ver con el interés nacional y con el interés que tenemos los argentinos en el fuerte desarrollo de la actividad naval, mercante y, sobre todo, de la industria vinculada con lo naval y con lo mercante.
Realmente creo que es auspicioso que se hayan ido encontrando puntos de coincidencia en un momento en el que, desde la perspectiva del Frente para la Victoria PJ, por el proceso de apertura económica, por las condiciones económicas vigentes en el país, por las políticas que se llevan adelante, se está produciendo un proceso de retroceso en materia de industrialización. Por eso consideramos que es auspicioso. Seguramente podemos coincidir con los argumentos críticos que se han vertido en relación a lo que le falta a este proyecto y a los aspectos que deberían contemplarse. Recién hablábamos con algunos compañeros diputados y diputadas sobre la cuestión de las contribuciones patronales, para poner un ejemplo. Pero creemos que es un verdadero avance en esta línea de buscar que la actividad mercante y que la actividad naval esté asociada con el desarrollo industrial en la Argentina. Creemos que esto es ineludible.
Por otro lado, como provinciano de una provincia sin ríos navegables, me veo muy impresionado por los números que los compañeros y compañeras de las provincias del litoral, fundamentalmente, nos pasan. Un 3 por ciento de participación argentina en la hidrovía, la destrucción del 100 por ciento de la flota de mar y la destrucción de un 98 por ciento de la flota mercante. Estos datos contundentes de una realidad muy dura tienen que ser afrontados por iniciativas que a veces salen desde el Poder Ejecutivo y otras veces es el Congreso el que se pone el tema al hombro y lo lleva adelante.
Quiero terminar destacando la actuación de los diputados y diputadas de las comisiones que han intervenido, especialmente la de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios. Quiero destacar muy especialmente la voluntad y la vocación de generar acuerdos y de plantear diferencias de parte del presidente de la Comisión de Intereses Marítimos, el diputado Julio Solanas.
Así que: muchísimas gracias, Julio, por el compromiso. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE SOLANAS Tiene la palabra el señor diputado González.
SR. GONZÁLEZ Señor presidente: para ser breve y a los efectos de no ser reiterativo, quiero felicitarlo en su carácter de presidente de la Comisión de Intereses Marítimos, así como al "vasco" De Mendiguren y al diputado Lipovetzky que también han juntado estas voluntades.
Hoy estamos firmando dos despachos que abrazan a una actividad y a una industria. Después de muchísimos años de discusión lo hemos logrado en los distintos espacios políticos, tanto en el Congreso como en el Poder Ejecutivo nacional que ha participado y mucho para llegar a este entendimiento, lo que creo que es para celebrar.
En este sentido y tratando de cerrar esta reunión, agradezco a todos los diputados porque todos han puesto un poco.
Señor presidente: usted ha puesto mucho; ha puesto mucho empeño y ha puesto mucho de lo que en política denominamos generosidad. Nos ha permitido, después de discusiones, a lo mejor acaloradas, alguna de ellas jurídicas, que hoy estemos acá firmando el despacho, que es lo importante. Lo que estamos haciendo acá, después de muchísimos años de hablar, de discutir, de no ponerse de acuerdo, de no llegar a ningún entendimiento, es considerar dos despachos que están a la firma con el seguro tratamiento, más allá de las disidencias parciales que podemos tener que, seguramente si no son tenidas en cuenta, no van a frenar la sanción de ambas leyes.
Así que, dicho esto, le agradezco a todos, fundamentalmente en mi compañera de bloque, diputada Toledo, que ha sido quien nos ha llevado de la mano de la Comisión de Intereses Marítimos, pero también tanto a los integrantes de la industria como a los compañeros de los distintos sindicatos que han hecho un gran esfuerzo para llegar a este entendimiento.
Creo que lo bueno es que este tema no se discute más, ya está, ya tiene dictamen y si Dios quiere algún cambio podrá haber, pero la esencia va estar y el 22 de este mes se va convertir en ley. (Aplausos.)
