Expresar su adhesión a la decisión del Poder Ejecutivo Nacional de establecer límites a la importación de moto-vehículos, a fin de promover su construcción en el país, contribuyendo así a sostener el crecimiento de la actividad industrial, la inversión y el empleo en Argentina.

Señor presidente:

Durante varios años, se ha considerado erróneamente que la interferencia del Estado en las actividades económicas resultaba perjudicial. Esta opinión provenía, quizás, de cierta concepción ideológica que respondía a intereses contrarios al Bien Común.

No obstante, durante algunas épocas de la historia argentina, como así también en los países más desarrollados del mundo, el Estado suele intervenir para promover, entre otras cosas, las actividades productivas que contribuyan a la independencia económica y al pleno empleo de los factores productivos de un país.

En este sentido, el Poder Ejecutivo Nacional estableció, recientemente, un sistema de licencias no automáticas para la importación de motos que busca proteger e impulsar la construcción de ese tipo de rodados en el país, donde más del 90 por ciento de las unidades vendidas provienen del extranjero. La medida apunta no sólo a los vehículos terminados sino, también, a las partes de motos.

Por su parte, la Comisión de Fabricantes de Moto-vehículos de la Confederación General Económica (CGE), expresó oficialmente que esta decisión provocará que el sector privado invierta en los próximos tres años unos 80 millones de dólares y genere alrededor de 3.500 puestos de trabajo. De acuerdo a lo manifestado por la CGE, en los primeros siete meses del año se importó un 178 por ciento más de motos que en el mismo período del año pasado, cuando las importaciones habían llegado a casi triplicar las de 2004.

Así, con la convicción de seguir contribuyendo al crecimiento de nuestra economía y al sostenimiento de la reactivación industrial del país, debemos destacar esta clase de medidas, que representan una intervención positiva del Estado en las actividades económicas, en vistas al logro del Bien Común de los argentinos.

Por todo lo antes expuesto, solicito a mis pares que me acompañen con la aprobación del presente Proyecto de Resolución.