Que ante la proliferación de convocatorias dirigidas a los jóvenes para participar en fiestas privadas con la consigna de consumir bebidas alcohólicas en forma excesiva, sin controles familiares ni institucionales, vería con agrado que el Poder Ejecutivo Nacional, a través de los organismos que correspondan, tome en consideración esta nueva modalidad de consumo dentro de las campañas de concientización contra el consumo excesivo de alcohol

Señor presidente:

Recientemente se ha difundido en distintos medios de comunicación de todo el país, la nueva y preocupante tendencia de los jóvenes -y lo que es peor, de adolescentes- de organizar, difundir y participar de "fiestas privadas" en las que el objetivo es - claramente- concurrir a lugares privados (fuera de los controles institucionales) para consumir bebidas alcohólicas sin límite alguno.

Esto es, se organizan fiestas en casas particulares, se difunde la misma por las redes sociales y se cobra una suma de dinero para ingresar. La consigna es consumir alcohol "Hasta no dar más".

Por citar uno de los tantos casos a lo largo del País con variadas proposiciones, en la Ciudad de Córdoba se difundió una fiesta de estas características bajo la denominación "Proyecto XXX" en relación a la cual se realizaron los operativos policiales y municipales pertinentes.

Este hecho que -reitero- se reproduce en una enorme cantidad de ciudades de todo el país y devela que muchos jóvenes y adolescentes carecen de contención familiar y eluden deliberadamente los controles institucionales, se exponen a graves peligros propios de este tipo de conductas.

Según las notas periodísticas, los jóvenes prefieren estas "fiestas" porque se realizan en lugares donde nadie los controla, pueden beber sin límites, no hay personal de seguridad que les impida el acceso ni que decida arbitrariamente quien entra y quien no y no tienen restricciones sobre la vestimenta.

Estudios realizados por el Sedronar han informado que al medir "el porcentaje de jóvenes que lo consumieron [al alcohol] en los últimos 30 días del período analizado y la magnitud del abuso, que muestra una tendencia clara y ascendente, estimado a partir de la ingesta de 5 vasos o más en la misma ocasión..."

Alarman también los informes sobre la corta edad en la que se inician en el consumo de alcohol ya que los propios jóvenes reconocen que les resulta sumamente fácil conseguir bebidas alcohólicas pese a que se encuentra prohibida su venta a menores y concurren a estas "fiestas del descontrol" con el casi exclusivo objetivo de beber sin límites.

Por lo expuesto y a fin de llamar a la reflexión a la sociedad en su conjunto y en especial a los jóvenes frente ante este tipo de conductas, solicito a mis pares acompañen el presente proyecto de declaración