Hoy estamos firmando dos despachos que abrazan a una actividad y a una industria. Después de muchísimos años de discusión lo hemos logrado en los distintos espacios políticos, tanto en el Congreso como en el Poder Ejecutivo nacional que ha participado y mucho para llegar a este entendimiento, lo que creo que es para celebrar.
En este sentido y tratando de cerrar esta reunión, agradezco a todos los diputados porque todos han puesto un poco.
Señor presidente: usted ha puesto mucho; ha puesto mucho empeño y ha puesto mucho de lo que en política denominamos generosidad. Nos ha permitido, después de discusiones, a lo mejor acaloradas, alguna de ellas jurídicas, que hoy estemos acá firmando el despacho, que es lo importante. Lo que estamos haciendo acá, después de muchísimos años de hablar, de discutir, de no ponerse de acuerdo, de no llegar a ningún entendimiento, es considerar dos despachos que están a la firma con el seguro tratamiento, más allá de las disidencias parciales que podemos tener que, seguramente si no son tenidas en cuenta, no van a frenar la sanción de ambas leyes.
Así que, dicho esto, le agradezco a todos, fundamentalmente en mi compañera de bloque, diputada Toledo, que ha sido quien nos ha llevado de la mano de la Comisión de Intereses Marítimos, pero también tanto a los integrantes de la industria como a los compañeros de los distintos sindicatos que han hecho un gran esfuerzo para llegar a este entendimiento.
Creo que lo bueno es que este tema no se discute más, ya está, ya tiene dictamen y si Dios quiere algún cambio podrá haber, pero la esencia va estar y el 22 de este mes se va convertir en ley. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE SOLANAS Tiene la palabra el señor diputado Silva.
SR. SILVA Señor presidente: creo que con las definiciones que dio el diputado Martínez Campos así como otros legisladores es muy poco lo que se puede agregar más que tratar de estar presentes en un momento que me llena de satisfacción.
Mi satisfacción se debe a lo que hemos logrado a pesar de que, como se dice en la jerga del lunfardo, en toda pelea siempre se pierden algunas plumas. En ese sentido, creo que todos hemos ido resignando parte de nuestras visiones o estrategias, pero hemos podido avanzar justamente respetándonos y empezando a tenernos confianza.
El diputado Gustavo Martínez Campos hizo un recuento de su paso por la historia. Cuando yo llegué a esta Honorable Cámara y asumí el honor de ser representante de la Nación por mi distrito, uno de los objetivos que me propuse fue el de integrar esta comisión. Sin pretender grandes innovaciones, junto con otros diputados tomamos los temas pendientes y presentamos un proyecto de ley que se basó fundamentalmente en lo que había hecho Gustavo Martínez Campos y también otros legisladores que dejaban la Cámara.
Eso nos entusiasmó; era una primera etapa. Era algo casi épico -si se quiere- porque el tema no estaba instalado, más allá de la lucha particular de algunos legisladores como los que mencioné.
Así es cómo se tomaron estas decisiones -muy bien explicadas por Martínez Campos- y se siguió la estrategia para llevar adelante esta iniciativa compartida. Esto fue respetado y de esta forma se dio el primer paso que nos permitió conocernos y tirar para atrás los proyectos de iniciativa propia, porque no se buscaba un título sino una ley. Luego, avanzamos en ese sentido con confianza y tratando de volcar en el bloque oficialista algo que tenía que ver con un complemento. En efecto, creo que esa es la tarea pendiente que aquí se mencionó varias veces.
Pido disculpas si se considera abusivo de mi representación lo que voy a decir, pero quiero expresar mi opinión acerca de que el Parlamento tiene el desafío de dar el primer paso e involucrarse mucho más de lleno en lo que es la hidrovía y el desarrollo y el funcionamiento de nuestros puertos.
Estas dos iniciativas sobre la industria naval y, especialmente, sobre la marina mercante, ponen el tema en la agenda de este Congreso y constituyen un primer paso.
Por supuesto que este primer paso lo interpretamos como una contribución imprescindible para las economías regionales. Integro la comisión que lleva ese nombre y he tenido la oportunidad de recorrer prácticamente todo el país con legisladores de todos los bloques. He visto la incidencia de los fletes y de la identidad y la falta de involucramiento por parte del Estado -en su magnitud y en su expresión plena- para buscar alternativas que tiendan al desarrollo de las economías regionales.
