1) Expresar su solidaridad con la población afectada por los incendios desatados en amplias zonas de las provincias de La Pampa, Río Negro y Buenos Aires.

2) Declarar su reconocimiento a los bomberos voluntarios y a los pobladores por su importante trabajo como primera línea de defensa ante el avance del fuego.

3) Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional declare zona de desastre y emergencia económica, social, productiva y sanitaria en las provincias y/o zonas afectadas por el plazo de 180 días prorrogable. Asimismo se declare la emergencia agropecuaria en el marco de la ley 26509.

Señor presidente:

En las últimas dos semanas estamos asistiendo a un desastre de grandes proporciones en las provincias de Río Negro, La Pampa y el sur de la provincia de Buenos Aires, donde hasta estos momentos ya han sido arrasadas por el fuego 800000 hectáreas. Los daños son cuantiosos y las consecuencias se sufrirán en el largo plazo. Todo comenzó con las altas temperaturas, la sequía que afecta la región y hasta tormentas eléctricas que también con la descarga de rayos provocaron focos de incendio. Cabe destacar la importante tarea desempeñada por los bomberos voluntarios de las localidades afectadas quienes junto a los pobladores se han constituido en la primera línea de defensa frente al avance del fuego.

En estos momentos por la magnitud y gravedad del fenómeno es fundamental atender a la población y ayudar en la reconstrucción. Por eso se solicita al Poder Ejecutivo Nacional que declare zona de emergencia y desastre a las provincias y zonas afectadas.

Esta situación puso a la vista la falta de inversiones durante años para prevenir y/o afrontar este tipo de catástrofes y además mostró la ausencia de políticas públicas efectivas que cumplan con los objetivos planteados al sancionarse la ley 26.815 de creación del Sistema Federal de Manejo del Fuego. Para fundamentarlo podemos mencionar el Informe de la Auditoria General de la Nación del 2006 con las múltiples observaciones que elevó al Poder Ejecutivo Nacional y que en sus conclusiones termina señalando “…a lo largo de los años se observan escasos avances en la conformación de los planes operativos con excepción de la región andino patagónica. Asimismo, sería conveniente que la Unidad analice la necesidad de contar con más Brigadas Nacionales distribuidas en otras regiones…”. Esto muestra cierto paralelismo con los llamados de atención que realizaba mediante informes este organismo de control respecto al sistema ferroviario y la posterior tragedia de Once.

Por otra parte el mismo informe afirmaba que “No se encuentra establecida la relación entre el presupuesto asignado al organismo para la gestión del manejo de los incendios forestales a nivel federal y sus efectos ecológicos y económicos negativos.”. Por ello no se comprende que se agrave el cuadro de desamparo que están sufriendo todas estas localidades, al ejecutarse en el 2016 solo el 51% del presupuesto aprobado por este Congreso para el programa del Plan Nacional de Manejo del Fuego que depende del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable.

Por ello una vez que se hayan controlado los incendios y empiece la etapa de reconstrucción tendría el Poder Ejecutivo Nacional brindar un informe de las acciones

tomadas pre y post catástrofe y reverse los planes de manejo de fuego dotando a las provincias con mayores riesgos de incendios de los elementos necesarios para hacer frente a estos fenómenos que se agudizan cada vez más debido al cambio climático.

Hay fenómenos naturales que no pueden prevenirse totalmente, pero hoy a nivel internacional se disponen de muchos avances tecnológicos para detectarlos y combatirlos eficientemente. Cuanto más rápido se controlan y circunscriben menos daños humanos, ambientales y materiales se producen.

Por lo expuesto solicito a mis pares me acompañen en la aprobación del presente proyecto de Resolución.