Señor presidente:

Yves Alain Domergue, ciudadano francés, y Cristina Cialceta Marull, ciudadana mexicana, eran militantes del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT), que fueron interceptados y detenidos por una patrulla del Ejército Argentino el 26 de setiembre de 1976 en la ciudad de Rosario y llevados ilegalmente al interior de la base militar batallón 121 de comunicaciones. Ambos fueron asesinados y sus cuerpos encontrados, a la vera de un camino, a 5 kilómetros al sur de la localidad santafesina de Carreras. Los cadáveres fueron enterrados como NN en el cementerio de Melincué, provincia de Santa Fe.

La investigación que llevó adelante el Área de Investigación, Apoyatura y Seguimiento de Causas de Lesa Humanidad del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Santa Fe, se originó a partir de una denuncia realizada en marzo de 2008 por la docente Juliana Cagrandi de la escuela N° 425 Pablo Pizzurno de esa ciudad. En esta denuncia se señalaba que había un expediente, iniciado en 1976, que contenía pruebas, documentos y algunas fotos de estas dos personas. Además figuraban fechas, lugares y personas claves. Una vez finalizada la investigación, se realizó una presentación en el juzgado de Instrucción de Melincué que permitió que el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) exhumara los cuerpos.

El EAAF es una organización no gubernamental y sin fines de lucro argentina, de carácter científico, creada por la iniciativa de las organizaciones de derechos humanos con el fin de desarrollar técnicas de antropología legal que ayudaran a descubrir que había ocurrido con las personas desaparecidas durante la última dictadura militar. Actualmente, el equipo trabaja en Latinoamérica, África, Asia y Europa. Desde 2007, gracias al trabajo de EAAF se restituyó la identidad de 120 cuerpos de desaparecidos y aún restan 700 personas más.

Los recursos necesarios para la exhumación, análisis antropológico y genético, traslados, actuaciones e intervenciones judiciales fueron aportados por el Gobierno de la provincia de Santa Fe, a través del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, mediante fondos contemplados en la ley N° 12.337.

El equipo de la Secretaria de Derechos Humanos se entrevistó con la docente Cagrandi, con la jueza de instrucción, para tomar conocimiento del estado actual del expediente, con el sumariante del juzgado que había conservado el expediente judicial evitando su archivo y con el sepulturero del cementerio de la localidad. La causa estaba caratulada como "NN. causa homicidio v/NN masculino y femenino" y mencionaba el homicidio de dos personas jóvenes, con signos evidentes de tortura e impactos de armas de fuego.

Integrantes del equipo de Investigación, Apoyatura y Seguimiento de Causas Judiciales de Lesa Humanidad, se contactaron con Eric Domergue, hermano de Yves Domergue para informarle de la investigación y las probabilidades de que una de las personas inhumadas como NN podría ser su hermano.

El pasado 28 de julio en el Salón de los Científicos Argentinos del Bicentenario de la Casa de Gobierno, se realizó el acto de restitución de la identidad de estos ciudadanos, del cual participaron autoridades del gobierno nacional y de la provincia de Santa Fe, familiares de los desaparecidos, docentes y alumnos de la escuela N° 425 Pablo Pizzurno, quienes realizaron un profundo seguimiento del caso, en busca de su esclarecimiento y fueron reconocidos en este acto.

Los restos de Yves Alain Domergue y Cristina Cialceta Marull y el expediente judicial hallado en Melincué, se convertirán en prueba en causas por crímenes de lesa humanidad cometidos por la última dictadura militar que se llevan adelante en Rosario. La familia de Domergue, se constituye en querellante en la causa por su desaparición que se tramita en la Justicia Federal de Rosario. La desaparición de su compañera, Cialceta, es uno de los 93 casos que se citan en el juicio oral contra el ex comandante del II Cuerpo de Ejército Ramón Genero Díaz Bessone.

Eric Domergue, escribió un poema titulado "Huesos desnudos" para su hermano Ives:

Veo tus huesos desnudos.

Huesos perforados, delicadamente ordenados en una mesada.

Te miro y te reconozco.