Personalmente considero que todo lo logrado se debe a la contribución que han hecho los sectores que representan a los trabajadores, ya que se trata de un tema muy específico. Al principio, como dije, éramos nuevos y nos mirábamos con mucho respeto pero sin la solvencia necesaria para ir avanzando. Ese camino se fue allanando. En esa misma mesa se sentaron los empresarios y los armadores y así ese camino empezó a consolidarse. Para avanzar en ese sentido, obviamente también resultó imprescindible la actitud del bloque oficialista en los últimos tiempos, más allá de las estrategias que llevaron adelante como, por ejemplo, generar debates en el plenario.
Señor presidente: usted ha tenido solvencia y pragmatismo en los momentos en que era necesario pero también ha tenido una clara convicción de que había que buscar la forma para que este día llegara y, además, para que junto con los legisladores hoy estuvieran presentes los protagonistas principales, quienes han sido el sustento de mucho de lo que está escrito. Me refiero a los trabajadores y al sector empresario.
Solamente quería expresar mi opinión y un sentimiento que comenzó hace dos años, cuando asumí en esta banca. Escuchando a muchos legisladores -como, por ejemplo, a Gustavo Martínez Campos- he aprendido cómo debe ser la búsqueda de un consenso para concretar un objetivo que sirve a los intereses de la Nación.
Muchas gracias, señor presidente. (Aplausos.)
Mi satisfacción se debe a lo que hemos logrado a pesar de que, como se dice en la jerga del lunfardo, en toda pelea siempre se pierden algunas plumas. En ese sentido, creo que todos hemos ido resignando parte de nuestras visiones o estrategias, pero hemos podido avanzar justamente respetándonos y empezando a tenernos confianza.
El diputado Gustavo Martínez Campos hizo un recuento de su paso por la historia. Cuando yo llegué a esta Honorable Cámara y asumí el honor de ser representante de la Nación por mi distrito, uno de los objetivos que me propuse fue el de integrar esta comisión. Sin pretender grandes innovaciones, junto con otros diputados tomamos los temas pendientes y presentamos un proyecto de ley que se basó fundamentalmente en lo que había hecho Gustavo Martínez Campos y también otros legisladores que dejaban la Cámara.
Eso nos entusiasmó; era una primera etapa. Era algo casi épico -si se quiere- porque el tema no estaba instalado, más allá de la lucha particular de algunos legisladores como los que mencioné.
Así es cómo se tomaron estas decisiones -muy bien explicadas por Martínez Campos- y se siguió la estrategia para llevar adelante esta iniciativa compartida. Esto fue respetado y de esta forma se dio el primer paso que nos permitió conocernos y tirar para atrás los proyectos de iniciativa propia, porque no se buscaba un título sino una ley. Luego, avanzamos en ese sentido con confianza y tratando de volcar en el bloque oficialista algo que tenía que ver con un complemento. En efecto, creo que esa es la tarea pendiente que aquí se mencionó varias veces.
Pido disculpas si se considera abusivo de mi representación lo que voy a decir, pero quiero expresar mi opinión acerca de que el Parlamento tiene el desafío de dar el primer paso e involucrarse mucho más de lleno en lo que es la hidrovía y el desarrollo y el funcionamiento de nuestros puertos.
Estas dos iniciativas sobre la industria naval y, especialmente, sobre la marina mercante, ponen el tema en la agenda de este Congreso y constituyen un primer paso.
Por supuesto que este primer paso lo interpretamos como una contribución imprescindible para las economías regionales. Integro la comisión que lleva ese nombre y he tenido la oportunidad de recorrer prácticamente todo el país con legisladores de todos los bloques. He visto la incidencia de los fletes y de la identidad y la falta de involucramiento por parte del Estado -en su magnitud y en su expresión plena- para buscar alternativas que tiendan al desarrollo de las economías regionales.
