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PREVENCION DE ADICCIONES Y CONTROL DEL NARCOTRAFICO

Comisión Permanente

Of. Administrativa: Piso P02 Oficina 206

Secretario Administrativo SR. CABRERA RUBEN

Jefe SR. ABREGO HUGO IVAN

Martes 12.00hs

Of. Administrativa: (054-11) 60752241 Internos 2241

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PROYECTO DE RESOLUCION

Expediente: 8754-D-2010

Sumario: PEDIDO DE INFORMES AL PODER EJECUTIVO SOBRE DIVERSAS CUESTIONES RELACIONADAS CON LOS HECHOS OCURRIDOS EN LA BASE AEREA DE MORON Y EL POSTERIOR SECUESTRO DE UN AVION CHALLENGER 604 EL DIA 2 DE ENERO DE 2011 EN ESPAÑA, QUE TENIA A BORDO UN CARGAMENTO DE DROGA.

Fecha: 10/02/2011

Publicado en: Trámite Parlamentario N° 201

Proyecto
Solicitar al Poder Ejecutivo que, a través de los organismos que resulten competentes, informe lo que a continuación se solicita con referencia a personal de la Fuerza Aérea Argentina vinculado al caso del Challenger 604 con matrícula norteamericana N600AM secuestrado el 2 de enero de 2011 en el aeropuerto de El Prat con 944 kilogramos de cocaína a bordo:
Si la Fuerza Aérea Argentina despliega actividades de inteligencia sobre los aeropuertos de Ezeiza y Morón.
En tal caso, si la Jefatura de la fuerza recibió algún tipo de informe que alertara sobre movimientos fuera de lo normal en relación con el avión Challenger.
Si tuvo conocimiento, por medio de otra agencia de inteligencia estatal, nacional o internacional, algún dato sobre el avión en cuestión.
Si el Brigadier Rodolfo Centurión, o algún otro integrante de su fuerza, elevó o no algún tipo de informe al Jefe de la Fuerza Aérea acerca del avión o de algún pedido de autorización para usar la base de Morón para estacionar el mismo.
En caso de haber recibido algún tipo de informe de inteligencia, cuáles fueron las medidas adoptadas en función de la información contenida en el mismo.
Si Roberto Antonio Coronel, DNI 12.731.333, es personal de la Fuerza Aérea Argentina y, en caso de pertenecer a la fuerza, cuál es su grado y situación de revista, si tiene algún antecedente de baja calificación o alguna falta disciplinaria grave en su foja de servicios, o estuvo bajo proceso judicial.
Para el caso de encontrarse en actividad, indique si está autorizado a trabajar por fuera de la fuerza, qué autoridad le otorgó el permiso, y si dicha autorización no resulta incompatible con la carrera militar.

FUNDAMENTOS

Proyecto
Señor presidente:


