Su beneplácito por la meritoria conducta del Comandante del buque A:R:A ALMIRANTE IRIZAR, Sr. Capitán de Fragata Guillermo Horacio Tarapow, quien a riesgo de su propia vida, dio un ejemplo del respeto por los derechos humanos al preservar y proteger la de sus subordinados, y de singular desempeño de sus funciones, permaneciendo en soledad a bordo del buque a fin de colaborar así con las tareas de rescate, haciendo honor de esta forma a la tradición naval más allá del estricto cumplimiento del deber.

Por ello pido a mis pares el apoyo al presente proyecto de declaración

Señor presidente:

Con hondo pesar se ha tomado conocimiento del lamentable suceso acaecido en el buque ARA ALMIRANTE IRIZAR.

No obstante, en medio de esta gran consternación, conforta el desempeño de su Comandante, Sr. Capitán de Fragata Guillermo Horacio Tarapow. Es a través de su control y templanza durante la emergencia que se pudo llevar a feliz término el rescate de toda la tripulación.

Debe destacarse la actitud de este honorable oficial, quien demostró su apego a los derechos humanos, poniendo ante todo a sus subordinados a salvo.

Pero ahí no dio por terminado el cumplimiento de su función, sino que más allá de dar prioridad a la preservación de su propia vida, prefirió quedar a bordo en soledad, para proteger los bienes que el Estado Nacional habían puesto bajo su responsabilidad, colaborando en la tareas de rescate del buque.

Este hecho enaltece el prestigio de los cuadros de nuestras Fuerzas Armadas y hace honor a la tradición naval de nuestra Armada donde los comandantes de buques, a riesgo de su propia vida, velan por la protección de un bien confiado a su mando hasta las últimas consecuencias.

Pero por sobre todo, en una época donde no abundan los modelos de coraje y lealtad, la conducta del Capitán de Fragata Guillermo Horacio Tarapow constituye una auténtica muestra de valentía y cabal cumplimiento del deber que debe servir de ejemplo para toda la dirigencia en general, cualquiera fuere el rubro en que actúe.