Personalmente considero que todo lo logrado se debe a la contribución que han hecho los sectores que representan a los trabajadores, ya que se trata de un tema muy específico. Al principio, como dije, éramos nuevos y nos mirábamos con mucho respeto pero sin la solvencia necesaria para ir avanzando. Ese camino se fue allanando. En esa misma mesa se sentaron los empresarios y los armadores y así ese camino empezó a consolidarse. Para avanzar en ese sentido, obviamente también resultó imprescindible la actitud del bloque oficialista en los últimos tiempos, más allá de las estrategias que llevaron adelante como, por ejemplo, generar debates en el plenario.
Señor presidente: usted ha tenido solvencia y pragmatismo en los momentos en que era necesario pero también ha tenido una clara convicción de que había que buscar la forma para que este día llegara y, además, para que junto con los legisladores hoy estuvieran presentes los protagonistas principales, quienes han sido el sustento de mucho de lo que está escrito. Me refiero a los trabajadores y al sector empresario.
Solamente quería expresar mi opinión y un sentimiento que comenzó hace dos años, cuando asumí en esta banca. Escuchando a muchos legisladores -como, por ejemplo, a Gustavo Martínez Campos- he aprendido cómo debe ser la búsqueda de un consenso para concretar un objetivo que sirve a los intereses de la Nación.
Muchas gracias, señor presidente. (Aplausos.)
SR. PRESIDENTE SOLANAS Tiene la palabra el señor diputado Alonso.
SR. ALONSO Pido disculpas por hacer uso de la palabra nuevamente, señor presidente, pero ya firmados los dictámenes y considerados los temas que motivaron esta reunión plenaria, por un deber de conciencia quiero destacar la actitud de los 13 diputados de la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios. En realidad, somos 14, pero me autoexcluyo porque es sabido que nunca es bueno ser autoreferencial.
Nosotros firmamos un dictamen y la Presidencia de la Cámara determinó que ese dictamen era nulo. Los que firmamos ese dictamen pedimos que el presidente del cuerpo reconsiderase su decisión, pero el presidente del cuerpo rechazó esa reconsideración.
Pese a ello, acá estamos señor presidente, firmando este dictamen porque nos comprometimos con el consenso, pero fundamentalmente con la solución.
También hago propicia la ocasión para señalar su grandeza, señor presidente. Porque supo diferenciar lo accesorio de lo principal.
Para todos nosotros, lo principal, es la sanción de estos dos proyectos de ley. Hoy dimos un paso en esa dirección y creo no equivocarme si en nombre de todos los que efectuamos el pedido de reconsideración, digo que acá terminó la controversia con el señor presidente de la Cámara.
Gracias, señor presidente de la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios.
Nosotros firmamos un dictamen y la Presidencia de la Cámara determinó que ese dictamen era nulo. Los que firmamos ese dictamen pedimos que el presidente del cuerpo reconsiderase su decisión, pero el presidente del cuerpo rechazó esa reconsideración.
Pese a ello, acá estamos señor presidente, firmando este dictamen porque nos comprometimos con el consenso, pero fundamentalmente con la solución.
También hago propicia la ocasión para señalar su grandeza, señor presidente. Porque supo diferenciar lo accesorio de lo principal.
Para todos nosotros, lo principal, es la sanción de estos dos proyectos de ley. Hoy dimos un paso en esa dirección y creo no equivocarme si en nombre de todos los que efectuamos el pedido de reconsideración, digo que acá terminó la controversia con el señor presidente de la Cámara.
Gracias, señor presidente de la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios.
SR. PRESIDENTE SOLANAS Tiene la palabra el señor presidente de la Comisión de Legislación General, diputado Lipovetzky.
SR. LIPOVETZKY Voy a ser muy breve. Simplemente quiero agradecer a todos los diputados presentes.
Para los que no están habituados a venir a este tipo de reuniones en la Cámara, quiero decirles que un plenario de cuatro comisiones no es algo que se haga muchas veces en este Congreso.
Esto demuestra el compromiso de los integrantes de las cuatro comisiones para poder avanzar en estas leyes que son de promoción de la actividad y de verdadera política industrial, sobre todo para la industria naval.