Tal como planteáramos días atrás en otro proyecto de resolución, el escándalo del narcoavión Challenger 604 con matrícula norteamericana N600AM, secuestrado el pasado sábado 2 de enero de 2011 en el aeropuerto catalán de El Prat con 944 kilogramos de cocaína de máxima pureza valuada en 30 millones de euros, sin duda alguna, involucra, de manera directa o indirecta, a la Fuerza Aérea Argentina y el Ministerio de Defensa.
Dejando de lado los vínculos con el poder de los detenidos, lo que resulta motivo de extrema preocupación en esta oportunidad y motiva el presente proyecto, es el hecho que aparentemente habrían existido, antes del escándalo, informes de inteligencia de la Fuerza Aérea Argentina que habrían alertado sobre lo que estaba sucediendo en Morón alrededor de la mencionada nave.
De acuerdo a una nota periodística aparecida en sl Diario Perfil el pasado sábado 29 de enero de 2011 firmada por el periodista Fernando Oz, el caso del narcoavión habría generado importantes conflictos dentro de la cúpula de la fuerza, donde algunos creen que el Jefe de Inteligencia de la Fuerza Aérea Argentina, brigadier Rodolfo Centurión, habría ocultado información sobre los "extraños movimientos del Challenger en la base de Morón".
El brigadier Centurión, y su superior, el subjefe del arma brigadier Raúl Acosta, vienen sospechados en la fuerza desde agosto de 2010 con motivo de una denuncia sobre presuntos apremios ilegales y privación de la libertad cometidos contra personal de la propia Fuerza Aérea.
El episodio habría sucedido entre el 12 y el 17 de agosto, cuando el alférez a cargo de la sala de armas del Grupo de Guerra Electrónica situado en Aeroparque, habría notado que faltaban fusiles automáticos FAL y ametralladoras Ingram y Halcón. Ante tal situación, las autoridades aeronáuticas se abocaron a investigar de qué forma se vulneró la seguridad de esa guarnición y qué responsabilidad podría tener el personal encargado y con acceso a la sala de armas. En el marco de dicho proceso, personal de inteligencia, con la presencia del brigadier Rodolfo Centurión, habría vulnerado severamente los derechos y garantías de un interrogado.
Quedó claro en ese episodio la participación de la inteligencia militar en asuntos internos, actividad vedada por la Ley de Defensa, y más grave aún, con prácticas propias de los años de la última dictadura militar, en los cuáles se formaron y trabaron amistad el Brigadier Centurión y el Licenciado Carlos "Gurí" Aguilar, ex Director de Inteligencia Estratégica Militar del Ministerio de Defensa.
Oficiales de alto grado habrían confirmado ahora la existencia de "un informe reservado de la fuerza" que menciona los "extraños movimientos" en la base de Morón en torno a algunos vuelos. Lo que no se conoce es si el supuesto informe de inteligencia llegó a manos del jefe directo del brigadier Centurión, el brigadier mayor Raúl Acosta.
Ni el comodoro Guillermo Tealdi, flamante vocero de la Fuerza Aérea ni el secretario general de la fuerza, brigadier Ernesto Paris, negaron la existencia de informes reservados de Inteligencia que servirían a la investigación que lleva adelante el juez en lo Penal Económico Alejandro Catania.
Esta supuesta nueva participación de la inteligencia militar en asuntos de seguridad aeroportuaria, y el ocultamiento de la información, es lo que habría generado la discusión entre los mandos de la fuerza.
Otro eje de discusión de los altos mandos aéreos fue la ilustrativa denuncia anónima que indica que los 944 kilos de cocaína que transportaba el jet Challenger 604 fueron cargados en la Base Aérea Morón.
Más allá de endilgarse responsabilidades mutuamente entre la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), quienes sostienen que es la Fuerza Aérea la que se encarga del control de las cargas, y la Fuerza Aérea que responsabilizan a la ANAC porque la vigilancia de los vuelos civiles es de ANAC, habrían versiones que indicarían con un alto grado de certeza que la droga efectivamente se cargó en Morón y con los motoelevadores de la base.
El otro tema que requiere de nuestra atención es el referido a los agentes de migraciones, aduaneros y de la PSA que participaron de los trámites antes de la partida del avión, y allí aparece el nombre de Roberto Coronel, empleado de la empresa Aviación Atlántico Sur, encargada de asistir a los Juliá en los trámites.
El caso es que Coronel revistó en la entonces Policía Aeronáutica Nacional (PAN), actualmente Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), y cuando se transfirieron sus efectivos al área del Ministerio de Seguridad, hubo algunos que optaron por continuar su carrera en la Fuerza Aérea. Aparentemente ese sería el caso de Coronel, quien sería Suboficial Mayor en actividad y prestaría servicios en el geriátrico de la Obra Social de la Fuerza Aérea (OSFA).
Aparentemente, al mismo tiempo, y dados sus conocimientos y experiencias acumulados en la PAN, Coronel se dedicaría a la gestión del papeleo de vuelos que salen de Ezeiza. Esto nos obliga también a requerir al Poder Ejecutivo Nacional que confirme o desmienta la pertenencia de Coronel a la Fuerza Aérea Argentina.
Lo cierto es que: el aeropuerto es una base militar y propiedad de la Fuerza Aérea Argentina; que casi no quedan dudas que la droga se cargó en dichas instalaciones, utilizando equipos y con la colaboración de personal afectado a dicha base; que los detenidos tienen aceitados vínculos familiares y sociales con oficiales y suboficiales de la fuerza; y que en la confección de los papeles del vuelo aparece un supuesto miembro de la misma.
Frente a todos estos elementos, ¿puede algún funcionario todavía negar que la Fuerza Aérea Argentina se encuentre involucrada en este escándalo? Si parte de su personal resulta asociado a operaciones de narcotráfico, la institución como tal, y el poder político, deben llevar a cabo todas las acciones a su alcance para adjudicar y deslindar las responsabilidades que puedan caberle a cada miembro de la fuerza. Sólo un proceso auténticamente transparente de depuración puede devolverle a la fuerza el prestigio perdido.
Por todo lo expuesto solicito a mis pares me acompañen en la aprobación del presente pedido de informes.
Proyecto
Firmantes
Firmante Distrito Bloque
MARTINEZ, JULIO CESAR LA RIOJA UCR
Giro a comisiones en Diputados
Comisión
PREVENCION DE ADICCIONES Y CONTROL DEL NARCOTRAFICO (Primera Competencia)
TRANSPORTES