Artículo 1.- Declárese la emergencia en adicciones en todo el territorio nacional por el período de 5 (cinco) años a partir de la sanción de la presente ley.

Artículo 2.- El Ministerio de Educación y Deportes deberá efectuar la capacitación docente a los efectos de poder prevenir y detectar casos de adicciones, en el ámbito escolar.

Artículo 3.- El Ministerio de Salud a través de sus efectores procederá a la atención gratuita y cobertura del 100% de los tratamientos de adicciones estableciendo para las mismas el criterio de enfermedad aguda y crónica. A los efectos de extender y profundizar las acciones de prevención y asistencia de las adicciones en todo el territorio nacional el Ministerio de Salud deberá contar con una partida presupuestaria no inferior al %10 de su presupuesto actual.

Artículo 4.- El Ministerio de Desarrollo Social deberá llevar adelante el Programa Talleres Artístico, Culturales y Deportivos. A los fines de la prevención, inclusión, capacitación y formación de personas en proceso de rehabilitación de adicciones. Los mismos deberán realizarse a través de clubes, bibliotecas populares, vecinales o cualquier otra institución pública o privada que el Ministerio autorice.

Artículo 5.- Destínese un porcentaje no inferior al 10% de la pauta publicitaria oficial a los fines de amplificar las campañas de concientización y de divulgar las medios de comunicación y organismos del Estado dedicados a la asistencia y prevención de adicciones

Artículo 6.- Autorícese a los Ministerios mencionados en la presente ley, o aquellos que los reemplacen, a efectuar convenios con provincias y municipios a los fines de garantizar el cumplimiento de lo estipulado.

Artículo 7.- Facúltese al Jefe de Gabinete de Ministros a ampliar las partidas presupuestarias correspondientes vinculadas a la temática.

Artículo 8.- De forma.

Señor presidente:

Es una realidad ineludible que la problemática de las adicciones se ha instalado de forma abrumadora en nuestra sociedad, como también lo es que las políticas públicas diseñadas e implementadas en relación a este tema –a nivel nacional- son insuficientes.

Resulta cada vez más necesaria la presencia del Estado en el abordaje de la problemática vinculada a los niños, niñas, jóvenes como también adultos que son víctimas de adicciones. No sólo mediante una función preventiva sino también mediante acciones concretas que permitan la reinserción social de aquellos ciudadanos que hayan quedado atrapados en las redes de consumo, generando las condiciones propicias y las oportunidades necesarias que posibiliten a estos jóvenes no volver a ser víctimas de este flagelo.

Es prioritario que el Estado tome medidas en favor de la recomposición del tejido social que se fue debilitando progresivamente, permitiendo el avance del narcotráfico y dejando a miles de niños, niñas, jóvenes y adultos a merced de estos grupos. Así también, es de suma importancia que el Estado brinde las herramientas adecuadas para atender con una mirada multisectorial tanto a los sufrientes como a sus familiares.

Creemos que es momento de presentar una batalla lógica, coherente, organizada, multisectorial, centralizada y articulada en sus esfuerzos. Entendemos que es preciso aunar esfuerzos para lograr una mayor articulación con los distintos actores

Vinculados al tema y brindarle a la ciudadanía en general, y a las áreas estatales competentes en el tema, herramientas integrales y sistematizadas para un mejor tratamiento de esta problemática.

El presente Proyecto de Ley se inscribe en esta lógica y pretende dotar a las distintas áreas del Estado Nacional de un instrumento para la promoción y coordinación de estrategias destinadas a la prevención y abordaje de este tema.

Por lo expuesto anteriormente, solicito a mis pares que me acompañen en la aprobación del presente proyecto.-