Este plenario es muy destacable, sobre todo en un marco donde hoy tenemos compromisos con un montón de comisiones que se están reuniendo de manera simultánea. Sin embargo, con este plenario de las cuatro comisiones estamos juntando a más de la mitad de los miembros de toda la Cámara de Diputados. Esto es justamente lo que quiero destacar: el compromiso de todos los diputados de todos los bloques.
Las políticas industriales y de fomento a la actividad son transversales a todos los partidos políticos y eso lo estamos demostrando en el día de hoy.
No es la primera vez que lo hacemos ya que el año pasado también hemos votado leyes muy importantes, como la ley de pymes. Pero en estos proyectos, las comisiones -sobre todo la presidida por el señor diputado Solanas- han trabajado en conjunto con los trabajadores del sector y los representantes de los diferentes sectores para encontrar el consenso, algo que no es fácil, porque son muchos diputados. Sin embargo, en definitiva, lo que primó fue la voluntad política de tener una ley. Eso es clave. Por supuesto, el oficialismo, el bloque que yo integro de Cambiemos, tiene una parte importante porque justamente es uno de los interbloques más importantes de la Cámara.
Más allá de eso, quiero destacar el compromiso de todos los diputados que estamos acá reunidos dictaminando y que, seguramente, en los próximos días estaremos sancionando los proyectos para avanzar en una ley que es muy necesaria para toda la industria naval de la República Argentina.
Para los que no están habituados a venir a este tipo de reuniones en la Cámara, quiero decirles que un plenario de cuatro comisiones no es algo que se haga muchas veces en este Congreso.
Esto demuestra el compromiso de los integrantes de las cuatro comisiones para poder avanzar en estas leyes que son de promoción de la actividad y de verdadera política industrial, sobre todo para la industria naval.
Este plenario es muy destacable, sobre todo en un marco donde hoy tenemos compromisos con un montón de comisiones que se están reuniendo de manera simultánea. Sin embargo, con este plenario de las cuatro comisiones estamos juntando a más de la mitad de los miembros de toda la Cámara de Diputados. Esto es justamente lo que quiero destacar: el compromiso de todos los diputados de todos los bloques.
Las políticas industriales y de fomento a la actividad son transversales a todos los partidos políticos y eso lo estamos demostrando en el día de hoy.
No es la primera vez que lo hacemos ya que el año pasado también hemos votado leyes muy importantes, como la ley de pymes. Pero en estos proyectos, las comisiones -sobre todo la presidida por el señor diputado Solanas- han trabajado en conjunto con los trabajadores del sector y los representantes de los diferentes sectores para encontrar el consenso, algo que no es fácil, porque son muchos diputados. Sin embargo, en definitiva, lo que primó fue la voluntad política de tener una ley. Eso es clave. Por supuesto, el oficialismo, el bloque que yo integro de Cambiemos, tiene una parte importante porque justamente es uno de los interbloques más importantes de la Cámara.
Más allá de eso, quiero destacar el compromiso de todos los diputados que estamos acá reunidos dictaminando y que, seguramente, en los próximos días estaremos sancionando los proyectos para avanzar en una ley que es muy necesaria para toda la industria naval de la República Argentina.
SR. PRESIDENTE SOLANAS A modo de corolario quería hacer un derrotero del trabajo de esta Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios.
En ese sentido quiero destacar la presencia de las universidades, que vinieron más de una vez; a los gremios, que vinieron más de una vez; a los delegados gremiales y a los hombres y mujeres del sector industrial que también abonaron su postura y su posición.
Soy ribereño, he nacido en la costa del Paraná, en la ciudad de Paraná y he sido intendente de esa ciudad. Por eso, obviamente, coincido con lo que decía el diputado Carmona con una claridad meridiana y que, a pesar de ser de Mendoza, evidentemente está muy bien informado -razón por la que lo felicito y me da orgullo ser parte del mismo bloque.
Por la costa de la ciudad de Paraná pasan 5.000 barcazas por año. Solamente el 6 por ciento son de bandera argentina. El resto, son de banderas de otros países. Evidentemente, cuando uno ve la bandera, se da cuenta dónde estamos parados, lo que hay hacer, qué hay que recuperar y todo lo que aquí se ha dicho.
