Comisiones » Permanentes » Comisión Permanente de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios »

INTERESES MARITIMOS, FLUVIALES, PESQUEROS Y PORTUARIOS

Comisión Permanente

Of. Administrativa: Piso P02 Oficina 219

Jefe SR. RODRIGUEZ JUAN MANUEL

Martes 17.30hs

Of. Administrativa: (054-11) 6075-2367 Internos 2367/2449/2356

cimaritimos@hcdn.gob.ar

PROYECTO DE RESOLUCION

Expediente: 4694-D-2011

Sumario: PEDIDO DE INFORMES AL PODER EJECUTIVO NACIONAL SOBRE DIVERSAS CUESTIONES RELACIONADAS CON EL REINGRESO DE LA "EMPRESA MARUBA" EN LA ACTIVIDAD NAVIERA.

Fecha: 20/09/2011

Publicado en: Trámite Parlamentario N° 136

Proyecto
Solicitar al Poder Ejecutivo para que a través de los organismos que corresponda se sirva informar el ingreso de la Empresa Maruba nuevamente en las empresas navieras:
1.-¿Quiénes componen la empresa naviera argentina Maruba ?
2.-¿Que porcentajes poseen cada uno de los componentes en la misma?
3.-¿ Que puesto y participación tiene en la misma el dirigente gremial Enrique Omar Suarez?
4.-¿Existen denuncias sobre la prolongada embestida contra la industria pesquera de Mar del Plata y los exportadores de pescado que se habían revelado ante una serie de exigencias gremiales.? En caso afirmativo; indique cuales.
5.-¿Qué participación tuvo Maruba, ayudado por la pasividad oficial, en la paralizacion durante varios meses de las exportaciones de contenedores de pescado con diversas trabas a las navieras que llevaban esas cargas?
6.-¿Cómo se resolvieron los problemas económicos que tenia Maruba?
7.-¿Cómo esta empresa consiguió un importante crédito del Banco Nacion, que prestó más de US$ 60 millones a esta naviera argentina contra cero de garantía de recobro?
8.-¿Se ha realizado un relevamiento sobre la importante injerencia que esta empresa y el Sr. Suarez tiene en temas como:
a) Remolcadores
b) Contenedores
c) Combustibles
d) la energética estatal ENARSA para que Maruba se convierta en la "agencia marítima" que manejará las operaciones de alije y traslado de los barcos de GNL que ingresarán al puerto de Escobar a partir de junio.
e) sector de granos donde Suárez les advirtió a las grandes cerealeras, aceiteras y a los acopiadores que tienen que incluir a Maruba en el negocio de los fletes externos de granos.
9.-¿Se han realizado relevamientos e investigaciones teniendo en cuenta los numerosos planteos que se vienen sucediendo en todos los tópicos que hemos nombrado en la pregunta anterior? En caso afirmativo indicar que resultado arrojo y en caso negativo explique los motivos.
10.-¿Cuál es la autoridad encargada de realizar todas estas premisas? ¿Qué medidas tomo al respecto? En caso negativo; explique los motivos.

FUNDAMENTOS

Proyecto
Señor presidente:


