Expresar repudio a las agresiones sufridas por la activista trans Amancay Diana Sacayán el pasado 10 de agosto en la provincia de Buenos Aires.

Señor presidente:

Durante los últimos tres años la Argentina hizo importantes avances en la adquisición de derechos ciudadanos incorporando entre su legislación a las poblaciones de diversidad sexual. La sanción de las leyes 26.818 de Matrimonio Igualitario, 26.743 de Identidad de Género y 26.862 de Reproducción Médicamente Asistida junto al compromiso de un Estado Nacional presente en la promoción de políticas sobre diversidad sexual fueron algunos de los logros sociales, culturales y políticos más significativos en Derechos Humanos de los últimos tiempos.

No obstante, el pasado 10 de agosto, en horas de la madrugada, Amancay Diana Sacayán fue brutalmente golpeada por un transeúnte que la insultó por su identidad de género mientras se encontraba en un bar de la estación de Laferrere, partido de la Matanza, provincia de Buenos Aires. Por otra parte, las agresiones y el abandono denunciados por la víctima, por parte de otros agentes de seguridad constituirían violaciones a los Derechos Humanos.

No sólo se vulneró el derecho al disfrute universal de los derechos universales sino a la igualdad y a la no discriminación, a la seguridad personal y a no ser sometida a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes sin distinción alguna por orientación sexual o por identidad de género. Todas estas garantías se encuentran protegidas por la Constitución Nacional y las Convenciones Internacionales de Derechos Humanos del Sistema Jurídico nacional e internacional.

La trayectoria política de Sacayán y su participación pública hicieron posible dar a conocer ese violento ataque. Diana es una luchadora por los derechos de la comunidad trans. Actualmente trabaja en el Instituto Nacional contra la Discriminación (INADI). Fue redactora del primer periódico trans "El Teje" y colabora en el diario Pagina 12. Es representante para el Cono Sur de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex (ILGA). Participó en la elaboración de la Ley de Identidad de género y colaboró en diversos relevamientos de datos que permitieron conocer la situación de las personas trans.

A diferencia de la agresión a Diana Sacayán, las experiencias de discriminación y violencia que viven diariamente muchas personas trans no siempre adquieren notoriedad pública. Datos suministrados por la Primera Encuesta sobre Población Trans: Travestis, Transexuales, Transgéneros y Hombres Trans realizada por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) y el INADI (2012) en la provincia de Buenos Aires indicaron que casi el 85 por ciento del total de las mujeres trans entrevistadas vivió situaciones de discriminación por parte de "personas desconocidas en la vía pública y el 63 por ciento por parte de vecinos".

Los acontecimientos de violencia que sufrió Sacayán hicieron visible una situación de desigualdad y violencia a la que están expuestas todas las poblaciones de Diversidad Sexual. Un antecedente cercano fue el asesinato de Natalia "Pepa" Gaitán, sucedido el 6 de marzo de 2010, en el barrio Parque Liceo, perteneciente a la 2ª Sección de la ciudad de Córdoba, en manos del padrastro de su pareja.

Las acciones de violencia acometidas contra Diana Sacayán demandan un fuerte repudio de todas las instancias del Estado a fin de abonar a la construcción de una sociedad que respete la diversidad sexual y de géneros. De esta forma estaremos contribuyendo a la consolidación de una ciudadanía realmente igualitaria en el marco de una cultura y una sociedad que apueste a la profundización de la democracia mediante el respeto, el cumplimiento y la promoción de los Derechos Humanos de todas las personas sin distinciones.

Por lo expuesto, solicitamos a nuestros pares la aprobación del presente proyecto de resolución.