Yo creo en los consensos donde están incluidos los trabajadores y los empresarios argentinos que creen decididamente en un desarrollo de Nación. A eso apostamos con estos dos proyectos de ley, y es fundamental que lo digamos.
El sostén de la construcción de estos dos proyectos de ley son los trabajadores argentinos, el que está hoy ávido de empleo o el que quiere mejorar o recuperar decididamente la industria naval para tener una marina mercante como tuvimos otrora en la República Argentina.
Estos proyectos también atienden a los industriales argentinos, que en su mayoría son pymes y no grandes empresarios. Nosotros destacamos a las pymes porque generan empleo y tienen rostros. Muchas veces, los grandes empresarios son sociedades anónimas que no tienen rostro y los trabajadores y los ciudadanos que vivimos en esos lugares, no los conocemos. Por eso reivindicamos a la pyme como actividad real y a la industria nacional para recuperar decididamente a la misma.
Sinceramente, este es un primer paso y es un deber cumplido. Más de una vez nos sentimos frustrados porque esto lo intentamos dos o tres veces y después firmamos un dictamen que recién mencionó el diputado Alonso.
Me parece importante lo que usted dijo, diputado Alonso. Pero no debe ocurrir más en esta Cámara que el presidente de la misma tome decisiones unilaterales y no llame al presidente de la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios para que, al menos, haga su descargo. Eso es muy grave.
El presidente de la Cámara, jamás me llamó para decirme por qué decía que habíamos actuado por fuera del reglamento cuando en realidad no lo hicimos. Y como él no se retracta, está pensando que nosotros lo hicimos.
Creo que el presidente de la Cámara tendrá que retractarse alguna vez, porque nosotros no funcionamos por fuera del reglamento. Por el contrario, lo hicimos dentro del reglamento.
El presidente de la Cámara tendría que haber advertido eso -como le dije a la diputada Susana Toledo, que ya es una amiga- y, simplemente rechazando o poniendo en claro que había sido una situación no querida, solucionaba el tema. Pero el presidente de la Cámara insistió con lo mismo. Esto es algo que no comparto en absoluto y no quiero que en esta Cámara suceda otro hecho parecido. Porque en otra ocasión, cualquier comisión puede dictaminar y el presidente de la Cámara, en forma unilateral y sin llamar a ese presidente de la comisión, puede manifestar que esa comisión dictaminó por fuera del reglamento y dejar sin efecto sus dictámenes, como pasó con nuestros dos dictámenes.
Me pareció, y aún sostengo, que es un hecho grave y que me hubiera gustado que el presidente de la Cámara se retractase, no públicamente, sino que reconsiderara la situación.
No creo en las cuestiones unilaterales. No creo que nadie sea dueño de la historia. Todos estamos acá circunstancialmente por cuatro años y hacemos un pedacito. Aunque creamos en lo personal que hacemos historia, la historia pasa por otro lado. Se hace historia cuando las herramientas que quedan para el pueblo -en este caso en la marina mercante o la industria naval- se llevan a cabo y, fundamentalmente, llegan a buen puerto generando empleo, actividad económica y cuestiones sustentables en función de sostener el empleo en la República Argentina, la industria y, fundamentalmente, a los empresarios argentinos.
Por eso, les agradezco a todos y a todas: a los presidentes de las otras tres comisiones, a los integrantes de esas comisiones -de Legislación General, de Presupuesto Y Hacienda y de Industria-, pero fundamentalmente a los compañeros y compañeras, y a los no compañeros y compañeras, que compartimos la Comisión de Intereses Marítimos, porque trabajamos mucho y este es el corolario (Aplausos.)
No habiendo más asuntos que tratar, damos por finalizada la reunión.
En ese sentido quiero destacar la presencia de las universidades, que vinieron más de una vez; a los gremios, que vinieron más de una vez; a los delegados gremiales y a los hombres y mujeres del sector industrial que también abonaron su postura y su posición.
Soy ribereño, he nacido en la costa del Paraná, en la ciudad de Paraná y he sido intendente de esa ciudad. Por eso, obviamente, coincido con lo que decía el diputado Carmona con una claridad meridiana y que, a pesar de ser de Mendoza, evidentemente está muy bien informado -razón por la que lo felicito y me da orgullo ser parte del mismo bloque.