Para comprender lo que nos motiva a la realización del presente pedido de informes haremos una breve reseña de los hechos acaecidos.
Enrique Omar Suárez -más conocido en el ambiente como el "Caballo"- es el polémico titular del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), que en los últimos meses ha lanzado una fuerte embestida contra navieras, petroleras y cerealeras para favorecer al gremio y a la compañía marítima Maruba.
A la hora de hacer negocios, utiliza los mismos métodos de "convencimiento" que los camioneros de Hugo Moyano. Desempeña el doble rol de dirigente gremial y empresario . Y con el apoyo del Gobierno ha concretado una serie de movidas que agitaron las aguas y las reglas de juego del ámbito marítimo local.
Protagonista en 2007 de un escándalo en la embajada Argentina en Suiza -de donde fue retirado por haberse excedido en la ingesta de alcohol por otros sindicalistas que estaban con la entonces candidata presidencial Cristina Kirchner-, el mandamás del SOMU suele repetir: "Todo lo que se mueve sobre el agua es mío" .
Hace casi tres años llevó adelante una prolongada embestida contra la industria pesquera de Mar del Plata y los exportadores de pescado que se habían revelado ante una serie de exigencias gremiales.
Ayudado por la pasividad oficial, paralizó durante varios meses las exportaciones de contenedores de pescado con diversas trabas a las navieras que llevaban esas cargas.
A principios de 2010, comenzó a preparar su desembarco en Maruba , una de las principales navieras locales que arrastraba serios problemas económicos.
Con la promesa de un crédito del Banco Nación que no se venia concretando , Suárez consiguió ingresar como director de Maruba en octubre del año pasado y desde entonces no ha parado de presionar a otras empresas para que cedan tráficos y negocios a esa compañía.
La ofensiva -que cuenta con el visto bueno del subsecretario de Puertos y Vías Navegables, Ricardo Luján- se ha materializado en los siguientes estamentos del negocio marítimo.
Remolcadores : Desde el gremio le advirtieron a todas las empresas de lanchas y a los "prácticos" que cuando presten servicios a los buques de cargas deben utilizar los remolques de Maruba y no los de otras compañías. Esto trajo como consecuencia que Smith Internacional, la principal empresa de remolcadores que operaba en Buenos Aires y Bahía Blanca, se vaya del país y que todos sus clientes pasen a Maruba.
Contenedores : Con el apoyo del Gobierno y sugestivas demoras en las operaciones de los barcos, el titular del SOMU salió a "convencer" a las firmas Maersk y Hamburg Sud para que dejen parte de los tráficos de porta contenedores al Litoral y Ushuaia en manos de Maruba.
Como resultado de esas "gestiones", la naviera de Suárez terminó cuarteando dos barcos para hacerse cargo del servicio Rosario-Zárate que abandonó Maersk y de la línea Buenos Aires-Tierra del Fuego, que cubría Hamburg Sud.
Combustibles: En este sector, se registra una doble presión. Hay varias empresas que tienen frenados desde hace varios meses los permisos oficiales para operar con buques petroleros. A otras, como a ENPASA, le exigen que contrate más tripulantes que los habituales. Mientras tanto, Maruba -que nunca operó buques petroleros- recibió una sorpresiva ayuda de la CAMMESA (la administradora del mercado eléctrico) y se quedó con la mayor parte de los contratos para transportar el gasoil y fueil oil que consumen las usinas térmicas.
Para ese negocio garantizado por el Gobierno, Maruba trajo dos buques de China que se presentaron la semana pasada en un acto en el puerto de Buenos Aires que encabezaron Suárez, Moyano y diputado oficialista, Carlos Kunkel .
Además, la ofensiva de Suárez también llegó a la energética estatal ENARSA para que Maruba se convierta en la "agencia marítima" que manejará las operaciones de alije y traslado de los barcos de GNL que ingresarán al puerto de Escobar a partir de junio.
Ahora, tiene en la mira al sector granos. Suárez les advirtió a las grandes cerealeras, aceiteras y a los acopiadores que tienen que incluir a Maruba en el negocio de los fletes externos de granos. El pedido fue respaldado, a principios de marzo, con un bloqueo a las terminales del río Paraná, Bahía Blanca y Quequén. Si no obtiene la respuesta esperada, el gremio ya anticipó que volverá a mostrar su capacidad de presión.
