Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional que informe a través del Ministerio de Producción y/o el organismo pertinente sobre las importaciones de equipos de computación, en particular Notebooks, Netbooks, Tablets, All In One (AIO) y Computadoras de Escritorio.

A saber:

1) En la actualidad, las posiciones arancelarias de estos productos están incluidos en el listado de excepciones al Arancel Externo Común, próximo a vencer. ¿Se continuará otorgando esta excepción, teniendo en cuenta el estímulo que representa para la fabricación nacional de dichos equipos?

2) ¿Qué propuestas de políticas económicas concretas ofrecen al sector de fabricación nacional de estos equipos electrónicos?

3) Entre las distintas políticas de estímulo que se le brindan el sector, ¿el Ministerio de Producción estudió la factibilidad de aplicar alguna reducción en los aranceles a la importación de las materias primas utilizadas en el proceso productivo, en aquellos rubros que no exista producción nacional, como un mecanismo de abaratar los precios?

4) ¿Qué medidas ha adoptado o adoptará el Ministerio de Producción para evitar la importación de equipos obsoletos a precios de remate?

5) ¿Qué políticas estructurales planifica el Ministerio de Producción para mejorar la competitividad y disminuir los costos extra fábrica de modo de contribuir con la disminución de los precios de los productos, sin afectar la producción nacional?

Señor presidente:

En la actualidad, nuestro país posee un importante sector industrial productor de Notebooks, Netbooks, Tablets, All In One (AIO) y Computadoras de Escritorio, que emplea directamente a más de 5.500 personas y genera 7.000 puestos de trabajo indirectos en los proveedores de materiales, servicios y armadores. Se trata de unas veinte (20) empresas industriales nacionales que fabrican equipos de computación, que abastecen al mercado interno, y miles de Pequeñas y Medianas Empresas (PyMES) (denominados en el rubro de la informática como “resellers”) en todo el país, los cuales arman Computadoras Personales de distintos tipos y configuraciones a medida para sus clientes.

La demanda de estos productos ha sufrido una fuerte caída en el último año, al pasar de 1,6 millones de unidades vendidas en 2014, a 1,1 millones en 2015 y a 0,9 millones durante 2016 (estimación provisoria elaborada por las cámaras del sector al 4 de octubre de 2016, las cuales incluyen los equipos correspondientes a los Programas de Educación Pública: Educ.Ar y Plan Sarmiento). Actualmente, producto de la reducida demanda, las empresas cuentan con un importante stock de producción, equivalente a 10 meses de consumo, cuando en situaciones normales el stock no supera los tres meses de demanda.

A la par de la caída de la demanda, en lo que va del año 2016, la importación de estos productos se incrementó, afectando fuertemente la actividad de las empresas del sector. Solo entre enero y mayo de este año, las importaciones de productos terminados alcanzaron las 220 mil unidades, cifra equivalente al total importado durante 2015. De continuar esta tendencia para el resto del año, la producción local será desplazada por la competencia importada y el mercado argentino de productos electrónicos pasará de estar un 78% abastecido por producción nacional en 2015 a sólo 42% para 2016.

La situación descripta repercute negativamente en los puestos de trabajo registrados, pues las empresas deben aplicar suspensiones y despidos. La falta de una política industrial de apoyo al sector generará en el corto plazo, el quiebre y cierre de empresas; la destrucción de puestos de trabajo y la pérdida para nuestro país de las capacidades productivas adquiridas en la fabricación de productos electrónicos. Esto no es otra cosa que un verdadero retroceso para el proceso de desarrollo de nuestra industria nacional.

Por los motivos expuestos, solicito a los Señores Diputados la aprobación del presente proyecto de Resolución.-