Expresar su beneplácito por la presentación del Plan de Reactivación de la Actividad Nuclear Argentina, por parte del Ministerio de Planificación Federal de la Nación, cuyo carácter es pacífico, y tiene como principales finalidades el aumento de la producción nucleoeléctrica, el uso medicinal y la generación de numerosos puestos de empleo de alta calificación.

Señor presidente:

Hoy en día el aprovechamiento de la energía nuclear es uno de los logros tecnológicos más importantes alcanzados por el hombre y, dada su trascendencia, cobra cada vez mayor peso en las agendas de la mayoría de las naciones del mundo.

La fisión nuclear del uranio es la principal aplicación práctica civil de la energía nuclear y se emplea en cientos de centrales nucleares en todo el planeta, ya que tiene como principal ventaja que no utiliza combustibles fósiles, con lo que no emite a la atmósfera gases tóxicos o de efecto invernadero.

La Argentina ingresó en el año 1983 al selecto grupo de países con esta tecnología y luego de varios años de inactividad, el pasado 23 de agosto de 2006, el Ministerio de Planificación Federal presentó el denominado "Plan de Reactivación de la Actividad Nuclear Argentina", que consta de proyectos en el área que tendrán carácter pacífico, dirigidos a la salud pública y a la generación de electricidad.

El plan prevé finalizar las obras de la central nuclear Atucha II en el segundo semestre del año 2010, con un costo cercano a los 1800 millones de pesos, con lo cual se incrementaría en 745 megawatts la oferta de energía eléctrica del sistema interconectado nacional y se cerraría el frente abierto por la escasez de energía que pone en riesgo la continuación del crecimiento de la economía, según la opinión de muchos especialistas en el tema. Se propone también extender la vida útil de la central de Embalse de Río Tercero, de 2018 a 2043; iniciar un estudio de factibilidad para la construcción de una cuarta generadora nuclear; y retomar la producción de uranio enriquecido en la planta piloto de Pilcaniyeu. Se contempla también una inversión de 3500 millones de dólares que se desembolsarán en los próximos 8 años, con destino a promover iniciativas para el desarrollo de tecnologías en este campo, lo cual a su vez podría llegar a generar al menos 6000 nuevos puestos de empleo, muchos de ellos de alta calificación.

En suma, esta iniciativa del Gobierno Nacional apuntará a fortalecer la posición del país en dos zonas estratégicas: la generación de energía nucleoeléctrica y el desarrollo de tecnologías para los sectores de la salud, la industria y la investigación científica.

Por todo lo antes expuesto, solicito a mis pares que me acompañen con la aprobación del presente Proyecto de Resolución.