Expresar su más enérgico repudio y preocupación por la brutal golpiza propinada al Diputado de la Nación Horacio Pietragalla Corti, por parte de miembros de la Policía Metropolitana, durante el procedimiento de desalojo del asentamiento "Papa Francisco" en el barrio porteño de Villa Lugano, el pasado 23 de agosto del corriente.

Señor presidente:

El día 23 de agosto del presente año, los legisladores porteños José Cruz Campagnoli y Pablo Ferreyra, y el Diputado Nacional Horacio Pietragalla Corti, fueron brutalmente agredidos por la Policía Metropolitana cuando concurrieron al asentamiento "Papa Francisco" para pedir la liberación de un joven que había sido golpeado y detenido por dicha fuerza.

La Policía Metropolitana no respetó los protocolos, ni la integridad física del diputado y los legisladores presentes. Haciendo un uso desmedido de la fuerza, no sólo violentó a los legisladores y al diputado, sino que también hirió a varios militantes y vecinos. Mucho antes que su condición de diputado nacional, igual que el resto de los presentes, Horacio Pietragalla Corti vio avasallados sus derechos básicos, de los que goza cualquier ciudadano. La Policía Metropolitana, en un accionar que resulta altamente preocupante por lo recurrente, violó groseramente la dignidad personal e integridad física de todos ellos.

En adición a esto, no es posible soslayar que nuestra Constitución Nacional reconoce inmunidades a los senadores y diputados, que fueron vulneradas por la Policía Metropolitana.

Es inadmisible e injustificable que, en un estado democrático, una fuerza de seguridad reitere prácticas violatorias de los derechos humanos sin que las autoridades políticas de la misma tomen las medidas necesarias para prevenir y sancionar esta clase de abusos.