Por la costa de la ciudad de Paraná pasan 5.000 barcazas por año. Solamente el 6 por ciento son de bandera argentina. El resto, son de banderas de otros países. Evidentemente, cuando uno ve la bandera, se da cuenta dónde estamos parados, lo que hay hacer, qué hay que recuperar y todo lo que aquí se ha dicho.
Yo creo en los consensos donde están incluidos los trabajadores y los empresarios argentinos que creen decididamente en un desarrollo de Nación. A eso apostamos con estos dos proyectos de ley, y es fundamental que lo digamos.
El sostén de la construcción de estos dos proyectos de ley son los trabajadores argentinos, el que está hoy ávido de empleo o el que quiere mejorar o recuperar decididamente la industria naval para tener una marina mercante como tuvimos otrora en la República Argentina.
Estos proyectos también atienden a los industriales argentinos, que en su mayoría son pymes y no grandes empresarios. Nosotros destacamos a las pymes porque generan empleo y tienen rostros. Muchas veces, los grandes empresarios son sociedades anónimas que no tienen rostro y los trabajadores y los ciudadanos que vivimos en esos lugares, no los conocemos. Por eso reivindicamos a la pyme como actividad real y a la industria nacional para recuperar decididamente a la misma.
Sinceramente, este es un primer paso y es un deber cumplido. Más de una vez nos sentimos frustrados porque esto lo intentamos dos o tres veces y después firmamos un dictamen que recién mencionó el diputado Alonso.
Me parece importante lo que usted dijo, diputado Alonso. Pero no debe ocurrir más en esta Cámara que el presidente de la misma tome decisiones unilaterales y no llame al presidente de la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios para que, al menos, haga su descargo. Eso es muy grave.
El presidente de la Cámara, jamás me llamó para decirme por qué decía que habíamos actuado por fuera del reglamento cuando en realidad no lo hicimos. Y como él no se retracta, está pensando que nosotros lo hicimos.
Creo que el presidente de la Cámara tendrá que retractarse alguna vez, porque nosotros no funcionamos por fuera del reglamento. Por el contrario, lo hicimos dentro del reglamento.
El presidente de la Cámara tendría que haber advertido eso -como le dije a la diputada Susana Toledo, que ya es una amiga- y, simplemente rechazando o poniendo en claro que había sido una situación no querida, solucionaba el tema. Pero el presidente de la Cámara insistió con lo mismo. Esto es algo que no comparto en absoluto y no quiero que en esta Cámara suceda otro hecho parecido. Porque en otra ocasión, cualquier comisión puede dictaminar y el presidente de la Cámara, en forma unilateral y sin llamar a ese presidente de la comisión, puede manifestar que esa comisión dictaminó por fuera del reglamento y dejar sin efecto sus dictámenes, como pasó con nuestros dos dictámenes.
Me pareció, y aún sostengo, que es un hecho grave y que me hubiera gustado que el presidente de la Cámara se retractase, no públicamente, sino que reconsiderara la situación.
No creo en las cuestiones unilaterales. No creo que nadie sea dueño de la historia. Todos estamos acá circunstancialmente por cuatro años y hacemos un pedacito. Aunque creamos en lo personal que hacemos historia, la historia pasa por otro lado. Se hace historia cuando las herramientas que quedan para el pueblo -en este caso en la marina mercante o la industria naval- se llevan a cabo y, fundamentalmente, llegan a buen puerto generando empleo, actividad económica y cuestiones sustentables en función de sostener el empleo en la República Argentina, la industria y, fundamentalmente, a los empresarios argentinos.
Por eso, les agradezco a todos y a todas: a los presidentes de las otras tres comisiones, a los integrantes de esas comisiones -de Legislación General, de Presupuesto Y Hacienda y de Industria-, pero fundamentalmente a los compañeros y compañeras, y a los no compañeros y compañeras, que compartimos la Comisión de Intereses Marítimos, porque trabajamos mucho y este es el corolario (Aplausos.)
No habiendo más asuntos que tratar, damos por finalizada la reunión.