Solicitar al Banco Central de la República Argentina que estudie la posibilidad de incrementar los montos de las garantías de los depósitos bancarios, a efectos de llevar tranquilidad a los ahorristas, en momentos de serias turbulencias financieras internacionales.

Señor presidente:

Es harto sabido que cuando Wall Street se resfría, el resto del mundo contrae una fuerte gripe. Sin embargo, en esta ocasión, la crisis financiera originada en la principal economía mundial, va mucho más allá de un simple resfriado. El colapso de las finanzas, a partir del estallido de los hedge founds, ya tiene escala planetaria, producto de la globalización.

El problema central del estallido de la burbuja es que no se sabe a ciencia cierta la profundidad del problema. En otras palabras, cuanta es la cantidad de activos "tóxicos", quien los tiene y cuanto repercuten en los balances. Afortunadamente, todavía el nudo se encuentra en la banca de inversión. Apenas ha tocado a la banca comercial. Pero, como en toda crisis, los niveles de desconfianza sistémicos se exponencian.

El crac de 1929 nos enseñó que el paso de "preocupación" a "histeria" generalizada suele ser extremadamente rápido. Con sus secuelas clásicas: corridas contra el sistema financiero y el "flight to the security" que repercute en el tipo de cambio. Lo segundo ya lo estamos viendo. El Banco Central ha tenido que intervenir con gruesas sumas para frenar la suba abrupta

de la cotización del dólar estadounidense. Es archi sabido, que en Argentina, los ahorristas acuden prestos a comprar la moneda norteamericana, apenas asoma cualquier síntoma de riesgo o peligro. Sea real o tenga fundamentos.

Dada nuestra particular historia de los últimos cinco decenios, sería muy importante aplicar medidas concretas a efectos de aplacar el "nerviosismo" de los mercados y del público inversor. Una buena señal, a nuestro entender, sería, entre otras, que el Banco Central de la República Argentina aumente y extienda las salvaguardias respecto a los depósitos bancarios, sean a la vista o a plazo. Se trata de una medida ya adoptada por los bancos centrales de varios países. Y serviría para llevar tranquilidad a los mercados, en momentos de zozobra, tanto a nivel doméstico como externo.

Por estas razones y las que oportunamente brindaré en el recinto de la H. Cámara, es que solicito a mis pares la aprobación del presente Proyecto de Resolución.