Su beneplácito ante la decisión de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Tucumán, de sumarse a las unidades académicas que brindan Educación Superior, en situación de encierro.

Señor presidente:

Quisiera destacar la importancia, que una universidad pública, en este caso a través de una unidad académica, como la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UNT, haya tomado la decisión de promover la educación superior

Los DDHH deben ser efectivos para todos los ciudadanos de la Nación y sin dudas, entre ellos el derecho de Acceso a la Educación.

Por ello, el convenio de cooperación académica, celebrado por la Facultad con el Ministerio de Gobierno, Justicia y Seguridad de la provincia, a fin de garantizar el desarrollo de las actividades tutoriales de la carrera de Derecho, es una herramienta transformadora.

El acuerdo permite que los alumnos de abogacía, que se encuentran privados de su libertad, tengan en la cárcel un espacio dedicado a las actividades universitarias, lo que se convierte en la primera experiencia de enseñanza superior intramuros del NOA.

Este tipo de políticas inclusivas, merecen ser resaltadas, ya que estamos acostumbrados a que las cárceles solo son noticias por hechos negativos.

Detrás de la decisión institucional de la Facultad de Derecho y Cs. Sociales, encabezada por su Decana, Dra. Adela Seguí, hay un equipo de personas comprometidas, entre las que se destacan los responsables del Programa de Tutorías de la Facultad integrado por la Dra. Larisa Moris, Dr. Martin Rivas y Lic. Patricia López y los Responsables del Área Tutorías en contexto de encierro, Dr. Guillermo Puig y Dr. Franco Venditti, que desarrollando estas acciones de extensión universitaria, buscan evitar la reincidencia de las personas privadas de su libertad y a la vez reducir el daño que provocan los institutos penales, mediante el estudio de una carrera universitaria.

Por lo expuesto, solicito a mis pares el acompañamiento en este proyecto.