Ante tamañas conexiones el Banco Nación de la Argentina prestó más de US$ 60 millones a la naviera Argentina Maruba contra cero de garantía de recobro, según datos dados a conocer en el vecino país.
Cabe señalar que el 30% de las acciones de esta compañía pertenece al Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), que perpetró en diciembre del año pasado un boicot portuario contra el Paraguay, cuyo secretario general, Omar "Caballo" Suárez, se había puesto como meta de mediano plazo recuperar las empresas navieras argentinas que en la década de los 90 se "fugaron" a nuestro país de la Argentina, debido a la falta de seguridad jurídica, provocada por un violento movimiento sindical en el vecino país.
El informe señala que hay otro 30% de las acciones que quedan en manos de gente que nadie sabe quiénes son, ni por qué están, y un 40% que queda en manos de la familia Rodríguez, que ven como de quebrados pasaron nuevamente a la calidad de armadores y magnates de la industria.
Advierte que si la Nación presta (en inciertas condiciones) US$ 60 millones, por qué se le cede a los gremios el 30% de las acciones, sin que hayan aportado un solo centavo, "algo aquí no cierra".
En el mes de octubre de 2010, las principales autoridades de la Marina Mercante Argentina asistieron al nombramiento del secretario general del SOMU, Omar Suárez, como director de Maruba SA.
Este fue el principio de la historia de "recuperar la bandera Argentina en el mundo" y "generar construcción de buques en nuestros astilleros" para ese fin, previo saqueo por supuesto de las arcas del Banco Nación.
En consecuencia, es importante destacar que Maruba era una empresa Argentina con profundos problemas económicos y que después de la intervención estatal comenzó a afianzar de forma repentina su actividad naviera una empresa Argentina que prácticamente no tiene buques argentinos y que ha dejado deudas en cada puerto del mundo por el que pasó. (ABC -Paraguay)
La empresa Maruba comenzó a hacer llegar al país el arribo al país de los buques tanque Chubut (ex Neva Star) y Neuquén (ex Tosna Star).
No fue casual, entonces, la presencia en el acto del secretario general de la Confederación General del Trabajo (CGT), Hugo Moyano, junto al director de Maruba y secretario general del SOMU, Omar Suárez.
Según se informó, el objetivo de la presentación y puesta en marcha de estos dos buques es ofrecer el transporte de una extensa flota química petrolera y continua y asegura la modernización tecnológica de los equipos de toda la flota de barcos Maruba.
Suárez recalcó que esta empresa estaba en malas condiciones financieras y gracias al esfuerzo de los trabajadores, empresarios y el acompañamiento del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, hoy por hoy Maruba realiza viajes por todo el mundo. De acuerdo a una visión compartida por los gremios y empresarios que participan en Maruba, hoy las exportaciones argentinas generan un mercado de fletes de entre u$s 5.000 y u$s 7.000 millones al año del cual no participan las navieras nacionales. La idea es lograr una flota en capacidad de captar, al menos, una porción interesante de la torta.
No son pocas las presiones gremiales, tanto en el Congreso como en la Casa Rosada, para lograr sancionar una ley de reserva de carga a imagen de lo que sucede en varios países del mundo. Tampoco se descarta volver al Fondo de la Marina Mercante para posibilitar la construcción de buques bajo bandera Argentina.
En el acto, también estuvieron presentes en el acto Omar Viviani, secretario general de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT); Juan Carlos Schmid, secretario general de Dragado y Balizamiento; Juan Carlos López Mena, presidente de Buquebus; Carlos Kunkel, diputado nacional por el Frente para la Victoria; Cayo Ayala (Fempinra); y Ricardo Lujan, subsecretario de Puertos y Vías Navegables de la NEnrique Omar Suárez, el titular del Sindicato Obreros Marítimos Unidos (SOMU), se convirtió en un factor de presión indiscutido en el transporte de cargas fluvial y marítimo.
El poder de Suárez radica en que los trabajadores del SOMU son clave en los remolcadores, embarcaciones necesarias para que un buque oceánico amarre y zarpe de los puertos y para empujar los convoyes de barcazas allí donde el calado de los ríos no permite la navegación de buques. El 90% del comercio exterior argentino sale y llega por agua.
