Dirigirse al Poder Ejecutivo Nacional en los términos de los artículos 100, inciso 11, de la Constitución Nacional y 204 del Reglamento para que por intermedio del Ministerio de Salud de la Nación, informe a esta Cámara de Diputados de la Nación diversos aspectos relacionados con el aumento de consumo de alcohol entre los jóvenes menores de dieciocho años, de acuerdo con los puntos siguientes:

Programas efectivamente realizados -en los términos de la ley 24.788- por los Ministerios de Salud y Acción Social de la Nación, de Cultura y de Educación de la Nación, de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y Lucha contra el Narcotráfico desde el año 2001 al presente;

Presupuesto otorgado anualmente por el gobierno nacional -desde 2001 al presente- para la ejecución del "Programa Nacional de Prevención y Lucha contra el Consumo Excesivo de Alcohol" (artículo 8 ley 24.788);

Fondos percibidos, conforme artículo 20 inciso a) ley 24.788, para el desarrollo del "Programa Nacional de Prevención y Lucha contra el Consumo Excesivo de Alcohol" durante el periodo señalado;

Cantidad de muertes provocadas por la ingesta de alcohol en menores de dieciocho años desde el 2001 al presente.

Señor presidente:

El presente pedido de informes, es consecuencia lógica y directa, del estudio que ha dado a conocer a fines del año pasado el Ministerio de Salud de la Nación en el que se destaca un aumento exponencial del consumo de alcohol entre los jóvenes menores de dieciocho años.

En tal sentido, y según el propio Ministerio de Salud de la Nación, la ingesta del alcohol entre los menores se ha duplicado desde el año 2001 al presente.

Asimismo, y a través de diversos medios periodísticos, hemos tomado conocimiento respecto a los hechos siguientes: i) la edad promedio en la que se inicia la ingesta de alcohol es de 13 años; ii) no hay diferencias entre varones y mujeres -beben por igual- y iii) el espacio temporal en el que se ingiere alcohol se ha ampliado: a la famosa "previa" de las salidas nocturnas ahora se sumó el consumo durante el día, incluso antes y después del colegio (Diario Infobae, 8 de diciembre de 2014).

Con suma preocupación, advertimos que tales datos se condicen, negativamente, con otras situaciones de la realidad que surgen de las estadísticas de accidentes automovilísticos en los que se encuentran involucrados los menores.

De hecho, se afirma que mueren tres jóvenes por día por manejar ebrios a la vez que los accidentes de tránsito, ya se convirtieron en la primera causa de muerte no natural de las personas entre 15 y 25 años.

Es evidente, entonces, que no sólo se encuentra en riesgo la vida de todas las personas que padecen este flagelo -ya sea directa o indirectamente- sino además, el futuro mismo de la nación. No es ocioso recordar, que una gran parte de nuestros jóvenes no estudian ni trabajan, y hasta el día de hoy, esa tendencia no se ha revertido.

Indudablemente, ello continuará agravándose en caso de no ejecutarse programas y políticas idóneas para evitar el abuso en el consumo de alcohol (y estupefacientes) por parte de los jóvenes.

Por lo tanto, y de acuerdo con la Observación General N° 6 del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales que determina que "los Estados Partes deberían tener presente que mantener la salud hasta la vejez exige inversiones durante todo el ciclo vital de los ciudadanos, básicamente a través de la promoción de estilos de vida saludables (alimentación, ejercicio, eliminación del tabaco y del alcohol, etc.)"; resulta indispensable conocer concretamente que programas y políticas ha llevado a cabo el Ministerio de Salud de la Nación desde el año 2001 al presente para hacer frente a esta alarmante situación.

Por todo lo expuesto, solicitamos el acompañamiento de nuestros pares a fin de aprobar este pedido de informes.