Expresar beneplácito por la reciente decisión de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner de poner en marcha el Programa " Recuperar Inclusión" de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (SEDRONAR), que pone en práctica una mirada sobre la temática de la drogadicción, que hace eje en considerar a la adicción como un cuestión de Salud Social, que fomenta y alienta la inclusión y que evita estigmatizar a todos aquellos con problemas con las drogas considerándolos como lo que realmente son, sujetos de derecho.

Señor presidente:

Los alcances y objetivos del Programa " Recuperar Inclusión" de la SEDRONAR que fuera anunciado el pasado 31 de marzo por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, a pesar de su amplios propósitos, puede ser definido apelando a algunas breves reflexiones de Juan Carlos Molina, titular del organismo e impulsor del mismo. "Tenemos que pensar más allá de sacar los chicos de la droga momentáneamente, tenemos que incluirlos para que en el futuro tengan un proyecto de vida", manifestó al asumir el cargo. Señalando además con particular énfasis, "Desde esta Secretaría estamos encarando la problemática de las adicciones desde la inclusión, que es darle oportunidad a quien no la tuvo. Esta es una política de Estado".

Esta política de Estado supone hasta el presente, tal como lo señala la presidenta, una inversión de 1.993 millones de pesos que se distribuirá por todo el país. Y permitirá, a través de un acuerdo entre la SEDRONAR y el Ministerio de Planificación Federal contar con 60 Casas Educativas Terapéuticas (CET), de las cuales 40 serán nuevas y 20 refuncionalizadas, y que servirán como espacios de contención y acogimiento para mitigar el consumo de drogas y/o alcohol en contextos de alta vulnerabilidad social. También se construirán 150 Centros Recreativos Locales de las Adicciones (CEPLA), que funcionarán como espacios de contención en los cuales se llevaran a cabo actividades de recreación, desarrollo cultural, deportivo y artístico.

Esta estructura permitirá al organismo consolidar una de sus premisas fundamentales. Esto es el fortalecimiento del trabajo en los territorios y la articulación y la coordinación, no sólo con los organismos nacionales, provinciales y municipales, sino también con iglesias y organizaciones barriales con interés en la temática.

En definitiva de lo que se trata es de inaugurar un nuevo camino en la erradicación del uso indebido de las drogas y sus adicciones. En el que las acciones en esta materia ya no supongan tratar a un "adicto" o a un "enfermo", sino a personas que tal como señalara Molina, "... merecen una vida plena y el Estado tiene que estar presente para ayudarlos a conseguirla".

Es por los fundamentes expuestos que pido a mis pares la aprobación del presente proyecto.