El jefe del SOMU hoy es la cara más visible y combativa de la marina mercante, desmantelada a mediados de los 90 con la desaparición de la reserva de cargas para la bandera nacional y la liquidación de las flotas estatales fluviales y marítima (Effea y ELMA), hechos que condenaron a la mano de obra nacional a perder espacio frente a las tripulaciones con las banderas de conveniencia. Entonces, por la hidrovía Paraná-Paraguay, se movían 500.000 toneladas de cargas.
Pero con China y su apetito por materias primas, las cosechas de soja Argentina y paraguaya se multiplicaron, al mismo tiempo que lo hizo el mineral de hierro boliviano y el brasileño.
Estas commodities encontraron en la vía fluvial el medio de transporte más eficiente y barato.
La hidrovía mueve hoy 15 millones de toneladas de granéeles, que se elevarán a 28 millones en 5 años y a 60 millones en 20 años. Este volumen genera un negocio de fletes considerable, en el que la marina mercante Argentina, no obstante, está en desventaja competitiva frente a terceras banderas regionales, la paraguaya sobre todo, por las asimetrías económicas. La Argentina le dio la espalda a su línea "fluvial" de bandera. Paraguay la promocionó por su naturaleza mediterránea, que condena a su comercio exterior a depender totalmente del río
Así, mientras un armador argentino que quiera participar del flete fluvial e importar una embarcación usada tiene que pagar 52% de aranceles, esperar dos meses para su aprobación técnica y pagar el combustible al precio "de surtidor" sin el subsidio que gozan otros transportes. En cambio, un armador paraguayo paga 5% sobre el bien importado, tiene 5 años de gracia impositiva, logra el registro en 20 días y carga en la Argentina combustible (el mayor costo operativo en la navegación) sin pagar el IVA ni los impuestos argentinos.
Si a esto se suma que un marinero paraguayo cobra menos de la mitad de uno argentino el efecto económico directo es claro: el registro argentino cuenta con apenas el 5% de todas las embarcaciones de la hidrovía; el paraguayo, con más del 90%. Y los armadores argentinos que no encuentran rentabilidad en la bandera nacional, migraron a la paraguaya: la mayoría de los remolques de bandera paraguaya son de empresas vinculadas a los armadores argentinos.
Esta situación desbocó a Suárez, quien, como cabeza visible del movimiento obrero embarcado, manifestó su hartazgo por las asimetrías e hizo pública su obsesión por recuperar las cargas para la bandera nacional. Comenzó por crear un sindicato homólogo en Paraguay y presiona a los armadores argentinos para que sus empresas afiliadas en Paraguay firmen convenios colectivos con el Somupa. Al dominar los remolques, el ahogo operativo al que somete a los armadores es total; las barcazas que navegan en el Alto Paraná no pueden hacerlo sin un empuje. A fines de 2010 mantuvo paralizado por 40 días el comercio exterior paraguayo. Suárez manifiesta sin eufemismos que hará todo lo necesario para que la bandera nacional recupere cargas. Y encontró en Maruba -la única empresa de bandera nacional que quedaba en el tráfico marítimo internacional, y que arrastraba una deuda con proveedores de más de 100 millones de dólares- el trampolín para lograrlo. Suárez vio que podía allanar el camino para nacionalizar los fletes con Maruba.
A la vez, con los sindicatos, los aliados políticos necesarios para competir en el cabotaje nacional y, tal vez, esperar alguna ayuda del Gobierno.
Como conclusión diremos que Omar Suárez se convirtió en director de la empresa Maruba en representación de los trabajadores.
De esta manera, la compañía naviera reestructuró su deuda y logró avales extranjeros para construir buques.
El propio dirigente sindical manifestó que los cargadores iban a tener que fletar con Maruba o encontrarían dificultades para conseguir remolque. Los buques que llegaron de Maruba no fueron graneleros, sino cuatro petroleros chinos nuevos que se presentaron en marzo último ante el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, y el líder de la CGT, Hugo Moyano.
Por todo lo expuesto, es que vengo a solicitar de mis pares la aprobacion del presente proyecto.
Proyecto
Firmantes
Firmante Distrito Bloque
BIANCHI, IVANA MARIA SAN LUIS PERONISMO FEDERAL
Giro a comisiones en Diputados
Comisión
INTERESES MARITIMOS, FLUVIALES, PESQUEROS Y PORTUARIOS (Primera Competencia)
LEGISLACION DEL TRABAJO